Elecciones europeas de 2024

Tomar Europa por las elecciones. La extrema derecha mundial en Madrid

De Milei a Orbán pasando por Meloni y Le Pen; del Portugal de Ventura a los Estados Unidos de Trump: la internacional de las extremas derechas se reunió este fin de semana en Madrid en un mitin imponente. En vísperas de unas elecciones continentales que deberían verle florecer, la derecha radical europea está experimentando una profunda recomposición —hay que leer estos discursos para comprender su estrategia, sus convergencias y sus escollos—. Una selección de fragmentos y un comentario de la convención de Vistalegre por el especialista Steven Forti.

Autor
Steven Forti
Portada
© ALBERTO GARDIN/SOPA

El pasado 18 y 19 de mayo se ha celebrado en Madrid Europa Viva 24. Organizado por Vox y los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), el acto ha congregado en el palacio de Vistalegre de la capital española a una numerosa representación de dirigentes de ultraderecha tanto europeos como americanos. Además del líder de Vox, Santiago Abascal, anfitrión del encuentro, y de sus compañeros de partido, José Antonio Ortega Lara y Jorge Buxadé, en el mitin han participado otros líderes del ECR, como el ex primer ministro polaco Mateusz Morawiecki y la presidenta del gobierno italiano Giorgia Meloni. 

Sin embargo, a Europa Viva 24 han acudido también miembros del otro partido político europeo de extrema derecha, Identidad y Democracia (ID), como el líder de la portuguesa Chega, André Ventura, y la presidenta de la Reagrupación Nacional francesa, Marine Le Pen, mientras el premier húngaro, Viktor Orbán, que ha convertido el país magiar en una autocracia electoral desde que ha vuelto al poder en 2010, se ha conectado también telemáticamente, como Meloni. Asimismo, ha habido una nutrida representación extraeuropea: por un lado, el presidente argentino, Javier Milei, y el líder del Partido Republicano chileno, José Antonio Kast; por el otro, diversos exponentes del trumpismo, como el presidente de la Unión Conservadora Americana y animador de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), Matt Schlapp, y el vicepresidente de The Heritage Foundation, Roger Severino. Por último, ha participado también el ministro de Asuntos de la Diáspora de Israel y lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli.

El encuentro madrileño no solo sigue en la estela de otros celebrados anteriormente por Vox, como los Viva 21 y Viva 22, que ya habían contado con la asistencia de líderes internacionales, como Ventura, Meloni o Morawiecki, sino que se inserta en las numerosas cumbres organizadas por la ultraderecha a un lado y otro del Atlántico: desde las diferentes ediciones de las CPAC en Estados Unidos, Brasil, México o Hungría a las Cumbres de la Iberosfera, lanzadas por Vox en 2022 tras la creación del Foro de Madrid, pasando por los encuentros llamados “Defender Europa”, celebrados en Varsovia en 2021 y Madrid en 2022. Europa Viva 24 nos muestra, por consiguiente, la existencia de una tupida red transnacional de extrema derecha que se ha fortalecido en estos últimos años. 

Además, el acto ha marcado el comienzo de la campaña para las elecciones europeas que se celebrarán entre el 6 y el 9 de junio. La extrema derecha ha querido mostrar su fuerza de cara a unos comicios en que, según todos los sondeos, mejorará sus resultados y tiene posibilidades para modificar los equilibrios políticos comunitarios. Si en 2019 el principal mitin electoral se había organizado en Milán, con el líder de la Liga, Matteo Salvini, como anfitrión y hombre fuerte, este año ha sido Madrid la ciudad que ha acogido el principal acto de la extrema derecha. Lo que demuestra, por lo menos, dos cosas. En primer lugar, la creciente importancia de Vox en la geografía ultraderechista europea y transatlántica, al ser también el puente de lanza entre la Unión Europea y América Latina. En segundo lugar, la obsesión de la extrema derecha con el gobierno de izquierdas liderado por Pedro Sánchez, convertido en el principal enemigo en una Europa que se ha ido tiñendo cada vez más de negro. 

André Ventura (Portugal)

Queridos amigos de Vox, es un enorme orgullo estar aquí hoy. Esta convención no es sólo una escuela de líderes, de presidentes y de sucesos. Muchos de los que han estado aquí, en este palco, han ganado en sus países —han ganado la libertad de sus países—. Estoy seguro de que, aquí entre nosotros, están muchos de los que van a gobernar en el futuro en Europa y en América, y América del Sur. Aquí está el próximo presidente del gobierno de España, Santiago Abascal; la próxima presidenta de Francia, Marine Le Pen; y si me permiten, el próximo primer ministro de Portugal. 

Hasta hace poco, André Ventura era un líder poco conocido fuera de las fronteras de Portugal. Sin embargo, en las elecciones legislativas del pasado mes de marzo, su partido, Chega, ha conseguido casi el 20% de los votos. Esto ha convertido a Ventura en un líder en alza. En su intervención —que hizo en español—, cabe señalar dos cuestiones. Por un lado, la voluntad, compartida por todos los líderes ultraderechistas, de presentarse como moderados y presentables, rechazando la etiqueta de radicales y extremistas. Por el otro, el intento de apropiarse del concepto de libertad, trasladado en este caso incluso al nivel europeo y mundial. 

Hoy en Portugal, pero también en España y estoy seguro que también en toda Europa, los periódicos dicen que la derecha más radical se reúne aquí en Madrid, que la derecha más radical de Europa y del mundo aquí se reúne. Pero están equivocados; nosotros no somos la derecha más radical de Europa. ¡Nosotros somos los únicos, los únicos, que se han erguido para defender la libertad de Europa y la libertad del mundo entero!

Nosotros no somos la derecha más radical de Europa. ¡Nosotros somos los únicos, los únicos, que se han erguido para defender la libertad de Europa y la libertad del mundo entero!

André Ventura

Jorge Buxadé (España) 

Buenas tardes, España. Muchísimas gracias a todos los invitados internacionales. El próximo 9 de junio nos jugamos el futuro de España y de toda Europa. El próximo 9 de junio decidimos si Europa sigue en manos de fanáticos globalistas que persiguen la destrucción del campo, la devastación de las clases medias, la desprotección de las fronteras y la sumisión de Europa a los caprichos de una casta burocrática de relatores de la ONU; por el contrario, si las naciones europeas recuperamos el control de nuestras vidas, de nuestra economía y de nuestra libertad. 

Buxadé ha sido el principal impulsor del giro antiglobalista de Vox, plasmado en la Agenda España. Este documento programático, presentado en Viva 21, se ha concebido como una respuesta ultranacionalista e identitaria a la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, tachadas como uno de los principales enemigos de España y una amenaza a la soberanía de las naciones. Se suele responsabilizar también al eurodiputado de Vox, con un pasado falangista antes de afiliarse durante una década al Partido Popular, de la introducción de tímidas e inconcretas políticas sociales que moderaban en parte el programa económico ultraliberal de Vox en los primeros tiempos. Resulta difícil, de todas formas, entender cómo las supuestas políticas sociales de marca neofalangista defendidas por Buxadé puedan encajar con un programa paleolibertario de destrucción del Estado como el defendido por la estrella invitada de este mitin, Javier Milei.

Españoles, italianos, polacos, franceses o húngaros no tienen ni una sola preocupación por la creación artificial de un pueblo europeo. Al contrario, les preocupa la seguridad en la calle, la creación de empleos estables, la inflación de los productos básicos, el acceso a la vivienda, la competitividad de nuestras empresas frente a la competencia extranjera, la inmigracion ilegal, evitar el colapso de nuestros sistemas sanitarios o el futuro de nuestros jóvenes. 

El próximo 9 de junio decidimos si Europa sigue en manos de fanáticos globalistas que persiguen la destrucción del campo, la devastación de las clases medias, la desprotección de las fronteras y la sumisión de Europa a los caprichos de una casta burocrática de relatores de la ONU.

Jorge Buxadé

Giorgia Meloni (Italia) 

En los últimos años, la Unión Europea ha exigido decidir que podíamos o no comer, como debíamos o no renovar nuestras casas —por supuesto sin decirnos con qué dinero—, qué automóvil podíamos o no conducir, qué tecnologías podíamos o no usar en nuestras empresas. 

Utilizaron la coartada de la defensa de la naturaleza para dar vida a un ataque a nuestra libertad que debemos rechazar. Nosotros defenderemos a nuestros agricultores, a nuestros pescadores, a nuestra industria manufacturera, a nuestras pequeñas y medianas empresas contra esos ataques sin precedentes. Los defenderemos para defender a Europa, porque a Europa la han hecho ellos con su trabajo, sus sacrificios, su creatividad, sus productos de excelencia mientras los ecologistas discutían cómo proponer las siguientes leyes absurdas cómodamente en el sofá de su salón. 

Nosotros defenderemos a nuestros agricultores, a nuestros pescadores, a nuestra industria manufacturera, a nuestras pequeñas y medianas empresas contra esos ataques sin precedentes. Los defenderemos para defender a Europa.

Giorgia Meloni

La Unión Europea que tenemos en mente debe recuperar el orgullo de su historia y su identidad. Continuaremos oponiéndonos firmemente a todos los intentos de negar o borrar nuestras raíces culturales comenzando por nuestras raíces cristianas. Porque es un hecho que los monasterios fueron los primeros ladrillos de Europa. Olvidarlo, negarlo, disminuirlo es negar el significado mismo de Europa como civilización. Y no vamos a permitirlo. Nos opondremos de la misma manera a aquellos que quieren cuestionar la familia como pilar de nuestra sociedad, a aquellos que quieren introducir la teoría de género en los colegios, a aquellos que quieren promover prácticas inhumanas como la gestación subrogada. Porque nadie me convencerá de que se puede llamar progreso permitir que los hombres ricos compren los cuerpos de las mujeres pobres o eligan a sus hijos como si fueran productos de supermercados. No es progreso, es oscurantismo. 

Me enorgullece que en el Parlamento italiano se esté discutiendo bajo propuesta de Fratelli d’Italia una ley que quiere hacer del alquiler del útero un delito universal. Se trata de castigar en Italia incluso si el delito se comete en el extranjero. 

Giorgia Meloni ha optado por no acudir presencialmente a Madrid, pero no ha faltado a la llamada de Abascal —participando por vía telemática, en directo y en español—, por al menos tres razones. En primer lugar, Europa Viva 24 ha sido coorganizado por el ECR, formación que Meloni preside desde 2020. En segundo lugar, entre la actual presidenta del gobierno italiano y Abascal hay una estrecha relación personal: además de las anteriores ediciones de Viva, Meloni acompañó Abascal y Macarena Olona en el ya famoso mitin de la plaza de toros de Marbella durante la campaña para las elecciones andaluzas de 2022. 

Por su lado, Abascal ha viajado en varias ocasiones a Italia, participando también en Atreju, la fiesta anual de Hermanos de Italia. En tercer lugar, Meloni no podía faltar en el encuentro de Madrid: es la dirigente de extrema derecha en Europa que ocupa el cargo de más importancia, la presidencia del gobierno de la tercera economía de la Unión. Sin llegar a los excesos del mitin de Marbella, Meloni ha vuelto a un discurso más identitario y crítico con la Unión, demostrando que su supuesta moderación tras su llegada al Palacio Chigi no es nada más que fachada o, si se prefiere, pragmatismo con el objetivo de ser aceptada internacionalmente. Lo más interesante del discurso de Meloni es, sin embargo, el ataque, sin nombrarlo, al PPE por los acuerdos con liberales y socialdemócratas. Esta presión, poco diplomática, parece chocar en parte con la estrategia envolvente de los últimos meses en que la líder de Hermanos de Italia ha tejido una relación de complicidad con Ursula von der Leyen. 

Nosotros lucharemos sobre todo contra aquellos que como la izquierda sesgada por el deseo de borrar las identidades pretenden utilizar Bruselas para imponer su agenda globalista y nihilista. Donde las naciones se reducen a accidentes de la historia, las personas a meros consumidores, donde el multiculturalismo y el relativismo ético se hacen pasar por los pilares necesarios de la integración europea. 

Por primera vez los resultados de las elecciones europeas podrían finalmente terminar con mayorías antinaturales y contraproducentes. Tenemos que mantenernos enfocados, mantener los pies en la tierra y la mirada en el horizonte; es hora de la movilización.

Giorgia Meloni

Amigos, la legislatura europea 2019-2024 se ha caracterizado por prioridades y estrategias erróneas. Mientras que otras fuerzas políticas han apoyado acuerdos anti naturales con la izquierda, produciendo la imposición verde y progresista, nosotros siempre hemos luchado —a menudo solos— por una Unión Europea diferente. Pero hoy, puede ser un momento diferente. Estamos en vísperas de unas elecciones decisivas porque por primera vez los resultados de las elecciones europeas podrían finalmente terminar con mayorías antinaturales y contraproducentes. Tenemos que mantenernos enfocados, mantener los pies en la tierra y la mirada en el horizonte; es hora de la movilización, es hora de salir a la calle y mirar a nuestros compatriotas a los ojos para explicarles lo que queremos hacer en los próximos cinco años. 

Tenemos el deber de luchar hasta el último día de la campaña electoral. Porque ningún cambio en Europa es posible sin los conservadores europeos. Y eso es un hecho. Nosotros somos el motor y los protagonistas del renacimiento de nuestro continente. 

¡Viva Italia! 

¡Viva España! 

¡Vivan los conservadores europeos! 

Marine Le Pen (Francia) 

Vox y su presidente, Santiago Abascal, con quien estamos en contacto desde hace tiempo, encarnan el movimiento patriótico español. Sé que con vosotros puedo contar a nivel europeo para reactivar Europa. En efecto, Europa, la verdadera Europa, la Europa de la libertad y de los pueblos, la Europa de la soberanía y de los Estados, la Europa de la identidad y de las naciones, necesita nuestras fuerzas combinadas ya que la Unión Europea le ha hecho mucho daño desde hace décadas. 

En esta lucha política común vengo a deciros lo importante que es para nuestro proyecto de recuperación, la amistad entre nuestros dos países, la fraternidad entre nuestros dos partidos, la solidaridad entre nuestros diputados. Y permitidme enviaros el saludo de millones de patriotas franceses y aseguraros que podéis contar con su amistad y con su apoyo. 

Juntos estamos en la recta final para hacer del 9 de junio un día de liberación y de esperanza. Nos quedan tres semanas para convencer a nuestros respectivos compatriotas de que salgan a votar y de que salgan a votar para que Jordan Bardella y Jorge Buxadé lleguen con la mayor delegación posible a Bruselas. Los promotores de la Unión Europea encabezados por el dúo Macron – Von der Leyen nunca están satisfechos. Y ahora quieren llevar a nuestro continente a una casi fusión europea, una marcha forzada hacia un superestado europeo centralizado. Esta vez, y sin que sirva de precedente, lo hacen a cara descubierta. Todo se encuentra en el informe Verhofstadt aprobado por el Parlamento europeo por pocos votos el pasado noviembre y en el que se habla en concreto del fin del derecho de veto. 

Juntos estamos en la recta final para hacer del 9 de junio un día de liberación y de esperanza. 

Marine Le Pen

Cuanto más construyen una Unión Europea integrada peores son los resultados. Es difícil no mencionar ahora mismo el tema de la inmigración en este momento. Zonas enteras de mi país, Francia, se encuentran en una situación de sumersión migratoria y ya no están bajo el control del Estado. Suelen denominarse como zonas sin ley pero, en realidad, son zonas regidas por leyes distintas de las francesas. Esta situación de separatismo migratorio también se da en Gran Bretaña, en Bélgica, en Suecia, con una inseguridad creciente y la amenaza constante de disturbios amenaza a toda Europa. 

[…] Han fracasado en todo. Bueno, en todo menos en conquistar la libertad de los pueblos europeos. Vosotros no queréis esta visión. Nosotros no la queremos tampoco. Creo que una gran parte de los pueblos de Europa tampoco la quieren. La Unión Europea quiere silenciar a los pueblos y nosotros queremos una Europa que garantice su libertad. La Unión Europea quiere que desaparezca el derecho de veto que garantiza que las naciones puedan defender sus intereses y quiere inmiscuirse en la vida de nuestros conciudadanos en todas partes y nosotros lo que queremos es una Europa con una cooperación libremente aprobada. La Unión Europea quiere uniformizar todo el continente mientras que nosotros queremos una Europa que garantice la diversidad de las culturas y las identidades de los pueblos europeos. 

La presencia de la líder de la Reagrupación Nacional en Europa Viva 24 es doblemente importante. En primer lugar, muestra que, más allá de la división entre ECR e ID, la extrema derecha europea puede colaborar. Las divergencias en temas tan importantes como la geopolítica —conocidas son las posiciones filoputinianas de Le Pen, cuyo partido en 2014 recibió unos 11 millones de euros de bancos vinculados al Kremlin— parece que no impidan una colaboración, como demostró el manifiesto en favor de las raíces cristianas de Europa, firmado por la gran mayoría de partidos de ultraderecha en julio de 2021, o la participación de la misma Le Pen en la cumbre de Madrid de enero de 2022. ¿La decisión por parte de Le Pen y Salvini de romper relaciones con Alternativa para Alemania pone las bases para un acercamiento entre el ECR y una parte de ID? 

Es cierto que la posibilidad de una unificación de toda la extrema derecha en Europa ha sido siempre un tema sobre la mesa que nunca se ha concretado, pero, quizás, ahora puede haber sorpresas al respecto. En segundo lugar, el discurso de Le Pen es mucho más duro que, por ejemplo, el de Meloni: los ataques a von der Leyen y Macron son directos. La líder de Reagrupación Nacional, además, dice lo que otros no se han atrevido a decir: aunque hable de querer regenerar Europa, su discurso es euroescéptico sin medias tintas. La mención al fin del derecho de veto muestra cuál sería el modelo de Europa defendido por Le Pen: una Confederación de Estados soberanos que llegan a acuerdos únicamente en algunas cuestiones, como la economía o la inmigración. Un modelo, por cierto, defendido hasta la fecha también por Hermanos de Italia. 

Roger Severino (Estados Unidos) 

Queridos amigos, vengo desde Estados Unidos con un mensaje urgente: lo que le está pasando al presidente Trump en Nueva York puede pasar en Madrid, puede pasar en París, puede pasar en Londres, puede pasarme a mí, puede pasarte a ti. Me refiero a los izquierdistas que corrompen la ley y la convierten en un arma para interferir con la democracia y silenciar la voz del pueblo. 

Como no pueden convencer a millones de personas que voten por sus agendas absurdas, los zurdos intentan convencer a 12 jurados de un delito que no existe. En lugar de debatir con sus opositores, quieren encarcelarlos. Lo que era impensable hace 10 o incluso 5 años es nuestra realidad de hoy. Pero esa no es la única advertencia que traigo. Hoy en día en las universidades a través de Estados Unidos hay desorden, violencia y un antisemitismo desenfrenado, promovidos por una ideología radical que trata a los atacantes como víctimas y a uno de los grupos más oprimidos de la historia como opresores. 

Lo que le está pasando al presidente Trump en Nueva York puede pasar en Madrid, puede pasar en París, puede pasar en Londres, puede pasarme a mí, puede pasarte a ti. 

Roger Severino

Esos mismos jóvenes han sido bombardeados por una cultura y un sistema médico que les dice que exploren todos los apetitos sexuales a los 10 años, que el aborto no implica la destrucción de los bebés sino que es atención médica, que si se sienten incómodos con su sexo probablemente nacieron en un cuerpo equivocado y las cirugías pueden arreglar ese error. 

Pero estoy aquí para decir que Dios no comete errores. Nuestra civilización occidental común corre el riesgo de desaparecer precisamente porque nos hemos olvidado de Dios y de Cristo. Pero Él sigue con nosotros. Incluso en estos días oscuros debemos tener fe, también en nuestra herencia occidental y en todo el bien recibido durante 3.000 años centrados en la fe, la razón, el Estado de derecho y la familia. 

Estoy aquí para decir que Dios no comete errores. Nuestra civilización occidental común corre el riesgo de desaparecer precisamente porque nos hemos olvidado de Dios y de Cristo. 

Roger Severino

Europa y Estados Unidos han perdido tanta fe en Occidente que no solo fallamos en transmitir nuestra cultura a nuestros hijos sino que ya ni tenemos hijos. En la mayoría de países de Occidente lamentablemente mueren más personas de las que nacen. Si dejamos que esto continúe será el triunfo definitivo de la izquierda que mira a cada ser humano —si le permite nacer— como una fuente más de contaminación de carbono. 

En los años 80, Ronald Reagan y Margaret Thatcher restauraron un sentimiento de orgullo nacional. Hicieron retroceder al socialismo y las familias comenzaron a crecer nuevamente. Más recientemente el presidente Trump construyó una nueva coalición conservadora que exigía fronteras seguras y liberarse de élites globalistas que quieren controlar todo lo que compras, todo lo que comes, todo lo que dices e incluso todo lo que piensas. Tuve el gran honor de servir durante 4 años bajo el presidente Trump y vi como él defendía a los trabajadores olvidados. Trump desafió directamente a las élites woke en los negocios, en la tecnología, en las universidades. Sus esfuerzos de desregulación impulsaron una prosperidad económica y niveles de empleo que no se habían visto en una generación. Cerró los programas DEI que hizo que el gobierno respondiera ante el pueblo y no al revés. 

Europa y Estados Unidos han perdido tanta fe en Occidente que no solo fallamos en transmitir nuestra cultura a nuestros hijos sino que ya ni tenemos hijos.

Roger Severino

Pero justo cuando empezábamos a restaurar la grandeza estadounidense sus esfuerzos fueron interrumpidos. Espero que en apenas unos pocos meses Trump regresará para cumplir lo que empezó. 

Severino ha representado la voz del trumpismo en el mitin madrileño. Su discurso repite a rajatabla los eslóganes de la ultraderecha estadounidense que se ha apoderado del Partido Republicano y de toda una serie de fundaciones y think tanks conservadores, como la misma The Heritage Foundation, de la que Severino es vicepresidente, que han radicalizado notablemente sus posiciones en la última década. La receta de Severino, es decir la receta trumpista, se basa principalmente en tres elementos: la fe religiosa —con el corolario del antiabortismo y el impulso de la natalidad—; políticas económicas ultraliberales; y la lucha contra la supuesta hegemonía cultural de las izquierdas y del wokismo.

Hay tres elementos interesantes de su discurso en Vistalegre. Por un lado, la voluntad de presentarse como defensores de la libertad y la democracia frente a una izquierda supuestamente antidemocrática, mostrando una incoherencia sin paliativos teniendo en cuenta que no solo Trump no reconoció jamás la victoria de Biden en 2020, sino que impulsó el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021. Pero, se sabe, el tacticismo, la incoherencia y los secuestros semánticos son marca de la casa. Por otro lado, el ataque directo a las universidades y los estudiantes progresistas norteamericanos con la coletilla del antisemitismo: la defensa de Israel se ha convertido en un tema en que prácticamente todas las ultraderechas están de acuerdo. Por último, la mención explícita a Reagan y Thatcher, vendidos como modelos y antesignanos. Hace falta recordar que George W. Bush que, sin duda, de Reagan, fue un discípulo, no respaldó a Trump en las elecciones de 2020.

Mateusz Morawiecki (Polonia) 

Como pueden escuchar he empezado en polaco. Me disculpo porque desafortunadamente no puedo estar en Madrid. ¿Por qué he empezado hablando en mi lengua materna? Pues porque hoy en día algunas personas olvidan que el inglés no es la única lengua y que Bruselas no es la única capital. 

Algunas personas se olvidan que Europa es lo primero y ante todo una unión de naciones. Y no la tierra de los burócratas y por eso llega una voz desde España, desde Polonia, pero también desde muchos otros países de Europa. 

Europa debe ser la tierra para una nueva esperanza, la patria del futuro. Europa debe ser líder. Desgraciadamente el mundo se ha convertido una vez más en un lugar peligroso. Estamos muy preocupados por el intento de asesinato en Eslovaquia del Primer Ministro Robert Fico. Debemos dar un paso adelante por Europa, debemos dar un paso adelante los unos por los otros. En 1795 fuimos divididos por tres agresores: Francia, Prusia y Rusia. Entonces Don Domingo de Iriarte fue uno de los últimos diplomáticos españoles en quedarse en Varsovia. Don Domingo de Iriarte nos enseña una lección: lo que estamos observando hoy en día es la división de Europa. En Polonia sabemos que Rusia no se detendrá en Ucrania. Sabemos que la agresión por parte de Rusia es una amenaza al orden de Europa. 

Europa debe ser la tierra para una nueva esperanza, la patria del futuro.

MATEUSZ MORAWIECKI

Hoy Europa se enfrenta a muchas amenazas. Tenemos un enemigo existencial. Sí, Rusia es la Némesis de Europa. Por eso hoy los conservadores deben ser una fuerza civilizadora, somos quienes deben proporcionar esta estabilidad. Nosotros debemos asegurar que Europa, como herencia, sobreviva. 

Remarcando su contrariedad a una integración política europea —la Unión debería ser solo una “unión de naciones”—, el ex primer ministro polaco, diputado de Ley y Justicia y miembro de ECR, se ha preocupado sobre todo de subrayar la amenaza rusa. Resulta difícil imaginar a Le Pen diciendo lo mismo. ¿La división geopolítica seguirá siendo el gran elemento que impedirá la unificación de toda la extrema derecha a escala europea? O, como ha demostrado el acuerdo de gobierno en los Países Bajos, ¿basta con que la extrema derecha de ID modere un poco sus posiciones y se aleje de Moscú para ser considerada presentable para populares e incluso liberales?

José Antonio Kast (Chile)

Este megáfono también ha sido un instrumento para detener a la izquierda en su nefasta ideología. Aquí en España y lo decimos fuerte y claro: el fracaso de Podemos en España no hubiera sido posible sin Vox, sin Santiago Abascal y sin todos ustedes. El fracaso de Podemos se debe a la lucha de millones por la libertad que frenaron el avance de la izquierda más radical. 

Kast subió al escenario con un pequeño megáfono: un guiño a Abascal y a sus primeros mítines. El chileno dice al principio de su intervención: “Hace casi diez años, fue muy inspirador para todos nosotros, cuando tú con un megáfono en mano te parabas en un banco de Sevilla defendiendo principios y promoviendo las ideas de la libertad”. Kast insiste así en la evolución de Vox, subrayando el éxito de la convención con la presencia de tantos líderes. 

Muchos hoy día se quedan en los números, en los porcentajes, porque son incapaces de ver más allá y de comprender el peligro que hay detrás de estos grupos radicales y el profundo daño que pueden hacer a un país. Es cierto que hoy gobierna Sánchez. Por eso digo hoy que ha sido un gobierno desastroso para España, incapaz de frenar la inmigración ilegal, de combatir la inseguridad y de darle solidez a la economía y al empleo en España. 

Así que como decimos en Chile “le queda poco” y en Chile decimos “¡y fuera! ¡y fuera!”. Ya vendrá, ya iremos por él con perseverancia y con constancia y con las ideas de la libertad siempre por delante. 

El líder del Partido Republicano chileno ha cargado contra la izquierda y, especialmente, contra Podemos y el gobierno de Pedro Sánchez, sin, de todos modos, superar las líneas rojas, como su correligionario Javier Milei. Excepto por las menciones a Vox, su discurso podría ser pronunciado por Alberto Núñez Feijóo. Lo que demuestra no tanto la supuesta moderación de Kast, sino la radicalización del PP

Viktor Orbán (Hungría)

Les damos la bienvenida desde Budapest, en vísperas de las elecciones europeas. Estamos ante una gran batalla común. Bruselas está desatando una migración ilegal masiva, envenenando a nuestros hijos con propaganda de género, abandonando las zonas de campo y destruyendo las familias tradicionales y nosotros no podemos permitirlo. 

Por si fuera poco, hace unas semanas, en Bruselas, nos enviaron a la policía porque no querían oír que hablábamos de valores conservadores, cristianos y patrióticos. Es decir, del futuro de nuestra Europa. No hay nada más que hacer en esta situación, queridos amigos españoles, los patriotas debemos ocupar Bruselas. 

No hay nada más que hacer en esta situación, queridos amigos españoles, los patriotas debemos ocupar Bruselas. 

Viktor Orbán

Sólo podemos contar con nosotros mismos si queremos defender las fronteras de Europa. Sólo podemos contar con nosotros mismos si queremos que nuestras familias estén seguras y en paz. Sólo podemos contar con nosotros mismos si queremos ayudar a la gente a tener hijos y si queremos que el campo, el campo español, también tenga futuro. Y para eso necesitamos muchos luchadores patriotas en toda Europa. Gente que ya ha demostrado su valía. 

Mi amigo Santiago Abascal y los partidarios de Vox son luchadores entregados, sobre todo cuando se trata de la seguridad, de la libertad, de la protección de los españoles y de las familias. 

Vamos Santiago, vamos Vox, ¡hagamos que Europa vuelva a ser grande!

Mientras el checo Fiala, miembro de ECR, no ha asistido a Europa Viva 24, Meloni y Orbán, los únicos presidentes de gobierno ultraderechistas europeos que han participado, lo han hecho por vía telemática. Cabe notar, sin embargo, que Orbán envió un mensaje grabado mientras que Meloni estaba conectada en directo.

En la intervención del premier húngaro, hay que subrayar dos cuestiones. Por un lado, la centralidad de cuatro temas, ensalzados como banderas y compartidos por todas las extremas derechas a nivel europeo: la inmigración, la familia tradicional, la “ideología de género” y el mundo rural. Por otro lado, Orbán es, quizás, uno de los ponentes que explicita más la voluntad de tocar el poder en la Unión Europea o, utilizando, sus palabras “ocupar Bruselas”. Cabe poner de manifiesto el giro que la extrema derecha ha dado en la última década: desde querer destruir la Unión y salir del euro a querer conquistarla —para destruirla desde dentro, aunque no se diga tan explícitamente—. En las elecciones europeas de 2019 se apuntó ya a este viraje de 180 grados: ahora el viraje se ha completado.

Javier Milei (Argentina) 

¡Viva la libertad carajo!

¡Viva la libertad carajo!

¡Viva la libertad carajo!

[Cantando]

Hola a todos, yo soy el león, 

rugió la bestia en medio de la avenida,

lloran los zurdos sin entender 

Panic show a plena luz del día. 

¡Vamos! 

Pasan varios minutos de largos y sostenidos aplausos de un público que aclama a Milei y reclama el famoso “¡Viva la libertad carajo!” repetido —gritado— tres veces por el presidente argentino. Empieza luego su discurso cantando y adaptando la canción Panic Show del grupo de rock argentino La Renga. 

Para comenzar quiero darle las gracias a los organizadores del Viva, a Vox y a mi querido amigo Santiago Abascal por invitarme a estar aquí con ustedes hoy. El viernes presentando mi libro El camino del libertario contaba que cuando empecé con toda esta peripecia de dar públicamente la batalla cultural estaba más solo que Adán en el día de la madre. Y en ese contexto, uno de los pocos que me abrazaron y me aguantaron cuando todos me daban la espalda fue el querido Santiago. Así que quiero comenzar hoy aquí haciéndole un agradecimiento público ante ustedes. Gracias.

Santiago, mira Santiago, hasta dónde hemos llegado y cuánto tenemos por delante. Vengo predicando mi visión del sistema capitalista en auditorios donde la mayoría de lo que escuchan no siempre comparten lo que digo. A veces inclusive predicando ante gente que lo detesta porque se sienten aludidos por mi crítica como ocurrió por ejemplo en el Foro de Davos. Así es que debo decir que al igual que cuando expuse en el Instituto Milken, en Los Ángeles, es grato hoy estar entre amigos. Es reconfortante estar frente a un público que comparte nuestras ideas y que es parte de la enorme tarea de dar la batalla cultural frente a quienes quieren imponernos una visión del mundo que no solo es inmoral sino que es contraria a los valores que hicieron grande a Occidente.

Cuando empecé con toda esta peripecia de dar públicamente la batalla cultural estaba más solo que Adán en el día de la madre.

Javier Milei

Es cierto que dos años no son nada pero han pasado algunas cosas desde la última vez que estuve aquí con ustedes. Cuando me presenté acá hace dos años era tan solo un diputado nacional que, acompañado solamente por quien ahora ejerce el cargo de vicepresidente de la nación, enfrentábamos a la totalidad del sistema político en Argentina defendiendo las ideas de la libertad. Quiero decirles que si bien ahora tengo un trabajo un poquito más complicado y algo más particular nunca he dejado de lado ni lo haré en el futuro mi tarea histórica que es ser un humilde divulgador de las ideas de la libertad. Porque estoy convencido que hoy más que nunca estas ideas y valores que llevaron a lo más alto a la especie humana corren peligro y necesitan ser defendidas del asedio del maldito y cancerígeno socialismo.

El socialismo, esa ideología que está pintada de una pátina altruista que básicamente esconde lo peor del ser humano, que es la envidia, el odio, el resentimiento, el trato desigual frente a la ley y si es necesario, el asesinato porque nunca se olviden que los malditos socialistas asesinaron a 150 millones de seres humanos. Hace poco, en la conferencia que brindé en el Instituto Milken dije que en algún sentido, los argentinos somos profetas de un futuro apocalíptico que nosotros ya hemos vivido pero que el resto de Occidente aún tiene por delante. Porque si miran la historia argentina de los últimos dos siglos verán una tragedia en dos partes: ascenso y caída, una tragedia que es testimonio de lo que puede ocurrir cuando se reemplaza las ideas de la libertad por cualquier tipo de experimento colectivista. En la segunda mitad del siglo XIX, la dirigencia argentina grabó en piedra los principios básicos del liberalismo que son la defensa a la vida, a la libertad y a la propiedad privada. Como resultado vimos el proceso de crecimiento económico más fuerte de nuestra historia. De hecho, Argentina crecía más que el equivalente de las tasas chinas de ese momento. En tan solo 35 años nos convertimos en una potencia mundial, fuimos la primera nación de la historia humana en erradicar el analfabetismo, teníamos un producto bruto interno total superior a la suma de Brasil, México, Paraguay y Perú juntos. Éramos la primera potencia mundial en términos de PBI per cápita. 

Nosotros, un país periférico que el resto del mundo apenas conocía, éramos la Meca de Occidente y recibimos millones y millones de inmigrantes que soñaron en Argentina la posibilidad de una vida mejor. La mayoría de ellos eran españoles; de ahí radica en parte la hermandad eterna entre nuestros pueblos. Desde la primera mitad del siglo XX la dirigencia política se enamoró del Estado, abandonó las ideas de la libertad y las reemplazó por la doctrina de la justicia social que atenta directamente contra la libertad y la propiedad del individuo. Ahí comenzó el siglo de humillación en Argentina. 100 años de decadencia en los que se rompieron una y otra vez todas las reglas básicas de la economía para sostener el afán de los políticos de gastar lo que no tenemos bajo el delirante pretexto de que donde hay una necesidad nace un derecho.

[…] 

La justicia social siempre es injusta porque implica un robo. Porque implica un trato desigual frente a la ley y que cada intento de los políticos por hacerse los buenos termina perjudicando la generación de riqueza y en consecuencia, termina perjudicando el conjunto de la sociedad. Tampoco se dan cuenta o no parece importarles que el costo de sostener esta pantomima bienpensante de los progres sea subvertir todos los valores que hicieron de la civilización occidental la punta de lanza de la historia del progreso humano. Porque, en el fondo, están siendo guiados por pasiones humanas de las más bajas como la envidia, el odio y el resentimiento que nublan el pensamiento y los enceguecen. Es más, tanto los enceguecen, a punto tal que viven proyectando sus miserias en el resto. Por eso a todos aquellos que se piensan que están salvando el mundo con el Estado presente con impuestos altos, con cupo de géneros y castigando a los empresarios yo les digo: ¿saben qué es lo mejor para los trabajadores? Que pacten contrato libremente con sus empleadores, es a las mujeres dejar de tratarlas como víctimas que necesitan cuidados especiales. 

Yo pregunto: ¿acaso los socialistas consideran a las mujeres como seres inferiores para estar otorgándoles privilegios? Les pregunto a los socialistas: ¿saben qué es lo mejor para el planeta? Dejar el mercado que encuentre, como ha hecho siempre, las mejores soluciones. ¿Saben qué es lo mejor para los niños? Un padre y una madre que les conoce mucho mejor que cualquier burócrata. ¿Y saben cómo se logra esto? Retirando al Estado parasitario de la vida de las personas y dejando que los ciudadanos sean libres, dejándolos asociarse libremente, elegir qué producir, a quién emplear, dónde estudiar, a quién venderle, qué comprar y qué hacer con el fruto del trabajo. 

El mundo se salva no corriendo atrás de una agenda culposa de un par de burócratas sino achicando al Estado para engrandecer a la sociedad. Hay que destruir esa idea parasitaria que se ha aprendido en Occidente que dice que la tarea del Estado —o sea del burócrata— es controlar cada aspecto de la vida de los ciudadanos, esa idea de que los políticos deben cuidar a la gente desde la cuna hasta la tumba. Esto no ha sido nunca la tarea del Estado: la tarea del Estado en caso de existir es defender la vida, la libertad y la propiedad privada de los individuos. 

El mundo se salva no corriendo atrás de una agenda culposa de un par de burócratas sino achicando al Estado para engrandecer a la sociedad.

Javier Milei

Pero las élites globales no se dan cuenta de lo destructivo que puede llegar a ser implementar las ideas del socialismo porque lo tienen demasiado lejos. No saben qué tipo de sociedad y país puede producir, y qué calaña de gente atornillada al poder y qué niveles de abuso puede llegar a generar. Digo aún cuando tenga la mujer corrupta, digamos, ensucia y se tome 5 días para pensarlo. 

Por eso me toca a mí mostrarle lo que es lo siniestro y nefasto, qué es el socialismo, porque lo hemos vivido en carne propia, lo sufrimos todos los días, porque la Argentina es un país infectado de socialismo hace décadas o quizás debería decir, estaba. El socialismo conduce a la pobreza y a la muerte, el que diga otra cosa es un ignorante o un mentiroso. Conduce a la muerte. Nunca pero nunca podemos dar el brazo a torcer en nada, no podemos dejarnos correr un milímetro por los zurdos y aún cuando parezca que tienen razón —porque nunca la tienen—. 

El presidente argentino ha sido, sin duda, el invitado estrella de Europa Viva 24. Su discurso, de notable agresividad, es el más relevante de los pronunciados en Vistalegre. No se trata de algo nuevo, pero el lugar y el contexto en que los ha pronunciado importan. No hay que olvidar que es este el primer viaje oficial de Milei a España y no ha pedido reunirse ni con el jefe del Estado, ni con el presidente del gobierno que ha incluso insultado su mujer, tachándola de “corrupta” sin ninguna prueba, desatando una crisis diplomática de calado entre Madrid y Buenos Aires

La receta paleolibertaria o, como gusta decir el presidente argentino, “anarcocapitalista”, se resume en el ataque contra el socialismo, definido como una ideología que produce miseria y muerte; la afirmación de que la justicia social es una “aberración”; la negación de la existencia de derechos; la defensa constante de la libertad, convertida en un significante vacío; la idea de que el Estado debe en la práctica desaparecer y no interferir en la vida de los ciudadanos. La propuesta de Milei mezcla el autoritarismo y el conservadurismo con un ultraliberalismo agresivo, que haría palidecer a Reagan y Thatcher: véase su crítica al Foro de Davos, considerado como una cumbre de peligrosos socialistas… Todo esto, en una estrategia marcada por la batalla cultural, instrumentalizando el pensamiento del filósofo comunista italiano Antonio Gramsci, citado a menudo por Milei, descontextualizándolo. Ahora bien, no hay que olvidar que el líder de La Libertad Avanza utiliza las guerra culturales, mezcladas a fake news y posverdad —véase la visión idealizada de la historia de Argentina, alejada de cualquier base científica— para crear ruido mediático y caos con el objetivo de que no se hable de otros temas, como, por ejemplo, las políticas austeritarias aplicadas tras su llegada a la Casa Rosada; políticas que no solo no han mejorado la situación económicas del país, sino que han aumentado exponencialmente el número de familias en situación de pobreza.

Matt y Mercedes Schlapp (Estados Unidos) 

Santiago, muchísimas gracias por invitarnos a España. Nos han dicho que iba a merecer la pena el viaje, y lo merece. Qué gran momento para estar vivos, para estar en esta lucha por la libertad. Qué gran momento en Estados Unidos para luchar por todo lo que hace grande a América. 

Mercedes y yo tenemos un mensaje: dejad de ver CNN. Dejad de leer los periódicos estadounidenses, dejadlo. Tenemos algo importante que deciros: en Estados Unidos vamos a ganar porque Donald Trump va a ser de nuevo nuestro presidente. Quedan meses, días, para que se levanten los estadounidenses. Porque se les ha mentido a los estadounidenses, se les ha mentido por los mismos que os mienten a vosotros aquí en España. Os han dicho que vuestras familias están descompuestas, que no son importantes. Os han dicho que vuestros hijos están mejor si los cría el gobierno. Os han dicho que vuestra fe en Dios es una mala concepción y una concepción obsoleta. 

La intervención de los cónyuges Schlapp no es importante por el contenido que se reduce a los clásicos eslóganes trumpistas, incluidos los ataques a los medios de comunicación independientes. Lo que cabe retener es el significado de la presencia a Madrid del presidente de la Unión Conservadora Americana y animador de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), principales think tanks del trumpismo. Por un lado, nos muestra como Vox y la extrema derecha europea tienen buenas relaciones con los ultras del otro lado del Atlántico. Por el otro, nos muestra la presencia tentacular de redes y lobbies ultraderechistas en todo el mundo. A partir de 2017, durante la presidencia de Trump, cuando su mujer Mercedes trabajaba como directora de Comunicación Estratégica de la Casa Blanca, Schlapp fue el principal impulsor de la expansión global de la CPAC que empezó a organizar cumbres en Japón, Corea del Sur, Australia, Brasil, México y Hungría. La mayoría de los líderes presentes en Vistalegre han participado en algunos de los eventos de la CPAC en Europa o América. 

El motivo por el que Estados Unidos ganará y Trump será presidente de nuevo es porque reafirmamos en este momento nuestra fe en Dios, nuestra creencia en su verdad. Honramos la vida que nos da y celebramos todas las vidas. Le agradecemos por ponernos en esta lucha por la libertad, por la civilización, por nuestro futuro y aquí es crucial que todos estemos unidos de la mano, conservadores, personas que creen en las tradiciones, en la fe. No vamos a dejar que Biden o Soros nos dividan. 

El motivo por el que Estados Unidos ganará y Trump será presidente de nuevo es porque reafirmamos en este momento nuestra fe en Dios, nuestra creencia en su verdad. No vamos a dejar que Biden o Soros nos dividan.

Matt Schlapp

Amichai Chikli (Israel) 

Es un gran privilegio estar aquí. Muchas gracias señor Abascal por su invitación a este evento único. Es un tiempo duro en Israel, como sabemos. Actualmente estamos bajo un ataque iraniano, luego también los misiles de crucero de Irán, un ataque de Hezbolá y sus organizaciones hermanas, lanzados sin provocación desde la frontera de Líbano. Y desde luego, la guerra contra Hamás que lanzó un ataque brutal hace meses contra Israel con más de 1.000 muertos civiles, con ancianos, niños, mujeres fallecidos. Cómo puede un ser humano estar motivado para torturar a una mujer frente a sus hijos y luego asesinarlos. Cómo puede uno cultivar el deseo de la muerte, de la violación de mujeres jóvenes que estaban en una fiesta. 

Estas son las verdades corruptas de Hamás, del islam radical. En las escuelas el sistema palestino de Educación se enseña el odio, el deseo de matar a los infieles, a los judíos, con esta mezcla de fanatismo religioso y de tropas paramilitares. 

[…] Por favor no olvidéis a las personas inocentes, os ruego no olvidar cómo empezó todo esto, cómo empezó esta guerra. No tenemos más opción que pelear y ganar por el bien de nuestros hijos, por el bien del mundo libre. Lamentablemente, el Primer Ministro español Sánchez cree que los palestinos tienen que ser gratificados por su masacre y este es el momento de darles un Estado. 

Esta guerra no tiene solo que ver con el futuro de Gaza o del Estado de Israel. Sino que es una batalla existencial por el futuro de nuestra civilización contra el islam radical, el futuro de la civilización occidental, el futuro de la humanidad. 

Amichai Chikli

Hay que subrayar estos hechos cruciales de la Autoridad Palestina. Ni siquiera un cargo superior ha condenado la barbarie de Hamás. Ni siquiera uno de los cargos en el gobierno palestino, de la Autoridad Palestina. Por el contrario, muchos muchos palestinos apoyan la masacre en el gobierno y piensan que es una respuesta natural. Los oficiales de Fatah dicen que en Sabra hubo más masacres y están en un estado de euforia. Hay un estado de alegría inmensa. Esa es la Autoridad Palestina pero la Autoridad Palestina va más allá. Exige pagos por los prisioneros, piden miles de millones de séqueles para que las escuelas sigan adoctrinando a los jóvenes en el odio a los judíos. 

El Instituto Palestino llevó a cabo una investigación en octubre: el 90% de los palestinos tenían un orgullo por el ataque del 7 de octubre. Hace falta un pueblo entero para educar a un niño y también hace falta un pueblo para criar a violadores asesinos. Santiago hace unos meses, tú viniste a Israel para mostrar tu solidaridad. Caminaste por esas casas destruidas de los kibutz, viste a los niños que habían abandonado sus juguetes allí y a diferencia de otros, no lo hiciste por la foto. A diferencia de otros, tu buen corazón te llevó a alinearte con el Estado de Israel en lugar de amar a Hamás. 

Muchas gracias Santiago Abascal, muchas gracias por apoyar la verdad en nombre de los ciudadanos de Israel y del gobierno de Israel. Te quiero dar las gracias porque entendiste muy bien que esta guerra no tiene solo que ver con el futuro de Gaza o del Estado de Israel. Sino que es una batalla existencial por el futuro de nuestra civilización contra el islam radical, el futuro de la civilización occidental, el futuro de la humanidad. 

La presencia en Vistalegre del ministro israelí a cargo de Asuntos de la Diáspora de Israel y de la lucha contra el Antisemitismo resulta sintomática. No tanto por la repetición de la versión “oficial” de la guerra de Gaza del ejecutivo de Netanyahu, del cual Chikli es miembro. Más bien, lo que interesa retener es la sintonía existente entre la extrema derecha de todo el mundo y el Estado de Israel, concebido como una especie de “centinela de Occidente” en Oriente Medio. En las últimas décadas, y sobre todo tras el 11 de septiembre de 2001, la extrema derecha hizo un viraje de 180 grados, pasando del antisemitismo al filosionismo en función anti islámica. El gobierno de Netanyahu formado por el Likud, aliado de ECR, y formaciones de extrema derecha religiosa es el modelo de unificación de la derecha al que aspiran los ultras del resto del mundo.

Santiago Abascal (España) 

Qué buenos amigos tenemos, qué alegría poder oír hoy aquí tantos idiomas distintos, tantos acentos distintos, tantos partidos, asociaciones y movimientos distintos, pero que pelean frente a las mismas amenazas —y a todas ellas se han referido los que me han precedido en el uso de la palabra—. Por sufrir esas amenazas absolutamente compartidas estamos dispuestos a cooperar, a colaborar y a ser solidarios unos con otros. Esa es la clave, porque todos defendemos nuestra soberanía y nuestro interés nacional, porque nuestro primer deber es con nuestros compatriotas. 

Aunque hoy estemos aquí con nuestros aliados internacionales pero también sabemos que no podemos hacerlo solos porque los otros, los malos, no lo hacen solos y frente al globalismo que ataca las soberanías nacionales y frente a su alma socialista absolutamente criminal que restringe la libertad de prensa debemos responder con una alianza global de los Patriotas en defensa del sentido común, de la prosperidad económica, de la seguridad y de la libertad. Porque compartimos la amenaza pero también compartimos la esperanza del cambio, del triunfo. Y eso nos debe llevar a la absoluta hermandad, a la colaboración permanente, al trabajo hombro con hombro y sin descanso hasta derrotar todas y cada una de las políticas que solo persiguen la ruina moral, económica y nacional de nuestros pueblos. 

Esas políticas que hemos visto en España desde hace demasiado tiempo, las hemos visto y todavía las padecemos. Un sumiso gobierno globalista entregado o secuestrado por todos los enemigos de nuestra patria desde los que quieren romperla desde dentro hasta los que quieren invadirla desde fuera y desde entonces no pasa un solo día sin que lesionen la unidad nacional, la separación de poderes, asalten nuestras fronteras o que directamente le metan la mano en el bolsillo a los trabajadores. Y así todos los días y un día detrás de otro porque un día vuelan por los aires una central eléctrica y al día siguiente, suben los impuestos para pagarle el gas a Rusia. Un día aunque media España esté sedienta y en la otra media haya inundaciones se oponen a las presas y a los trasvases siguiendo los dictados de la ley de la restauración de la naturaleza y al día siguiente aprueban cientos de millones para pagar a Marruecos sus propios trasvases y sus propias presas. 

Debemos responder con una alianza global de los Patriotas en defensa del sentido común, de la prosperidad económica, de la seguridad y de la libertad. 

Santiago Abascal

Un día se traviste —porque aquí también se traviste, querido José Antonio— de defensores de la democracia y esa misma noche, pero es que esa misma noche, están metidos en la cama con todos los regímenes narcocoyotes. Se hacen fotos con restos humanos de víctimas del socialismo del siglo pasado. Lo ha hecho el presidente del gobierno, como si disfrutaran removiendo viejos rencores y viejas guerras. Y al día siguiente, promueven una ley de amnistía para terroristas y para ladrones porque dicen que eso sí hay que olvidarlo. 

[…] Ellos son los culpables de prometer un falso futuro, una falsa esperanza a millones de personas en el mundo que siquiera estamos en condiciones de ofrecer a nuestros hijos y a nuestras familias. Ellos, los progres, los zurdos, los rojos, los socialistas y la derechita cobarde y acomplejada, ellos son los culpables.

[…] Y así todos los días y todos los meses hasta que no echemos a este gobierno. La pregunta es cómo es posible que no les hayamos echado a patadas, que no les hayamos corrido a gorrazos, recordando todas estas barbaridades, todas estas tropelías, las que han cometido, las que cometen y las que están por cometer. 

Esa es la pregunta. 

El líder de Vox, anfitrión del evento, no ha añadido nada nuevo a su ya usual discurso. Cabe reseñar, sin embargo, la violencia verbal de su intervención hasta el punto de pedir que se eche “a patadas” el ejecutivo de Sánchez, y los continuos ataques al PP, tildado de “derechita cobarde”. Sin embargo, lo más interesante es, probablemente, la mención a “una alianza global de los Patriotas en defensa del sentido común”. Esto nos muestra, por un lado, cómo la extrema derecha se sienta parte de una misma familia global y ha tejido redes internacionales que teóricamente deberían entrar en contradicción con el ultranacionalismo que profesan. Por el otro, la constante referencia al “sentido común”, que se debe entender tanto en la lógica de desdiabolización de estas formaciones —no se consideran extremistas, ni radicales: dicen defender la gente común, el pueblo llano—, así como en la voluntad de conquistar el sentido común —que la gente normalice su discurso hasta considerarlo, justamente, “sentido común”—. 

Bueno, ahora ahora dirán que he hecho una propuesta literal y tendrán titulares para todos los días porque no entienden la lengua española. Pues sabéis por qué es posible que no lo hayamos logrado todavía. Pues porque hay una derechita cobarde y estafadora que un día hace como que se opone a estas cosas y al día siguiente, las aprueba, las asume de una forma o de otra, porque la derechita cobarde y estafadora un día se manifiesta contra este gobierno y al día siguiente, le va mendigando cualquier pacto desde la financiación de las regiones a la forma de repartirse los jueces. 

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