«Estamos en guerra». Al atacar directamente la postura del canciller Scholz, a la expectativa sobre Ucrania, y tender la mano al presidente francés, el líder de la poderosa Unión Demócrata Cristiana (CDU), Friedrich Merz, que el verano pasado abrió paso para un acercamiento con la AfD, pronunció un discurso fundamental, con un principio rector: Alemania debe volver a ser capaz de defenderse. Lo traducimos aquí.
Pierre Mennerat
El 1 de noviembre, Robert Habeck, Ministro de Economía y Vicecanciller alemán, pronunció un discurso sobre el conflicto israelo-palestino que suscitó una gran atención tanto en Alemania como en el extranjero. Reaccionando en particular al aumento de los actos antisemitas, su objetivo era recordar el lugar singular que ocupa esta cuestión en Alemania, anclando su política exterior en un razonamiento pedagógico e histórico.
Las relaciones entre París y Berlín no son buenas en estos momentos -y es un eufemismo-. Hay poco entendimiento por ambas partes, hasta el punto de que los principales pilares de la cooperación franco-alemana parecen estar en punto muerto. Para saber por qué, Michaela Wiegel, corresponsal de FAZ en París, responde a nuestras preguntas.
«No estamos de acuerdo en nada»: lo que Habeck dijo realmente sobre las relaciones franco-alemanas
EconomíaDesde hace unos días, una pequeña frase agita toda la burbuja franco-alemana. ¿Cómo debe interpretarse? En plena crisis alemana, Robert Habeck, Ministro Federal de Economía y Energía, puede haber encontrado la franqueza que le falta a Scholz cuando se dirige a París. Para comprender el sentido de su discurso, lo introducimos y traducimos íntegramente.
¿Se está convirtiendo Scholz en el nuevo think tanker-in-chief del continente? En su discurso del 9 de mayo ante el Parlamento Europeo, el canciller alemán propuso una formulación alternativa de la Unión geopolítica, opuesta a la de una Europa potencia bañada en el mito civilizatorio. Lo traducimos y comentamos línea por línea por primera vez.
Con motivo del sexagésimo aniversario del Tratado del Elíseo, Olaf Scholz quiso manifestar su deseo de volver a poner en marcha el motor franco-alemán tras varios meses marcados por un claro enfriamiento. Concebido principalmente como una celebración de la relación bilateral y de sus artífices, el discurso subraya el papel de «locomotora» desempeñado por París y Berlín en la secuencia abierta en febrero de 2022 con la invasión de Ucrania por Rusia -una lectura esencial-.
La relación franco-alemana no empezó con el Tratado del Elíseo. Si la centralidad de esta pareja para la construcción europea es antigua, hoy ha tomado la forma de un mito funcional y virtuoso, esencial para la dinámica continental y capaz de producir compromisos decisivos. 10 puntos para entender cómo.
«Los intereses alemanes no son los únicos en juego», una conversación con el ministro Tobias Lindner
Política¿Cómo ve Alemania su lugar en el mundo y su papel en Europa desde la invasión de Ucrania? Hablamos con Tobias Lindner, Viceministro Federal de Asuntos Exteriores de las filas de Die Grünen: en nombre de Berlín, aboga por pasar de una «seguridad interconectada» a un «bloque de seguridad» -que tenga en cuenta la diversidad de dependencias y desafíos-.
Hoy, en Praga, Olaf Scholz acaba de pronunciar un discurso que es necesario leer con atención. Publicamos la primera traducción en español, con comentarios línea por línea.
«La mera constatación de un cambio de época no hace un programa.» En un importante texto comentado aquí por primera vez en español, Olaf Scholz detalla cómo podría ser la entrada de Alemania en una nueva era global, articulando diferentes escalas y abriendo el camino a alianzas inesperadas.