Mohammad Reza Zahedi, muerto en un ataque en Damasco el 1 de abril, era una figura clave de la política iraní en la región, que actuaba como puente entre Siria y Hezbolá.

  • Miembro de alto rango de la Guardia Revolucionaria, su perfil era menos central que el del general Soleimani, muerto en 2020 por un ataque estadounidense con drones y convertido desde entonces en un símbolo nacional cuyo retrato se exhibe en todas las embajadas iraníes.
  • Este elemento es esencial para tratar de comprender la lógica del ataque atribuido a Israel, llevado a cabo sin consultar con Estados Unidos, y para ponerlo en contexto.
  • De hecho, es posible que no se tratara de una operación premeditada para eliminar a una figura importante del régimen, sino más bien de una respuesta a los ataques contra Israel por parte de grupos apoyados por Irán, que se han intensificado en los últimos días.

Tras unas negociaciones en las que participó el primer ministro iraquí, Al Sudani, el principal grupo armado de la Resistencia Islámica en Irak anunció el 30 de enero el cese de sus ataques contra posiciones estadounidenses1.

  • Desde entonces, los ataques de la organización se han concentrado en objetivos israelíes, según los datos recogidos y compilados por el Washington Institute for Near East Policy2.
  • Según los datos del instituto, la tendencia mensual en el número de ataques con éxito de la Resistencia Islámica en Irak contra objetivos israelíes ha aumentado significativamente: 0 en octubre, 3 en noviembre, 4 en diciembre, 11 en enero, 4 en febrero y 16 en marzo.
  • Aunque cada uno de estos ataques difiere en alcance e impacto, su multiplicación es lo que pudo llevar a Israel a atacar el lunes 1 de abril.
  • Este ataque se produjo inmediatamente después de un atentado atribuible a la Resistencia Islámica en Irak contra la base naval israelí de Eilat esa misma mañana, que causó algunos daños materiales.

¿Cómo responderá Irán?

  • El ataque en Damasco pone al régimen en una situación delicada. A diferencia del asesinato de Qassem Soleimani, Teherán aún tiene la opción de considerar este ataque no como una escalada, sino como una respuesta oportunista de Israel en el contexto de las tensiones regionales sin buscar una escalada. Según algunas fuentes, Israel aprovechó una reunión de alto nivel en el edificio objetivo para atacar.
  • Si este fuera el caso, cabría prever una respuesta mínima: Irán podría planificar su represalia a lo largo del tiempo intensificando las acciones de sus proxies más o menos distantes en Irak, Líbano y Yemen.
  • En el caso contrario, cuando Irán interprete la acción de Israel como una escalada, Teherán podría optar por un ataque con drones o misiles sobre Eilat o un consulado en un país de la región.

En cualquier caso, el ataque atribuido a Israel no parece señalar un deseo por parte del Estado hebreo de escalar el conflicto, sino más bien una señal de que no teme la escalada de una guerra directa con Teherán.

  • Según el ex jefe de la inteligencia británica (MI6), en esta secuencia Israel aprovechó la cautela mostrada por Hezbolá e Irán para adoptar una actitud más agresiva3.

A pesar de las amenazas de represalias «apropiadas» y de la declaración del ayatolá Jamenei de que Irán haría que Israel «se arrepintiera de este crimen», las autoridades iraníes no han especificado la naturaleza de su respuesta. Israel, por su parte, aún no ha reivindicado explícitamente la autoría del atentado. En una referencia apenas velada al ataque, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, declaró ante una comisión de la Knesset: «Estamos en una guerra con varios frentes, de ataque y de defensa. Tenemos pruebas de ello todos los días, incluidos estos días».

Notas al pie
  1. Anuncio del grupo Kataeb Hezbolá. Timour Azhari, Iraq’s Kataib Hezbollah says it suspends attacks on US forcesReuters, 30 de enero de 2024.
  2. Washington Institute for Near East Policy, « Tracking Anti-U.S. Strikes in Iraq and Syria During the Gaza Crisis », abril de 2024.
  3. Patrick Wintour, « Iran decides on response to Israeli strike that killed top commanders », The Guardian, 2 de abril de 2024.