El tipo impositivo mínimo del 15% que entró en vigor el 1 de enero es el segundo pilar del acuerdo alcanzado por la OCDE en octubre de 2021.

  • Inicialmente estimado por la OCDE en 150.000 millones de dólares anuales, la organización ha revisado al alza sus estimaciones y ahora considera que los ingresos fiscales del nuevo impuesto podrían alcanzar los 200.000 millones de dólares anuales a escala mundial1.
  • El tipo mínimo también ha entrado en vigor en el Reino Unido, Noruega, Canadá, Australia, Japón y Corea del Sur2.
  • China y Estados Unidos, en cambio, aún no han aprobado la legislación que transpone el acuerdo a la legislación nacional.

Sin embargo, el tipo impositivo mínimo del 15% sigue siendo considerado insuficiente por varios países y organizaciones, que reclaman una reforma más ambiciosa de la fiscalidad internacional3.

  • Para Gabriel Zucman, la eficacia del acuerdo alcanzado en 2021 se ha visto mermada por «toda una serie de exenciones y nichos, así como por la no participación de Estados Unidos».
  • Además, en lugar de reducir la competencia fiscal, la armonización de los tipos impositivos podría provocar en realidad un cambio en la naturaleza de la competencia fiscal y un desplazamiento hacia «una competencia fiscal basada en créditos fiscales y subvenciones».
  • El 22 de noviembre de 2023, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó, por 125 votos a favor, 48 en contra y 9 abstenciones, la resolución presentada por Nigeria en nombre del grupo de países africanos, recomendando el establecimiento de una convención marco para una cooperación fiscal internacional «plenamente integradora y más eficaz»4.
  • Los países del Norte, entre ellos Estados Unidos, los Estados miembros de la Unión Europea, Japón y Corea del Sur, se oponen.

El primer pilar de la reforma fiscal internacional de la OCDE, dirigido específicamente a las empresas con mayor volumen de negocio y más rentables del mundo -en particular las digitales-, podría entrar en vigor ya en 20255, según la OCDE.

  • Consiste en un impuesto del 25% sobre los «beneficios residuales» -definidos como beneficios superiores al 10% del volumen de negocio-, cuyos ingresos se repartirán entre los países en los que opere la empresa (y ya no sólo en función de su domicilio oficial).
  • Se dirige a empresas con un volumen de negocio superior a 20.000 millones de euros y una rentabilidad superior al 10%, incluidas las GAFAM (Google, Apple, Facebook, Amazon y Microsoft). Cabe señalar que las industrias extractivas y las empresas de servicios financieros regulados están excluidas, a pesar de su importante volumen de negocios y rentabilidad.
  • La OCDE estima que los ingresos por este impuesto habrían alcanzado entre 17.400 y 31.700 millones de dólares en 2021.

Entre las demás negociaciones previstas en 2024 sobre el tema de la fiscalidad, el grupo de trabajo lanzado en la COP 28 sobre nuevos instrumentos fiscales internacionales para una financiación justa y eficaz de la transición ecológica presentará sus primeras conclusiones en la COP 29, que tendrá lugar en Bakú del 11 al 22 de noviembre.

Notas al pie
  1. OCDE, Informe fiscal del Secretario General de la OCDE a los Jefes de Estado y de Gobierno del G20, Septiembre de 2023.
  2. FT, « Global minimum tax on multinationals goes live to raise up to $220bn », 1 de enero de 2024.
  3. Incluida la Comisión Independiente para la Reforma Fiscal de las Empresas Internacionales (ICRICT), de la que forman parte Joseph Stiglitz, Thomas Piketty y Gabriel Zucman.
  4. Naciones Unidas, Proyecto de resolución revisado, 15 de noviembre de 2023.
  5. OECD, Outcome Statement on the Two-Pillar Solution to Address the Tax Challenges Arising from the Digitalisation of the Economy, 11 de julio de 2023.