Las previsiones de crecimiento de las principales economías se revisan al alza, salvo las de Alemania

En general, el Fondo Monetario Internacional se muestra positivo: los signos de mejora a corto plazo son «innegables», y la economía mundial sigue recuperándose gradualmente de la pandemia y de las consecuencias de la invasión rusa de Ucrania¹.

• En sus previsiones actualizadas, el FMI elevó su proyección de crecimiento mundial en 0,2 puntos, del 2,8% al 3%.
• Debido a la caída de los precios de la energía y los alimentos, las presiones inflacionistas se han atenuado más rápidamente de lo previsto².
• El periodo de inestabilidad financiera marcado por las «turbulencias bancarias» de marzo (que provocaron la quiebra de importantes bancos estadounidenses, entre ellos el Silicon Valley Bank y el Signature Bank) se contuvo «gracias a la enérgica actuación de las autoridades estadounidenses y suizas».

Mientras que las últimas proyecciones del FMI indican que es poco probable que Italia y el Reino Unido experimenten una recesión en 2023 (tras un aumento de 0,7 puntos para el Reino Unido en comparación con las proyecciones de abril), el crecimiento en Alemania se estima en un -0,3% y un 1,3% para 2024. Esto convierte a Alemania en el único país del G7 cuya economía se prevé que se contraiga el próximo año, en gran parte debido a la debilidad de la producción manufacturera³.

A pesar de la mejora general de las perspectivas a corto plazo de la economía mundial, el FMI advierte de que «aún no está fuera de peligro».

• En particular, el FMI recomienda a los principales bancos centrales que eviten nuevas subidas de sus tipos de interés oficiales, ya que los riesgos de inflación están ahora «más equilibrados».
• La «fragmentación geopolítica» también se presenta como un factor que aumenta la volatilidad de los precios de las materias primas y «obstaculiza la cooperación multilateral en la provisión de bienes públicos mundiales».
• Por último, el informe recomienda la consolidación fiscal – sin abogar por medidas de austeridad – para las economías que han puesto en marcha importantes políticas de apoyo presupuestario para hacer frente a las numerosas crisis que han surgido: pandemia, energía, clima en particular.

A pesar de los indicios de que «la recuperación china está perdiendo fuelle», las perspectivas de crecimiento de China para 2023 (5,2%) y 2024 (4,5%) se mantienen sin cambios y siguen estando por encima de la media de los mercados emergentes y las economías en desarrollo. Sin embargo, el FMI señala que la debilidad del sector inmobiliario, el aumento del desempleo juvenil y la caída del consumo tienen «implicaciones potencialmente negativas» para la economía regional y mundial.