Mientras Occidente parece unido en su firme condena del atentado de Hamás, la mayoría de los países árabes y musulmanes han optado por una forma de neutralidad: llamando a la desescalada -entre la distancia estratégica y el apoyo ambiguo- o no tomando posición, en una neutralidad que raya en la actitud de esperar a ver qué pasa.

Después de Irán (cuya postura hemos estudiado aquí), Argelia es el primer país que adopta una postura clara, condenando unilateralmente al Estado de Israel (considerado único responsable de los «brutales atentados») y reivindicando el derecho de los palestinos a luchar contra «la ocupación sionista».

En un comunicado oficial publicado en las redes sociales por la cuenta del Ministerio de Asuntos Exteriores argelino se lee:

«Argelia sigue con gran preocupación la evolución de los brutales ataques de Israel contra la Franja de Gaza, que han costado la vida a decenas de hijos e hijas inocentes del pueblo palestino, caídos como mártires frente a la persistente política de opresión y persuasión que la ocupación sionista impone al valiente pueblo palestino.

Argelia condena firmemente estas políticas y prácticas, que violan las normas humanitarias más elementales y las referencias de la legitimidad internacional.

En este contexto, Argelia renueva su llamamiento a la intervención inmediata de la comunidad internacional a través de las instancias internacionales competentes para proteger al pueblo palestino de la arrogancia y el crimen que la ocupación sionista ha erigido en sello distintivo de esta cooperación.

Argelia renueva asimismo su convicción de que la ocupación colonial sionista está en el centro del conflicto árabe-israelí y que el fin de las plagas y tragedias resultantes de este conflicto reside indiscutiblemente en la realización de los legítimos derechos nacionales del pueblo palestino y en su habilitación para establecer su estatuto independiente en las fronteras de 1967 con Al-Quds Al Sharif [uno de los nombres árabes de Jerusalén] como capital.

Argel, 7 de octubre de 2023«.

Algunos puntos de contexto:

  • Argelia e Israel nunca han mantenido relaciones diplomáticas oficiales, Argelia participa en el boicot de la Liga Árabe a Israel y no reconoce oficialmente el Estado de Israel. Argelia también deniega la entrada a cualquier persona que tenga pasaporte israelí o cualquier otro pasaporte con visado israelí.
  • Esta postura está en el centro de la doctrina del presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, especialmente en relación con los Acuerdos de Abraham y en clave antimarroquí. En una entrevista concedida a los medios de comunicación argelinos el 20 de septiembre de 2020, declaró: «Hemos observado una especie de carrera hacia la normalización. Esto es algo en lo que nunca participaremos, ni bendeciremos, la cuestión palestina es sagrada para nosotros y es la madre de todas las cuestiones y sólo se resolverá con la creación de un Estado palestino, con las fronteras de 1967, con la santa Jerusalén como capital.»