Tras varios meses de repliegue de las tropas ucranianas ante el avance ruso hacia Velyka Novosilka, un pueblo al oeste del óblast de Donetsk que llegó a tener una población de 5.000 habitantes, las fuerzas de Kiev que quedan están prácticamente rodeadas. La pérdida del pueblo parece inevitable, aunque el mando ucraniano ha declarado hoy, viernes 24 de enero, que «se están considerando ciertas opciones para resolver esta situación» 1.

  • Según los datos del vector del Institute for the Study of War, a 23 de enero las tropas rusas reivindicaban el control de más de tres cuartas partes de Velyka Novosilka (128 km²).
  • El acceso a las dos carreteras que unen la ciudad con el norte y el oeste del óblast está ahora parcialmente controlado por las fuerzas rusas, lo que hace peligrosa cualquier retirada. La situación geográfica de la localidad, y en particular la presencia de ríos, está «creando dificultades adicionales» para las operaciones 2.

Sobre el terreno, la agrupación operativa y estratégica de las tropas de Khortytsia, responsable de la defensa de la aldea, describió «combates agotadores contra un enemigo superior». Según el portavoz del grupo, el objetivo no era repeler a los combatientes rusos, sino «infligirles el máximo de bajas» 3. La toma de la aldea, que acarrearía importantes pérdidas ucranianas si los rusos no se retiran, sería vista como una victoria significativa por Moscú: los rusos llevan intentando ocupar el bastión desde 2022, sin éxito.

A principios de este año, el Estado Mayor ruso se adjudicó su primera victoria de 2025 con la captura de Kurakhove, a unos cuarenta kilómetros al noreste. La pérdida de Velyka Novosilka por parte de Kiev supondría un segundo revés en el espacio de unas pocas semanas.

  • La caída de la aldea no cambiaría radicalmente la faz del frente. Sin embargo, abriría aún más el camino a las fuerzas rusas hacia Pokrovsk, en el noreste, y el óblast de Zaporiyia, en el oeste.
  • Rusia también podría penetrar en las próximas semanas en el óblast de Dnipropetrovsk, a unos veinte kilómetros al norte del pueblo. El valle formado por el río Mokri Yaly, que sube hacia Novopavlivka, y su falta de fortificaciones podrían ser aprovechados por las fuerzas rusas 4.
  • Aunque el regreso de Trump al poder parece haber desencadenado una dinámica más favorable a un acuerdo de alto el fuego, con conversaciones programadas con Kiev y amenazas de nuevas sanciones contra Moscú, Rusia ganaría un punto de apoyo en un octavo óblast ucraniano (Crimea está totalmente ocupada desde 2014), lo que reforzaría aún más su posición de cara a las negociaciones.

En Davos, el Comandante Supremo Aliado de Estados Unidos en Europa, el general Christopher G. Cavoli, trató de tranquilizar a los europeos al afirmar el martes 21 que no temía que «Ucrania perdiera de repente», y añadió: «No veo la posibilidad de un avance masivo» 5. Aunque el ritmo de los avances rusos en Ucrania se ralentizó en diciembre en comparación con los meses anteriores, Moscú conquistó sin embargo 3.200 km² de territorio ucraniano el año pasado.