Para Ron DeSantis, la guerra en Ucrania es una «disputa territorial»

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, aún no ha anunciado oficialmente su candidatura a las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024, pero se espera que lo haga entre mayo y junio. Sin embargo, un sondeo de intención de voto para las primarias del Partido Republicano publicado el 14 de marzo por la CNN le otorga el 36% de los sufragios, frente al 40% del expresidente Donald Trump¹.

Ron DeSantis no se había pronunciado mucho hasta entonces sobre la guerra en Ucrania y, más en general, sobre cuestiones de política exterior.

• A diferencia de los senadores -como fue el caso de Joe Biden-, los gobernadores de Estado que se presentan a la presidencia rara vez se pronuncian sobre cuestiones de política exterior, y concentran sus intervenciones en cuestiones de política interior.
• Defensor de la tesis de las guerras culturales -a menudo comparado en este sentido con Viktor Orbán- y de un enfoque «legalista» de su agenda política, la postura de DeSantis sobre Ucrania ha evolucionado en los últimos años².
• Cuando fue elegido miembro de la Cámara de Representantes del Estado de Florida (2013-2018), el actual gobernador atacó a la Administración Obama por no enviar suficiente ayuda militar a Ucrania. En 2017, afirmó en una entrevista ser de la «escuela Reagan, duro con Rusia»³.

En respuesta a un «cuestionario» del presentador conservador y populista de Fox News Tucker Carlson, Ron DeSantis calificó la guerra en Ucrania de «disputa territorial» entre Kiev y Moscú. También añadió que, a diferencia de «asegurar las fronteras de Estados Unidos, preparar el ejército, la independencia energética y la seguridad de Estados Unidos, y controlar el poder económico, cultural y militar del Partido Comunista Chino», la guerra de alta intensidad que Rusia libra contra Ucrania desde hace más de un año no figura entre los «intereses vitales de Estados Unidos».

Esta declaración refleja un cambio en la percepción del conflicto entre el electorado republicano.

• En enero de 2023, el Pew Research Center señaló que el porcentaje de votantes que se identifican como republicanos o de tendencia republicana que creen que Estados Unidos está proporcionando demasiada ayuda militar a Ucrania había aumentado del 9% en marzo de 2022 al 40% en enero de 2023.
• Las opiniones de los votantes demócratas sobre esta cuestión apenas cambiaron a lo largo del año. La proporción de votantes demócratas que consideran que la ayuda militar estadounidense a Ucrania es excesiva ha pasado del 5% al 15%, y sigue siendo minoritaria⁴.

A pesar del estatus de Ron DeSantis como «estrella emergente» del Partido Republicano, sus comentarios han suscitado muchas críticas desde dentro del GOP. Mientras que el gobernador de Florida parece compartir ahora una opinión similar a la del expresidente Donald Trump, la exmiembro de la Cámara de Representantes Liz Cheney, el senador republicano por Carolina del Sur Lindsey Graham y el excandidato presidencial Marco Rubio han condenado los comentarios de DeSantis⁵. Estos republicanos neoconservadores, aunque miembros del establishment, tienen mucho menos peso político que Trump y DeSantis, que cuentan con tres cuartas partes del electorado republicano.

Aunque Estados Unidos sigue siendo, con diferencia, el mayor contribuyente de ayuda militar a Ucrania desde que comenzó la guerra, las declaraciones de Trump y DeSantis -dos candidatos con grandes posibilidades de ganar la Casa Blanca en 2024- apuntan ambas a un retroceso en la política exterior estadounidense y a un llamamiento a la «paz en Ucrania». Más allá del aislacionismo -aunque no compartido en las mismas proporciones por todos los conservadores estadounidenses, sobre todo sobre Taiwán-, existe también una forma de alineamiento con la posición defendida por Rusia, que es la antítesis de la agenda de política exterior del actual presidente Joe Biden.