La petición de desclasificación del Senado estadounidense se produce a raíz de un artículo del Wall Street Journal1 publicado el 26 de febrero, en el que se hacía referencia a un documento clasificado del Departamento de Energía que supuestamente se había filtrado de la Casa Blanca y de altos cargos del Congreso, en el que se concluía que el SARS-Cov-2 probablemente se había filtrado desde un laboratorio.

  • El Departamento de Energía coincide así con la posición del FBI, que ya en noviembre de 2021 había dicho disponer de documentos que apoyaban esta hipótesis2; su director, Christopher Wray, mantuvo en una entrevista el 28 de febrero que el accidente de laboratorio sigue siendo la pista más creíble para la agencia.
  • Sin embargo, no hay consenso sobre esta hipótesis; otras cuatro agencias siguen creyendo que los primeros enfermos de SRAS-Cov-2 se infectaron a través del contacto con animales; la CIA sigue indecisa.

Un estudio de la OMS realizado en enero de 2021, el único que pudo llevarse a cabo en la ciudad china de Wuhan, epicentro de la pandemia, por investigadores extranjeros, tenía como objetivo identificar los posibles orígenes del SRAS-Cov-2 y cómo se transmitió el virus.

  • En enero de 2021, la OMS envió un consorcio internacional de científicos para documentar el origen del SRAS-Cov-2 en la ciudad de Wuhan. La investigación documentó principalmente la posible transmisión a través de animales sacrificados o vivos en el mercado de Huanan.
  • En efecto, un tercio de los 168 casos identificados retrospectivamente en diciembre de 2019 estaban directamente relacionados con el mercado; un estudio publicado en mayo de 2022 por investigadores de Pekín y Wuhan intentó datar el inicio del SRAS-Cov-2 mediante el análisis de anticuerpos en el plasma de donantes de sangre3; al no encontrar anticuerpos en las muestras tomadas entre septiembre y diciembre de 2019, concluyó que el Covid-19 no se había generalizado en Wuhan hasta finales de año.
  • El informe de la OMS se publicó en marzo de 2021 y pretendía respaldar una serie de investigaciones adicionales; sin embargo, el gobierno chino no permitió que siguiera adelante.

A falta de investigaciones en suelo chino, los virólogos siguen intentando reconstruir la cronología de los inicios del virus y cómo se transmitió.

  • Algunos de los virus más estrechamente relacionados con el SRAS-CoV-2 se han encontrado en murciélagos a unos 1.600 kilómetros de la ciudad de Wuhan, en el centro de China, donde estalló la enfermedad a finales de 2019. Como en general se acepta que no podría haberse transmitido directamente a los humanos, la investigación se está centrando en un hipotético huésped animal intermedio entre humanos y murciélagos, a través de especímenes recogidos en regiones fronterizas de China4.

La petición de los senadores estadounidenses corre el riesgo de deteriorar aún más las relaciones chino-estadounidenses, ya tensas por cuestiones comerciales y tecnológicas.

Notas al pie
  1. Michael R. Gordon y Warren P. Strobel, «Lab Leak Most Likely Origin of Covid-19 Pandemic, Energy Department Now Says», The Wall Street Journal, 26 de febrero 2023.
  2. Julian E. Barnes, «Origin of virus may remain murky, U.S Intelligence agencies say», The New York times, 29 de octubre 2021.
  3. Chang, L. y al., «Serosurvey for SARS-CoV-2 among blood donors in Wuhan, China from September to December 2019», Protein Cell, n°14, pp. 28 – 36, 24 de mayo 2022.
  4. Smriti Mallapaty, «WHO abandons plans for crucial second phase of COVID-origins investigation», Nature, 14 de febrero 2023.