• Los datos del índice ND-GAIN de la Universidad estadounidense de Notre Dame indican que los países más vulnerables son, en su mayoría, los que tienen las menores emisiones de CO2 per cápita (representadas por el tamaño de los cuadrados en el gráfico siguiente). Asimismo, también se encuentran entre los países menos preparados para las consecuencias del cambio climático (eje vertical)1.
  • Para medir la vulnerabilidad de los países, el equipo de Notre Dame tuvo en cuenta tres indicadores: la exposición al cambio climático, la sensibilidad, que mide la dependencia de los sectores que pueden verse afectados por los riesgos climáticos, y la capacidad de adaptación, que mide la disponibilidad de recursos que pueden destinarse a las víctimas del cambio climático.
  • En estos tres indicadores se consideraron seis bienes y sectores de consumo: alimentos, agua, salud, servicios de los ecosistemas, hábitat e infraestructuras. El nivel de preparación mide la capacidad del país para convertir las inversiones en acciones que permitan a la población adaptarse.
  • Los países más expuestos y menos preparados se concentran en gran medida en África, Asia y muchos Estados insulares (Micronesia, Vanuatu, Haití o Madagascar). Por el contrario, los países escandinavos, europeos y del Golfo son en general los mejor preparados, así como los menos vulnerables.
  • En 2009, los países desarrollados se comprometieron en la COP de Copenhague a movilizar 100.000 millones de dólares anuales en financiación climática para 2020, con el fin de ayudar a los países en desarrollo a reducir sus emisiones de CO2 y adaptarse al cambio climático. Sin embargo, según los cálculos realizados por los investigadores del think-tank ODI, sólo 7 países (de los más de 20 presentados al estudio) habían cumplido sus compromisos en 2020, y sólo 5 están en vías de cumplirlos en 20252.
  • De estos países, Estados Unidos es el que menos ha contribuido a la financiación de los países en desarrollo, con sólo 2.300 millones de dólares de los 43.480 comprometidos en 2009, lo que representa sólo el 5% de su cuota. La cuota justa es un indicador que tiene en cuenta la renta nacional bruta, las emisiones de CO2 acumuladas desde 1990 y el tamaño de la población.
Notas al pie
  1. ND-GAIN Country Index, Universidad de Notre-Dame.
  2. Sarah Colenbrander, Laetitia Pettinotti y Yue Cao, « A fair share of climate finance ? An appraisal of past performance, future pledges and prospective contributors », ODI Working Paper, junio de 2022.