
El 28 de abril, la Corte Constitucional ecuatoriana despenalizó el aborto en casos de violación. Enmarcando este acontecimiento en continuidad con la legalización del aborto en Argentina el pasado mes de diciembre y en medio del endurecimiento de las restricciones a raíz de la segunda ola de la pandemia en Argentina, Ingrid Beck nos ofrece una reflexión sobre las dos herramientas –el feminismo y el humor– que hicieron el 2020 más llevadero y que, finalmente, se presentan como dos discursos clave para, aún en un contexto de crisis sanitaria, no dejar de cuestionar, desafiar y poner en jaque al poder establecido.