La semana pasada, los Conservadores y Reformistas Europeos (CRE), un grupo de 80 eurodiputados liderado por Mateusz Morawiecki, del partido polaco Ley y Justicia, cuya segunda formación política es Fratelli d’Italia, también celebraron una reunión sobre el mismo tema, con el mismo título. La conferencia de los CRE tuvo dos temas principales: la protección del patrimonio y la identidad cultural de Europa, y la migración.
En Madrid, el líder de Vox, Santiago Abascal, es el anfitrión de Patriotas por Europa (PfE), cuyos principales miembros son el francés Rassemblement National, el húngaro Fidesz y la italiana Lega. Asistirán Viktor Orbán y Marine Le Pen.
- El título del acto del PfE, «Make Europe Great Again» (MEGA), hace eco del eslogan de campaña de Donald Trump, pero también corresponde al lema utilizado por la presidencia húngara del Consejo de la Unión Europea, que finalizó el 31 de diciembre.
- Alonso de Mendoza Asensi, portavoz del PfE, declaró al Grand Continent antes del evento: «Será una conferencia importante para Europa. Reafirmaremos nuestras ideas, defenderemos nuestra identidad y nuestro futuro. Nuestro mensaje claro y contundente contra la inmigración ilegal masiva, a favor de la seguridad y el sentido común y contra la ideología del wokismo ha demostrado tener razón. La coalición globalista de Bruselas, representada por gente como Ursula von der Leyen y Emmanuel Macron, no ofreció soluciones reales y sus políticas, como el Pacto Verde, han llevado a Europa a la ruina».
- Hace casi un año, antes de las elecciones europeas, Abascal invitó a Madrid a varias figuras de la reacción internacional para la cumbre anual de Vox «Europa Viva 24», entre ellos el presidente argentino Javier Milei, el presidente de la Unión Conservadora Americana Matt Schlapp, el vicepresidente de la Heritage Foundation Roger Severino, el ministro israelí de lucha contra el antisemitismo Amichai Chikli y el chileno José Antonio Kast.
Tras las elecciones de junio de 2024, los partidos de extrema derecha europeos experimentaron un notable crecimiento. Entre los CRE, el PfE y el grupo Europa de las Naciones Soberanas (que incluye a la AfD), hay 192 eurodiputados a la derecha de los 188 del PPE. En total, 380 diputados de derechas o de extrema derecha, 19 más que la mayoría absoluta.
- De ahí la estrategia de estos partidos: invitar al PPE a votar con ellos en muchos textos, aunque ello suponga poner en peligro la coalición centrista que el PPE forma con los socialistas y los liberales.
- Al ser cuestionado sobre una coalición de derechas en el Parlamento Europeo, De Mendoza Asensi declaró: «En cuanto al mal llamado cordón sanitario, es un discurso de exclusión dirigido contra los 18 millones de europeos que nos han dado su apoyo. No es más que un acoso antidemocrático que simplemente refleja el miedo. Pero esta estrategia está condenada al fracaso, porque la tendencia es clara y la realidad se ha impuesto».
- El pasado lunes, Jordan Bardella, líder del PfE, escribió a Manfred Weber, presidente del PPE, proponiéndole unir fuerzas para deshacer el Pacto Verde, a lo que el eurodiputado del PPE Peter Liese respondió: «A Bardella, simplemente le diré que no». Los CRE, en cambio, respondieron favorablemente al llamado.
- En la conferencia de los CRE de la semana pasada, el eurodiputado de la Lega Roberto Vannacci declaró al Grand Continent: «Trump es un regalo del cielo. No hay por qué temerle. MEGA y MAGA son totalmente compatibles, porque ambos abogan por un retorno a los valores que hicieron grandes a nuestros países en el pasado».
La elección de Trump y el cambio de vibras que ha provocado en Estados Unidos, pero también en Europa, parece estar beneficiando a los partidos de derecha y extrema derecha en Europa. En el Reino Unido, el partido de Nigel Farage Reform UK está superando a los laboristas en las encuestas. En Alemania, donde las elecciones federales están previstas para el 23 de febrero, la diferencia entre la CDU/CSU y la AfD se ha reducido de 14 a 9 puntos desde las elecciones estadounidenses.