Apertura de la Cumbre Unión-China: el déficit comercial con Pekín se ha más que duplicado en dos años

El déficit comercial de la Unión Europea con China –calificado de «abismal» por Josep Borrell– ya era importante (más de 100.000 millones de euros) a principios de la década de 2010, y se duplicó con creces entre 2020 y 2022. Mientras las exportaciones europeas crecen a un ritmo relativamente estable, el valor de las importaciones de bienes procedentes de China ha pasado de 250.000 millones de euros hace diez años a 626.000 millones en 2022.

• Dentro de la Unión, sólo Irlanda tiene una balanza comercial positiva con China. El año pasado fue de 773 millones de euros.
• Los Países Bajos tienen un déficit comercial con Pekín de más de 120.000 millones de euros, según datos de Eurostat.
• No obstante, la Oficina Central de Estadística neerlandesa señala que una parte importante de los bienes importados de China se transfiere «casi inmediatamente» a otros Estados miembros¹.

En Pekín, Charles Michel manifestó su deseo de establecer unas relaciones comerciales «sostenibles, equilibradas y justas» con China². Xi Jinping afirmó que «China y la Unión deben ser socios en una cooperación mutuamente beneficiosa», sin mencionar el creciente déficit comercial.

• El déficit comercial de la Unión Europea con China se ha reducido casi a la mitad este año en comparación con el anterior, después de aumentar drásticamente entre 2020 y 2022. En los 11 primeros meses de 2023, se situó en 201.000 millones de dólares, según datos de las aduanas chinas.
• Sin embargo, la transición energética y la electrificación de los usos en la Unión deberían conducir a un aumento de las importaciones de paneles solares, coches eléctricos, bombas de calor, turbinas eólicas, etc., una gran parte de los cuales se producen en China³.
• El 4 de octubre, la Comisión Europea abrió una investigación -que podría durar más de un año- sobre las subvenciones «masivas» de China al sector del automóvil.
• En 2022, el 54% de los vehículos eléctricos importados por la Unión Europea procederán de China.

En este contexto de relaciones comerciales desequilibradas, Roma se ha retirado oficialmente esta semana de la iniciativa de las Nuevas Rutas de la Seda. Mientras que las exportaciones chinas a Italia casi se han duplicado desde la firma del acuerdo -alcanzando los 57.000 millones de euros en 2022-, las italianas sólo han aumentado ligeramente.

Es la primera vez desde 2019 que altos representantes europeos visitan China para una cumbre bilateral en presencia de Xi Jinping. Aunque Pekín espera enviar una señal positiva a los países de la Unión para desactivar los llamamientos al «de risking» y la diversificación, no se espera que se alcance ningún acuerdo sustancial al final de la reunión⁴.