En octubre, el consumo europeo de gas natural se situó un 25% por debajo de la media 2019-2021.

  • Esto se debe a la reducción del consumo industrial y doméstico como consecuencia de unas temperaturas estacionales inferiores a la media y de una menor producción en algunos sectores.
  • Por el contrario, el gas consumido para producir electricidad aumentó un 2% en octubre en comparación con el mismo periodo de 2021.

Las reservas europeas de gas también están casi llenas, superando con creces el objetivo de llenado del 80% fijado por la Comisión Europea, situándose en el 95,35% a 7 de noviembre. De media, durante los años 2014-2021, solo un tercio (entre el 29% y el 38%, según el año) de la demanda invernal europea de gas procede de las reservas1.

Aunque Europa ha podido llenar su capacidad de almacenamiento en gran medida mediante la importación de gas natural licuado (GNL), la interrupción de los mercados internacionales causada por el cierre casi total del suministro de gas ruso a Europa está teniendo un impacto significativo en los países en desarrollo.

  • Según el Grupo de Trabajo de Seguridad Energética Unión-Estados Unidos, que se reunió por última vez el 3 de noviembre en Washington: «Sólo este año, entre enero y octubre, se exportaron unos 48.000 millones de metros cúbicos de GNL desde Estados Unidos a la Unión Europea, 26.000 millones de metros cúbicos más que en todo el año 20212.
  • Las previsiones de BloombergNEF indican que la demanda europea de GNL se mantendrá en niveles muy superiores a los de 2021, y aumentará gradualmente en los próximos años3.

Así, en el mercado del GNL, los países en desarrollo compiten ahora directamente con las ofertas más caras de los países europeos más ricos. Además, el aumento de los costes de entrega -que han pasado de unos 33 millones de dólares por un buque cisterna de GNL en la década de 2010 a casi 100 millones de dólares en 2022- está socavando la capacidad de compra de los países en desarrollo, hasta el punto de que los proveedores de GNL han reducido drásticamente sus ofertas a, por ejemplo, Pakistán.

  • Debido a la profunda crisis económica del país, los proveedores temen que Islamabad no pueda pagar las entregas, prefiriendo economías más estables.
  • Según Pakistan LNG Limited (PLL), la empresa encargada por el gobierno de la importación de GNL, sólo se presentó una oferta el pasado mes de junio.
  • En las mismas fechas del año pasado, la empresa había recibido 25 ofertas.

Para los países en desarrollo, las consecuencias de esta evolución son múltiples: pueden conducir a una pérdida de acceso a la electricidad y, a falta de una opción mejor, a un mayor uso de combustibles fósiles más contaminantes como el carbón, el fuel o el gas licuado de petróleo. Actualmente, según la Agencia Internacional de la Energía, 770 millones de personas viven sin acceso a la electricidad, principalmente en África y Asia.

Notas al pie
  1. Supply, transformation and consumption of gas – monthly data, Comisión Europea
  2. Joint Statement following the latest meeting of the EU-US Task Force on Energy Security, Comisión Europea, 7 de noviembre de 2022.
  3. Stephen Stapczynski, Anna Shiryaevskaya y Faseeh Mangi, « Europe’s Energy Crunch Will Trigger Years of Shortages and Blackouts », Bloomberg, 8 de noviembre de 2022.