Nuestra historia está hecha de nuestra tumultuosa relación con el espacio público y el monumento. Nacido del matrimonio forzado del templo y el ágora, el parvis -y por extensión la plaza- ha mantenido el espíritu de lo sagrado en el corazón de la agitación urbana. La arquitectura del poder, brillante y manifiesta, revela en silencio el poder de la arquitectura. Sin embargo, este misterioso poder no debe nada a los dioses, meros pasajeros. Proviene de las propias paredes, no de lo que contienen.
Karim Basbous