McCarthy y la bancada demócrata se enfrentan por el techo de deuda

Al presentar su plan para elevar el techo de la deuda estadounidense a cambio de concesiones en el gasto federal, el speaker republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, ha entablado un enfrentamiento con Joe Biden y los demócratas del Congreso que ninguna de las partes piensa ceder.

• En un discurso pronunciado el 17 de abril, McCarthy afirmó que los republicanos de la Cámara de Representantes votarían a favor de una medida para elevar el techo de la deuda para el año fiscal 2024 a cambio de congelar el gasto federal al nivel de 2022.
• Las condiciones presentadas por el portavoz para proceder al aumento del techo de la deuda incluyen medidas que desharían el gasto de decenas de miles de millones de dólares en fondos de ayuda liberados durante la pandemia que aún no se han gastado e impondrían requisitos más estrictos para los beneficiarios de cupones de alimentos y Medicaid¹.

Aunque se espera que el gobierno federal de Estados Unidos entre en suspensión de pagos este mismo verano si no se aumenta el tope para entonces, la propuesta de McCarthy nunca se convertirá en ley porque el Partido Republicano no tiene mayoría en el Senado, y no se sabe con certeza si se aprobará en la Cámara de Representantes, donde la mayoría republicana es reducida.

Para el speaker, la «Limit, Save, Grow Act of 2023» tiene como objetivo principal iniciar negociaciones con Biden para obtener concesiones de la bancada demócrata².

• Para ello, la votación del proyecto de ley -prevista a partir del 26 de abril- debe obtener una mayoría, actualmente incierta dada la oposición categórica de algunos miembros republicanos.
• Con el fin de garantizar la mayoría, el martes por la noche se llevaron a cabo negociaciones para convencer a los representantes electos que seguían oponiéndose desde el 25 de abril³.
• Estas negociaciones de última hora indican que el apoyo de los republicanos a esta propuesta es más que incierto, mientras que un fracaso de la votación llevaría probablemente a los miembros del GOP a aceptar un aumento del techo de la deuda sin contrapartida alguna, con el fin de evitar un impago.

Esta vacilación de varios representantes republicanos se ve alimentada por el rechazo categórico de algunos a elevar el techo de la deuda (sea cual sea el bando que proponga esta medida), pero también por las estimaciones de un impacto muy negativo del plan de McCarthy en la economía estadounidense. El lunes 24 de abril, un informe de Moody’s Analytics advertía de que provocaría la destrucción de 780.000 empleos de aquí a finales de 2024 y contribuiría a un descenso del crecimiento estadounidense del 2,25% al 1,6%⁴.

En los últimos años, las votaciones sobre el aumento del techo de la deuda estadounidense han pasado de ser una relativa formalidad -no exenta de debate- a un enfrentamiento ideológico entre el bando demócrata y el republicano. Aunque el país nunca ha incumplido el pago de su deuda, este escenario podría darse si no se llega a un acuerdo antes de junio, lo que dañaría significativamente la confianza general en el dólar estadounidense⁵.