Jens Stoltenberg y el ministro turco de Asuntos Exteriores, Mevlüt Çavuşoğlu, debatieron ayer la espinosa cuestión de la pertenencia de Finlandia y Suecia a la OTAN.
- El Secretario General de la Alianza expresó su deseo de que ambos países se unieran a la alianza militar, ya que habían «cumplido sus promesas» al «prohibir la pertenencia a organizaciones terroristas, lo que reducirá el número de personas que pueden ser extraditadas».
- Para Stoltenberg, el ingreso en la OTAN de estos dos «socios cercanos» enviaría «una clara señal de que la puerta de las alianzas sigue abierta», y «para evitar cualquier malentendido con Moscú» 1.
Una gran diáspora kurda vive en Suecia, que promueve una política de acogida de refugiados políticos.
- Sin embargo, estos residentes turcos son lo que Ankara considera un problema de seguridad nacional. Esta diáspora tendría presuntos vínculos con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán, que lanzó una insurgencia contra el Estado turco en la década de 1980 y que reclama la igualdad de derechos para esta minoría.
- Tras el reciente giro a la derecha del gobierno sueco en las últimas elecciones, el ministro Çavuşoğlu se mostró optimista respecto a la ayuda del nuevo gobierno.
- Recientemente, el nuevo ministro de Asuntos Exteriores de Suecia, Tobias Billström, dijo que quería acabar con la pionera política exterior feminista sueca.
Los dos países escandinavos, acusados por Turquía de apoyar el «terrorismo» al acoger a estos militantes kurdos, han intentado acercarse en los últimos meses.
- Los tres países llegaron a un acuerdo en junio que compromete a Finlandia y Suecia a «tramitar con rapidez las solicitudes de deportación de presuntos terroristas», y a levantar un embargo de armas impuesto a Ankara.
- Como resultado, el 5 de julio se firmaron los protocolos de adhesión de los dos países nórdicos al final de las conversaciones de adhesión.
El acuerdo fue aclamado como un gran avance cuando se firmó en la cumbre de la OTAN en Madrid. Poco después, el presidente turco Recep Tayyip Erdoğan amenazó con congelar el proceso por un supuesto retraso en las extradiciones. En la actualidad, sólo Turquía y Hungría tienen que ratificar los protocolos de adhesión, aunque los observadores prevén que Budapest lo haga pronto.
Como miembro de la OTAN, el respaldo de Turquía es necesario, ya que el ingreso de un país en la OTAN requiere el consentimiento unánime de los 30 países miembros de la Alianza Atlántica.
- A pesar de los pasos positivos reconocidos por Çavuşoğlu, Ankara parece seguir oponiéndose a las aspiraciones de Suecia y Finlandia.
- El ministro de Asuntos Exteriores reconoció en los medios de comunicación turcos los avances en las normas de exportación, pero dijo que «estos países no han cumplido todas las condiciones del acuerdo tripartito alcanzado para permitirles unirse a la alianza».
Notas al pie
- Ella Joyner, « Turkey holds off on Finland and Sweden in NATO », DW, 3 de noviembre de 2022.
