• El próximo 29 de mayo se celebrarán elecciones presidenciales en Colombia, y se votará al futuro presidente y vicepresidente para el mandato 2022-2026. Los miembros del Congreso -el Senado de la República y la Cámara de Representantes- ya fueron elegidos en las elecciones legislativas del 13 de marzo
  • Los representantes interpartidistas, también elegidos en las elecciones del 13 de marzo, para los tres grupos principales son Gustavo Petro por Pacto Histórico en representación de la izquierda; Federico Gutiérrez, por Equipo por Colombia como la coalición de derecha; y Sergio Fajardo por Centro Esperanza representando al centro. En ese momento, Petro confirmó su estatuto de favorito, la derecha mantuvo su tradicional apoyo popular y el centro se desplomó. El resultado fue la polarización, enmarcada en un contexto de descontento social con el gobierno actual de Iván Duque. 
  • Para que uno de los candidatos se alce como presidente en las elecciones del 29 de mayo, debería obtener la mayoría simple, sino se sucederá una segunda vuelta el 19 de junio entre los dos candidatos más votados. El clima en el que se insertan estas elecciones es especialmente tenso. El impacto de la crisis post pandemia en Colombia desencadenó fuertes dificultades económicas. Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) en abril se registró una inflación de 9,23%, la más alta en 21 años. Destaca también la informalidad laboral y la tasa de desempleo, que en marzo se ubicaba en 12,1% pero que llegó a alcanzar el 16,6% en 2021.
  • El descontento social se prolonga desde las protestas de 2019, acrecentadas en marzo de 2021 por la convocatoria del paro nacional, como una contestación social en contra del proyecto de reforma tributaria del gobierno. Desde entonces, las protestas sociales no han cesado. Esto se relaciona con el establecimiento de una nueva línea de diálogo político, que ubica en el centro de las prioridades ciudadanas asuntos relacionados con la economía, la corrupción y la desigualdad social. 
  • Las elecciones colombianas han tendido a virar en torno a la preocupación por la violencia y la guerra interna. Sin embargo, ahora, tal y como muestra la encuesta del Observatorio de Democracia de la Universidad de los Andes de 2020, las principales prioridades de los colombianos son la salud, la economía y la corrupción, por delante de las cuestiones de seguridad. En este contexto, también adquiere importancia los Acuerdos de Paz firmados en 2016 con las FARC, que se han mostrado incapaces de disminuir la violencia en el país.
  • En esta línea, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) -la última guerrilla activa en Colombia- ha anunciado un alto al fuego de 10 días, del 25 de mayo al 3 de junio, para promover un clima de tranquilidad en torno a las elecciones presidenciales. En última instancia, esto facilitará focalizar la atención en cuestiones más allá de la violencia, como la empleabilidad, la inflación, la corrupción o la brecha social, entre otros. Esto no implica que la seguridad colombiana esté mejorando, sino que, a pesar de la permanencia de la violencia, el contexto económico, social y político ha supuesto un cambio en las prioridades de los colombianos. 
  • En parte, esto ha favorecido que un candidato de izquierda, por primera vez en décadas, ascienda en Colombia. Por un lado, el limitado alcance de los Acuerdos de Paz ha provocado una pérdida de confianza en la ciudadanía que relacionaba la seguridad con los gobiernos de derechas. Por otro lado, la agenda política de Petro incluye aquellas cuestiones económicas y sociales que comienzan a primar entre la ciudadanía colombiana.
  • Según los sondeos, Petro liderará la mayoría de los votos, pero no alcanzará el 50%. Las encuestas registradas ante el Consejo Nacional Electoral calculan un apoyo del 38,8% para Petro y un 26,4% para Fico como las dos fuerzas más votadas. En ese caso, ambos candidatos deberán enfrentarse en una segunda vuelta electoral. Sergio Fajardo, como opción de centro, ha perdido apoyos de forma masiva, posiblemente por el desgaste del gobierno actual. En los sondeos lo adelanta Rodolfo Hernández, como un populista de derechas, quien recibe en los sondeos un 12,4% de apoyos. 
  • Hasta ahora, en Colombia siempre ha habido mucho miedo hacia la izquierda política, debido en gran parte a las guerrillas de extrema izquierda. No son pocas las voces que vinculan al posible gobierno de Petro con el chavismo, a pesar de que las circunstancias contextuales y estructurales son totalmente distintas. La polarización sigue siendo muy elevada y, aunque Petro alcanzase la mayoría electoral, su presidencia vendría acompañada de coaliciones y búsqueda de mayorías en las cámaras del gobierno. Con todo, estas elecciones son especialmente importantes para Colombia, ya que podría acabar gobernando la izquierda democrática, algo nuevo para un país históricamente caracterizado por gobiernos conservadores.