Nicolas Werth


En la Rusia de Putin, la historia es un campo de batalla donde la memoria de las atrocidades del pasado lucha contra la reescritura oficial. El sitio de Sandormokh, en Carelia, una fosa común emblemática del Gran Terror estalinista de 1937-1938, se ha convertido en un símbolo de resistencia histórica frente a los intentos revisionistas, y la fecha del 5 de agosto en un día de recuerdo para garantizar que el horror no se olvide.

El historiador Yuri Dmitriev fue el encargado de documentar la masacre. Injustamente encarcelado en las prisiones de Putin en condiciones atroces, no figuraba en la lista de personalidades liberadas hace unos días.

El historiador Nicolas Werth le rinde homenaje.

1,600 muertos por día.

En Europa, las Grandes Purgas de 1937-1938 son conocidas por sus juicios amañados y su cobertura mediática, y marcan el punto de inflexión en las purgas estalinistas del partido. Pero el Gran Terror no se limitó a los cuadros del PCUS: también y sobre todo eliminó a cientos de miles de soviéticos, considerados una amenaza según criterios socioétnicos. En este estudio a profundidad, Nicolas Werth intenta averiguar quiénes la llevaron a cabo.

El Holodomor —la hambruna de 4 millones de ucranianos— moldeó la identidad ucraniana.

Pero no fue la única hambruna de la era soviética. El reinado de Stalin estuvo marcado por las últimas grandes hambrunas europeas, algunas orquestadas intencionalmente, la mayoría olvidadas. En este estudio a profundidad, Nicolas Werth hace balance de la situación y destaca los últimos avances de la historiografía sobre este tema.