El actual marco financiero plurianual (MFP) se extiende hasta 2027, y las instituciones están debatiendo actualmente el siguiente presupuesto septenal.

  • La propuesta sobre la mesa es un presupuesto de 1,816 billones de euros para siete años, lo que representa el 1,26 % del PIB de los Estados miembros, con el fin de «reforzar la soberanía de Europa, estimular la competitividad y aumentar la resiliencia».
  • La Comisión también propone varios cambios importantes en la arquitectura general, dos de los cuales suscitan especial atención entre los diputados europeos: por un lado, la agrupación en un megafondo común de la política agrícola común (PAC) y los fondos de cohesión regional, que juntos representan casi la mitad del presupuesto (865.000 millones de euros); por otro lado, la elaboración de «planes de asociación regionales y nacionales» sobre la utilización de estos fondos por cada uno de los 27 Estados miembros.
  • Los principales grupos del Parlamento (PPE, S&D y Renew) habían advertido a la Comisión que adoptarían una resolución común en contra de la propuesta, expresando sus reticencias ante la falta de garantías ofrecidas a las regiones y a los agricultores. También les preocupaba el escaso control de los eurodiputados sobre los planes nacionales, así como el peso de los créditos no asignados a programas específicos, previstos por la Comisión como una reserva de flexibilidad ante futuras crisis, pero percibidos como poco transparentes y demasiado discrecionales.
  • Para responder a estas críticas, la Comisión presentó el 9 de noviembre tres ajustes: la creación de un «control regional» para reforzar la capacidad de supervisión de las autoridades locales sobre la ejecución del gasto; un «objetivo rural» que garantice que al menos el 10 % de los fondos se destinen efectivamente a las regiones; y un «mecanismo de pilotaje» destinado a dar al Parlamento —pero también al Consejo— una mayor influencia en la definición de las prioridades de financiación.
  • Aunque los grupos parlamentarios siguen divididos sobre estas revisiones —el PPE se muestra satisfecho, mientras que los socialdemócratas las califican de «cambios cosméticos» y siguen pidiendo una modificación formal de la propuesta inicial—, la resolución común ya no figura en la agenda por el momento.

Las negociaciones sobre el próximo marco financiero plurianual ocuparán la agenda europea hasta 2027 y se prevén especialmente difíciles.

  • A partir de 2028, la Comisión deberá comenzar a reembolsar el plan de recuperación NextGenerationEU, lo que reducirá en más de 20.000 millones de euros al año los márgenes presupuestarios disponibles.

Paralelamente, el viernes 14 de noviembre, los ministros de Finanzas de los 27 se reunirán en Consejo para decidir sobre el presupuesto europeo de 2026.

  • Para el próximo año, el Consejo ha propuesto 186.000 millones de euros en créditos de compromiso, sin contar los instrumentos especiales.
  • Los ministros de los 27 volverán a confirmar esta propuesta el viernes por la mañana, antes de acudir a la comisión de conciliación con el Parlamento.
  • La propuesta de este último asciende a 194.000 millones de euros, ya que los eurodiputados han reforzado en particular los presupuestos de los programas Horizonte Europa, Erasmus+ y EU4Health.
  • El procedimiento de conciliación debe concluir el lunes 17 de noviembre a medianoche.