Los líderes de los nueve países miembros de los BRICS se encuentran actualmente en Kazán, en Rusia, donde la alianza celebra su primera cumbre anual tras la ampliación decidida el año pasado en Sudáfrica. La incorporación de cuatro nuevos miembros (Arabia Saudí aún no se ha adherido formalmente) contribuirá a cambiar el equilibrio interno del grupo y constituirá una prueba para posibles futuras adhesiones.

  • Desde 2020, los BRICS han superado la cuota del G7 en el PIB mundial. Tras la admisión de cuatro nuevos miembros, esta cuota ha aumentado en 3,25 puntos porcentuales en comparación con el año pasado.
  • La cuota del G7 no ha dejado de disminuir desde 2015, cuando representaba el 32,6% del PIB mundial, frente al 29% actual.
  • La alianza creada inicialmente en 2009 en torno a China, Rusia, India y Brasil representa ahora el 45% de la población (+4,21 pp), el 31% de la producción de petróleo (+9,3 pp) y el 22% (+2,6 pp) de las exportaciones mundiales de bienes.

Aunque China sigue representando más de la mitad del PIB del grupo (52,5%) tras la ampliación, esta cifra es 4,3 puntos inferior a la de 2022. Rusia representa menos del 10% del PIB total del grupo por primera vez desde su formación en 2009.

  • La Alianza de los BRICS se ha fijado el objetivo de ofrecer una alternativa al «orden mundial» dominado por los países occidentales, y en particular Estados Unidos, y su moneda.
  • La retórica laudatoria de sus líderes sobre la supuesta convergencia de sus intereses choca, sin embargo, con los escasos logros del grupo desde su creación hace quince años.
  • Aunque Putin quiere demostrar en Kazán que no está aislado en el escenario internacional, se espera que de la cumbre salgan pocas medidas concretas.