Por primera vez desde que John Boehner fue elegido para el mismo cargo en 2011, Mike Johnson recibió todos los votos de los republicanos de la Cámara de Representantes para nombrarle presidente de la Cámara de Representantes. A diferencia de su predecesor Kevin McCarthy, que finalmente fue designado tras 15 votaciones, solo era necesario un voto.
- Mike Johnson representa al 4º distrito electoral de Luisiana. Recibió el 65,2% de los votos en su primera elección al Congreso federal en 2016 y fue ampliamente reelegido en 2022 en un distrito que tiene fama de ser muy republicano.
- Con su elección, dos cargos electos de Luisiana ocupan ahora la cúspide de la jerarquía republicana de la Cámara de Representantes, con el líder de la mayoría y antiguo candidato a portavoz, Steve Scalise, elegido por el distrito 1 del Estado.
Johnson, de 51 años, fue profesor universitario, presentador de radio y columnista antes de emprender una carrera jurídica con varios grupos religiosos conservadores -entre ellos la Alliance Defending Freedom y la Convención Bautista del Sur- como abogado y portavoz.
- Aunque no es miembro del Freedom Caucus, que se sitúa en la extrema derecha del ala republicana de la Cámara, Johnson es un cargo electo muy conservador.
- Según el modelo estadístico DW-NOMINATE, que sitúa a los miembros electos del Congreso estadounidense en un espectro ideológico que va del más liberal al más conservador en función de sus votos, Johnson es el speaker más conservador en al menos 80 años.
Conocido aliado de Donald Trump, Mike Johnson se opuso a la certificación de los resultados de las elecciones de 2020, votó en contra de la destitución y condena de Donald Trump por incitar a la insurrección, se opuso a la creación de una comisión para investigar el 6 de enero, es contrario al aborto, apoya las restricciones al colectivo LGTB y votó en contra de prestar ayuda a Ucrania.
- A sus 51 años y con solo 7 de experiencia en el Congreso, Johnson es también el portavoz con menos experiencia desde la Segunda Guerra Mundial, tanto demócratas como republicanos.
- La comparación también se aplica a la actual administración y legislatura: Joe Biden fue senador por Delaware durante 36 años, el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, fue elegido por primera vez a la Cámara en 1981 y representa a Nueva York en el Senado desde 1999.
La tarea a la que se enfrenta Mike Johnson es monumental. El Congreso no ha aprobado ninguna de las 12 leyes anuales de gasto que servirán para evitar un cierre del gobierno federal el 17 de noviembre, la Casa Blanca ha solicitado recientemente 106.000 millones de dólares en fondos para Ucrania, Israel, la protección de las fronteras estadounidenses y la ayuda humanitaria, mientras que otras leyes urgentes como la reautorización de la Administración Federal de Aviación, que expira el 31 de diciembre, o la votación de una nueva ley agrícola que podría costar hasta 1,5 billones de dólares exigirán una carga de trabajo colosal.
La elección de Johnson es una gran victoria no sólo para Donald Trump, que coloca a uno de sus aliados más cercanos en un puesto clave de cara a las elecciones de noviembre de 2024, sino también para el ala radical del Partido Republicano. Si bien esta última se resistió en parte a los MAGA a principios de año, cuando McCarthy fue elegido, aunque les hizo algunas concesiones, parece que el ala moderada del GOP ha preferido ahora capitular -al menos temporalmente- para poner fin al caos que reina en la Cámara desde hace tres semanas.
