¿Podemos decir, como escribió W. H. Auden, que Jane Austen reveló «con tanta franqueza, tanta sobriedad, los fundamentos económicos de la sociedad»? 1
Para responder a esta pregunta, primero hay que determinar las respectivas fortunas de los principales personajes de las novelas de Jane Austen.
- La riqueza de los personajes de las novelas se calcula por los ingresos en libras esterlinas al año, que corresponden aproximadamente al 5 % de la fortuna total.
- Según Edward Copeland y Juliet McMaster, en The Cambridge Companion to Jane Austen, 400 libras de ingresos permiten pertenecer a la gentry, es decir, a la clase de los terratenientes; 2.000 libras constituyen una fortuna cómoda; y por encima de las 4.000 libras anuales, es posible llevar una vida lujosa. 2
- Unos ingresos equivalentes a 10.000 libras, como los del señor Darcy, permiten tener una finca en el campo, una gran casa en Londres, sirvientes y el tren de vida que acompaña a tal riqueza. 3
- Estas cantidades absolutas dependen de la situación general de cada individuo.
- Así, una joven soltera como Emma Woodhouse —el personaje central de Emma—, que dispone de unos ingresos de 1.500 libras, es considerada «guapa, inteligente y rica», 4 mientras que los ingresos de la propiedad del señor Bennet, de 2.000 libras al año, que solo pueden transmitirse a un heredero varón, sitúan a sus cinco hijas ante el riesgo de una degradación social.
- Los ingresos de un trabajador agrícola de la época se estiman en 25 libras, y los de un pequeño comerciante en 100 libras al año. 5
- El comienzo del siglo XIX británico se caracterizó por una fuerte inflación; la mayoría de las novelas se publicaron durante las guerras napoleónicas.
- Así, la fortuna del señor Darcy en Orgullo y prejuicio, cuya trama se desarrolla unos 15 años antes que la de Mansfield Park, sigue siendo relativamente mayor que la del señor Rushworth. 6
¿Se quiere al señor Darcy por su fortuna?
Consideradas novelas sentimentales y psicológicas, las de Jane Austen están marcadas por su época y, por lo tanto, sitúan en el centro de la narración debates precisos sobre la fortuna material de los individuos.
- A primera vista, los personajes de Orgullo y prejuicio se definen en primer lugar por su fortuna, lo que sugiere una historia materialista.
- De hecho, la primera descripción del señor Darcy insiste largamente en el efecto causado por la mención de sus ingresos: «El señor Darcy atrajo rápidamente la atención de la asamblea por su gran estatura, sus rasgos elegantes, su noble porte y por el rumor, ampliamente difundido entre todos los presentes, cinco minutos después de su entrada, de que tenía 10.000 libras de ingresos al año». 7
- Sin embargo, los personajes más positivos de la novela son aquellos que parecen indiferentes al dinero.
- Elizabeth Bennett, durante un enfrentamiento con Lady de Bourgh, demuestra sus cualidades al responder con firmeza y sin complacencia: «[Elizabeth consideró que podía contemplar sin estremecerse la majestuosidad del dinero y el rango». 8
- El desinterés por la riqueza ostentosa lleva, sin embargo, a Elizabeth Bennett a casarse, al final de la novela, con el muy rico señor Darcy. Este final suscita dudas sobre las motivaciones de Elizabeth, especialmente en la escena en la que ve por primera vez la propiedad del señor Darcy, Pemberley: «Elizabeth estaba absolutamente encantada. […] [Todos] estaban entusiasmados en su admiración; y, en ese momento, ella sintió que ser la dueña de Pemberley sería algo grandioso». 9
- La descripción posterior de Pemberley permite comprender mejor el equilibrio entre el realismo de las consideraciones y el arrebato del corazón en el universo de Austen: «Delante [de la finca], un arroyo, naturalmente ancho, se ensanchaba en un estanque, sin parecer artificial por ello. Sus orillas no eran formales ni falsamente decoradas». 10 La finca y el parque que rodean Pemberley, lejos de toda ostentación, revelan, por el contrario, la modestia en el lujo, la sinceridad de las aspiraciones y, sobre todo, el buen gusto natural del señor Darcy, signos de sus incalculables cualidades interiores.
El lector puede estar tranquilo, en estas fiestas cuya dimensión materialista a veces preocupa: la fortuna del señor Darcy contribuye sin duda a las fantasías que suscita, pero sirve sobre todo para resaltar sus cualidades morales.
Notas al pie
- «So frankly and with such sobriety / The economic basis of societyW. H. Auden, «Letter to Lord Byron», Longer Contemporary Poems, Penguin Books, 1966.
- Edward Copeland et Juliet McMaster, The Cambridge companion to Jane Austen, Cambridge, Cambridge University Press, 1997.
- Ibid., p. 136.
- «Handsome, clever and rich», Jane Austen, Emma, 1815.
- Janet M. Todd, Jane Austen in context, Cambridge, Cambridge University Press, 2005, p. 320.
- «Was Mr Darcy the richest of all Jane Austen’s characters?», The Economist, 12 de diciembre de 2025.
- «Mr. Darcy soon drew the attention of the room by his fine, tall person, handsome features, noble mien, and the report which was in general circulation within five minutes after his entrance, of his having ten thousand a year». Jane Austen, Pride and Prejudice, 1813, c. 3.
- «The mere stateliness of money or rank [Elizabeth] thought she could witness without trepidation», Ibid., c. 29.
- «She was delighted. […]They were all of them warm in their admiration; and at that moment she felt that to be mistress of Pemberley might be something!», Pride and Prejudice, c. 43.
- «In front [of the country estate], a stream of some natural importance was swelled into greater, but without any artificial appearance. Its banks were neither formal, nor falsely adorned», Ibidem.