Nick Fuentes, el influyente supremacista blanco de MAGA conocido por sus comentarios antisemitas, negacionistas y sexistas, así como por su simpatía hacia el régimen nazi, se ha beneficiado considerablemente del asesinato de Charlie Kirk el 10 de septiembre. Aunque controvertido incluso dentro de la propia base del partido, ahora es uno de los comentaristas más seguidos por la administración Trump para conocer las tendencias que aglutinan a sus votantes.

  • Fuentes entró la semana pasada en una nueva fase de popularidad cuando fue invitado al podcast de Tucker Carlson, el segundo más escuchado en Spotify en Estados Unidos después del de Joe Rogan.
  • Su audiencia se ha duplicado en Rumble, una plataforma conservadora de streaming financiada en parte por Peter Thiel, Vivek Ramaswamy y J.D. Vance, pasando de unos 250.000 suscriptores a finales del verano a más de 470.000 en la actualidad.
  • En X (antes Twitter), la red social comprada por Elon Musk en otoño de 2022, su ascenso también es fulgurante: Fuentes cuenta ahora con más de un millón de seguidores, frente a los menos de 500.000 que tenía a principios de año.

Aunque Nick Fuentes no es una figura mainstream dentro del universo MAGA —su audiencia sigue siendo muy inferior a la de pesos pesados de la extrema derecha estadounidense como Tucker Carlson (17 millones de seguidores en X), Ben Shapiro (8 millones) o Candace Owens (7 millones)—, ocupa un lugar cada vez más importante entre los jóvenes votantes masculinos del Partido Republicano, llenando el vacío dejado por la muerte de Kirk. Sus seguidores se denominan «Groypers».

Según el editorialista Rod Dreher, cercano a J.D. Vance, entre el 30% y el 40% de los asistentes de los representantes republicanos menores de 30 años que trabajan en Washington serían Groypers.

  • Aunque lanzó su programa America First en 2017, año marcado por la llegada al poder de Trump, Fuentes permaneció en la sombra del movimiento, retransmitiendo regularmente para una audiencia de varias decenas de miles de personas.
  • Tras participar en las concentraciones que desembocaron en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, fue expulsado de numerosas redes sociales y plataformas que le permitían monetizar sus contenidos —DLive, Twitter, PayPal, Patreon…— debido a su discurso de odio y sus comentarios racistas y antisemitas.
  • En mayo de 2024, Twitter permitió su regreso definitivo a la plataforma, tras una reactivación momentánea de su cuenta en enero de 2023 que sólo duró unas horas, durante las cuales Fuentes aprovechó para declarar: «Los judíos controlan los medios de comunicación».
  • Fuentes era uno de los principales críticos de Charlie Kirk, a quien acusaba de no ser lo suficientemente radical con respecto a la inmigración o las personas LGBT.
  • La aparición de rumores sobre la implicación de un Groyper en el asesinato de Kirk le valió una audiencia nacional.
  • Los datos de Google indican un aumento exponencial de las búsquedas de Nick Fuentes a mediados de septiembre.

La reciente entrevista de Fuentes con Tucker Carlson y el respaldo que le dio Kevin Roberts, presidente de la Heritage Foundation, podrían indicar un cambio radical en el Partido Republicano, reactivando un antisemitismo conservador encarnado por figuras como Charles Lindbergh o, más recientemente, David Duke, que en 2024 participó en un mitin de la America First Political Action Conference en Detroit, junto a Fuentes.

  • En su declaración sobre Fuentes, Roberts pidió a los votantes conservadores que «se centren en nuestros adversarios políticos de izquierda, en lugar de atacar a nuestros amigos de derecha».
  • Se trata de una norma cada vez más seguida por algunos conservadores, resumida en la fórmula «No Enemies To The Right» («Sin adversarios a la derecha»).
  • En octubre, J.D. Vance minimizó la importancia de los mensajes racistas, antisemitas y homófobos enviados en un grupo de Telegram por varios jóvenes responsables del Partido Republicano. Las capturas de pantalla también mostraban chistes sobre las cámaras de gas, la esclavitud y la violación.
  • El vicepresidente estadounidense declaró: «La realidad es que los niños hacen tonterías, sobre todo los chicos jóvenes. Cuentan chistes provocativos e hirientes. Es normal en los niños. Y realmente no quiero que vivamos en un país en el que un niño que cuenta un chiste estúpido, un chiste muy hiriente y estúpido, vea su vida arruinada por ello».