El primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, que anunció su dimisión el 7 de septiembre, fue uno de los primeros líderes en visitar la Casa Blanca para reunirse con Donald Trump a principios de febrero, pocos días después de su toma de posesión. A pesar de los esfuerzos diplomáticos de Ishiba, el presidente estadounidense impuso en abril aranceles del 24% a Japón, además de los aranceles sectoriales del 25% a los automóviles y las piezas de automóvil y del 50% al acero y el aluminio.
Tokio entabló negociaciones comerciales con la Administración Trump, que concluyeron el 22 de julio con el anuncio de un acuerdo.
- Este fija el tipo arancelario sobre las importaciones procedentes de Japón en un 15%.
- Según el documento, al que ha tenido acceso el Financial Times, el memorando de entendimiento firmado durante el verano compromete a Japón a invertir 550.000 millones de dólares en Estados Unidos antes del 19 de enero de 2029, último día del segundo mandato de Trump.
- Aunque, en teoría, Tokio tendrá derecho a supervisar las inversiones que realicen las empresas japonesas a través de préstamos garantizados por el Estado, el comité con mayor influencia no contará con ningún japonés 1.
El negociador japonés, Ryosei Akazawa, declaró el martes que el nuevo tipo del 15% debería entrar en vigor la semana que viene, el martes 16 de septiembre, tras la publicación por parte de la Casa Blanca del documento en el Federal Register 2. Sin embargo, aún quedan muchos puntos por aclarar, en particular la posibilidad de que los 500.000 millones de dólares de inversiones en Estados Unidos prometidos a principios de año por Softbank, en colaboración con OpenAI, MGX y Oracle, se reconozcan como parte de los compromisos de Tokio.
- El protocolo de acuerdo estipularía claramente que es Trump, y no la parte japonesa, quien tendrá libertad para elegir cómo se invertirán los 550.000 millones de dólares comprometidos.
- Si Tokio intentara ir en contra de los deseos del presidente estadounidense, este tendría derecho a imponer aranceles más elevados a las importaciones japonesas.
El acuerdo plantea numerosas cuestiones de orden jurídico. Como señaló Akazawa en su rueda de prensa del martes, el Banco Japonés de Cooperación Internacional y la Nippon Export and Investment Insurance, dos instituciones propiedad del Estado japonés que se barajan para prestar dinero a las empresas japonesas en el marco del acuerdo, no pueden, en virtud de sus marcos jurídicos, «ni invertir, ni conceder préstamos o proporcionar garantías para proyectos profundamente deficitarios, ni para proyectos que no tengan relación alguna con Japón» 3.
- El negociador japonés declaró que «las consideraciones estratégicas y las restricciones legales se tendrán debidamente en cuenta en el proceso».
- En un vídeo publicado el viernes 5 de septiembre, Akazawa agradeció al secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, por «su liderazgo» 4.
- Añadió: «Por supuesto, usted piensa en Estados Unidos, eso es evidente, pero también piensa en lo que es bueno para Japón. Lo creo sinceramente. Confío plenamente en usted. Es usted una persona muy agradable para mí, para el pueblo japonés y para Japón».
Notas al pie
- Leo Lewis, « Japan confronts the increased price of US friendship », Financial Times, 11 de septiembre de 2025.
- Implementing the United States–Japan Agreement, Federal Register, 9 de septiembre de 2025.
- Francis Tang, « Akazawa heralds U.S. trade deal as he moots wrinkle in it », The Japan Times, 9 de septiembre de 2025.
- Publicación de Howard Lutnick en X, 5 de septiembre de 2025.