Si analizamos las elecciones de 2024 en los países desarrollados, parece perfilarse una tendencia: los partidos en el poder, que en particular vivieron el apogeo de la inflación tras la pandemia de Covid-19, han sido desbancados.
- El regreso de Donald Trump en Estados Unidos, la Reagrupación Nacional como primer grupo parlamentario en la Asamblea Nacional francesa tras su disolución en junio, el fin de 14 años de tories en el Reino Unido, la victoria de la AfD en Turingia y el hundimiento de la coalición alemana en torno a Olaf Scholz: el año 2024 trajo su cuota de cambios en los países del G7 y de la OCDE.
- En Rumanía, la noche de la primera vuelta de las elecciones presidenciales, un candidato de extrema derecha que un mes antes se situaba en el 1% de las encuestas ganó con el 22,94% de los votos. En vísperas de la segunda vuelta, el Tribunal Constitucional anuló las elecciones y las aplazó hasta 2025.
Por término medio, 7 de cada 10 elecciones en todo el mundo se han saldado con la reelección de los partidos en el poder.
- En África, de las doce elecciones generales celebradas, los partidos en el poder perdieron las elecciones en cuatro países: Ghana, Botsuana, Mauricio y Senegal.
- En Moldavia, el resultado de los comicios del 20 de octubre pareció debilitar a la presidenta proeuropea Maia Sandu, que sin embargo ganó las elecciones del 3 de noviembre gracias sobre todo a una renovada movilización y al voto de la diáspora.
A la escala de la Unión Europea, si bien los resultados de las elecciones europeas del 6 al 9 de junio reforzaron la mayoría pro-integración (PPE, Renew, S&D y Verdes), también dieron lugar a la creación de tres grupos a la derecha del Partido Popular Europeo (Conservadores y Reformistas, Patriotas por Europa y Europa de las Naciones Soberanas, con un total de 187 escaños).
- La Comisión, que entró en funciones el 1 de diciembre, es la más a la derecha de la historia.
- El PPE puede ahora votar a favor —o bloquear— la legislación con la mayoría tradicional (que incluye a Renew, los Verdes y el S&D) o con grupos de extrema derecha, como ocurrió en noviembre con la ley contra la deforestación.
En muchos países donde ganaron los partidos en el poder, su posición se debilitó considerablemente.
- En Japón, el Partido Liberal Demócrata se mantuvo primero en la Cámara, pero perdió la mayoría que había ostentado durante 15 años, y de hecho casi ininterrumpidamente desde 1955.
- En India, Modi ganó las elecciones, pero con una mayoría menor de la esperada.
- En Sudáfrica, el Congreso Nacional Africano, que ha gobernado el país desde el final del apartheid, perdió su mayoría parlamentaria y ahora gobierna con la Alianza Democrática, un partido liberal centrista.
- En Georgia, la controvertida victoria del partido Sueño Georgiano y las consiguientes elecciones presidenciales desencadenaron una crisis constitucional y manifestaciones masivas en todo el país.