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Hoy, jueves 19 de septiembre, el Parlamento Europeo ha aprobado una resolución en la que pide «a los Estados miembros que levanten inmediatamente las restricciones al uso de sistemas de armamento occidentales suministrados a Ucrania contra objetivos militares legítimos en territorio ruso» que «obstaculizan la capacidad de Ucrania para ejercer plenamente su derecho a la autodefensa en virtud del derecho internacional público y dejan a Ucrania vulnerable a ataques contra su población e infraestructuras».

  • La resolución, adoptada con 425 votos a favor, 131 en contra y 63 abstenciones, es meramente simbólica y contrasta con las posiciones divergentes de los Estados miembros, que son los únicos en condiciones de tomar una decisión al respecto.
  • En Italia, el gobierno de Giorgia Meloni ha indicado que las armas italianas no pueden utilizarse directamente contra Rusia, alegando la amenaza de una escalada y las limitaciones constitucionales: «Italia no ha autorizado el uso de material militar italiano fuera de Ucrania», reafirmó también el ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, ante el Parlamento italiano la semana pasada.
  • En Alemania, el canciller Olaf Scholz sigue oponiéndose al envío de misiles de crucero Taurus a Ucrania, que permitirían realizar ataques profundos en territorio ruso (capaces de alcanzar aeródromos, depósitos de municiones y otros objetivos estratégicos actualmente fuera de su alcance).
  • A escala europea, sin embargo, el Alto Representante para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, afirmó que facilitar la capacidad de Ucrania para contraatacar estaría en consonancia con el derecho internacional, si bien reconoció que la Comisión no podía imponer esta lógica a los Estados miembros: «Es su decisión».
  • Los países bálticos, entre los más firmes defensores de Ucrania, también criticaron esta postura. El Ministro de Defensa estonio, Hanno Pevkur, calificó estas limitaciones de «estúpidas» y contrarias a la promesa de la Unión de dar a Ucrania «todo lo que necesita» para defenderse.

En cuanto a la situación en Oriente Medio, el 18 de septiembre la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó una resolución no vinculante en la que exigía a Israel que pusiera fin «sin demora a su presencia ilegal en el territorio palestino ocupado, que constituye un acto ilícito continuado de responsabilidad internacional, y a más tardar 12 meses después de la adopción de la presente resolución […] retirando todas sus fuerzas militares del territorio palestino ocupado, incluidos su espacio aéreo y sus aguas marítimas».

  • La resolución fue aprobada con 124 votos a favor, 14 en contra y 43 abstenciones.
  • Francia, Bélgica, España y Grecia fueron algunos de los países de la Unión que votaron a favor del texto. Alemania, Suecia, Austria y Polonia se abstuvieron. La República Checa votó en contra, al igual que Hungría.
  • Aunque la resolución no es vinculante, podría animar a más Estados a reconocer a Palestina. Desde el ataque de Hamás del 7 de octubre, los Estados miembros siguen divididos sobre la cuestión del reconocimiento del Estado palestino, decisión tomada este año por España, Bélgica e Irlanda.
  • Las europeas también están divididas sobre la cuestión de las sanciones económicas contra Israel, que se beneficia de un acuerdo comercial con la Unión Europea, por no respetar los derechos humanos.
  • Una fuente diplomática cercana al asunto declaró a el Grand Continent: «Está claro que no hay consenso sobre esta cuestión».

En cuanto a Venezuela, si bien la Unión ha declarado que no reconocerá a Nicolás Maduro como presidente de Venezuela hasta que las autoridades hayan publicado los resultados de las elecciones de julio, tampoco reconocerá la victoria del candidato opositor Edmundo González, a quien España ha concedido asilo político y se encuentra actualmente en Madrid.

  • Además de la falta de consenso sobre la adopción de sanciones económicas, los ministros de Asuntos Exteriores temen un escenario similar al de 2021.
  • La Unión había reconocido la victoria del líder opositor Juan Guaidó en 2021, sumiendo a Venezuela en un estado de incertidumbre política. Al final, esta situación permitió al chavismo aferrarse al poder durante otro mandato.

Sin embargo, en una resolución aprobada el 19 de septiembre con 309 votos a favor, 201 en contra y 12 abstenciones, el Parlamento Europeo pidió a la Unión que reconociera a Edmundo González como legítimo ganador de las elecciones.

  • La votación se produce cuando, a principios de septiembre, el Parlamento español también aprobó una resolución que declaraba ganador a Edmundo González.
  • Sin embargo, por falta de consenso a nivel europeo, el texto no recibió el apoyo del Gobierno español.