Desde hace varios días, las relaciones entre Kiev y uno de sus principales apoyos desde el inicio de la invasión rusa se están deteriorando.

  • El lunes 18 de septiembre, la ministra ucraniana de Economía, Yulia Svyrydenko, anunció en un comunicado de prensa que Ucrania iba a presentar una denuncia ante la OMC contra Polonia, Hungría y Eslovaquia.
  • La pasada primavera, Polonia, Hungría, Eslovaquia, Bulgaria y Rumanía obtuvieron autorización de la Comisión Europea para bloquear la comercialización de un determinado número de productos agrícolas ucranianos en su territorio. Los países en cuestión justificaron esta medida proteccionista para proteger su sector agrícola de la afluencia de cereales ucranianos baratos.
  • El viernes 15 de septiembre, la Comisión, competente en la materia, puso fin a esta excepción. Sin embargo, Varsovia, Budapest y Bratislava decidieron anular esta decisión imponiendo un embargo unilateral. Aunque Rumania mostró su descontento con la decisión de la Comisión, no los siguió.

Durante su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, el Presidente ucraniano Zelenski criticó ferozmente a los tres países contra los que Kiev había anunciado que iniciaba un procedimiento ante la OMC, sin nombrarlos: «Estamos trabajando duro para preservar las rutas terrestres de exportación de cereales. Es alarmante ver cómo […] algunos de nuestros amigos en Europa están jugando a la política de solidaridad […] en realidad están ayudando a preparar el terreno para un actor moscovita».

  • Fue al día siguiente de esta decisión cuando el Primer Ministro polaco habló de detener el suministro de armas a Ucrania. Esa misma tarde, el Presidente polaco Andrej Duda comparó a Ucrania con «un hombre que se ahoga».
  • Sin embargo, Morawiecki moderó sus declaraciones precisando que Polonia mantendría operativo su centro de Rzesów, en enlace con Estados Unidos -punto absolutamente nodal para la entrega de material a Ucrania- y seguiría apoyando la defensa ucraniana contra la invasión rusa.
  • El jueves, Polonia convocó al embajador ucraniano para «protestar enérgicamente» contra lo que Varsovia considera un ataque de Zelenski a Polonia durante su discurso en Nueva York.

La Comisión Europea se encuentra en una posición especialmente compleja:

  • Por un lado, la petición ucraniana se justifica sobre la base de la legislación de la Unión, que Polonia, Hungría y Eslovaquia han optado deliberadamente por contravenir.
  • Sin embargo, tras haber pedido inicialmente a estos Estados miembros que revocaran su decisión unilateral, la Comisión debe intervenir en el procedimiento de la OMC para responder a Ucrania. Como analizó el jurista Alberto Alemanno en X (Twitter), «esto no le impedirá incoar más adelante un procedimiento de infracción contra estos mismos Estados».

¿Cómo entender la decisión polaca?

Los polacos acudirán a las urnas el 15 de octubre para las elecciones legislativas. Según los últimos sondeos, el partido en el poder desde 2015, Ley y Justicia (PiS), es el claro favorito, con un 38% de intención de voto, frente al 29% de la Coalición Cívica, aunque esto no le daría la mayoría absoluta. Para asegurarse un tercer mandato, el partido necesitaría obtener en torno al 40% de los votos.

  • La postura cada vez más radical del Gobierno se inscribe en el contexto de una campaña electoral extremadamente polarizada.
  • El partido de extrema derecha Confederación, que ya había criticado el apoyo del Gobierno a Ucrania, ha subido en las encuestas del 6% en junio de 2022 al 14% en julio de 2023. El 18 de septiembre, se le atribuía el 10% de las intenciones de voto.
  • La mayoría de los votos que el PiS ha perdido en las encuestas desde las elecciones de 2019 son ahora abstenciones. La estrategia central del PiS es recuperar este electorado perdido, por un lado desplegando un generoso gasto social, pero también haciendo hincapié en cuestiones vinculadas a la seguridad y la soberanía nacional -de ahí la organización de un referéndum sobre las privatizaciones, el pacto europeo sobre migración y asilo y la securitización de la frontera con Bielorrusia-.

Desde el comienzo de la invasión rusa en febrero de 2022, Polonia ha sido uno de los principales apoyos del esfuerzo bélico ucraniano. El país ha iniciado varias entregas de armas, incluidos tanques Leopard II y cazas F-16, y se ha posicionado como la puerta de entrada de toda la ayuda económica y militar: alrededor del 90% de la ayuda y el material militar destinado a Kiev pasa por territorio polaco.

  • Polonia ha prometido un total de 3.000 millones de euros en ayuda militar, la sexta mayor cantidad después de Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Noruega y Dinamarca.
  • El país también ha acogido a un número récord de refugiados ucranianos. En conjunto, el apoyo bilateral del gobierno de Varsovia y el coste de la acogida de refugiados representan el 3,2% del PIB de Polonia, el nivel más alto de todo el apoyo a Ucrania.