El proyecto italiano es ambicioso porque, como explica el ministro Urso, «16 de las 34 materias primas críticas identificadas se encuentran en el subsuelo de Italia», incluido «el segundo mayor yacimiento de cobalto del mundo».
- Los políticos italianos llevan tiempo advirtiendo de la necesidad de ponerse al día en materia de materias primas críticas. Como explica un estudio de la Cassa Depositi e Prestiti, la principal empresa de apoyo económico controlada por el Estado, «en un escenario compatible con la neutralidad climática, la Comisión Europea calcula que en 2050 la demanda anual de litio de Europa podría multiplicarse por 56 en comparación con los niveles actuales, la de cobalto por 15 y la de tierras raras por 10».
- Uno de los objetivos fijados por el gobierno italiano es utilizar parte de los recursos del Plan de Recuperación para aumentar la competitividad de Italia en el sector. Según Adolfo Urso, Italia debe «dedicar recursos de los capítulos y objetivos que probablemente no se alcanzarán en 2026 a los capítulos más útiles para apoyar la transición ecológica y digital».
Sin embargo, la estrategia italiana no tendrá un gran impacto inmediato, como también explica la Cassa Depositi e Prestiti: «Dados los largos plazos de las actividades mineras -al menos de 10 a 15 años para la comercialización de las primeras tierras raras del yacimiento sueco-, a corto plazo, la contribución de los posibles recursos nacionales a la reducción de la dependencia exterior es modesta».
- El 17 de febrero de 2023 se celebró en el Ministerio de Empresa y Made in Italy la primera reunión oficial del Comité Técnico de Materias Primas Críticas, que definió la estrategia para los próximos años.
- El gobierno no sólo quiere autorizar la apertura de nuevas minas y lanzar una campaña para encontrar los minerales necesarios, sino también aprovechar las grandes cantidades de residuos mineros almacenados en minas en desuso. El Ministerio de Comercio e Industria, por ejemplo, calcula que se puede recuperar entre un 7 y un 8% de zinc de ciertos yacimientos.
- Algunas empresas privadas ya han obtenido concesiones para buscar materiales críticos. La empresa australiana Altamin podrá buscar cobre, cobalto y metales asociados en Emilia-Romaña y Piamonte, y ha solicitado realizar estudios similares para el litio en Lacio. En Cerdeña, en cambio, la atención se centra en la mina Silius, que, según Il Sole 24 Ore, debería volver a la producción de la mano de Gerrei.
- Aunque Italia pretende actuar en coordinación con sus socios europeos y la Comisión, el gobierno no oculta su deseo de defender la «soberanía italiana». En este sentido, el ministro Urso declaró que Italia pide a Europa que «comprenda que debe combinar las necesidades de la transición ecológica con los métodos y el calendario que permitan a las empresas y al sistema social italianos y europeos experimentar una auténtica reconversión y ser competitivos.»