Hasta el verano de 2022, Dinamarca estuvo gobernada por el gabinete en minoría dirigido por Mette Frederiksen (Socialdemócratas, S&D), que contó con el apoyo sin participación de los grupos parlamentarios de los Radicales de Izquierda (Renovación), el Partido Socialista Popular (Verdes/EFA) y la Lista Unitaria (GUE/NGL).

  • En junio, la comisión que investigó la matanza de millones de visones en el contexto de la pandemia de Covid-19 concluyó que el ejecutivo había actuado sin base legal al tomar dicha medida.
  • La Izquierda Radical instó entonces a Frederiksen a convocar elecciones anticipadas, amenazando con censurar al gobierno si no lo hacía.

En las elecciones del lunes, los socialdemócratas de Mette Frederiksen volvieron a estar en cabeza (27,5%, +1,6 pp), seguidos por el partido de centro-derecha Venstre (Renovación), que se hundió (13,3%, -10,1 pp), el nuevo partido Moderados, una escisión de Venstre (9,3%, nv.) y el Partido Socialista Popular (8,3%, +0,6 pp). Los Radicales de Izquierda, que habían provocado las elecciones, vieron sus resultados reducidos a la mitad (3,8%, -4,8 pp).

El histórico partido danés de extrema derecha, el Partido Popular Danés, sufrió una derrota electoral aún mayor, perdiendo más de dos tercios de su electorado (2,6%, -6,4 pp).

  • Sin embargo, este colapso debe considerarse en el contexto de la llegada a la escena política de los Demócratas de Dinamarca de Inger Støjberg, cuyo posicionamiento político se inspiró en el de los Demócratas de Suecia.
  • El partido obtuvo un 8,1% (nv.). Si añadimos a estos resultados los de la Nueva Derecha (3,7%, +1,3 pp), las distintas formaciones de la derecha radical danesa parecen crecer de forma significativa.

En conjunto, las formaciones de izquierda y centro-izquierda obtienen 90 escaños de los 179 del Folketing, exactamente la mayoría absoluta, y 9 escaños menos que el día después de las elecciones de 2019. «Con 500 votos», según el Jyllands-Posten, el centro-izquierda liderado por Frederiksen debería poder seguir gobernando en el próximo parlamento.

Los ciudadanos de las Islas Feroe y Groenlandia, que forman parte del Reino de Dinamarca, también participaron en las elecciones.

  • Los cuatro escaños en juego no cambiaron de manos: los dos representantes feroeses son de la Unión (centro-derecha) y los socialdemócratas, mientras que los dos diputados groenlandeses son de Siumut (centro-izquierda) y de Inuit Ataqatigiit (izquierda radical, independentista).