Anton Barbashin


«Una de las características esenciales del mundo que se nos presenta será la ausencia de una representación ética universalmente válida en materia de justicia —es decir, de acción justa— en la práctica de los Estados y la legitimidad de sus dirigentes».

Las élites putinistas han desarrollado una doctrina para justificar las peores agresiones y la guerra perpetua: Rusia simplemente se adaptaría al caos.

El disidente ruso Anton Barbashin se sumerge en la maquinaria retórica de los expertos del Club Valdai.