En Berlín, Ucrania continúa las negociaciones con Washington para llegar a un acuerdo antes de Navidad

Los negociadores estadounidenses Witkoff y Kushner se encontraban ayer, domingo 14 de diciembre, en Berlín, donde mantuvieron una reunión de cinco horas con Zelenski y la delegación ucraniana.

Las discusiones continuarán hoy, lunes 15 de diciembre, por la mañana entre Kiev y Washington, antes de la llegada prevista de varios líderes europeos y del secretario general de la OTAN, Mark Rutte, a lo largo del día.

• En un comunicado publicado ayer por la noche, Witkoff declaró que se habían logrado «avances importantes» en el texto del plan de paz, cuya última versión contiene ahora 20 puntos, y en las «cuestiones económicas».
• Antes de la reunión con Witkoff y Kushner, Zelenski había señalado el domingo 14 que Ucrania estaba dispuesta a «renunciar» a su solicitud de adhesión a la OTAN si Estados Unidos y los países europeos ofrecían garantías de seguridad suficientes ¹.
• Sin embargo, la última versión de la propuesta de paz presentada en Washington por Kiev y los europeos a finales de la semana pasada contenía una cláusula que garantizaba la adhesión de Ucrania a la Unión Europea antes del 1 de enero de 2027.

El presidente estadounidense, que «está muy decepcionado con las dos partes implicadas en el conflicto» y «cansado de las reuniones que no tienen otro objetivo que reunirse», según la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, desearía llegar a un acuerdo antes de Navidad ². Más allá de la cuestión de los territorios, que a día de hoy sigue sin resolverse, el principal obstáculo para alcanzar un acuerdo parece ser la postura de Rusia, que sigue indicando que probablemente rechazaría cualquier propuesta procedente de los europeos y los ucranianos.

• Antes de las conversaciones de ayer en Berlín, el asesor del presidente ruso, Yuri Ushakov, señaló que Moscú tendría «fuertes objeciones» a la «contribución de los ucranianos y los europeos» al plan de paz estadounidense.
• Ushakov declaró en particular que «la contribución de los ucranianos y los europeos a estos documentos no será muy constructiva […] Ese es el problema […] Habrá disposiciones totalmente inaceptables para nosotros, en particular sobre la cuestión territorial» ³.

Moscú se mantiene firme en su postura respecto a la retirada de Kiev de todo el Donbás, del que más de 8.500 km² siguen bajo el control del ejército ucraniano, lo que supondría el abandono de posiciones defensivas ventajosas para disuadir y hacer frente a una posible nueva invasión rusa. Moscú también se opone a la creación de una zona desmilitarizada a ambos lados de la línea del frente, lo que implicaría la retirada de las tropas ucranianas y rusas, siguiendo el modelo de la zona entre las dos Coreas.