La presidencia danesa del Consejo de la Unión, que comienza hoy, martes 1 de julio, por un período de seis meses, tiene dos prioridades: «Una Europa segura y una Europa competitiva y verde».
- La agenda estará marcada en gran medida por la actualidad, lo que sin duda explica por qué Copenhague ha formulado prioridades deliberadamente vagas y generales.
- Así, la presidencia danesa deberá abordar la cuestión de los aranceles estadounidenses —la suspensión decidida por Donald Trump expira el 9 de julio—, iniciar las negociaciones sobre el próximo marco financiero plurianual (se espera una propuesta inicial de la Comisión este mes) y avanzar en los debates sobre el objetivo climático para 2040.
- Ante las amenazas de Trump de anexionar Groenlandia, Dinamarca también debería prestar especial atención a los avances en materia de defensa común, mientras Rusia sigue avanzando en el frente ucraniano.
- En la cumbre de la OTAN, los aliados acordaron aumentar su gasto en defensa hasta el 5% del PIB para 2035 (del cual el 3,5% se destinará a gastos estrictamente militares).
- Aunque existen grandes industrias europeas (Rheinmetall, MBDA, Dassault, Leonardo…), existe el riesgo de que una parte importante de estos fondos adicionales —alrededor de 510.000 millones de euros al año— se destine a empresas estadounidenses, en particular para los sistemas más avanzados: aviones de combate, baterías antimisiles, radares…
- Esta es la cuestión a la que Dinamarca debería dedicarse en los próximos meses. A finales de mayo, los 27 aprobaron un nuevo instrumento, SAFE (Security Action for Europe), que destina 150.000 millones de euros a la financiación conjunta de adquisiciones en el sector de la defensa.
- En este contexto, la estrategia EDIP (European Defence Industry Programme), aún en fase de debate, debería contribuir a apoyar y reforzar la industria de defensa europea.
Dinamarca está a favor de endurecer la presión sobre Moscú mediante sanciones. Según diplomáticos rusos, Moscú teme además un refuerzo del apoyo prestado por Bruselas a Ucrania bajo la presidencia danesa, «tanto por parte de la Unión en su conjunto como de sus países miembros individualmente» 1.
- El último paquete de sanciones en preparación, el decimoctavo desde febrero de 2022, se enfrenta a la oposición del primer ministro eslovaco, Robert Fico, y del húngaro, Viktor Orbán.
- Bratislava se opone a la propuesta de la Comisión de poner fin a las compras de energía rusa para finales de 2027 2.
Partidario y artífice de una línea dura en materia de migración, Copenhague también hará de la endurecimiento de la política migratoria europea una de sus prioridades. El país, que aplica una de las políticas de inmigración más estrictas de la Unión, ha endurecido la legislación sobre la reagrupación familiar, ha puesto en marcha una política de externalización de la tramitación de las solicitudes de asilo a terceros países y ha revocado los permisos de residencia de algunos refugiados sirios.
Notas al pie
- Кирилл Фенин, « Санкционный проситель : Дания будет способствовать усилению ограничений против РФ », Известия, 30 de junio de 2025.
- Slovensko nesúhlasí s plánom EÚ na zastavenie dovozu plynu, ropy a jadrového paliva z Ruska, Ministerio de Economía de Eslovaquia, 7 de mayo de 2025.