Paralelamente a su participación en las negociaciones para el establecimiento de un alto el fuego en Ucrania, la Rusia de Putin continúa armándose y preparándose para la guerra. Unos días antes de la llegada del negociador ruso Kirill Dmitriev a Washington 1 —una señal enviada por el Kremlin sobre su voluntad de desarrollar sus relaciones con Trump y poner fin al conflicto—, Vladimir Putin firmó un decreto que marcaba el inicio de la mayor campaña de reclutamiento en más de una década.
Al reorientar la economía rusa hacia la industria manufacturera y la producción de armamento, Putin ha transformado Rusia de forma duradera en un Estado guerrero, hasta tal punto que los servicios de inteligencia europeos temen que el Kremlin se aproveche de un alto el fuego en Ucrania para reponer sus fuerzas y dirigirlas hacia otro de sus vecinos.
- En febrero, los servicios de inteligencia militar daneses (Forsvarets Efterretningstjeneste) publicaron una actualización de su evaluación anual sobre la amenaza que representa Rusia para el Reino de Dinamarca.
- El documento establecía explícitamente el tiempo que tardaría el ejército ruso en regenerar sus fuerzas para iniciar una nueva guerra: seis meses contra un sólo país tras el cese de las hostilidades en Ucrania, dos años contra uno o varios países miembros de la OTAN (principalmente en el Báltico) y cinco años para una guerra a gran escala en el continente europeo, en caso de que Estados Unidos no prestara su apoyo 2.
- En noviembre de 2024, el presidente del Servicio Federal de Inteligencia de Alemania, Bruno Kahl, también estimó que «las fuerzas armadas rusas probablemente serían capaces de llevar a cabo un ataque contra los países de la OTAN en Europa de aquí a finales de la década, tanto en términos de personal como de material» 3.
Rusia ya está librando activamente desde 2022 una guerra híbrida contra Europa que se dirige principalmente a las infraestructuras críticas y de transporte, a la industria y a los gobiernos de los Estados miembros en un esfuerzo por sembrar el caos y poner a prueba las defensas de los países de la OTAN. Según el CSIS, estos ataques se concentran principalmente en el noreste del continente y se dirigen sobre todo a los Estados bálticos y nórdicos. Hungría y Serbia, que regularmente se convierten en los relevos de la propaganda rusa en Europa, no han sufrido ningún ataque identificado como procedente de Rusia desde 2022 4.
- Los servicios daneses especifican en su informe de febrero que los plazos asociados a los riesgos que pesan actualmente sobre Europa tras el cese de los combates en Ucrania «suponen que la OTAN no se rearma simultáneamente al mismo ritmo».
- Uno de los principales temas debatidos en la Alianza Atlántica desde la elección de Donald Trump es la parte del PIB que los Estados aliados dedican a su defensa.
- El presidente estadounidense quiere definir un nuevo objetivo de gasto que podría alcanzar el 5% del PIB en la próxima cumbre de la OTAN, que tendrá lugar en La Haya en junio. La mayoría de los países europeos miembros de la Alianza apuntan por ahora a un objetivo del 3-3,5% 5.
- El año pasado, una cifra récord de países miembros de la OTAN alcanzó el objetivo del 2%: 23 países, frente a los 10 del año anterior. Sin embargo, en vista de la amenaza que representa Putin y de las deficiencias de capacidad de los países europeos, este nivel de gasto se considera ahora en gran medida insuficiente.
Notas al pie
- Alex Marquardt, Jennifer Hansler y Alayna Treene, « Senior Russian official is expected to visit Washington for talks with Trump administration this week », CNN, 2 de abril de 2025.
- Opdateret vurdering af truslen fra Rusland mod Rigsfællesskabet, Forsvarets Efterretningstjeneste, 9 de febrero de 2025.
- « BND-Chef warnt vor Putins konventioneller und hybrider Kriegsführung », Der Spiegel, 28 de noviembre de 2024.
- Seth G. Jones, Russia’s Shadow War Against the West, CSIS, 18 de marzo de 2025.
- Daniel Michaels y Laurence Norman, « Trump Wants NATO to Spend More. Europe Pitches Redefining Defense to Get There », The Wall Street Journal, 1 de abril de 2025.