{"id":76762,"date":"2025-08-27T10:09:27","date_gmt":"2025-08-27T08:09:27","guid":{"rendered":"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/?p=76762"},"modified":"2025-08-27T10:09:32","modified_gmt":"2025-08-27T08:09:32","slug":"hablar-en-contra-de-putin-las-voces-de-la-resistencia-ucraniana","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/2025\/08\/27\/hablar-en-contra-de-putin-las-voces-de-la-resistencia-ucraniana\/","title":{"rendered":"Hablar en contra de Putin: las voces de la resistencia ucraniana"},"content":{"rendered":"\n
El siguiente texto es un simple extracto de un programa de radio emitido en Suspilne, la televisi\u00f3n y radio p\u00fablica ucraniana. \u00abH\u00e9roes\u00bb da la palabra a los soldados ucranianos, y este programa en concreto se emiti\u00f3 en julio. La escuch\u00e9 al salir de Jarkov, de camino a Izium, una ciudad ocupada durante varios meses por el ej\u00e9rcito ruso y que a\u00fan muestra las secuelas de ese periodo. Serhii Duplyak es coronel del servicio de guardias fronterizos, que combate en el frente, y est\u00e1 en servicio desde 2014.<\/em><\/p>\n\n\n\n La motivaci\u00f3n del soldado es [hoy] completamente diferente. Cuando ocurrieron los acontecimientos de 2014 \u2014la captura de territorios en las regiones de Lugansk y Donetsk\u2014, a muchos les pareci\u00f3 algo muy lejano. Pensaban: que se queden all\u00ed, est\u00e1 lejos. A nosotros, en Kiev, en Jmelnitski, en Le\u00f3polis, no nos afectar\u00e1. Pero cuando la amenaza lleg\u00f3, cuando ya estaba cerca de Kiev, cerca de Zhytomyr, cuando se cavaban trincheras cerca de Lviv, todos comprendieron que no era algo lejano, que pod\u00eda suceder hoy mismo. Entonces, la actitud de la gente hacia la guerra, hacia Rusia y sus acciones cambi\u00f3 un poco. […]<\/p>\n\n\n\n Es poco probable que recuperemos nuestro territorio solo gracias a la buena voluntad de los rusos y a las negociaciones. Por eso hay que prepararse y defender nuestra tierra, ayudar a los muchachos que, en este momento, llevan a cabo misiones de combate, que detienen esta ofensiva. Todos debemos comprender que estos muchachos, que ahora est\u00e1n en primera l\u00ednea, tambi\u00e9n necesitan relevo y tambi\u00e9n necesitan un poco de descanso. […]<\/p>\n\n\n\n Podemos obtener la victoria. Pero necesitamos la consolidaci\u00f3n de toda nuestra sociedad civil en torno a ella, la preparaci\u00f3n para la resistencia, la continuaci\u00f3n de los combates. Aunque algunos no sean militares, tambi\u00e9n ellos realizan tareas importantes aqu\u00ed, en la retaguardia, pero todos deben ser capaces, en cualquier momento, de levantarse para defender [el pa\u00eds]. Nunca ser\u00e1 demasiado, porque nadie sabe lo que va a pasar, ni si lo que estamos viviendo ahora es lo peor. Siempre puede ser peor, aunque, evidentemente, no lo deseemos. Pero debemos estar preparados, debemos prepararnos. O defendemos nuestra tierra o seguiremos siendo un pueblo sin tierra, sin patria. Podemos huir al extranjero. Pero \u00bfqui\u00e9n nos espera all\u00ed? Nuestras casas, nuestras pertenencias, no podemos llev\u00e1rnoslo todo all\u00ed. No todo el mundo se ir\u00e1. Y si una parte de la poblaci\u00f3n quiere huir al extranjero, vivir toda su vida como refugiada, sin patria, sin Estado, empezar de cero…<\/p>\n\n\n\n\n Conoc\u00ed a Mar\u00eda Koutnyakova el 21 de febrero de 2022, unos d\u00edas antes del inicio de la invasi\u00f3n rusa. Entonces trabajaba como especialista en comunicaciones en 1991, una aceleradora de start-ups y espacio de coworking situado en el coraz\u00f3n de Mariupol. La conversaci\u00f3n fue breve, sorprendentemente banal en comparaci\u00f3n con el horror que vivir\u00edan Mar\u00eda y el resto de los habitantes de Mariupol unos d\u00edas m\u00e1s tarde. Hoy refugiada en Lituania, Mar\u00eda public\u00f3 el siguiente texto en su p\u00e1gina de Facebook el pasado 18 de marzo, exactamente tres a\u00f1os despu\u00e9s de los acontecimientos que all\u00ed relata. Entonces ten\u00eda 30 a\u00f1os.<\/em><\/p>\n\n\n\n El 18 de marzo de 2022, est\u00e1bamos en el pueblo de Melekine, no lejos de Mariupol. La v\u00edspera hab\u00edamos llegado all\u00ed a pie y luego en coche. En ese momento, miles de habitantes de Mariupol ya hab\u00edan logrado huir de la ciudad sitiada y bombardeada por el ej\u00e9rcito ruso. Todas las bases de ocio, campamentos de verano, dachas y casas rurales estaban ocupadas.<\/p>\n\n\n\n Todo el mundo acud\u00eda a la escuela y al ayuntamiento. Hab\u00eda cientos de personas en la escuela: algunas sal\u00edan limpias de sus coches, otras llevaban chaquetas quemadas y ropa sucia. Hab\u00eda gente con ni\u00f1os, animales, maletas. \u00a1Y lo m\u00e1s importante, hab\u00eda red! Y tambi\u00e9n la oportunidad de recargar los tel\u00e9fonos. Parec\u00eda un milagro, porque entonces no ten\u00edamos noticias. En el vest\u00edbulo hab\u00eda dos filas, una para conectar los tel\u00e9fonos y otra para acceder al comedor escolar. En ese momento, no hab\u00edamos comido bien desde el 10 de marzo, m\u00e1s de una semana con raciones fr\u00edas y agua limitada.<\/p>\n\n\n\n Nos dieron un plato de estofado y, en los grifos de los ba\u00f1os, pod\u00edamos llenar botellas con agua fr\u00eda. Me sent\u00eda como en el para\u00edso. Incluso pod\u00edamos lavarnos las manos y la cara. Pero se oy\u00f3 un ruido: result\u00f3 que la comida no se distribu\u00eda a todo el mundo, sino solo a quienes pagaban.<\/p>\n\n\n\n Un hombre vestido de civil entr\u00f3 a la escuela, era un funcionario local o ya un ruso. Nos orden\u00f3 a todos que subi\u00e9ramos a los autobuses con destino a Rostov [en Rusia, nota de la redacci\u00f3n<\/em>], aparcados en el estacionamiento. Inmediatamente comprendimos por qu\u00e9 la directora ped\u00eda a la gente que saliera. Algunos corrieron directamente hacia los coches, otros se negaron rotundamente y otros se consultaban entre s\u00ed y dudaban.<\/p>\n\n\n\n Nosotros (mi madre, mi hermana, nuestros vecinos y yo) entendimos que no pod\u00edamos ir a Rostov. Podr\u00eda ser un viaje de ida, pero \u00bfd\u00f3nde \u00edbamos a dormir? \u00bfEn la calle, en el fr\u00edo? Entonces empezamos a llamar a todo el mundo. Abr\u00ed la lista de contactos de mi tel\u00e9fono y empec\u00e9 a llamar a todos por orden alfab\u00e9tico. Y consegu\u00ed contactar con Tanya, que nos salv\u00f3 (lo contar\u00e9 m\u00e1s adelante).<\/p>\n\n\n\n Por alguna raz\u00f3n, recordaba bien a esa directora con voz desagradable, que se quejaba por el guisado y los muebles. Siempre duele cuando esa insensibilidad viene de nuestra propia gente. Esperamos todo de los rusos, pero es esa taca\u00f1er\u00eda cotidiana la que nos afecta profundamente. A veces me pregunto qu\u00e9 habr\u00e1 sido de esa escuela, si los muebles estar\u00e1n bien, c\u00f3mo estar\u00e1 la directora. Pero no quiero pensar demasiado en ese mal.<\/p>\n\n\n\n En la escuela conocimos a un mont\u00f3n de desconocidos que nos ayudaron. Una se\u00f1ora mayor le dio a mi hermana un pa\u00f1uelo porque le goteaba la nariz. Una joven desconocida comparti\u00f3 un poco de jab\u00f3n l\u00edquido y un hombre nos felicit\u00f3 por haber salido de la ciudad y nos regal\u00f3 una tableta de chocolate. \u00bfSe imaginan lo que val\u00eda esa tableta en ese momento?<\/p>\n\n\n\n Tambi\u00e9n conocimos a un chico del teatro, con la chaqueta rota por un bombardeo, \u00a1que llevaba un loro consigo! Sin jaula, simplemente estaba posado en el hombro del chico. \u00abCuando nos atacaron, la jaula se volc\u00f3 y pens\u00e9 que hab\u00eda muerto. La llam\u00e9 y sali\u00f3 de la nada para posarse en mi hombro. As\u00ed es como llegamos aqu\u00ed juntos\u00bb.<\/p>\n\n\n\n La sosten\u00eda en mis manos mientras \u00e9l hac\u00eda fila en la cantina.<\/p>\n\n\n\n Y aunque esa escuela, ese espantoso estruendo de cientos de personas perdidas, las b\u00fasquedas, las llamadas y los gritos hacen que esos recuerdos sean muy inc\u00f3modos, lo que m\u00e1s recuerdo es ese loro en mis manos, y a la incre\u00edble Tanya, que logr\u00f3 llamarnos y nos dijo: \u00abMasha, no te asustes. Ahora lo voy a organizar todo\u00bb. <\/span>1<\/sup><\/a><\/span><\/span><\/p>\n\n\n\n\n \u00bfC\u00f3mo ver el pasado a la luz de la guerra actual? Esta pregunta sigue atravesando la sociedad ucraniana. Este extracto de una entrevista publicada en la revista intelectual ucraniana <\/em>Ukraina Moderna resume muy bien uno de los debates que rodean en Odessa la figura de Alexander Pushkin. Oksana Dovgopolova es una investigadora ucraniana especializada en cuestiones relacionadas con la memoria. Aqu\u00ed responde a la pregunta: \u00ab\u00bfQu\u00e9 figuras o temas hist\u00f3ricos suscitan los debates m\u00e1s acalorados?\u00bb.<\/em><\/p>\n\n\n\n Alejandro Pushkin e Isaac Babel son las dos figuras que concentran los debates m\u00e1s acalorados. El \u00abPushkinopad\u00bb (la \u00abca\u00edda de los Pushkin\u00bb) se ha producido, por supuesto, en toda Ucrania desde 2022 (hab\u00eda comenzado antes, pero fue en 2022 cuando adquiri\u00f3 una magnitud masiva). Odessa necesita una reevaluaci\u00f3n de la figura de Pushkin, porque, en realidad, hay argumentos racionales a favor y en contra. El monumento a Pushkin en Odessa no fue erigido por el poder sovi\u00e9tico. Es el caso, por ejemplo, del monumento de Mukachevo, del que no se sabe muy bien c\u00f3mo lleg\u00f3 all\u00ed. Cuando vemos a Pushkin en Mukachevo, entendemos que se trata de una clara marca del espacio por parte del poder sovi\u00e9tico.<\/p>\n\n\n\n El monumento a Pushkin existe en Odessa desde 1889, fue erigido antes de la revoluci\u00f3n bolchevique. Todo lo que exist\u00eda antes de la revoluci\u00f3n es considerado por la mayor\u00eda de los habitantes de Odessa como m\u00e1s natural. Esta postura era propia del p\u00fablico de la ciudad desde la \u00e9poca sovi\u00e9tica: los habitantes de Odessa distingu\u00edan y consideraban \u00abnormal\u00bb todo lo que exist\u00eda antes de 1917. Este paradigma sigue funcionando. Desde este punto de vista, el monumento a Pushkin, erigido mucho antes de los bolcheviques, se percibe como \u00abbueno\u00bb.<\/p>\n\n\n\n Existe una leyenda seg\u00fan la cual los propios habitantes de la ciudad recaudaron dinero para el monumento, ya que los ayuntamientos no proporcionaron los recursos suficientes. Por cierto, uno de los esquemas recurrentes de la mitolog\u00eda urbana de Odessa es la convicci\u00f3n de que la ciudad la construyen las personas, y no las autoridades. Por eso la gente defiende el monumento y dice que es bonito. Adem\u00e1s, fue fabricado en Odessa y hay muchas historias sobre qui\u00e9nes realizaron, por ejemplo, las fuentes y otros elementos del monumento. Esto est\u00e1 estrechamente relacionado con la historia de la econom\u00eda y la educaci\u00f3n en Odessa, por lo que los habitantes protegen estos hitos del espacio urbano.<\/p>\n\n\n\n Por otro lado, la postura de quienes dicen que hoy en d\u00eda es imposible conservar el monumento a Pushkin en el espacio de cualquier ciudad ucraniana, independientemente de c\u00f3mo haya llegado all\u00ed, es totalmente comprensible, ya que se trata de un s\u00edmbolo del poder imperial sovi\u00e9tico y ruso. Lamentablemente, cualquier objeto en el espacio p\u00fablico sigue percibi\u00e9ndose exclusivamente en el contexto de la glorificaci\u00f3n de un r\u00e9gimen determinado. No existe la idea de que sea posible recalificar un objeto, no hay ejemplos exitosos. Y la gente no logra encontrar una posici\u00f3n com\u00fan porque sus puntos de vista difieren fundamentalmente.<\/p>\n\n\n\n\n En Ucrania, Maria Berlinska es una personalidad conocida y controvertida. Apodada por los medios de comunicaci\u00f3n como la \u00abmadre de los drones\u00bb por el papel que ha desempe\u00f1ado desde 2014 en el despliegue de esta nueva arma en el ej\u00e9rcito, se expresa regularmente para criticar lo que considera la ceguera del Estado, en un discurso marcado por la amargura de alguien que cree haber sido ignorado durante demasiado tiempo.<\/em><\/p>\n\n\n\n Es una destacada representante de esa sociedad civil-militar que se ha desplegado al margen del Estado para apoyar mejor al ej\u00e9rcito. Este texto, uno de los que publica regularmente en su p\u00e1gina de Facebook, fue publicado en el momento en que comenzaba en la Casa Blanca la \u00faltima reuni\u00f3n entre Donald Trump y Volodimir Zelenski.<\/em><\/p>\n\n\n\n No me considero una experta en pol\u00edtica internacional. Pero la situaci\u00f3n en la que se nos quiere colocar es claramente un callej\u00f3n sin salida. En esencia, se nos ofrece una paz temporal a costa de nuestros intereses.<\/p>\n\n\n\n \u00abRenuncien a su territorio, entreguen a Rusia a los millones de personas que viven en los territorios ocupados y, entonces, tal vez, tendr\u00e1n un largo respiro. Pero no es seguro\u00bb. La paz la garantiza una palabra que, en realidad, como ha demostrado el memor\u00e1ndum de Budapest, no garantiza nada.<\/p>\n\n\n\n \u00bfD\u00f3nde est\u00e1 hoy Clinton, que entonces era el garante como presidente de Estados Unidos?<\/p>\n\n\n\n Pues ah\u00ed est\u00e1. Garantizamos que no garantizamos nada. Pero los soldados estadounidenses desplegaron la alfombra roja y se inclinaron ante un dictador man\u00edaco. El l\u00edder del mundo libre estrech\u00f3 la mano del dictador. <\/p>\n\n\n\n Y ese l\u00edder realmente quiere hacerse pasar por un art\u00edfice de la paz. \u00a1Para poner fin a una guerra que ni siquiera habr\u00eda comenzado bajo su mandato! (Pasaremos por alto el hecho de que ya estaba en curso durante su primer mandato). As\u00ed que cedan sus intereses. De lo contrario, corren el riesgo de quedarse sin la ayuda estadounidense. Sin m\u00e1s.<\/p>\n\n\n\n No me entusiasman muchas de las decisiones de nuestros l\u00edderes militares y pol\u00edticos.<\/p>\n\n\n\n Pero en este momento, deseo sinceramente que tengan \u00e9xito.<\/p>\n\n\n\n No envidio a nuestro presidente en este momento. En este momento hist\u00f3rico, desde luego que no me gustar\u00eda estar en su lugar. De hecho, estamos atrapados como rehenes entre dos imperios. Tampoco hay que olvidar los intereses de la Uni\u00f3n y de China en este juego.<\/p>\n\n\n\n Espero que no nos dejemos vencer. Espero que resistamos este golpe.<\/p>\n\n\n\n P.D. Hacer predicciones es un ejercicio arriesgado, pero supongo con cautela que intentar\u00e1n congelar el conflicto en la l\u00ednea del frente actual. Al mismo tiempo, no es seguro que eso sea suficiente para Putin. Tambi\u00e9n exigir\u00e1 los territorios incluidos en la Constituci\u00f3n rusa. Para nosotros, esto es, por supuesto, inaceptable. Por lo tanto, Putin seguir\u00e1 prolongando la guerra y echar\u00e1 la culpa de la \u00abintransigencia\u00bb a Ucrania.<\/p>\n\n\n\n Es una guerra de desgaste, \u00bfqui\u00e9n ceder\u00e1 primero? Si la sociedad se consolida lo suficiente, tenemos la oportunidad de resistir. Y de ver c\u00f3mo Rusia se derrumba. <\/span>2<\/sup><\/a><\/span><\/span><\/p>\n\n\n\n 18 de agosto de 2025<\/p>\n\n\n\n\n Diana Berg es una famosa activista cultural de Mariupol. En marzo de 2022, escap\u00f3 del asedio de su ciudad. Tres a\u00f1os despu\u00e9s, el 18 de agosto, se encontraba junto a varios cientos de personas en la plaza de la Independencia de Kiev para rendir homenaje a David Chichkan, un artista anarquista de 39 a\u00f1os que se alist\u00f3 como voluntario en el ej\u00e9rcito ucraniano y muri\u00f3 en el frente este verano. La ceremonia se celebr\u00f3 entre banderas rojas y negras del anarquismo y banderas arco\u00edris de la causa LGBT. A continuaci\u00f3n, se produjo un breve altercado con un neonazi ruso alistado en el ej\u00e9rcito ucraniano que intent\u00f3 arrancar una de las banderas LGBT. Diana Berg relata este momento surrealista, que es tambi\u00e9n un reflejo de la guerra en Ucrania.<\/em><\/p>\n\n\n\n Nos despedimos de David Chichkan. Estaban todos: anarquistas, soldados, artistas, activistas, pol\u00edticos, creadores de todos los \u00e1mbitos, antifascistas, patriotas, gente de izquierda y de derecha.<\/p>\n\n\n\n Cuando sal\u00edamos de la plaza para dirigirnos al cementerio de Baikove, ocurri\u00f3 algo incre\u00edble.<\/p>\n\n\n\n Maksym Nakonechny y Viktor Pylypenko, que llevaban banderas arco\u00edris, fueron atacados por la espalda por un grupo de militares del RDK [Cuerpo de Voluntarios Rusos, una unidad del ej\u00e9rcito ucraniano compuesta por voluntarios rusos, nota de la redacci\u00f3n<\/em>].<\/p>\n\n\n\n No asistieron al funeral, simplemente pasaban por all\u00ed y decidieron atacar la bandera LGBT.<\/p>\n\n\n\n Se desat\u00f3 una pelea entre los militares rusos de extrema derecha del RDK y el veterano gay, mientras unos anarquistas de izquierda pasaban por all\u00ed y pusieron fin a la pelea rociando a todo el mundo con gas lacrim\u00f3geno.<\/p>\n\n\n\n Esto solo pod\u00eda suceder en el funeral de David Chichkan. Creo que ten\u00eda que suceder, como una met\u00e1fora de su vida, su lucha y su arte.<\/p>\n\n\n\n Gloria eterna al h\u00e9roe. <\/span>3<\/sup><\/a><\/span><\/span><\/p>\n\n\n\n\n Este texto es un breve extracto de <\/em>Babyonki, obra de teatro representada este a\u00f1o por<\/em> la compa\u00f1\u00eda teatral \u00abOcheret\u00bb, con sede en Jarkov<\/em><\/a>. La obra fue escrita por Andriy Nesmyan, soldado y esposo de Anastasia, a quien menciono en los dos relatos de este dossier. <\/em>Babyonki es un di\u00e1logo entre mujeres inmersas en la guerra.<\/em><\/p>\n\n\n\nSerhii Douplyak<\/h4>\n\n\n\n
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\n <\/picture>\n Mar\u00eda Koutnyakova<\/h4>\n\n\n\n
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\n <\/picture>\n Oksana Dovgopolova<\/h4>\n\n\n\n
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\n <\/picture>\n Maria Berlinska<\/h4>\n\n\n\n
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\n <\/picture>\n Diana Berg<\/h4>\n\n\n\n
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\n <\/picture>\n \u00abBabyonki\u00bb<\/h4>\n\n\n\n