{"id":58690,"date":"2025-02-28T13:50:22","date_gmt":"2025-02-28T12:50:22","guid":{"rendered":"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/?p=58690"},"modified":"2025-02-28T13:50:25","modified_gmt":"2025-02-28T12:50:25","slug":"la-doctrina-miran-el-plan-de-trump-para-disrumpir-la-globalizacion","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/2025\/02\/28\/la-doctrina-miran-el-plan-de-trump-para-disrumpir-la-globalizacion\/","title":{"rendered":"La doctrina Miran: el plan de Trump para disrumpir la globalizaci\u00f3n"},"content":{"rendered":"\n

Por muy importante que fuera Brian Deese<\/a> bajo Joe Biden, Stephen Miran fue designado por Donald Trump para dirigir un Consejo de Asesores Econ\u00f3micos, un grupo de economistas encargados de asesorar al presidente de los Estados Unidos en materia de pol\u00edtica econ\u00f3mica.<\/p>\n\n\n\n

Doctorado en Econom\u00eda por Harvard, ha desarrollado la mayor parte de su carrera en el sector financiero como analista econ\u00f3mico. Tras un breve paso por el Departamento del Tesoro durante los \u00faltimos meses del primer mandato de Donald Trump, fue estratega senior del gestor de activos Hudson Bay Capital Management LP.<\/p>\n\n\n\n

En este puesto, tras la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales, redact\u00f3 un extenso programa, que traducimos aqu\u00ed, sobre la reestructuraci\u00f3n del sistema comercial mundial. En la forma, Miran se presenta como un analista que intenta anticipar las futuras acciones de la administraci\u00f3n de Trump para informar a sus clientes. Sin embargo, es mucho m\u00e1s que un simple asesor: es una de las personas destinadas a desempe\u00f1ar el papel de cerebro de la pol\u00edtica econ\u00f3mica de la administraci\u00f3n de Trump.<\/p>\n\n\n\n

La conclusi\u00f3n que establece sobre la econom\u00eda mundial no es muy novedosa. Se basa en algunas afirmaciones importantes.<\/p>\n\n\n\n

Estados Unidos se beneficia tanto como sufre de la posici\u00f3n del d\u00f3lar, la moneda de reserva mundial.<\/p>\n\n\n\n

Dado que el tipo de cambio del d\u00f3lar es bastante independiente de la situaci\u00f3n de su cuenta corriente, debido a una demanda casi infinita del d\u00f3lar como medio de pago e instrumento de reserva, no se benefician de los mecanismos normales de depreciaci\u00f3n en caso de d\u00e9ficit que llevar\u00edan su cuenta corriente hacia el equilibrio.<\/p>\n\n\n\n

La desindustrializaci\u00f3n y el aumento de la deuda externa son las consecuencias. Michael Pettis y Matthew C. Klein, y muchos otros antes que ellos, ya han planteado en\u00e9rgicamente este argumento en su libro Trade Wars are Class Wars,<\/em> y en estas p\u00e1ginas.<\/p>\n\n\n\n

Stephen Miran destaca el impacto de la desindustrializaci\u00f3n en la seguridad nacional, m\u00e1s all\u00e1 del impacto econ\u00f3mico de esta situaci\u00f3n, como una marca de la transformaci\u00f3n del capitalismo pol\u00edtico estadounidense, en la medida en que reduce los recursos financieros disponibles para Estados Unidos, sobre todo porque sostiene que la capacidad f\u00edsica para producir bienes es clave en la potencia militar. Por lo tanto, la producci\u00f3n industrial ser\u00eda superior a la actividad de los servicios en la potencia de un Estado.<\/p>\n\n\n\n

Pero la verdadera originalidad de Stephen Miran radica en su plan para desestabilizar y \u00abponer en orden\u00bb la econom\u00eda mundial: aumentar los aranceles para negociar un nuevo acuerdo del Plaza y devaluar el d\u00f3lar.<\/p>\n\n\n\n

La articulaci\u00f3n propuesta entre los aranceles y la realineaci\u00f3n de las divisas no es f\u00e1cil de entender.<\/p>\n\n\n\n

Para Miran, que considera que el objetivo de la administraci\u00f3n de Trump es el renacimiento industrial de Estados Unidos, los aranceles tienen una gran ventaja: no son inflacionistas. Seg\u00fan \u00e9l, se traducen en una depreciaci\u00f3n de la moneda del pa\u00eds afectado… Esto tambi\u00e9n significar\u00eda que, a la larga, no tienen ning\u00fan impacto en la competitividad de la industria estadounidense. Su utilidad est\u00e1 en otra parte. Como recordaba en estas p\u00e1ginas Federico Fubini<\/a>: podr\u00edan servir de moneda de cambio<\/em> para conseguir socios de Estados Unidos, a cambio de una supresi\u00f3n de los aranceles, una apreciaci\u00f3n de sus monedas.<\/p>\n\n\n\n

De tal razonamiento surgen varias contradicciones: si sus monedas se apreciaran tras haberse devaluado a ra\u00edz de los aranceles, \u00bfno volver\u00edamos al punto de partida? Si la depreciaci\u00f3n de las monedas extranjeras debe salvaguardar el poder adquisitivo de los estadounidenses en el escenario de los aranceles, \u00bfno corre el riesgo la devaluaci\u00f3n del d\u00f3lar de empobrecerlos?<\/p>\n\n\n\n

En el mundo de Stephen Miran, parece que es posible tener ambas cosas, \u00abhave your cake and eat it too<\/em>\u00bb, como dir\u00edan los estadounidenses, presionando a los socios de Estados Unidos.<\/p>\n\n\n\n

As\u00ed, la combinaci\u00f3n de aranceles y devaluaci\u00f3n deber\u00eda permitir cobrar aranceles a las empresas y hogares extranjeros, mientras que los an\u00e1lisis econom\u00e9tricos convergen en considerar que los aranceles son pagados por los consumidores y las empresas del pa\u00eds que los impone. Por \u00faltimo, la creaci\u00f3n de bonos del Tesoro a cien a\u00f1os deber\u00eda permitir que parte de la deuda p\u00fablica estadounidense recaiga sobre los bancos centrales extranjeros.<\/p>\n\n\n\n

La l\u00f3gica imperial del tributo que debe pagarse para beneficiarse de la Pax Americana<\/em> es transparente.<\/p>\n\n\n\n

Sin una discusi\u00f3n seria sobre los reequilibrios internos necesarios en Estados Unidos para restablecer el equilibrio de la balanza por cuenta corriente \u2014aumento del ahorro, reducci\u00f3n del d\u00e9ficit p\u00fablico\u2014 y, lo que es a\u00fan m\u00e1s ambicioso, para revertir la desindustrializaci\u00f3n (reasignaci\u00f3n sectorial del capital y los trabajadores, en una situaci\u00f3n de casi pleno empleo y cuando la administraci\u00f3n de Trump quiere llevar a cabo una pol\u00edtica de inmigraci\u00f3n muy restrictiva…), nos preguntamos si no estamos ante una nueva edici\u00f3n de lo que George W. H. Bush llam\u00f3 la \u201ceconom\u00eda vud\u00fa\u201d.<\/p>\n\n\n\n

Sea como fuere, la doctrina Miran establece un rumbo extremadamente claro que ser\u00e1 el objetivo de los pr\u00f3ximos meses de la presidencia de Trump. Su f\u00f3rmula es expl\u00edcita, simple y directa: transformar los acuerdos del Plaza en \u00abacuerdos de Mar-a-Lago\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

Cap\u00edtulo 1: Introducci\u00f3n<\/h2>\n\n\n\n

La opini\u00f3n de los estadounidenses sobre los sistemas comerciales y financieros internacionales ha empeorado considerablemente en la \u00faltima d\u00e9cada. Entre los votantes, e incluso entre los economistas, el consenso sobre el que se basa el sistema comercial internacional se ha deshilachado y los dos principales partidos han adoptado pol\u00edticas destinadas a reforzar la posici\u00f3n de Estados Unidos en este sistema.<\/p>\n\n\n\n

Dado que el presidente Trump ha sido reelegido con un fuerte mandato democr\u00e1tico, es razonable esperar que su administraci\u00f3n emprenda una importante reforma de los sistemas comerciales y financieros internacionales. Este ensayo revisa algunas de las herramientas disponibles para lograrlo. Contrario a gran parte del discurso de Wall Street y de los acad\u00e9micos, existen poderosas herramientas que pueden ser utilizadas por una administraci\u00f3n para influir en los t\u00e9rminos de intercambio, el valor de las divisas y la estructura de las relaciones econ\u00f3micas internacionales.<\/p>\n\n\n\n

Durante su campa\u00f1a, el presidente Trump propuso aumentar los aranceles al 60 % para China y al 10 % o m\u00e1s para el resto del mundo, y vincul\u00f3 expl\u00edcitamente la seguridad nacional y el comercio internacional. Muchos sostienen que los aranceles son altamente inflacionarios y pueden provocar una gran volatilidad en la econom\u00eda y los mercados, pero no tiene por qu\u00e9 ser as\u00ed. De hecho, los aranceles de 2018-2019, un aumento significativo de las tasas efectivas, se adoptaron sin que se percibieran las consecuencias macroecon\u00f3micas. El d\u00f3lar se ha apreciado casi en la misma medida que las tasas de los aranceles, anulando gran parte del impacto macroecon\u00f3mico y generando importantes ingresos. Dado que la capacidad adquisitiva de los consumidores chinos ha disminuido con la depreciaci\u00f3n de su moneda, China ha pagado de hecho por los ingresos aduaneros. (…)<\/p>\n\n\n\n

El presidente Trump tambi\u00e9n ha mencionado la adopci\u00f3n de cambios sustanciales en la pol\u00edtica del d\u00f3lar. Los aranceles aplastantes y el abandono de la pol\u00edtica del d\u00f3lar fuerte podr\u00edan tener las consecuencias m\u00e1s amplias de todas las pol\u00edticas emprendidas en d\u00e9cadas, remodelando fundamentalmente los sistemas comerciales y financieros mundiales.<\/p>\n\n\n\n

Existe una v\u00eda por la que estas pol\u00edticas pueden aplicarse sin consecuencias negativas materiales, pero es estrecha y requerir\u00e1 que el movimiento de divisas compense los aranceles, as\u00ed como, o bien un gradualismo en la aplicaci\u00f3n, o bien una coordinaci\u00f3n con los aliados o la Reserva Federal sobre el d\u00f3lar. El potencial de volatilidad econ\u00f3mica y de mercado es importante, pero la administraci\u00f3n puede tomar medidas para minimizarlo.<\/p>\n\n\n\n

Desde el punto de vista comercial, el d\u00f3lar est\u00e1 constantemente sobrevalorado, en gran parte porque los activos en d\u00f3lares funcionan como la moneda de reserva mundial. Esta sobrevaloraci\u00f3n ha afectado gravemente al sector manufacturero estadounidense, al tiempo que ha beneficiado a los sectores financieros de la econom\u00eda de una manera que beneficia a los estadounidenses ricos. Y, sin embargo, el presidente Trump ha elogiado el estatus de reserva del d\u00f3lar y ha amenazado con castigar a los pa\u00edses que dejen de utilizarlo con ese fin.<\/p>\n\n\n\n

Sin duda, aqu\u00ed, en el deseo de reactivar el sector manufacturero estadounidense manteniendo al mismo tiempo la preeminencia del d\u00f3lar, es donde se esconde la principal contradicci\u00f3n interna del texto de Stephen Miran.<\/p>\n\n\n\n

Al negarse a arbitrar entre los intereses de los \u00abestadounidenses ricos\u00bb y del sector financiero y los de los capitanes y trabajadores de la industria, solo le queda la opci\u00f3n de hacer recaer el peso del ajuste en el mundo exterior. Esto requiere el uso de la coerci\u00f3n, ya que Miran no tiene nada que ofrecer que sea beneficioso para sus socios.<\/p>\n\n\n\n

En otras palabras: la resoluci\u00f3n de las contradicciones internas del capitalismo estadounidense solo puede lograrse mediante la alteraci\u00f3n del orden comercial internacional.<\/p>\n\n\n\n

Espero que estas tensiones se resuelvan mediante una serie de pol\u00edticas dise\u00f1adas para aumentar el reparto de cargas entre los socios comerciales y de seguridad: en lugar de intentar poner fin al uso del d\u00f3lar como moneda de reserva mundial, la administraci\u00f3n de Trump puede intentar encontrar formas de recuperar parte de los beneficios que otras naciones reciben de nuestras reservas. La reasignaci\u00f3n de la demanda global de otros pa\u00edses hacia Estados Unidos, un aumento de los ingresos del Tesoro estadounidense o una combinaci\u00f3n de ambos elementos pueden ayudar a Estados Unidos a soportar el costo creciente de proporcionar activos de reserva para una econom\u00eda mundial en crecimiento. Es probable que la administraci\u00f3n de Trump entrelace cada vez m\u00e1s la pol\u00edtica comercial con la pol\u00edtica de seguridad, considerando que el suministro de activos de reserva y un paraguas de seguridad est\u00e1n relacionados y se dirigen hacia una distribuci\u00f3n de cargas en estos dos \u00e1mbitos.<\/p>\n\n\n\n

El resto de este ensayo est\u00e1 estructurado de la siguiente manera: primero reviso las causas econ\u00f3micas subyacentes de nuestros desequilibrios econ\u00f3micos. Luego, exploro los enfoques basados en aranceles para remediar estas fallas. En tercer lugar, reviso los enfoques basados en la moneda, tanto multilaterales como unilaterales. Por \u00faltimo, discuto las consecuencias para el mercado.<\/p>\n\n\n\n

Este ensayo no es un alegato pol\u00edtico. Intento diagnosticar el desequilibrio econ\u00f3mico en los t\u00e9rminos de intercambio que subyace a la cr\u00edtica de los nacionalistas al sistema actual, describir un cat\u00e1logo de herramientas que pueden utilizarse para remediarlo y analizar las ventajas o desventajas relativas de estas herramientas y sus posibles consecuencias.<\/p>\n\n\n\n

Mi an\u00e1lisis refleja \u00fanicamente mis propias opiniones, y no las de nadie del equipo del presidente Trump o de Hudson Bay Capital.<\/p>\n\n\n\n

El objetivo del an\u00e1lisis es comprender la gama de pol\u00edticas posibles que podr\u00edan implementarse, para que nuestro equipo y nuestros clientes puedan evaluar las consecuencias que podr\u00edan resultar en la econom\u00eda y los mercados financieros.<\/p>\n\n\n\n

Cap\u00edtulo 2: Fundamentos te\u00f3ricos<\/h2>\n\n\n\n

Las ra\u00edces del descontento econ\u00f3mico se encuentran en el d\u00f3lar<\/h3>\n\n\n\n

El mundo de Triffin<\/h4>\n\n\n\n

El profundo descontento con el orden econ\u00f3mico actual tiene sus ra\u00edces en la persistente sobrevaloraci\u00f3n del d\u00f3lar y en las condiciones comerciales asim\u00e9tricas. Esta sobrevaloraci\u00f3n hace que las exportaciones estadounidenses sean menos competitivas, que las importaciones estadounidenses sean m\u00e1s baratas y que la industria manufacturera estadounidense se vea perjudicada. El empleo en el sector manufacturero disminuye a medida que cierran las f\u00e1bricas. Las econom\u00edas locales se hunden, muchas familias trabajadoras ya no pueden mantenerse y se vuelven dependientes de las ayudas gubernamentales o de los opioides, o se mudan a lugares m\u00e1s pr\u00f3speros. Las infraestructuras se deterioran a medida que los gobiernos dejan de mantenerlas, y las viviendas y las f\u00e1bricas quedan abandonadas. Las comunidades se \u00abdeterioran\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

Seg\u00fan Autor, Dorn y Hanson (2016), <\/span>1<\/sup><\/a><\/span><\/span> entre 600 mil y un mill\u00f3n de empleos manufactureros estadounidenses desaparecieron entre 2000 y 2011 debido al \u00abchoque chino\u00bb provocado por el aumento del comercio con China. Si se incluyen categor\u00edas m\u00e1s amplias, los empleos eliminados por el comercio durante esta d\u00e9cada se acercaron a los 2 millones. Incluso 2 millones de p\u00e9rdidas de empleo en una d\u00e9cada representan solo 200 mil al a\u00f1o, una fracci\u00f3n de la rotaci\u00f3n de empleos que ocurre cada a\u00f1o debido a la tecnolog\u00eda, el auge y la ca\u00edda de empresas y sectores, y el ciclo econ\u00f3mico.<\/p>\n\n\n\n

Pero esta l\u00f3gica era err\u00f3nea en dos sentidos: en primer lugar, las estimaciones de p\u00e9rdidas de empleo debidas al comercio han aumentado con el tiempo a medida que han surgido nuevas investigaciones, por ejemplo, Autor, Dorn y Hanson (2021); el \u00abshock chino\u00bb ha sido mucho mayor de lo que se esperaba inicialmente. De hecho, tambi\u00e9n se han perdido muchos empleos no manufactureros que depend\u00edan de las econom\u00edas manufactureras locales. En segundo lugar, muchas p\u00e9rdidas de empleo se concentraron en estados y ciudades espec\u00edficos donde no hab\u00eda alternativas de empleo f\u00e1cilmente disponibles. Para estas comunidades, las p\u00e9rdidas fueron graves.<\/p>\n\n\n\n

El problema se agrava con la inversi\u00f3n del \u00abfin de la historia\u00bb y el resurgimiento de las amenazas a la seguridad nacional. En ausencia de rivales geopol\u00edticos importantes, los l\u00edderes estadounidenses pensaron que pod\u00edan minimizar la importancia del declive de las instalaciones industriales. Pero como China y Rusia son amenazas no solo comerciales, sino tambi\u00e9n de seguridad, vuelve a ser necesario contar con un sector manufacturero robusto y bien diversificado. Si no se dispone de cadenas de suministro para producir armas y sistemas de defensa, no se tiene seguridad nacional. Como declar\u00f3 el presidente Trump, \u00absi no tienes acero, no tienes pa\u00eds\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

En varias ocasiones a lo largo de su extenso art\u00edculo, Stephen Miren identifica a Rusia como un adversario… Cuatro meses despu\u00e9s, Trump parece estar perfectamente alineado con Putin<\/a>. Sin embargo, cabe se\u00f1alar que uno de los \u00faltimos memorandos ejecutivos del 21 de febrero sobre inversiones segu\u00eda designando a la Federaci\u00f3n de Rusia como \u00abadversario extranjero\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

Mientras que muchos economistas omiten incluir estas externalidades en su an\u00e1lisis y, por lo tanto, se contentan con contar con socios comerciales y aliados para estas cadenas de suministro, el bando de Trump no comparte esta confianza. Muchos aliados y socios de Estados Unidos tienen flujos comerciales y de inversi\u00f3n mucho mayores con China que con Estados Unidos; \u00bfestamos tan seguros de poder confiar en ellos si ocurre lo peor?<\/p>\n\n\n\n

M\u00e1s all\u00e1 de la visi\u00f3n mercantilista del mundo que revela esta observaci\u00f3n, es evidente que la estrategia de Trump puede agravar esta situaci\u00f3n y socavar las bases de la potencia estadounidense. Porque la imposici\u00f3n de aranceles, el cuestionamiento de las garant\u00edas de seguridad y la adopci\u00f3n de una pol\u00edtica coercitiva en materia de divisas podr\u00edan reducir a\u00fan m\u00e1s los flujos comerciales y de inversi\u00f3n entre Estados Unidos y sus aliados y socios.<\/p>\n\n\n\n

(…) En este contexto, la persistente sobrevaloraci\u00f3n del d\u00f3lar es el mecanismo clave de los desequilibrios comerciales, que mantiene las importaciones del extranjero obstinadamente baratas a pesar de la ampliaci\u00f3n de los d\u00e9ficits comerciales. Entonces, \u00bfc\u00f3mo es posible que los mercados de divisas, que son los mayores mercados del mundo en t\u00e9rminos de volumen de intercambio, no se equilibren? (…)<\/p>\n\n\n\n

Dado que Estados Unidos proporciona activos de reserva al mundo, existe una demanda de d\u00f3lares estadounidenses (USD) y de bonos del Tesoro de Estados Unidos (UST) que no se basa en el equilibrio comercial ni en la optimizaci\u00f3n de la rentabilidad ajustada al riesgo. Estas funciones de reserva sirven para facilitar el comercio internacional y proporcionan un veh\u00edculo para amplias reservas de ahorro, a menudo mantenidas por razones pol\u00edticas (por ejemplo, gesti\u00f3n de reservas o fondos soberanos) en lugar de para maximizar la rentabilidad.<\/p>\n\n\n\n

Gran parte (pero no la totalidad) de la demanda de reservas en d\u00f3lares y bonos del Tesoro de Estados Unidos es inel\u00e1stica en relaci\u00f3n con los fundamentos econ\u00f3micos o de inversi\u00f3n. Los bonos del Tesoro comprados para garantizar el comercio entre Micronesia y Polinesia se compran independientemente de la balanza comercial estadounidense con uno u otro, del \u00faltimo informe de empleo o del rendimiento relativo de los bonos del Tesoro frente a los bonos alemanes.<\/p>\n\n\n\n

Tales fen\u00f3menos reflejan lo que puede describirse como un \u00abmundo de Triffin\u00bb, llamado as\u00ed por el economista belga Robert Triffin.<\/p>\n\n\n\n

En el mundo de Triffin, los activos de reserva son una forma de masa monetaria mundial, y la demanda de los mismos es una funci\u00f3n del comercio y el ahorro mundiales, y no de la balanza comercial interna o de las caracter\u00edsticas de rendimiento del pa\u00eds de reserva.<\/p>\n\n\n\n

Cuando el pa\u00eds de reserva es grande en comparaci\u00f3n con el resto del mundo, no se le imponen externalidades significativas debido a su condici\u00f3n de reserva. La distancia entre el equilibrio de Triffin y el equilibrio comercial es peque\u00f1a. Sin embargo, cuando el pa\u00eds de reserva es m\u00e1s peque\u00f1o en comparaci\u00f3n con el resto del mundo, por ejemplo, porque el crecimiento mundial supera el crecimiento del pa\u00eds de reserva durante un largo per\u00edodo de tiempo, las tensiones se acumulan y la brecha entre el equilibrio de Triffin y el equilibrio comercial puede ser bastante importante. La demanda de activos de reserva conduce a una importante sobrevaloraci\u00f3n de la moneda, con consecuencias econ\u00f3micas reales.<\/p>\n\n\n\n

En el mundo de Triffin, el productor de activos de reserva debe registrar d\u00e9ficits por cuenta corriente persistentes a cambio de la exportaci\u00f3n de activos de reserva. Los bonos del Tesoro de Estados Unidos (UST) se convierten en productos exportados que alimentan el sistema comercial mundial. Al exportar UST, Estados Unidos recibe divisas extranjeras, que luego se gastan, generalmente en bienes importados. Estados Unidos registra importantes d\u00e9ficits por cuenta corriente no porque importe demasiado, sino porque debe exportar bonos del Tesoro para proporcionar activos de reserva y facilitar el crecimiento mundial. (…)<\/p>\n\n\n\n

Mientras que la participaci\u00f3n de Estados Unidos en el PIB mundial ha disminuido, el d\u00e9ficit por cuenta corriente o presupuestario que debe soportar para financiar el comercio mundial y las reservas de ahorro aumenta en proporci\u00f3n a la econom\u00eda nacional. Por lo tanto, a medida que el resto del mundo se desarrolla, las consecuencias para nuestros propios sectores de exportaci\u00f3n (un d\u00f3lar sobrevalorado que fomenta las importaciones) se vuelven m\u00e1s dif\u00edciles de soportar y el da\u00f1o infligido a esta parte de la econom\u00eda aumenta.<\/p>\n\n\n\n

M\u00e1s tarde (en teor\u00eda), se alcanza un \u00abpunto de inflexi\u00f3n\u00bb de Triffin a partir del cual estos d\u00e9ficits se vuelven lo suficientemente grandes como para inducir un riesgo de cr\u00e9dito en el activo de reserva. El pa\u00eds de reserva puede perder su estatus de reserva, lo que abre el camino a una ola de inestabilidad mundial, y esto es lo que se conoce como el \u00abdilema de Triffin\u00bb. De hecho, la paradoja de ser una moneda de reserva es que conduce a d\u00e9ficits gemelos permanentes, que a su vez conducen con el tiempo a una acumulaci\u00f3n insostenible de deuda p\u00fablica y externa que acaba socavando la seguridad y el estatus de moneda de reserva de una econom\u00eda tan deudora.<\/p>\n\n\n\n

Si bien la participaci\u00f3n de Estados Unidos en el PIB mundial se ha reducido a la mitad, pasando del 40 % en la d\u00e9cada de 1960 al 21 % en 2012, y se ha recuperado ligeramente hasta alcanzar su nivel actual del 26 %, todav\u00eda est\u00e1 lejos de un punto de inflexi\u00f3n de este tipo, en parte porque no existen alternativas significativas al d\u00f3lar o al d\u00f3lar estadounidense.<\/p>\n\n\n\n

El aumento del peso de Estados Unidos en el PIB mundial ha sido posible gracias a la apreciaci\u00f3n del d\u00f3lar durante este periodo, ya que el crecimiento estadounidense se ha mantenido por debajo del crecimiento mundial. Sin embargo, la depreciaci\u00f3n de la moneda deseada por Stephen Miran tendr\u00eda precisamente el efecto contrario: m\u00e1s all\u00e1 del impacto en las estad\u00edsticas, tendr\u00eda consecuencias reales, especialmente en la capacidad de compra \u2014y el efecto de atracci\u00f3n de los salarios en d\u00f3lares sobre los talentos internacionales\u2014 o en la adquisici\u00f3n de activos estadounidenses por parte de residentes extranjeros.<\/p>\n\n\n\n

Recordemos que los Acuerdos del Plaza fueron seguidos del p\u00e1nico estadounidense frente a una oleada de compras de empresas o bienes inmuebles que se volvieron muy atractivos para los inversores japoneses o europeos cuyas monedas se hab\u00edan apreciado.<\/p>\n\n\n\n

Una moneda de reserva debe ser convertible en otras monedas y un activo de reserva debe ser una reserva de valor estable regida por un Estado de derecho fiable. Mientras que otros pa\u00edses como China aspiran al estatus de reserva, no cumplen ninguno de estos criterios. Y si Europa puede, sus mercados de bonos est\u00e1n fragmentados en comparaci\u00f3n con el mercado del d\u00f3lar estadounidense y su participaci\u00f3n en el PIB mundial ha disminuido a\u00fan m\u00e1s que la de Estados Unidos.<\/p>\n\n\n\n

Cabe se\u00f1alar que la participaci\u00f3n de Estados Unidos en el PIB mundial alcanz\u00f3 un m\u00ednimo en torno a la crisis financiera mundial y se ha estabilizado o mejorado desde entonces, en consonancia con la evoluci\u00f3n del empleo en el sector manufacturero. En este contexto, nuestra participaci\u00f3n en el PIB mundial determina el alcance de la distorsi\u00f3n de Triffin en el equilibrio comercial, que a su vez determina el estado del sector de bienes comerciables.<\/p>\n\n\n\n

Estas evoluciones monetarias se han producido en el contexto de un sistema de aranceles, que est\u00e1 atrapado en una configuraci\u00f3n dise\u00f1ada para una \u00e9poca econ\u00f3mica diferente.<\/p>\n\n\n\n

Stephen Miran habla aqu\u00ed del PIB en d\u00f3lares corrientes. Por el contrario, la participaci\u00f3n de Estados Unidos en el PIB mundial en paridad de poder adquisitivo ha seguido disminuyendo. Parece que este es el indicador que deber\u00eda figurar en el an\u00e1lisis de Stephen Miran. De hecho, si nos basamos en la participaci\u00f3n en el PIB mundial en paridad de poder adquisitivo, la depreciaci\u00f3n del d\u00f3lar refuerza la distorsi\u00f3n de Triffin, ya que reduce la participaci\u00f3n de Estados Unidos (la depreciaci\u00f3n del d\u00f3lar aumenta el PIB de otros pa\u00edses expresado en d\u00f3lares), lo que parece incoherente con su argumento a favor de la depreciaci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

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