\u00bfUna era de guerras? Primera parte<\/h2>\n\n\n\n\nY la sangre negra, terrenal<\/p>\n\n\n\n
se hincha en nuestras venas<\/p>\n\n\n\n
destruyendo todas las fronteras,<\/p>\n\n\n\n
Cambios sin precedentes,<\/p>\n\n\n\n
Rebeliones inauditas….<\/p>\n\n\n\n
\u0410lexandre Blok, Venganza<\/em>, 1911.<\/p>\n<\/blockquote>\n\n\n\nComienzo este art\u00edculo con los versos de mi poeta ruso favorito, Alexander Blok, comparable al mayor genio ruso, Fiodor Dostoievski, en su don de clarividencia. Hace mucho tiempo, se\u00f1al\u00e9 que el mundo se dirig\u00eda inexorablemente hacia una oleada de conflictos militares, que amenazaba con convertirse en una tercera guerra termonuclear mundial, con una alta probabilidad de aniquilaci\u00f3n de la civilizaci\u00f3n humana.<\/p>\n\n\n\n
Esta predicci\u00f3n es una de las principales razones por las que he publicado una serie de art\u00edculos sobre la necesidad de restaurar la credibilidad de la disuasi\u00f3n nuclear que ha salvado al mundo durante m\u00e1s de medio siglo.<\/p>\n\n\n\n\t\n\t\t\n\t\t\t\n\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\tRetrato de un mundo roto\t\t\t\t\t<\/a>\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\t\tBajo la direcci\u00f3n de Giuliano da Empoli.<\/p>\n
Con contribuciones de Josep Borrell, Lea Ypi, Niall Ferguson, Timothy Garton Ash, Anu Bradford, Jean-Yves Dormagen, Aude Darnal, Branko Milanovi\u0107, Julia Cag\u00e9, Vladislav Surkov o Isabella Weber.<\/p>\n\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t
\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\u2192<\/span> Pedir el volumen<\/a>\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\u2192<\/span> Descubra nuestras ofertas<\/a>\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\t\tRetrato de un mundo roto<\/em>, el nuevo volumen en papel del Grand Continent publicado por Arpa. Est\u00e1 disponible para su compra<\/a> e incluido en nuestra oferta de lanzamiento<\/a>.<\/p>\n\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t![](\"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/wp-content\/uploads\/sites\/6\/2024\/09\/mediamodifier_image-128-990x660.png\")
\n\t\t\t\t\t\t\t\t<\/a>\n\t\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\n\t\t\t<\/div>\n\t\t<\/div>\n\t<\/div>\n<\/section>\n\n\n\nUna multitud de factores estructurales apuntan a una probabilidad extremadamente alta de un aumento cualitativo del nivel de conflicto militar que est\u00e1 llevando al mundo al borde de la cat\u00e1strofe final, y que tambi\u00e9n puede traer una desgracia incalculable a la humanidad y a nuestro pa\u00eds. No quer\u00eda asustar a la gente que ya estaba ansiosa y no estaba preparada para aceptar la nueva realidad. Sobre todo despu\u00e9s de ver la histeria provocada por mi anterior serie de art\u00edculos relativamente poco abrasivos. Pero ya no es posible mantenerlo en secreto, y los colegas m\u00e1s clarividentes han empezado a escribir cada vez con m\u00e1s decisi\u00f3n sobre la probabilidad de deslizarnos hacia una gran guerra, ofreciendo recetas para prevenirla y prepararse en caso de que estalle. El primero y m\u00e1s importante, por supuesto, es el art\u00edculo \u00abLa Gran Guerra: del pasado al futuro\u00bb, de Vasili Kachin y Andrei Suchentsov, elaborado a partir del informe del Club Valdai y publicado a finales de 2023 en la revista Russia in Global Affairs<\/em>.<\/span>1<\/sup><\/a><\/span> Otro experto en relaciones internacionales, Fyodor Lukyanov,<\/span>2<\/sup><\/a><\/span> ha empezado a perseguir la misma idea a su manera, m\u00e1s suave.<\/p>\n\n\n\nDesde hace varios meses, el debate sobre el uso de armas nucleares se ha reavivado en Rusia. Desde la invasi\u00f3n militar de Ucrania en febrero de 2022, Vladimir Putin se ha referido regularmente en sus discursos a la falta de mecanismos de disuasi\u00f3n nuclear \u00aba la antigua\u00bb, y los c\u00edrculos rusos de expertos en estrategia han empezado a publicar ampliamente sobre el tema.<\/p>\n\n\n\n
Por otra parte, el \u00abEstado profundo\u00bb estadounidense est\u00e1 advirtiendo de la alta probabilidad de una tercera guerra mundial y est\u00e1 estudiando la forma en que Estados Unidos puede evitar la derrota si tiene que luchar en dos o tres frentes (Europa, el Pac\u00edfico y Medio Oriente)<\/a>.<\/span>3<\/sup><\/a><\/span><\/p>\n\n\n\nHe decidido participar en el debate. Espero, por supuesto, que la pregunta planteada en el t\u00edtulo de este art\u00edculo tenga una respuesta negativa. Pero para que eso ocurra, tenemos que entender las razones del creciente conflicto e idear una pol\u00edtica mucho m\u00e1s activa para salvar el mundo. Estoy convencido de que necesitamos ajustar seriamente todas nuestras pol\u00edticas \u2014interna, militar y exterior\u2014 para ofrecernos a nosotros mismos y al mundo un nuevo paradigma de desarrollo.<\/p>\n\n\n\n\n
\n \n \n \n \n \n \n ![\"Soldados](\"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/wp-content\/uploads\/sites\/2\/2024\/10\/Czech_Legion_soldiers_in_gas_masks.jpg\")
\n <\/picture>\n Soldados de la Legi\u00f3n Checoslovaca con m\u00e1scaras antig\u00e1s Zelinsky-Kummant, 1916-1917.<\/figcaption> <\/figure>\n <\/a>\n \n <\/div>\n \n \n \n \n ![\"Soldados](\"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/wp-content\/uploads\/sites\/2\/2024\/10\/Soldaty_267_Duhovshinskogo_polka.jpg\")
\n <\/picture>\n Soldados del 267\u00ba Regimiento de Infanter\u00eda Dujovshchinsky con m\u00e1scaras antig\u00e1s Zelinsky-Kummant, 1916.<\/figcaption> <\/figure>\n <\/a>\n <\/div>\n <\/div>\n \n \n \n \n Soldados de la Legi\u00f3n Checoslovaca con m\u00e1scaras antig\u00e1s Zelinsky-Kummant, 1916-1917.<\/figcaption> <\/figure>\n \n <\/div>\n \n \n Soldados del 267\u00ba Regimiento de Infanter\u00eda Dujovshchinsky con m\u00e1scaras antig\u00e1s Zelinsky-Kummant, 1916.<\/figcaption> <\/figure>\n <\/div>\n <\/div>\n<\/div>\n\n\n\nEn este primer art\u00edculo, intentar\u00e9 presentar mi visi\u00f3n de los retos. En el segundo, propondr\u00e9 soluciones activas y preventivas para afrontarlos. No creo que la simple enumeraci\u00f3n de los retos vaya a revelar nada nuevo. Sin embargo, tomados en su conjunto, dibujan un panorama m\u00e1s que alarmante que requiere una acci\u00f3n decisiva.<\/p>\n\n\n\n
El principal desaf\u00edo es el agotamiento del tipo moderno de gesti\u00f3n econ\u00f3mica, el capitalismo, que se basa principalmente en la obtenci\u00f3n de beneficios y que, para ello, fomenta por todos los medios posibles el consumo desenfrenado de bienes y servicios cada vez m\u00e1s in\u00fatiles para la vida humana normal. La sobreabundancia de informaci\u00f3n sin sentido de las dos o tres \u00faltimas d\u00e9cadas tambi\u00e9n entra en esta categor\u00eda. Los aparatos devoran una cantidad monstruosa de energ\u00eda y tiempo que la gente podr\u00eda dedicar a actividades productivas. La humanidad ha entrado en conflicto con la naturaleza y ha empezado a erosionarla, a pesar de que es la base misma de su existencia. Incluso en nuestro pa\u00eds, por el momento, el crecimiento de la prosperidad implica sobre todo el crecimiento del consumo.<\/p>\n\n\n\n
Es interesante observar que Karaganov comienza sus observaciones mencionando el consumo excesivo y el desarrollo del capitalismo globalizado, se\u00f1al de que las lecturas sovi\u00e9ticas del mundo contempor\u00e1neo, inspiradas en las interpretaciones marxistas, se han reactivado en Rusia.<\/p>\n\n\n\n
El segundo desaf\u00edo es el m\u00e1s evidente. Los problemas del mundo \u2014contaminaci\u00f3n ambiental, cambio clim\u00e1tico, disminuci\u00f3n de las reservas de agua dulce, tierras cultivables y muchos otros recursos naturales\u2014 siguen sin resolverse. Se proponen soluciones denominadas \u00abverdes\u00bb, que la mayor\u00eda de las veces tienen por objeto consolidar la dominaci\u00f3n de los privilegiados y los ricos, tanto dentro de sus propias sociedades como a escala internacional. Pensemos, por ejemplo, en los constantes intentos de hacer recaer la carga de la lucha contra la contaminaci\u00f3n y las emisiones de CO2 en los productores, la mayor\u00eda de los cuales se encuentran fuera del viejo Occidente, y no en los consumidores dentro de \u00e9l, donde el consumo excesivo se est\u00e1 volviendo grotesco. Entre el 20% y el 30% de la poblaci\u00f3n, concentrada principalmente en Norteam\u00e9rica, Europa y Jap\u00f3n, consume entre el 70% y el 80% de los recursos de la biosfera,<\/span>4<\/sup><\/a><\/span> y la brecha es cada vez mayor.<\/p>\n\n\n\nTambi\u00e9n en este caso resulta fascinante ver que las cuestiones medioambientales se plantean tan pronto en el texto, en una tradici\u00f3n probablemente inspirada en Alexandre Panarine (1940-2003), uno de los grandes pensadores geopol\u00edticos rusos de los a\u00f1os noventa, que incorpor\u00f3 a sus textos una forma de escatolog\u00eda ecol\u00f3gica que denunciaba la identidad y los valores del mundo occidental.<\/p>\n\n\n\n
Sin embargo, la enfermedad del consumismo se est\u00e1 extendiendo al resto del mundo. Nosotros mismos seguimos padeciendo el consumo conspicuo, tan de moda en los a\u00f1os noventa y que ahora, lentamente, empieza a disminuir. Esto est\u00e1 provocando una creciente competencia por los recursos y un aumento de las tensiones internas, sobre todo las causadas por la desigualdad en el consumo, en muchos pa\u00edses y regiones.<\/p>\n\n\n\n
La conciencia del estancamiento del actual modelo de desarrollo, pero tambi\u00e9n la reticencia e incapacidad para abandonarlo, es una de las principales razones del crecimiento desenfrenado de la hostilidad hacia Rusia y, en menor medida, China (el costo de romper relaciones con esta \u00faltima es mucho mayor).<\/p>\n\n\n\n
Se necesita un enemigo para distraer la atenci\u00f3n de los desaf\u00edos insolubles.<\/p>\n\n\n\n
Desde mediados de la d\u00e9cada de 2010, las sanciones se explican por la necesidad de obstaculizar el engranaje de la Uni\u00f3n Europea. Hoy son uno de los principales fundamentos de Occidente.<\/p>\n\n\n\n
Hoy, Europa tambi\u00e9n habla cada vez m\u00e1s de la necesidad, incluso de la oportunidad, de prepararse para una guerra mundial. En la efervescencia del olvido hist\u00f3rico y del frenes\u00ed intelectual, olvidamos que, si estalla, a la Europa de la OTAN s\u00f3lo le quedar\u00e1n unos d\u00edas, o incluso unas horas, de vida. Aunque, por supuesto, esperemos que Dios no lo quiera.<\/p>\n\n\n\n
Un proceso paralelo es el crecimiento de la desigualdad social, que explot\u00f3 despu\u00e9s de que el fracaso de la URSS comunista enterrara la necesidad de un Estado del bienestar. En los pa\u00edses desarrollados de Occidente, la clase media, pilar de los sistemas pol\u00edticos democr\u00e1ticos, lleva una d\u00e9cada y media, o incluso dos, reduci\u00e9ndose. Su eficacia disminuye progresivamente<\/a>.<\/p>\n\n\n\nLa democracia es uno de los instrumentos con los que las \u00e9lites olig\u00e1rquicas, que detentan el poder y la riqueza, gestionan las sociedades complejas. De ah\u00ed el auge de las tendencias autoritarias e incluso totalitarias en Occidente, a pesar de los gritos de indignaci\u00f3n en defensa de la democracia. Y no se trata s\u00f3lo de un fen\u00f3meno local en Occidente.<\/p>\n\n\n\n
El tercer reto es la degradaci\u00f3n de las personas y de la sociedad, sobre todo en el Occidente relativamente desarrollado y rico. Esta regi\u00f3n \u2014pero no s\u00f3lo \u00e9sta\u2014 es v\u00edctima de la civilizaci\u00f3n urbana y de su relativo confort, as\u00ed como del alejamiento del hombre de su entorno tradicional, donde se ha formado hist\u00f3rica y gen\u00e9ticamente. El consumo digital sin fin va en aumento, lo que parecer\u00eda conducir a la ilustraci\u00f3n de las masas, pero en cambio est\u00e1 conduciendo a su ensordecimiento, con mayores oportunidades de manipulaci\u00f3n no s\u00f3lo por parte de las oligarqu\u00edas, sino tambi\u00e9n de las propias masas, una oclocracia a una nueva escala. Es m\u00e1s, las oligarqu\u00edas, poco dispuestas a compartir sus privilegios y riquezas, aturden deliberadamente a las personas, contribuyen a la desintegraci\u00f3n de las sociedades, tratando de privarlas de la capacidad de resistir al orden de cosas cada vez m\u00e1s injusto y peligroso para la Mayor\u00eda. No s\u00f3lo promueven, sino que imponen ideolog\u00edas, valores y modos de comportamiento antihumanos o posthumanos<\/a> que rechazan los fundamentos naturales de la moral humana y casi todos los valores humanos fundamentales.<\/p>\n\n\n\nKaraganov retoma elementos bien estudiados por los pensadores rusos sobre lo que interpretan como la decadencia pol\u00edtica y moral de Occidente, vinculando el supuesto fracaso de la democracia liberal representativa con el auge de la tecnolog\u00eda y la IA, as\u00ed como con las filosof\u00edas del transhumanismo surgidas de Silicon Valley<\/a>. El an\u00e1lisis de Karaganov no es en absoluto espec\u00edficamente ruso, y hace eco de muchas cr\u00edticas de la izquierda a la evoluci\u00f3n del mundo occidental.<\/p>\n\n\n\nLa ola de informaci\u00f3n se desarrolla en un contexto de condiciones de vida relativamente favorables, en el que los principales retos que han motivado hist\u00f3ricamente el desarrollo de la humanidad, como el hambre y el miedo a la muerte violenta, est\u00e1n en gran medida ausentes. Los miedos se est\u00e1n virtualizando.<\/p>\n\n\n\n
El \u00abclip thinking\u00bb amenaza con provocar una degradaci\u00f3n intelectual universal.<\/p>\n\n\n\n
Ya podemos ver la p\u00e9rdida casi total de pensamiento estrat\u00e9gico entre las \u00e9lites europeas; en el sentido meritocr\u00e1tico tradicional, simplemente ya no hay \u00e9lites. La decadencia intelectual de la \u00e9lite dirigente de Estados Unidos, un pa\u00eds con un enorme potencial militar, incluida la nuclear, se est\u00e1 produciendo ante nuestros propios ojos. Los ejemplos se multiplican. Ya he mencionado uno de los \u00faltimos, que me ha conmocionado. Tanto el presidente Biden como el secretario de Estado Blinken han dicho que la guerra nuclear no es tan mala como el calentamiento global.<\/span>5<\/sup><\/a><\/span> Este mal amenaza a toda la humanidad y debe ser abordado con decisi\u00f3n. Nuestra forma de pensar es cada vez m\u00e1s inadecuada ante retos cada vez m\u00e1s complejos. Se est\u00e1 promoviendo la inteligencia artificial<\/a> para distraernos de problemas insolubles. Con todas sus posibles aplicaciones \u00fatiles, no llenar\u00e1 el vac\u00edo de inteligencia, pero sin duda entra\u00f1a enormes peligros adicionales. Volveremos sobre esto m\u00e1s adelante.<\/p>\n\n\n\nLas \u00e9lites rusas est\u00e1n sorprendidas por lo que consideran una retirada de la Realpolitik norteamericana y su sustituci\u00f3n por una visi\u00f3n idealista del mundo, visible en el apoyo a Ucrania y el costo de ese apoyo. La parte rusa tambi\u00e9n se\u00f1ala, con raz\u00f3n, que los conocimientos estadounidenses sobre disuasi\u00f3n nuclear han disminuido en las \u00faltimas tres d\u00e9cadas, mientras que el tema ha seguido consider\u00e1ndose crucial en el mundo de los think tanks rusos.<\/p>\n\n\n\n
La cuarta fuente m\u00e1s importante de la tensi\u00f3n general que se ha ido acumulando durante la \u00faltima d\u00e9cada y media es la redistribuci\u00f3n r\u00e1pida y sin precedentes de fuerzas desde el viejo Occidente hacia la creciente Mayor\u00eda Global. Las placas tect\u00f3nicas se han desplazado bajo el viejo sistema mundial y ha comenzado un terremoto geopol\u00edtico, geoecon\u00f3mico y geoideol\u00f3gico global a largo plazo. Hay muchas razones para ello.<\/p>\n\n\n\n
En primer lugar, <\/strong>la URSS de los a\u00f1os cincuenta y sesenta, y luego Rusia, que se recuper\u00f3 tras 15 a\u00f1os de fracaso, hicieron a\u00f1icos la base \u2014la superioridad militar\u2014 de la dominaci\u00f3n europea y occidental, que hab\u00eda durado 500 a\u00f1os. Y, repito lo que se ha dicho muchas veces, sobre esta base se construy\u00f3 el dominio de la pol\u00edtica, la cultura y la econom\u00eda del mundo, que les permiti\u00f3 imponer sus intereses y sus \u00f3rdenes y, sobre todo, desviar el PIB mundial. La p\u00e9rdida de medio milenio de hegemon\u00eda es la causa fundamental del odio rabioso de Occidente hacia Rusia y de sus intentos de aplastarla.<\/p>\n\n\n\nEn segundo lugar: los errores del propio Occidente, que crey\u00f3 en su victoria final, se volvi\u00f3 complaciente, olvid\u00f3 la historia y cay\u00f3 en la euforia y la pereza. Comenz\u00f3 as\u00ed una serie de extravagantes errores geopol\u00edticos. En primer lugar, las aspiraciones de la mayor parte de la \u00e9lite rusa de finales de los a\u00f1os ochenta y noventa de integrarse a Occidente fueron rechazadas con arrogancia, quiz\u00e1 afortunadamente para nosotros. Nosotros quer\u00edamos estar en pie de igualdad, ellos se negaron. Como resultado, Rusia pas\u00f3 de ser un socio potencial e incluso un aliado, con enormes recursos naturales, militares e intelectuales, y menos importante pero no por ello menos significativo en t\u00e9rminos de producci\u00f3n, a convertirse en un adversario y en un n\u00facleo militar-estrat\u00e9gico del no-Occidente, al que se suele denominar Sur Global<\/a>, pero m\u00e1s precisamente, la Mayor\u00eda Mundial.<\/p>\n\n\n\n\n\n \n \n \n \n \n \n ![\"Un](\"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/wp-content\/uploads\/sites\/2\/2024\/10\/SIPA_00435489_000008-scaled.jpg\")
\n <\/picture>\n Un grupo de ecologistas realiza pruebas de contaminaci\u00f3n atmosf\u00e9rica en Saratov, en el Volga. \u00a9 EastNews\/SIPA<\/figcaption> <\/figure>\n <\/a>\n \n <\/div>\n \n \n \n \n ![\"Entrenamiento](\"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/wp-content\/uploads\/sites\/2\/2024\/10\/SIPA_00256797_000002-scaled.jpg\")
\n <\/picture>\n Entrenamiento del ej\u00e9rcito ruso con armas qu\u00edmicas. \u00a9 EastNews\/SIPA<\/figcaption> <\/figure>\n <\/a>\n <\/div>\n <\/div>\n \n \n \n \n Un grupo de ecologistas realiza pruebas de contaminaci\u00f3n atmosf\u00e9rica en Saratov, en el Volga. \u00a9 EastNews\/SIPA<\/figcaption> <\/figure>\n \n <\/div>\n \n \n Entrenamiento del ej\u00e9rcito ruso con armas qu\u00edmicas. \u00a9 EastNews\/SIPA<\/figcaption> <\/figure>\n <\/div>\n <\/div>\n<\/div>\n\n\n\nEn tercer lugar, creyendo en el modelo sin alternativa del capitalismo globalista liberal y democr\u00e1tico, Occidente no s\u00f3lo no vio sino que apoy\u00f3 el ascenso de China al poder, esperando que esa gran civilizaci\u00f3n siguiera el camino de la democracia, es decir, que fuera gobernada con menos eficacia y que se alineara estrat\u00e9gicamente con Occidente. Recuerdo mi asombro cuando se rechaz\u00f3 la oferta fant\u00e1sticamente lucrativa que hizo la \u00e9lite rusa en la d\u00e9cada de 1990. Pens\u00e9 que Occidente hab\u00eda decidido acabar con Rusia. En realidad, fue una combinaci\u00f3n de arrogancia y codicia. Posteriormente, la pol\u00edtica hacia China dej\u00f3 de ser tan sorprendente. El nivel intelectual de las \u00e9lites occidentales se hizo evidente.<\/p>\n\n\n\n
En cuarto lugar,<\/strong> Estados Unidos se involucr\u00f3 en una serie de conflictos sin sentido \u2014Afganist\u00e1n, Irak, Siria\u2014 y, como era de esperar, los perdi\u00f3, socavando la idea de su dominio militar y los billones invertidos en fuerzas polivalentes. Al retirarse temerariamente del Tratado ABM, quiz\u00e1 con la esperanza de recuperar su superioridad en el campo de las armas estrat\u00e9gicas, Washington reaviv\u00f3 el sentido de autopreservaci\u00f3n de Rusia. Las esperanzas de un acuerdo de buena fe se han esfumado. A pesar de su relativa pobreza, Mosc\u00fa lanz\u00f3 un programa de modernizaci\u00f3n de sus fuerzas estrat\u00e9gicas que, a finales de la d\u00e9cada de 2010, le permiti\u00f3, por primera vez en la historia, no s\u00f3lo igualar, sino incluso tomar la delantera, aunque temporalmente.<\/p>\n\n\n\nAqu\u00ed encontramos temas bien conocidos por la percepci\u00f3n rusa y desarrollados con mucho mayor detalle en otras obras escritas por el propio Karaganov o realizadas bajo su direcci\u00f3n, como su gran texto de 2023 sobre la necesaria desoccidentalizaci\u00f3n del mundo y el ascenso al poder de la \u00abMayor\u00eda Global\u00bb.<\/p>\n\n\n\n
La quinta fuente de tensi\u00f3n creciente en el sistema mundial \u2014el mencionado cambio, casi instant\u00e1neo en t\u00e9rminos hist\u00f3ricos, en el equilibrio de poder mundial, la r\u00e1pida reducci\u00f3n de la capacidad de Occidente para desviar el PIB mundial a su favor\u2014 provoc\u00f3 su furibunda reacci\u00f3n. Occidente, pero sobre todo Washington, est\u00e1 destruyendo su anta\u00f1o privilegiada posici\u00f3n en la esfera econ\u00f3mica y financiera mediante la militarizaci\u00f3n de los lazos econ\u00f3micos y el uso de la fuerza para tratar de frenar el debilitamiento de sus propias posiciones y perjudicar a sus competidores. Esto se consigue mediante la militarizaci\u00f3n de los v\u00ednculos econ\u00f3micos: el uso de la fuerza para intentar frenar el debilitamiento de su propia posici\u00f3n y perjudicar a sus competidores. Una avalancha de sanciones, restricciones a la transferencia de tecnolog\u00eda y bienes de alta tecnolog\u00eda, el desmantelamiento de las cadenas de producci\u00f3n. La impresi\u00f3n desenfrenada de d\u00f3lares, y ahora de euros, acelera la inflaci\u00f3n y aumenta la deuda p\u00fablica. En un intento por mantener su posici\u00f3n, Estados Unidos est\u00e1 socavando el sistema globalista que ellos mismos crearon, pero que ha empezado a dar a los competidores m\u00e1s organizados e industriosos de la mayor\u00eda mundial una oportunidad casi igual. Han comenzado la desglobalizaci\u00f3n econ\u00f3mica, la regionalizaci\u00f3n y la reducci\u00f3n de las antiguas instituciones de gobernanza econ\u00f3mica mundial. La interdependencia, que anta\u00f1o se consideraba una herramienta para el desarrollo y para reforzar la cooperaci\u00f3n y la paz, se est\u00e1 convirtiendo cada vez m\u00e1s en un factor de vulnerabilidad y est\u00e1 socavando su funci\u00f3n estabilizadora.<\/p>\n\n\n\n
Tambi\u00e9n aqu\u00ed Karaganov intenta captar las ambig\u00fcedades del sistema globalizado contempor\u00e1neo y el ambiguo papel desempe\u00f1ado por Estados Unidos como l\u00edder hegem\u00f3nico en declive frente a las fuerzas que exigen una redistribuci\u00f3n m\u00e1s justa en las instituciones internacionales.<\/p>\n\n\n\n
Sexto desaf\u00edo: lanzando un contraataque desesperado, primero contra Rusia pero tambi\u00e9n contra China, Occidente ha lanzado una campa\u00f1a de propaganda casi sin precedentes, de una envergadura digna de una guerra, demonizando a sus competidores, en particular Rusia, y cortando sistem\u00e1ticamente los lazos humanos, culturales y econ\u00f3micos. Se est\u00e1 levantando un tel\u00f3n de acero a\u00fan m\u00e1s tupido que el anterior. Se mantiene la imagen de un enemigo total. Por nuestra parte y por parte china, la guerra ideol\u00f3gica no tiene el mismo car\u00e1cter total y despiadado. Pero la oleada de reacciones va en aumento. Occidente deshumaniza a los rusos y, en menor medida, a los chinos (romper los lazos con ellos es m\u00e1s costoso), y nosotros miramos a Occidente con un desprecio cada vez mayor. La deshumanizaci\u00f3n allana el camino a la guerra. Parece formar parte de los preparativos de guerra en Occidente.<\/p>\n\n\n\n
Nuestra reacci\u00f3n est\u00e1 preparando el terreno para una lucha despiadada.<\/p>\n\n\n\n
S\u00e9ptimo desaf\u00edo: el desplazamiento de las placas tect\u00f3nicas, el surgimiento de nuevos pa\u00edses y continentes, y el renacimiento de viejos conflictos sofocados por el sistema de confrontaci\u00f3n estructurada de la Guerra Fr\u00eda, conducir\u00e1n inevitablemente \u2014a menos que los nuevos dirigentes pongan en marcha una pol\u00edtica de paz activa\u2014 a una serie de enfrentamientos. Tambi\u00e9n podr\u00edan surgir contradicciones \u00abinterimperialistas\u00bb, no s\u00f3lo entre las viejas y las nuevas potencias, sino tambi\u00e9n entre las propias nuevas potencias. Los primeros signos de estos conflictos ya son visibles en el Mar de China Meridional, entre India y China. Si los conflictos siguen multiplic\u00e1ndose, lo que es muy probable, provocar\u00e1n reacciones en cadena, aumentando el riesgo de guerra mundial. Por el momento, el principal peligro procede del feroz contraataque de Occidente. Sin embargo, los conflictos pueden surgir en cualquier parte, incluso en la periferia de Rusia.<\/p>\n\n\n\n
En Medio Oriente, el conflicto palestino-israel\u00ed ha estallado como era de esperar, amenazando con convertirse en un conflicto total en la regi\u00f3n. En \u00c1frica, hay varias guerras en curso. Persisten peque\u00f1os conflictos en los devastados Afganist\u00e1n, Irak y Siria. Occidente, que sigue dominando el panorama medi\u00e1tico propagand\u00edstico, prefiere ignorarlos. Hist\u00f3ricamente, Am\u00e9rica Latina y Asia no son regiones tan belicosas como Europa, que ha sido escenario de la mayor\u00eda de las guerras y de dos guerras mundiales en el espacio de una generaci\u00f3n. Sin embargo, tambi\u00e9n all\u00ed se han librado guerras, y muchas fronteras son artificiales, impuestas por antiguas potencias coloniales. El ejemplo m\u00e1s obvio es el de India y Pakist\u00e1n, pero hay docenas de ejemplos m\u00e1s.<\/p>\n\n\n\n
Dada la trayectoria actual de Europa, que hasta ahora se dirige inexorablemente hacia un declive marcado por la desaceleraci\u00f3n econ\u00f3mica, el aumento de la desigualdad, el agravamiento de los problemas migratorios, la creciente disfunci\u00f3n de los sistemas pol\u00edticos que a\u00fan son relativamente democr\u00e1ticos y la degradaci\u00f3n moral, podemos esperar con un alto grado de probabilidad una estratificaci\u00f3n de la Uni\u00f3n Europea a mediano plazo, seguida de su colapso, el auge del nacionalismo y la fascistizaci\u00f3n de los sistemas pol\u00edticos. Por el momento, se est\u00e1n desarrollando elementos del neofascismo liberal, pero ya est\u00e1 surgiendo el fascismo nacional de derecha. El subcontinente volver\u00e1 a caer en su habitual estado de inestabilidad e incluso de conflicto. La inevitable retirada de Estados Unidos, que ha perdido inter\u00e9s en la estabilidad del subcontinente, no har\u00e1 sino exacerbar esta tendencia. Nos quedan apenas unos diez a\u00f1os. Me gustar\u00eda equivocarme, pero no parece que sea el caso.<\/p>\n\n\n\n
Karaganov repite una lectura cl\u00e1sica de la Europa contempor\u00e1nea. El discurso del neofascismo liberal se ha convertido en la norma ideol\u00f3gica en la Rusia actual, inspirado en legados sovi\u00e9ticos que se remontan a los a\u00f1os de la Guerra Fr\u00eda, cuando la CIA financi\u00f3 muchos movimientos de extrema derecha por su anticomunismo. Este discurso se ha reavivado con el conflicto de Ucrania desde 2014 y mucho m\u00e1s claramente desde 2022 en torno al tema de la fascistizaci\u00f3n de Ucrania y, por delegaci\u00f3n, de Europa.<\/p>\n\n\n\n
En el an\u00e1lisis ruso, el \u00abfascismo\u00bb se utiliza para denunciar a todos aquellos que cuestionan el peso de los sacrificios humanos de la Uni\u00f3n Sovi\u00e9tica en la victoria sobre el nazismo en 1945 e insisten, en cambio, en una equivalencia entre nazismo y comunismo y en el pacto germano-sovi\u00e9tico de 1939-1941.<\/p>\n\n\n\n
Octavo desaf\u00edo: la situaci\u00f3n se ve agravada por el colapso de la gobernanza internacional, en t\u00e9rminos econ\u00f3micos, pol\u00edticos y de seguridad. La reanudaci\u00f3n de la feroz rivalidad entre las grandes potencias y la ruinosa estructura de la ONU la hacen cada vez menos funcional. El sistema de seguridad en Europa se ha visto perturbado por la expansi\u00f3n de la OTAN. Los intentos de Estados Unidos y sus aliados de formar bloques antichinos en la regi\u00f3n Indo-Pac\u00edfica y la lucha por el control de las rutas mar\u00edtimas tambi\u00e9n est\u00e1n aumentando el potencial de conflicto en esta regi\u00f3n. La Alianza del Atl\u00e1ntico Norte, que desempe\u00f1aba un papel estabilizador y equilibrador en t\u00e9rminos de seguridad, se ha transformado en un bloque que ha cometido una serie de actos de agresi\u00f3n que desembocaron en la guerra de Ucrania. Las nuevas organizaciones, instituciones y rutas destinadas a garantizar la seguridad internacional \u2014la Organizaci\u00f3n de Cooperaci\u00f3n de Shangh\u00e1i, los BRICS, el Cintur\u00f3n y la Ruta continental, la Ruta Mar\u00edtima Septentrional\u2014 s\u00f3lo han compensado hasta ahora parcialmente el creciente d\u00e9ficit de mecanismos de seguridad. Este d\u00e9ficit se ha visto agravado por el colapso, principalmente por iniciativa de Washington, del antiguo sistema de control de armamentos. Este sistema, aunque limitado en su capacidad para evitar una carrera armament\u00edstica, ofrec\u00eda sin embargo una mayor transparencia y previsibilidad, reduciendo as\u00ed la sospecha y la desconfianza.<\/p>\n\n\n\n
Noveno reto: la retirada de Occidente, en particular de Estados Unidos, de su posici\u00f3n dominante en la cultura, la econom\u00eda y la pol\u00edtica mundiales, aunque abre nuevas oportunidades para otros pa\u00edses y civilizaciones, tambi\u00e9n entra\u00f1a riesgos importantes.<\/p>\n\n\n\n
Al retirarse, Estados Unidos pierde inter\u00e9s en mantener la estabilidad en muchas regiones y, por el contrario, empieza a provocar inestabilidad y conflictos. El ejemplo m\u00e1s evidente es Medio Oriente, despu\u00e9s de que los estadounidenses se aseguraran su relativa independencia energ\u00e9tica. Es inconcebible que el actual conflicto israelo-palestino en Gaza sea simplemente el resultado de una grave incompetencia por parte de las agencias de inteligencia israel\u00edes y estadounidenses. Sin embargo, demuestra una p\u00e9rdida de inter\u00e9s por un desarrollo pac\u00edfico y estable. Pero lo esencial es que, al derivar lentamente hacia el neoaislacionismo, los estadounidenses permanecer\u00e1n durante mucho tiempo en un paradigma mental de dominaci\u00f3n imperial. Si se les deja a su aire, desatar\u00e1n conflictos en Eurasia. Durante al menos otra generaci\u00f3n, la clase pol\u00edtica estadounidense seguir\u00e1 operando dentro del marco intelectual de las teor\u00edas mackinderianas alimentadas por la dominaci\u00f3n geopol\u00edtica a corto plazo. En la pr\u00e1ctica, Estados Unidos obstaculizar\u00e1 el ascenso al poder de nuevos actores, en primer lugar China, pero tambi\u00e9n Rusia, India, Ir\u00e1n y, pronto, Turqu\u00eda y los Estados del Golfo. Esto es evidente en la provocaci\u00f3n y avivamiento del conflicto militar en Ucrania, los intentos de arrastrar a China a la guerra por Taiw\u00e1n<\/a> \u2014hasta ahora sin \u00e9xito\u2014 y de agravar los desacuerdos chino-ind\u00faes. Tambi\u00e9n est\u00e1 la agitaci\u00f3n constante de conflictos casi sin motivo en el Mar de China Meridional, as\u00ed como en el Mar de China Oriental, el torpedeo sistem\u00e1tico del acercamiento intracoreano y la escalada de conflictos en Transcaucasia, as\u00ed como entre los pa\u00edses \u00e1rabes del Golfo e Ir\u00e1n, tambi\u00e9n sin \u00e9xito hasta ahora. Cabe esperar que se fomenten los conflictos en la periferia com\u00fan de Rusia y China. El punto vulnerable m\u00e1s evidente es Kazajst\u00e1n. Ya se ha producido un intento, frenado por la introducci\u00f3n de un contingente de mantenimiento de la paz ruso y de la OTSC a petici\u00f3n de los dirigentes kazajos. Pero esto continuar\u00e1 hasta que una generaci\u00f3n de \u00e9lites pol\u00edticas tome el poder en Estados Unidos, con personalidades menos globalistas y m\u00e1s orientadas al \u00e1mbito nacional. Eso no ocurrir\u00e1 al menos hasta dentro de 15 o 20 a\u00f1os. Por supuesto, debemos intentar estimular el proceso en nombre de la paz internacional e incluso de los intereses del pueblo estadounidense. Pero esos intereses no se har\u00e1n realidad ma\u00f1ana. S\u00f3lo si se detiene la degradaci\u00f3n de la \u00e9lite estadounidense y tras una nueva derrota de Estados Unidos, esta vez en Europa en torno a Ucrania, esto podr\u00eda cambiar.<\/p>\n\n\n\nEste largo p\u00e1rrafo resume perfectamente la percepci\u00f3n que tiene Rusia de Estados Unidos como motor de la desestabilizaci\u00f3n en el mundo a trav\u00e9s de sus reiteradas pol\u00edticas de injerencia. Es interesante la menci\u00f3n de los acontecimientos de enero de 2022 en Kazajst\u00e1n, ya que no hay pruebas de ninguna influencia occidental en los conflictos internos entre las \u00e9lites kazajas y los c\u00edrculos del expresidente Nursultan Nazarbayev y su sucesor Kassym-Jomart Tokayev.<\/p>\n\n\n\n
Karaganov tambi\u00e9n hace hincapi\u00e9 en el ascenso de una nueva generaci\u00f3n estadounidense m\u00e1s aislacionista, lo que de hecho confirman los sondeos de opini\u00f3n en Estados Unidos, donde la generaci\u00f3n m\u00e1s joven rechaza m\u00e1s claramente que sus padres el intervencionismo extranjero y su costo.<\/p>\n\n\n\n\n
\n \n \n \n \n \n \n ![\"Miembros](\"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/wp-content\/uploads\/sites\/2\/2024\/10\/SIPA_01132495_000004-scaled.jpg\")
\n <\/picture>\n Miembros de la organizaci\u00f3n militar patri\u00f3tica juvenil Yunarmiya (Ej\u00e9rcito Joven) asisten a un curso sobre protecci\u00f3n contra armas de destrucci\u00f3n masiva en el marco del programa educativo de la Escuela de Futuros Comandantes impartido por militares de la Flota Rusa del Mar Negro y cadetes de la Escuela Naval Avanzada del Mar Negro Najimov en el Parque Patriota de Sebastopol, Crimea. \u00a9 Maks Vetrov \/ Sputnik<\/figcaption> <\/figure>\n <\/a>\n \n <\/div>\n \n \n \n \n ![\"Miembros](\"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/wp-content\/uploads\/sites\/2\/2024\/10\/SIPA_01132495_000002-scaled.jpg\")
\n <\/picture>\n Miembros de la organizaci\u00f3n militar patri\u00f3tica juvenil Yunarmiya (Ej\u00e9rcito Joven) asisten a un curso sobre protecci\u00f3n contra armas de destrucci\u00f3n masiva en el marco del programa educativo de la Escuela de Futuros Comandantes impartido por militares de la Flota Rusa del Mar Negro y cadetes de la Escuela Naval Avanzada del Mar Negro Najimov en el Parque Patriota de Sebastopol, Crimea. \u00a9 Maks Vetrov \/ Sputnik<\/figcaption> <\/figure>\n <\/a>\n <\/div>\n <\/div>\n \n \n \n \n Miembros de la organizaci\u00f3n militar patri\u00f3tica juvenil Yunarmiya (Ej\u00e9rcito Joven) asisten a un curso sobre protecci\u00f3n contra armas de destrucci\u00f3n masiva en el marco del programa educativo de la Escuela de Futuros Comandantes impartido por militares de la Flota Rusa del Mar Negro y cadetes de la Escuela Naval Avanzada del Mar Negro Najimov en el Parque Patriota de Sebastopol, Crimea. \u00a9 Maks Vetrov \/ Sputnik<\/figcaption> <\/figure>\n \n <\/div>\n \n \n Miembros de la organizaci\u00f3n militar patri\u00f3tica juvenil Yunarmiya (Ej\u00e9rcito Joven) asisten a un curso sobre protecci\u00f3n contra armas de destrucci\u00f3n masiva en el marco del programa educativo de la Escuela de Futuros Comandantes impartido por militares de la Flota Rusa del Mar Negro y cadetes de la Escuela Naval Avanzada del Mar Negro Najimov en el Parque Patriota de Sebastopol, Crimea. \u00a9 Maks Vetrov \/ Sputnik<\/figcaption> <\/figure>\n <\/div>\n <\/div>\n<\/div>\n\n\n\nEn una lucha desesperada por preservar el orden mundial de los \u00faltimos 500 a\u00f1os, y especialmente de los \u00faltimos 30 o 40, Estados Unidos y sus sat\u00e9lites, incluidos los reci\u00e9n llegados que parec\u00edan unirse al vencedor, provocaron y alimentaron la guerra de Ucrania. Su esperanza inicial era derrotar a Rusia. Ahora, habiendo fracasado, buscan prolongar el conflicto, esperando agotar al m\u00e1ximo a nuestro pa\u00eds, n\u00facleo pol\u00edtico-militar de la Mayor\u00eda Mundial. Su objetivo es paralizarnos, impedir nuestro desarrollo y reducir el atractivo de las alternativas que proponemos \u2014aunque a\u00fan no est\u00e9n claramente articuladas\u2014 al paradigma pol\u00edtico e ideol\u00f3gico de Occidente.<\/p>\n\n\n\n
Dentro de uno o dos a\u00f1os, la operaci\u00f3n militar especial deber\u00eda concluir con una victoria decisiva. Esto tambi\u00e9n permitir\u00e1 a las actuales \u00e9lites estadounidenses y a las \u00e9lites vendidas afines de Europa aceptar la p\u00e9rdida de su posici\u00f3n dominante y aceptar una posici\u00f3n mucho m\u00e1s modesta en el futuro sistema mundial.<\/p>\n\n\n\n
La tarea a largo plazo, pero ya urgente, es facilitar la retirada pac\u00edfica de Occidente de sus antiguas posiciones hegem\u00f3nicas.<\/p>\n\n\n\n
D\u00e9cimo reto: durante muchas d\u00e9cadas, la paz relativa en el mundo se bas\u00f3 en el miedo a las armas nucleares. En los \u00faltimos a\u00f1os, con la \u00abhabituaci\u00f3n\u00bb a la paz, la degradaci\u00f3n intelectual antes mencionada y el debilitamiento de la conciencia de las sociedades y las \u00e9lites, se ha desarrollado un \u00abparasitismo estrat\u00e9gico\u00bb: ya no se teme a la guerra, ni siquiera a la guerra nuclear. Ya he tratado este tema en art\u00edculos anteriores. Pero no soy el \u00fanico que da la voz de alarma. Dmitri Trenin, uno de los principales pensadores rusos en materia de pol\u00edtica exterior, plantea el tema con regularidad<\/a>.<\/span>6<\/sup><\/a><\/span><\/p>\n\n\n\n
Y la sangre negra, terrenal<\/p>\n\n\n\n
se hincha en nuestras venas<\/p>\n\n\n\n
destruyendo todas las fronteras,<\/p>\n\n\n\n
Cambios sin precedentes,<\/p>\n\n\n\n
Rebeliones inauditas….<\/p>\n\n\n\n
\u0410lexandre Blok, Venganza<\/em>, 1911.<\/p>\n<\/blockquote>\n\n\n\n Comienzo este art\u00edculo con los versos de mi poeta ruso favorito, Alexander Blok, comparable al mayor genio ruso, Fiodor Dostoievski, en su don de clarividencia. Hace mucho tiempo, se\u00f1al\u00e9 que el mundo se dirig\u00eda inexorablemente hacia una oleada de conflictos militares, que amenazaba con convertirse en una tercera guerra termonuclear mundial, con una alta probabilidad de aniquilaci\u00f3n de la civilizaci\u00f3n humana.<\/p>\n\n\n\n Esta predicci\u00f3n es una de las principales razones por las que he publicado una serie de art\u00edculos sobre la necesidad de restaurar la credibilidad de la disuasi\u00f3n nuclear que ha salvado al mundo durante m\u00e1s de medio siglo.<\/p>\n\n\n Bajo la direcci\u00f3n de Giuliano da Empoli.<\/p>\n Con contribuciones de Josep Borrell, Lea Ypi, Niall Ferguson, Timothy Garton Ash, Anu Bradford, Jean-Yves Dormagen, Aude Darnal, Branko Milanovi\u0107, Julia Cag\u00e9, Vladislav Surkov o Isabella Weber.<\/p>\n\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t Retrato de un mundo roto<\/em>, el nuevo volumen en papel del Grand Continent publicado por Arpa. Est\u00e1 disponible para su compra<\/a> e incluido en nuestra oferta de lanzamiento<\/a>.<\/p>\n\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\n\t\t\t\t\t\t\t Una multitud de factores estructurales apuntan a una probabilidad extremadamente alta de un aumento cualitativo del nivel de conflicto militar que est\u00e1 llevando al mundo al borde de la cat\u00e1strofe final, y que tambi\u00e9n puede traer una desgracia incalculable a la humanidad y a nuestro pa\u00eds. No quer\u00eda asustar a la gente que ya estaba ansiosa y no estaba preparada para aceptar la nueva realidad. Sobre todo despu\u00e9s de ver la histeria provocada por mi anterior serie de art\u00edculos relativamente poco abrasivos. Pero ya no es posible mantenerlo en secreto, y los colegas m\u00e1s clarividentes han empezado a escribir cada vez con m\u00e1s decisi\u00f3n sobre la probabilidad de deslizarnos hacia una gran guerra, ofreciendo recetas para prevenirla y prepararse en caso de que estalle. El primero y m\u00e1s importante, por supuesto, es el art\u00edculo \u00abLa Gran Guerra: del pasado al futuro\u00bb, de Vasili Kachin y Andrei Suchentsov, elaborado a partir del informe del Club Valdai y publicado a finales de 2023 en la revista Russia in Global Affairs<\/em>.<\/span>1<\/sup><\/a><\/span> Otro experto en relaciones internacionales, Fyodor Lukyanov,<\/span>2<\/sup><\/a><\/span> ha empezado a perseguir la misma idea a su manera, m\u00e1s suave.<\/p>\n\n\n\n Desde hace varios meses, el debate sobre el uso de armas nucleares se ha reavivado en Rusia. Desde la invasi\u00f3n militar de Ucrania en febrero de 2022, Vladimir Putin se ha referido regularmente en sus discursos a la falta de mecanismos de disuasi\u00f3n nuclear \u00aba la antigua\u00bb, y los c\u00edrculos rusos de expertos en estrategia han empezado a publicar ampliamente sobre el tema.<\/p>\n\n\n\n Por otra parte, el \u00abEstado profundo\u00bb estadounidense est\u00e1 advirtiendo de la alta probabilidad de una tercera guerra mundial y est\u00e1 estudiando la forma en que Estados Unidos puede evitar la derrota si tiene que luchar en dos o tres frentes (Europa, el Pac\u00edfico y Medio Oriente)<\/a>.<\/span>3<\/sup><\/a><\/span><\/p>\n\n\n\n He decidido participar en el debate. Espero, por supuesto, que la pregunta planteada en el t\u00edtulo de este art\u00edculo tenga una respuesta negativa. Pero para que eso ocurra, tenemos que entender las razones del creciente conflicto e idear una pol\u00edtica mucho m\u00e1s activa para salvar el mundo. Estoy convencido de que necesitamos ajustar seriamente todas nuestras pol\u00edticas \u2014interna, militar y exterior\u2014 para ofrecernos a nosotros mismos y al mundo un nuevo paradigma de desarrollo.<\/p>\n\n\n\n\n En este primer art\u00edculo, intentar\u00e9 presentar mi visi\u00f3n de los retos. En el segundo, propondr\u00e9 soluciones activas y preventivas para afrontarlos. No creo que la simple enumeraci\u00f3n de los retos vaya a revelar nada nuevo. Sin embargo, tomados en su conjunto, dibujan un panorama m\u00e1s que alarmante que requiere una acci\u00f3n decisiva.<\/p>\n\n\n\n El principal desaf\u00edo es el agotamiento del tipo moderno de gesti\u00f3n econ\u00f3mica, el capitalismo, que se basa principalmente en la obtenci\u00f3n de beneficios y que, para ello, fomenta por todos los medios posibles el consumo desenfrenado de bienes y servicios cada vez m\u00e1s in\u00fatiles para la vida humana normal. La sobreabundancia de informaci\u00f3n sin sentido de las dos o tres \u00faltimas d\u00e9cadas tambi\u00e9n entra en esta categor\u00eda. Los aparatos devoran una cantidad monstruosa de energ\u00eda y tiempo que la gente podr\u00eda dedicar a actividades productivas. La humanidad ha entrado en conflicto con la naturaleza y ha empezado a erosionarla, a pesar de que es la base misma de su existencia. Incluso en nuestro pa\u00eds, por el momento, el crecimiento de la prosperidad implica sobre todo el crecimiento del consumo.<\/p>\n\n\n\n Es interesante observar que Karaganov comienza sus observaciones mencionando el consumo excesivo y el desarrollo del capitalismo globalizado, se\u00f1al de que las lecturas sovi\u00e9ticas del mundo contempor\u00e1neo, inspiradas en las interpretaciones marxistas, se han reactivado en Rusia.<\/p>\n\n\n\n El segundo desaf\u00edo es el m\u00e1s evidente. Los problemas del mundo \u2014contaminaci\u00f3n ambiental, cambio clim\u00e1tico, disminuci\u00f3n de las reservas de agua dulce, tierras cultivables y muchos otros recursos naturales\u2014 siguen sin resolverse. Se proponen soluciones denominadas \u00abverdes\u00bb, que la mayor\u00eda de las veces tienen por objeto consolidar la dominaci\u00f3n de los privilegiados y los ricos, tanto dentro de sus propias sociedades como a escala internacional. Pensemos, por ejemplo, en los constantes intentos de hacer recaer la carga de la lucha contra la contaminaci\u00f3n y las emisiones de CO2 en los productores, la mayor\u00eda de los cuales se encuentran fuera del viejo Occidente, y no en los consumidores dentro de \u00e9l, donde el consumo excesivo se est\u00e1 volviendo grotesco. Entre el 20% y el 30% de la poblaci\u00f3n, concentrada principalmente en Norteam\u00e9rica, Europa y Jap\u00f3n, consume entre el 70% y el 80% de los recursos de la biosfera,<\/span>4<\/sup><\/a><\/span> y la brecha es cada vez mayor.<\/p>\n\n\n\n Tambi\u00e9n en este caso resulta fascinante ver que las cuestiones medioambientales se plantean tan pronto en el texto, en una tradici\u00f3n probablemente inspirada en Alexandre Panarine (1940-2003), uno de los grandes pensadores geopol\u00edticos rusos de los a\u00f1os noventa, que incorpor\u00f3 a sus textos una forma de escatolog\u00eda ecol\u00f3gica que denunciaba la identidad y los valores del mundo occidental.<\/p>\n\n\n\n Sin embargo, la enfermedad del consumismo se est\u00e1 extendiendo al resto del mundo. Nosotros mismos seguimos padeciendo el consumo conspicuo, tan de moda en los a\u00f1os noventa y que ahora, lentamente, empieza a disminuir. Esto est\u00e1 provocando una creciente competencia por los recursos y un aumento de las tensiones internas, sobre todo las causadas por la desigualdad en el consumo, en muchos pa\u00edses y regiones.<\/p>\n\n\n\n La conciencia del estancamiento del actual modelo de desarrollo, pero tambi\u00e9n la reticencia e incapacidad para abandonarlo, es una de las principales razones del crecimiento desenfrenado de la hostilidad hacia Rusia y, en menor medida, China (el costo de romper relaciones con esta \u00faltima es mucho mayor).<\/p>\n\n\n\n Se necesita un enemigo para distraer la atenci\u00f3n de los desaf\u00edos insolubles.<\/p>\n\n\n\n Desde mediados de la d\u00e9cada de 2010, las sanciones se explican por la necesidad de obstaculizar el engranaje de la Uni\u00f3n Europea. Hoy son uno de los principales fundamentos de Occidente.<\/p>\n\n\n\n Hoy, Europa tambi\u00e9n habla cada vez m\u00e1s de la necesidad, incluso de la oportunidad, de prepararse para una guerra mundial. En la efervescencia del olvido hist\u00f3rico y del frenes\u00ed intelectual, olvidamos que, si estalla, a la Europa de la OTAN s\u00f3lo le quedar\u00e1n unos d\u00edas, o incluso unas horas, de vida. Aunque, por supuesto, esperemos que Dios no lo quiera.<\/p>\n\n\n\n Un proceso paralelo es el crecimiento de la desigualdad social, que explot\u00f3 despu\u00e9s de que el fracaso de la URSS comunista enterrara la necesidad de un Estado del bienestar. En los pa\u00edses desarrollados de Occidente, la clase media, pilar de los sistemas pol\u00edticos democr\u00e1ticos, lleva una d\u00e9cada y media, o incluso dos, reduci\u00e9ndose. Su eficacia disminuye progresivamente<\/a>.<\/p>\n\n\n\n La democracia es uno de los instrumentos con los que las \u00e9lites olig\u00e1rquicas, que detentan el poder y la riqueza, gestionan las sociedades complejas. De ah\u00ed el auge de las tendencias autoritarias e incluso totalitarias en Occidente, a pesar de los gritos de indignaci\u00f3n en defensa de la democracia. Y no se trata s\u00f3lo de un fen\u00f3meno local en Occidente.<\/p>\n\n\n\n El tercer reto es la degradaci\u00f3n de las personas y de la sociedad, sobre todo en el Occidente relativamente desarrollado y rico. Esta regi\u00f3n \u2014pero no s\u00f3lo \u00e9sta\u2014 es v\u00edctima de la civilizaci\u00f3n urbana y de su relativo confort, as\u00ed como del alejamiento del hombre de su entorno tradicional, donde se ha formado hist\u00f3rica y gen\u00e9ticamente. El consumo digital sin fin va en aumento, lo que parecer\u00eda conducir a la ilustraci\u00f3n de las masas, pero en cambio est\u00e1 conduciendo a su ensordecimiento, con mayores oportunidades de manipulaci\u00f3n no s\u00f3lo por parte de las oligarqu\u00edas, sino tambi\u00e9n de las propias masas, una oclocracia a una nueva escala. Es m\u00e1s, las oligarqu\u00edas, poco dispuestas a compartir sus privilegios y riquezas, aturden deliberadamente a las personas, contribuyen a la desintegraci\u00f3n de las sociedades, tratando de privarlas de la capacidad de resistir al orden de cosas cada vez m\u00e1s injusto y peligroso para la Mayor\u00eda. No s\u00f3lo promueven, sino que imponen ideolog\u00edas, valores y modos de comportamiento antihumanos o posthumanos<\/a> que rechazan los fundamentos naturales de la moral humana y casi todos los valores humanos fundamentales.<\/p>\n\n\n\n Karaganov retoma elementos bien estudiados por los pensadores rusos sobre lo que interpretan como la decadencia pol\u00edtica y moral de Occidente, vinculando el supuesto fracaso de la democracia liberal representativa con el auge de la tecnolog\u00eda y la IA, as\u00ed como con las filosof\u00edas del transhumanismo surgidas de Silicon Valley<\/a>. El an\u00e1lisis de Karaganov no es en absoluto espec\u00edficamente ruso, y hace eco de muchas cr\u00edticas de la izquierda a la evoluci\u00f3n del mundo occidental.<\/p>\n\n\n\n La ola de informaci\u00f3n se desarrolla en un contexto de condiciones de vida relativamente favorables, en el que los principales retos que han motivado hist\u00f3ricamente el desarrollo de la humanidad, como el hambre y el miedo a la muerte violenta, est\u00e1n en gran medida ausentes. Los miedos se est\u00e1n virtualizando.<\/p>\n\n\n\n El \u00abclip thinking\u00bb amenaza con provocar una degradaci\u00f3n intelectual universal.<\/p>\n\n\n\n Ya podemos ver la p\u00e9rdida casi total de pensamiento estrat\u00e9gico entre las \u00e9lites europeas; en el sentido meritocr\u00e1tico tradicional, simplemente ya no hay \u00e9lites. La decadencia intelectual de la \u00e9lite dirigente de Estados Unidos, un pa\u00eds con un enorme potencial militar, incluida la nuclear, se est\u00e1 produciendo ante nuestros propios ojos. Los ejemplos se multiplican. Ya he mencionado uno de los \u00faltimos, que me ha conmocionado. Tanto el presidente Biden como el secretario de Estado Blinken han dicho que la guerra nuclear no es tan mala como el calentamiento global.<\/span>5<\/sup><\/a><\/span> Este mal amenaza a toda la humanidad y debe ser abordado con decisi\u00f3n. Nuestra forma de pensar es cada vez m\u00e1s inadecuada ante retos cada vez m\u00e1s complejos. Se est\u00e1 promoviendo la inteligencia artificial<\/a> para distraernos de problemas insolubles. Con todas sus posibles aplicaciones \u00fatiles, no llenar\u00e1 el vac\u00edo de inteligencia, pero sin duda entra\u00f1a enormes peligros adicionales. Volveremos sobre esto m\u00e1s adelante.<\/p>\n\n\n\n Las \u00e9lites rusas est\u00e1n sorprendidas por lo que consideran una retirada de la Realpolitik norteamericana y su sustituci\u00f3n por una visi\u00f3n idealista del mundo, visible en el apoyo a Ucrania y el costo de ese apoyo. La parte rusa tambi\u00e9n se\u00f1ala, con raz\u00f3n, que los conocimientos estadounidenses sobre disuasi\u00f3n nuclear han disminuido en las \u00faltimas tres d\u00e9cadas, mientras que el tema ha seguido consider\u00e1ndose crucial en el mundo de los think tanks rusos.<\/p>\n\n\n\n La cuarta fuente m\u00e1s importante de la tensi\u00f3n general que se ha ido acumulando durante la \u00faltima d\u00e9cada y media es la redistribuci\u00f3n r\u00e1pida y sin precedentes de fuerzas desde el viejo Occidente hacia la creciente Mayor\u00eda Global. Las placas tect\u00f3nicas se han desplazado bajo el viejo sistema mundial y ha comenzado un terremoto geopol\u00edtico, geoecon\u00f3mico y geoideol\u00f3gico global a largo plazo. Hay muchas razones para ello.<\/p>\n\n\n\n En primer lugar, <\/strong>la URSS de los a\u00f1os cincuenta y sesenta, y luego Rusia, que se recuper\u00f3 tras 15 a\u00f1os de fracaso, hicieron a\u00f1icos la base \u2014la superioridad militar\u2014 de la dominaci\u00f3n europea y occidental, que hab\u00eda durado 500 a\u00f1os. Y, repito lo que se ha dicho muchas veces, sobre esta base se construy\u00f3 el dominio de la pol\u00edtica, la cultura y la econom\u00eda del mundo, que les permiti\u00f3 imponer sus intereses y sus \u00f3rdenes y, sobre todo, desviar el PIB mundial. La p\u00e9rdida de medio milenio de hegemon\u00eda es la causa fundamental del odio rabioso de Occidente hacia Rusia y de sus intentos de aplastarla.<\/p>\n\n\n\n En segundo lugar: los errores del propio Occidente, que crey\u00f3 en su victoria final, se volvi\u00f3 complaciente, olvid\u00f3 la historia y cay\u00f3 en la euforia y la pereza. Comenz\u00f3 as\u00ed una serie de extravagantes errores geopol\u00edticos. En primer lugar, las aspiraciones de la mayor parte de la \u00e9lite rusa de finales de los a\u00f1os ochenta y noventa de integrarse a Occidente fueron rechazadas con arrogancia, quiz\u00e1 afortunadamente para nosotros. Nosotros quer\u00edamos estar en pie de igualdad, ellos se negaron. Como resultado, Rusia pas\u00f3 de ser un socio potencial e incluso un aliado, con enormes recursos naturales, militares e intelectuales, y menos importante pero no por ello menos significativo en t\u00e9rminos de producci\u00f3n, a convertirse en un adversario y en un n\u00facleo militar-estrat\u00e9gico del no-Occidente, al que se suele denominar Sur Global<\/a>, pero m\u00e1s precisamente, la Mayor\u00eda Mundial.<\/p>\n\n\n\n\n En tercer lugar, creyendo en el modelo sin alternativa del capitalismo globalista liberal y democr\u00e1tico, Occidente no s\u00f3lo no vio sino que apoy\u00f3 el ascenso de China al poder, esperando que esa gran civilizaci\u00f3n siguiera el camino de la democracia, es decir, que fuera gobernada con menos eficacia y que se alineara estrat\u00e9gicamente con Occidente. Recuerdo mi asombro cuando se rechaz\u00f3 la oferta fant\u00e1sticamente lucrativa que hizo la \u00e9lite rusa en la d\u00e9cada de 1990. Pens\u00e9 que Occidente hab\u00eda decidido acabar con Rusia. En realidad, fue una combinaci\u00f3n de arrogancia y codicia. Posteriormente, la pol\u00edtica hacia China dej\u00f3 de ser tan sorprendente. El nivel intelectual de las \u00e9lites occidentales se hizo evidente.<\/p>\n\n\n\n En cuarto lugar,<\/strong> Estados Unidos se involucr\u00f3 en una serie de conflictos sin sentido \u2014Afganist\u00e1n, Irak, Siria\u2014 y, como era de esperar, los perdi\u00f3, socavando la idea de su dominio militar y los billones invertidos en fuerzas polivalentes. Al retirarse temerariamente del Tratado ABM, quiz\u00e1 con la esperanza de recuperar su superioridad en el campo de las armas estrat\u00e9gicas, Washington reaviv\u00f3 el sentido de autopreservaci\u00f3n de Rusia. Las esperanzas de un acuerdo de buena fe se han esfumado. A pesar de su relativa pobreza, Mosc\u00fa lanz\u00f3 un programa de modernizaci\u00f3n de sus fuerzas estrat\u00e9gicas que, a finales de la d\u00e9cada de 2010, le permiti\u00f3, por primera vez en la historia, no s\u00f3lo igualar, sino incluso tomar la delantera, aunque temporalmente.<\/p>\n\n\n\n Aqu\u00ed encontramos temas bien conocidos por la percepci\u00f3n rusa y desarrollados con mucho mayor detalle en otras obras escritas por el propio Karaganov o realizadas bajo su direcci\u00f3n, como su gran texto de 2023 sobre la necesaria desoccidentalizaci\u00f3n del mundo y el ascenso al poder de la \u00abMayor\u00eda Global\u00bb.<\/p>\n\n\n\n La quinta fuente de tensi\u00f3n creciente en el sistema mundial \u2014el mencionado cambio, casi instant\u00e1neo en t\u00e9rminos hist\u00f3ricos, en el equilibrio de poder mundial, la r\u00e1pida reducci\u00f3n de la capacidad de Occidente para desviar el PIB mundial a su favor\u2014 provoc\u00f3 su furibunda reacci\u00f3n. Occidente, pero sobre todo Washington, est\u00e1 destruyendo su anta\u00f1o privilegiada posici\u00f3n en la esfera econ\u00f3mica y financiera mediante la militarizaci\u00f3n de los lazos econ\u00f3micos y el uso de la fuerza para tratar de frenar el debilitamiento de sus propias posiciones y perjudicar a sus competidores. Esto se consigue mediante la militarizaci\u00f3n de los v\u00ednculos econ\u00f3micos: el uso de la fuerza para intentar frenar el debilitamiento de su propia posici\u00f3n y perjudicar a sus competidores. Una avalancha de sanciones, restricciones a la transferencia de tecnolog\u00eda y bienes de alta tecnolog\u00eda, el desmantelamiento de las cadenas de producci\u00f3n. La impresi\u00f3n desenfrenada de d\u00f3lares, y ahora de euros, acelera la inflaci\u00f3n y aumenta la deuda p\u00fablica. En un intento por mantener su posici\u00f3n, Estados Unidos est\u00e1 socavando el sistema globalista que ellos mismos crearon, pero que ha empezado a dar a los competidores m\u00e1s organizados e industriosos de la mayor\u00eda mundial una oportunidad casi igual. Han comenzado la desglobalizaci\u00f3n econ\u00f3mica, la regionalizaci\u00f3n y la reducci\u00f3n de las antiguas instituciones de gobernanza econ\u00f3mica mundial. La interdependencia, que anta\u00f1o se consideraba una herramienta para el desarrollo y para reforzar la cooperaci\u00f3n y la paz, se est\u00e1 convirtiendo cada vez m\u00e1s en un factor de vulnerabilidad y est\u00e1 socavando su funci\u00f3n estabilizadora.<\/p>\n\n\n\n Tambi\u00e9n aqu\u00ed Karaganov intenta captar las ambig\u00fcedades del sistema globalizado contempor\u00e1neo y el ambiguo papel desempe\u00f1ado por Estados Unidos como l\u00edder hegem\u00f3nico en declive frente a las fuerzas que exigen una redistribuci\u00f3n m\u00e1s justa en las instituciones internacionales.<\/p>\n\n\n\n Sexto desaf\u00edo: lanzando un contraataque desesperado, primero contra Rusia pero tambi\u00e9n contra China, Occidente ha lanzado una campa\u00f1a de propaganda casi sin precedentes, de una envergadura digna de una guerra, demonizando a sus competidores, en particular Rusia, y cortando sistem\u00e1ticamente los lazos humanos, culturales y econ\u00f3micos. Se est\u00e1 levantando un tel\u00f3n de acero a\u00fan m\u00e1s tupido que el anterior. Se mantiene la imagen de un enemigo total. Por nuestra parte y por parte china, la guerra ideol\u00f3gica no tiene el mismo car\u00e1cter total y despiadado. Pero la oleada de reacciones va en aumento. Occidente deshumaniza a los rusos y, en menor medida, a los chinos (romper los lazos con ellos es m\u00e1s costoso), y nosotros miramos a Occidente con un desprecio cada vez mayor. La deshumanizaci\u00f3n allana el camino a la guerra. Parece formar parte de los preparativos de guerra en Occidente.<\/p>\n\n\n\n Nuestra reacci\u00f3n est\u00e1 preparando el terreno para una lucha despiadada.<\/p>\n\n\n\n S\u00e9ptimo desaf\u00edo: el desplazamiento de las placas tect\u00f3nicas, el surgimiento de nuevos pa\u00edses y continentes, y el renacimiento de viejos conflictos sofocados por el sistema de confrontaci\u00f3n estructurada de la Guerra Fr\u00eda, conducir\u00e1n inevitablemente \u2014a menos que los nuevos dirigentes pongan en marcha una pol\u00edtica de paz activa\u2014 a una serie de enfrentamientos. Tambi\u00e9n podr\u00edan surgir contradicciones \u00abinterimperialistas\u00bb, no s\u00f3lo entre las viejas y las nuevas potencias, sino tambi\u00e9n entre las propias nuevas potencias. Los primeros signos de estos conflictos ya son visibles en el Mar de China Meridional, entre India y China. Si los conflictos siguen multiplic\u00e1ndose, lo que es muy probable, provocar\u00e1n reacciones en cadena, aumentando el riesgo de guerra mundial. Por el momento, el principal peligro procede del feroz contraataque de Occidente. Sin embargo, los conflictos pueden surgir en cualquier parte, incluso en la periferia de Rusia.<\/p>\n\n\n\n En Medio Oriente, el conflicto palestino-israel\u00ed ha estallado como era de esperar, amenazando con convertirse en un conflicto total en la regi\u00f3n. En \u00c1frica, hay varias guerras en curso. Persisten peque\u00f1os conflictos en los devastados Afganist\u00e1n, Irak y Siria. Occidente, que sigue dominando el panorama medi\u00e1tico propagand\u00edstico, prefiere ignorarlos. Hist\u00f3ricamente, Am\u00e9rica Latina y Asia no son regiones tan belicosas como Europa, que ha sido escenario de la mayor\u00eda de las guerras y de dos guerras mundiales en el espacio de una generaci\u00f3n. Sin embargo, tambi\u00e9n all\u00ed se han librado guerras, y muchas fronteras son artificiales, impuestas por antiguas potencias coloniales. El ejemplo m\u00e1s obvio es el de India y Pakist\u00e1n, pero hay docenas de ejemplos m\u00e1s.<\/p>\n\n\n\n Dada la trayectoria actual de Europa, que hasta ahora se dirige inexorablemente hacia un declive marcado por la desaceleraci\u00f3n econ\u00f3mica, el aumento de la desigualdad, el agravamiento de los problemas migratorios, la creciente disfunci\u00f3n de los sistemas pol\u00edticos que a\u00fan son relativamente democr\u00e1ticos y la degradaci\u00f3n moral, podemos esperar con un alto grado de probabilidad una estratificaci\u00f3n de la Uni\u00f3n Europea a mediano plazo, seguida de su colapso, el auge del nacionalismo y la fascistizaci\u00f3n de los sistemas pol\u00edticos. Por el momento, se est\u00e1n desarrollando elementos del neofascismo liberal, pero ya est\u00e1 surgiendo el fascismo nacional de derecha. El subcontinente volver\u00e1 a caer en su habitual estado de inestabilidad e incluso de conflicto. La inevitable retirada de Estados Unidos, que ha perdido inter\u00e9s en la estabilidad del subcontinente, no har\u00e1 sino exacerbar esta tendencia. Nos quedan apenas unos diez a\u00f1os. Me gustar\u00eda equivocarme, pero no parece que sea el caso.<\/p>\n\n\n\n Karaganov repite una lectura cl\u00e1sica de la Europa contempor\u00e1nea. El discurso del neofascismo liberal se ha convertido en la norma ideol\u00f3gica en la Rusia actual, inspirado en legados sovi\u00e9ticos que se remontan a los a\u00f1os de la Guerra Fr\u00eda, cuando la CIA financi\u00f3 muchos movimientos de extrema derecha por su anticomunismo. Este discurso se ha reavivado con el conflicto de Ucrania desde 2014 y mucho m\u00e1s claramente desde 2022 en torno al tema de la fascistizaci\u00f3n de Ucrania y, por delegaci\u00f3n, de Europa.<\/p>\n\n\n\n En el an\u00e1lisis ruso, el \u00abfascismo\u00bb se utiliza para denunciar a todos aquellos que cuestionan el peso de los sacrificios humanos de la Uni\u00f3n Sovi\u00e9tica en la victoria sobre el nazismo en 1945 e insisten, en cambio, en una equivalencia entre nazismo y comunismo y en el pacto germano-sovi\u00e9tico de 1939-1941.<\/p>\n\n\n\n Octavo desaf\u00edo: la situaci\u00f3n se ve agravada por el colapso de la gobernanza internacional, en t\u00e9rminos econ\u00f3micos, pol\u00edticos y de seguridad. La reanudaci\u00f3n de la feroz rivalidad entre las grandes potencias y la ruinosa estructura de la ONU la hacen cada vez menos funcional. El sistema de seguridad en Europa se ha visto perturbado por la expansi\u00f3n de la OTAN. Los intentos de Estados Unidos y sus aliados de formar bloques antichinos en la regi\u00f3n Indo-Pac\u00edfica y la lucha por el control de las rutas mar\u00edtimas tambi\u00e9n est\u00e1n aumentando el potencial de conflicto en esta regi\u00f3n. La Alianza del Atl\u00e1ntico Norte, que desempe\u00f1aba un papel estabilizador y equilibrador en t\u00e9rminos de seguridad, se ha transformado en un bloque que ha cometido una serie de actos de agresi\u00f3n que desembocaron en la guerra de Ucrania. Las nuevas organizaciones, instituciones y rutas destinadas a garantizar la seguridad internacional \u2014la Organizaci\u00f3n de Cooperaci\u00f3n de Shangh\u00e1i, los BRICS, el Cintur\u00f3n y la Ruta continental, la Ruta Mar\u00edtima Septentrional\u2014 s\u00f3lo han compensado hasta ahora parcialmente el creciente d\u00e9ficit de mecanismos de seguridad. Este d\u00e9ficit se ha visto agravado por el colapso, principalmente por iniciativa de Washington, del antiguo sistema de control de armamentos. Este sistema, aunque limitado en su capacidad para evitar una carrera armament\u00edstica, ofrec\u00eda sin embargo una mayor transparencia y previsibilidad, reduciendo as\u00ed la sospecha y la desconfianza.<\/p>\n\n\n\n Noveno reto: la retirada de Occidente, en particular de Estados Unidos, de su posici\u00f3n dominante en la cultura, la econom\u00eda y la pol\u00edtica mundiales, aunque abre nuevas oportunidades para otros pa\u00edses y civilizaciones, tambi\u00e9n entra\u00f1a riesgos importantes.<\/p>\n\n\n\n Al retirarse, Estados Unidos pierde inter\u00e9s en mantener la estabilidad en muchas regiones y, por el contrario, empieza a provocar inestabilidad y conflictos. El ejemplo m\u00e1s evidente es Medio Oriente, despu\u00e9s de que los estadounidenses se aseguraran su relativa independencia energ\u00e9tica. Es inconcebible que el actual conflicto israelo-palestino en Gaza sea simplemente el resultado de una grave incompetencia por parte de las agencias de inteligencia israel\u00edes y estadounidenses. Sin embargo, demuestra una p\u00e9rdida de inter\u00e9s por un desarrollo pac\u00edfico y estable. Pero lo esencial es que, al derivar lentamente hacia el neoaislacionismo, los estadounidenses permanecer\u00e1n durante mucho tiempo en un paradigma mental de dominaci\u00f3n imperial. Si se les deja a su aire, desatar\u00e1n conflictos en Eurasia. Durante al menos otra generaci\u00f3n, la clase pol\u00edtica estadounidense seguir\u00e1 operando dentro del marco intelectual de las teor\u00edas mackinderianas alimentadas por la dominaci\u00f3n geopol\u00edtica a corto plazo. En la pr\u00e1ctica, Estados Unidos obstaculizar\u00e1 el ascenso al poder de nuevos actores, en primer lugar China, pero tambi\u00e9n Rusia, India, Ir\u00e1n y, pronto, Turqu\u00eda y los Estados del Golfo. Esto es evidente en la provocaci\u00f3n y avivamiento del conflicto militar en Ucrania, los intentos de arrastrar a China a la guerra por Taiw\u00e1n<\/a> \u2014hasta ahora sin \u00e9xito\u2014 y de agravar los desacuerdos chino-ind\u00faes. Tambi\u00e9n est\u00e1 la agitaci\u00f3n constante de conflictos casi sin motivo en el Mar de China Meridional, as\u00ed como en el Mar de China Oriental, el torpedeo sistem\u00e1tico del acercamiento intracoreano y la escalada de conflictos en Transcaucasia, as\u00ed como entre los pa\u00edses \u00e1rabes del Golfo e Ir\u00e1n, tambi\u00e9n sin \u00e9xito hasta ahora. Cabe esperar que se fomenten los conflictos en la periferia com\u00fan de Rusia y China. El punto vulnerable m\u00e1s evidente es Kazajst\u00e1n. Ya se ha producido un intento, frenado por la introducci\u00f3n de un contingente de mantenimiento de la paz ruso y de la OTSC a petici\u00f3n de los dirigentes kazajos. Pero esto continuar\u00e1 hasta que una generaci\u00f3n de \u00e9lites pol\u00edticas tome el poder en Estados Unidos, con personalidades menos globalistas y m\u00e1s orientadas al \u00e1mbito nacional. Eso no ocurrir\u00e1 al menos hasta dentro de 15 o 20 a\u00f1os. Por supuesto, debemos intentar estimular el proceso en nombre de la paz internacional e incluso de los intereses del pueblo estadounidense. Pero esos intereses no se har\u00e1n realidad ma\u00f1ana. S\u00f3lo si se detiene la degradaci\u00f3n de la \u00e9lite estadounidense y tras una nueva derrota de Estados Unidos, esta vez en Europa en torno a Ucrania, esto podr\u00eda cambiar.<\/p>\n\n\n\n Este largo p\u00e1rrafo resume perfectamente la percepci\u00f3n que tiene Rusia de Estados Unidos como motor de la desestabilizaci\u00f3n en el mundo a trav\u00e9s de sus reiteradas pol\u00edticas de injerencia. Es interesante la menci\u00f3n de los acontecimientos de enero de 2022 en Kazajst\u00e1n, ya que no hay pruebas de ninguna influencia occidental en los conflictos internos entre las \u00e9lites kazajas y los c\u00edrculos del expresidente Nursultan Nazarbayev y su sucesor Kassym-Jomart Tokayev.<\/p>\n\n\n\n Karaganov tambi\u00e9n hace hincapi\u00e9 en el ascenso de una nueva generaci\u00f3n estadounidense m\u00e1s aislacionista, lo que de hecho confirman los sondeos de opini\u00f3n en Estados Unidos, donde la generaci\u00f3n m\u00e1s joven rechaza m\u00e1s claramente que sus padres el intervencionismo extranjero y su costo.<\/p>\n\n\n\n\n En una lucha desesperada por preservar el orden mundial de los \u00faltimos 500 a\u00f1os, y especialmente de los \u00faltimos 30 o 40, Estados Unidos y sus sat\u00e9lites, incluidos los reci\u00e9n llegados que parec\u00edan unirse al vencedor, provocaron y alimentaron la guerra de Ucrania. Su esperanza inicial era derrotar a Rusia. Ahora, habiendo fracasado, buscan prolongar el conflicto, esperando agotar al m\u00e1ximo a nuestro pa\u00eds, n\u00facleo pol\u00edtico-militar de la Mayor\u00eda Mundial. Su objetivo es paralizarnos, impedir nuestro desarrollo y reducir el atractivo de las alternativas que proponemos \u2014aunque a\u00fan no est\u00e9n claramente articuladas\u2014 al paradigma pol\u00edtico e ideol\u00f3gico de Occidente.<\/p>\n\n\n\n Dentro de uno o dos a\u00f1os, la operaci\u00f3n militar especial deber\u00eda concluir con una victoria decisiva. Esto tambi\u00e9n permitir\u00e1 a las actuales \u00e9lites estadounidenses y a las \u00e9lites vendidas afines de Europa aceptar la p\u00e9rdida de su posici\u00f3n dominante y aceptar una posici\u00f3n mucho m\u00e1s modesta en el futuro sistema mundial.<\/p>\n\n\n\n La tarea a largo plazo, pero ya urgente, es facilitar la retirada pac\u00edfica de Occidente de sus antiguas posiciones hegem\u00f3nicas.<\/p>\n\n\n\n D\u00e9cimo reto: durante muchas d\u00e9cadas, la paz relativa en el mundo se bas\u00f3 en el miedo a las armas nucleares. En los \u00faltimos a\u00f1os, con la \u00abhabituaci\u00f3n\u00bb a la paz, la degradaci\u00f3n intelectual antes mencionada y el debilitamiento de la conciencia de las sociedades y las \u00e9lites, se ha desarrollado un \u00abparasitismo estrat\u00e9gico\u00bb: ya no se teme a la guerra, ni siquiera a la guerra nuclear. Ya he tratado este tema en art\u00edculos anteriores. Pero no soy el \u00fanico que da la voz de alarma. Dmitri Trenin, uno de los principales pensadores rusos en materia de pol\u00edtica exterior, plantea el tema con regularidad<\/a>.<\/span>6<\/sup><\/a><\/span><\/p>\n\n\n\n\n\t\t\t\t\t\t\t\t<\/a>\n\t\t\t\t\t\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\t\n\t\t\t<\/div>\n\t\t<\/div>\n\t<\/div>\n<\/section>\n\n\n\n\n <\/picture>\n \n <\/picture>\n \n <\/picture>\n \n <\/picture>\n \n <\/picture>\n \n <\/picture>\n