{"id":45682,"date":"2024-09-27T23:20:36","date_gmt":"2024-09-27T21:20:36","guid":{"rendered":"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/?p=45682"},"modified":"2024-09-27T23:20:38","modified_gmt":"2024-09-27T21:20:38","slug":"una-estrategia-euromediterranea-en-el-nuevo-orden-economico-mundial","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/2024\/09\/27\/una-estrategia-euromediterranea-en-el-nuevo-orden-economico-mundial\/","title":{"rendered":"Una estrategia euromediterr\u00e1nea en el nuevo orden econ\u00f3mico mundial"},"content":{"rendered":"\n

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Tras el repentino fin de los lazos entre la Uni\u00f3n Europea y Rusia, la relaci\u00f3n entre Europa \u2013en particular los pa\u00edses del sur del continente\u2013 y los pa\u00edses del sur \u2013en particular los de la orilla meridional del Mediterr\u00e1neo\u2013 representa una perspectiva esencial para la creaci\u00f3n de una amplia zona de intervenci\u00f3n econ\u00f3mica y para la difusi\u00f3n de las inversiones productivas, las infraestructuras log\u00edsticas, las conexiones digitales y los intercambios comerciales. La proyecci\u00f3n euromediterr\u00e1nea no s\u00f3lo permite alcanzar el objetivo de equilibrar los fen\u00f3menos de desacoplamiento<\/em> entre China y Estados Unidos y de reorganizaci\u00f3n de los equilibrios geoecon\u00f3micos mundiales, sino tambi\u00e9n construir un nuevo modelo de desarrollo que devuelva a la esfera de la competencia global a una Europa consciente y protagonista de los procesos de transformaci\u00f3n necesarios tanto desde el punto de vista pol\u00edtico como desde un punto de vista m\u00e1s estrictamente econ\u00f3mico.<\/p>\n\n\n\n

M\u00e1s all\u00e1 del concepto, no se trata en absoluto de una tarea f\u00e1cil. Aunque Europa ha dado varias muestras de vitalidad con sus respuestas al Covid-19 y los consiguientes planes de recuperaci\u00f3n, empezando por NextGenerationUE<\/em>, necesita volver a desempe\u00f1ar un papel protag\u00f3nico en los procesos de crecimiento de la econom\u00eda mundial y traducir su sobresalto pospand\u00e9mico en un cambio estructural y duradero<\/a> tras el letargo y las soluciones equivocadas con que reaccion\u00f3 a la crisis financiera mundial.<\/p>\n\n\n\n

Este objetivo podr\u00eda lograrse consolidando la apertura de una nueva fase de gobernanza <\/em>a varios niveles, reformando los acuerdos, reglas y procedimientos que obstaculizan la competitividad europea<\/a> y adoptando pol\u00edticas econ\u00f3micas y sociales audaces e innovadoras<\/a>. Desde este \u00e1ngulo, esta perspectiva aborda algunas de las cuestiones que ser\u00e1n centrales en un futuro pr\u00f3ximo: las herramientas adecuadas para desplegar una acci\u00f3n eficaz hacia las regiones del Sur y, en particular, el continente africano; la promoci\u00f3n de nuevos acuerdos internacionales y el papel de Europa; la posici\u00f3n de los pa\u00edses \u00e1rabes en una perspectiva euromediterr\u00e1nea; las principales econom\u00edas mundiales y la evoluci\u00f3n de la oportunidad africana; en resumen, las cuestiones demogr\u00e1ficas y la situaci\u00f3n del Sur de Europa.<\/p>\n\n\n\n

La puerta de entrada mundial y el objetivo del desarrollo euromediterr\u00e1neo<\/h2>\n\n\n\n

El encuentro entre Europa y el Mediterr\u00e1neo debe abordarse desde la perspectiva del refuerzo del papel geoecon\u00f3mico de Italia y de las regiones meridionales a escala internacional. Un tema de especial inter\u00e9s \u2013hasta ahora poco debatido\u2013 es el de una iniciativa como la Global Gateway<\/em>, lanzada en diciembre de 2021.<\/p>\n\n\n\n

La estrategia Global Gateway<\/em><\/a> pretende reducir el d\u00e9ficit de inversi\u00f3n global que acompa\u00f1a a las transiciones gemelas y aumentar la conectividad de la Uni\u00f3n Europea dot\u00e1ndola de mayor autonom\u00eda estrat\u00e9gica en sus relaciones pol\u00edticas y econ\u00f3micas con el resto del mundo. Se trata de un plan de mejora de las infraestructuras de calidad para los pa\u00edses en desarrollo y la vecindad europea, con miras a impulsar la competitividad y asegurar las cadenas de suministro, con una dotaci\u00f3n de 300 mil millones de euros (150 s\u00f3lo para el continente africano) hasta 2027, repartidos entre pr\u00e9stamos, subvenciones y garant\u00edas.<\/p>\n\n\n\n

Europa debe volver a desempe\u00f1ar un papel protagonista en los procesos de crecimiento de la econom\u00eda mundial.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Una parte de la suma total disponible \u201318 mil millones para ser exactos\u2013 corresponde a subvenciones <\/em>directas provenientes de programas de la Uni\u00f3n Europea, mientras que 145 mil millones proceden del Banco Europeo de Reconstrucci\u00f3n y Desarrollo (BERD) y otras instituciones financieras. Los aproximadamente 135 mil millones restantes corresponden a intervenciones que la Comisi\u00f3n pretende generar en el sector privado creando un efecto multiplicador con las garant\u00edas y recursos asignados por el Fondo Europeo de Desarrollo Sostenible, en cooperaci\u00f3n con el Banco Europeo de Inversiones. Seg\u00fan el Institute for International Policy Studies, la estrategia Global Gateway<\/em><\/a> no se limita a establecer un mecanismo de inversi\u00f3n en infraestructuras, sino que pretende proponer un verdadero modelo a los pa\u00edses beneficiados con los fondos, basado en la viabilidad t\u00e9cnica-financiera y en la sostenibilidad medioambiental y social de los proyectos.<\/p>\n\n\n\n

En cualquier caso, las intervenciones que se lleven a cabo en este marco \u2013gracias a una coordinaci\u00f3n m\u00e1s eficaz entre las instituciones de la Uni\u00f3n, los Estados miembros, las organizaciones financieras y las empresas privadas\u2013 servir\u00e1n para promover el desarrollo sostenible, reforzar los v\u00ednculos entre Europa y las zonas m\u00e1s d\u00e9biles y reducir el d\u00e9ficit global en materia de infraestructuras, que asciende a unos 15 billones de d\u00f3lares. Centrada en cinco \u00e1reas clave \u2013digital, clima y energ\u00eda, transporte, educaci\u00f3n e investigaci\u00f3n y sanidad\u2013, esta iniciativa plantea un ambicioso reto a las Nuevas Rutas de la Seda. Los territorios implicados en esta operaci\u00f3n podr\u00e1n emanciparse de una estricta dependencia a las inversiones chinas, que a menudo ha acentuado la subordinaci\u00f3n econ\u00f3mica y alimentado el endeudamiento de terceros pa\u00edses. Para la Uni\u00f3n Europea, los beneficios deber\u00edan incluir una reducci\u00f3n de los riesgos geopol\u00edticos vinculados a la iniciativa de las Nuevas Rutas de la Seda, una afluencia de materias primas cr\u00edticas y una mejora de las relaciones comerciales con gran parte del planeta.<\/p>\n\n\n\n

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Vista a\u00e9rea de la piscifactor\u00eda de Dugi Otok (Croacia). \u00a9 SIPA<\/figcaption>\n <\/a>\n<\/figure>\n\n\n\n\n

A finales del a\u00f1o pasado se aprobaron 138 proyectos prioritarios de Global Gateway para 2024 en \u00c1frica, Asia, Am\u00e9rica Latina y el Caribe. Estos proyectos se suman a los otros 87 lanzados en 2023. Desde su lanzamiento, esta estrategia ha sido objeto de diversas cr\u00edticas, algunas de ellas muy duras. The Economist<\/em> la describi\u00f3 como \u00abuna mezcla de compromisos existentes, garant\u00edas de pr\u00e9stamos e hip\u00f3tesis heroicas sobre la capacidad de atraer inversi\u00f3n privada, en lugar de nuevos gastos reales\u00bb. Otras cr\u00edticas se refer\u00edan al atractivo del programa Global Gateway<\/em> en relaci\u00f3n con la estrategia china, las tasas de inter\u00e9s aplicadas a los pr\u00e9stamos y el limitado volumen de inversi\u00f3n para la regi\u00f3n mediterr\u00e1nea. A pesar de estas observaciones, la nueva fase de esta pol\u00edtica se ha acoplado tambi\u00e9n a la Asociaci\u00f3n Global de Infraestructura e Inversi\u00f3n, inaugurada por el G7 en 2022, ampliando sus horizontes hacia intervenciones de car\u00e1cter estructural.<\/p>\n\n\n\n

Global Gateway<\/em> plantea un ambicioso desaf\u00edo a las Nuevas Rutas de la Seda.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Adem\u00e1s, la inclusi\u00f3n del Plan Mattei<\/a> italiano en esta estrategia europea y las discusiones trilaterales en curso entre Italia, Alemania y Francia sobre tecnolog\u00edas verdes, materiales raros y materias primas secundarias podr\u00edan convertirse en elementos esenciales de una pol\u00edtica industrial innovadora<\/a>. La propuesta surgida en la reuni\u00f3n del G7 sobre la industria para la creaci\u00f3n de un polo de desarrollo sostenible \u2013basado en la inteligencia artificial\u2013 que se construir\u00eda en sinergia con los pa\u00edses africanos es un paso en esta direcci\u00f3n. Sobre esta base, es hora de pasar de la fase de evaluaci\u00f3n del contexto y dise\u00f1o general a la de despliegue de acciones sist\u00e9micas concretas, en las que el sur de Europa podr\u00eda desempe\u00f1ar un papel protag\u00f3nico, no s\u00f3lo por su retraso en t\u00e9rminos de producci\u00f3n, sino tambi\u00e9n por su situaci\u00f3n geogr\u00e1fica y la expansi\u00f3n de su funci\u00f3n log\u00edstica.<\/p>\n\n\n\n

La perspectiva abierta por la estrategia Global Gateway<\/em> reconoce la necesidad de reanudar las relaciones econ\u00f3micas entre Occidente y una serie de zonas cruciales, en particular hacia el Este y el Sur. La concentraci\u00f3n de los esfuerzos europeos en \u00c1frica no es en absoluto fortuita y debe intensificarse, dado que en un futuro pr\u00f3ximo los avances m\u00e1s significativos en demograf\u00eda, producci\u00f3n y comercio tendr\u00e1n lugar en esta regi\u00f3n. En un planeta cambiante y lleno de riesgos, Europa puede contribuir al surgimiento de un nuevo paradigma, evitando al mismo tiempo la transici\u00f3n exacerbada de una era de crisis a una era de conflictos. Para ello, debe ser capaz de desempe\u00f1ar plenamente su papel de di\u00e1logo, cooperaci\u00f3n y romoci\u00f3n econ\u00f3mica como parte de un proyecto de futuro que le concierne a ella y a otras partes del mundo, siempre que sit\u00fae la encrucijada mediterr\u00e1nea en el centro de su estrategia.<\/p>\n\n\n\n

El papel de Europa en la construcci\u00f3n de un nuevo orden econ\u00f3mico internacional<\/h2>\n\n\n\n

La opini\u00f3n p\u00fablica internacional se centra cada vez m\u00e1s intensamente en las tensiones pol\u00edticas, las guerras y la reorganizaci\u00f3n geoecon\u00f3mica de un mundo cada vez m\u00e1s complejo a medida que los acontecimientos se desarrollan y adquieren mayor protagonismo. La econom\u00eda es una encrucijada esencial para interpretar este periodo<\/a> sin precedentes de la historia de la humanidad. Tambi\u00e9n es el campo de operaciones para el despliegue de inversiones ostentosas, relativas \u2013por ejemplo\u2013 a la oportunidad euromediterr\u00e1nea que hay que aprovechar en estos momentos. The Economist<\/em> public\u00f3 recientemente un informe titulado \u00abEl orden internacional liberal<\/a> se derrumba lentamente\u00bb, a\u00f1adiendo que su colapso podr\u00eda ser repentino e irreversible. La lectura de este an\u00e1lisis permite comprender todas las complejas cuestiones que subyacen a la construcci\u00f3n de un nuevo orden econ\u00f3mico mundial.<\/p>\n\n\n\n

A primera vista, la econom\u00eda presenta indicadores tranquilizadores \u2013con un crecimiento del PIB del 3% en 2023\u2013 a pesar de las guerras y conflictos comerciales en curso y de la desacelaraci\u00f3n de la globalizaci\u00f3n. Sin embargo, un examen m\u00e1s a profundidad revela la debilidad del panorama general, consecuencia de la erosi\u00f3n progresiva, sobre todo desde los a\u00f1os setenta, de las normas creadas en Bretton Woods para reactivar las relaciones econ\u00f3micas internacionales de posguerra. Seg\u00fan el semanario anglosaj\u00f3n, la desintegraci\u00f3n del viejo orden se deja sentir ampliamente. Las instituciones financieras (y de otro tipo) que sustentaban el sistema han perdido su credibilidad; las sanciones se utilizan cuatro veces m\u00e1s que en los a\u00f1os noventa; el apoyo estatal a la producci\u00f3n ecol\u00f3gica en Estados Unidos y China ha desencadenado una \u00abguerra de subvenciones\u00bb entre distintos pa\u00edses; y los flujos mundiales de capital han empezado a fragmentarse, ramificando las cadenas de valor.<\/p>\n\n\n\n

Europa puede contribuir al surgimiento de un nuevo paradigma, evitando al mismo tiempo la transici\u00f3n exacerbada de una era de crisis a una era de conflictos.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Una vez iniciado el declive, la ruptura de un equilibrio establecido puede producirse sin previo aviso. La primera globalizaci\u00f3n de finales del siglo XIX, que parec\u00eda durar mucho tiempo, termin\u00f3 bruscamente con el estallido de la Primera Guerra Mundial. El auge del neoliberalismo a finales del siglo XX, que se cre\u00eda imparable, se detuvo bruscamente con el inicio de la crisis econ\u00f3mica de 2007-2014; la pandemia y la guerra decretaron, despu\u00e9s, el fin de las formas extremas de mercantilismo. Hoy podemos imaginar una ruptura de la misma magnitud, debida a un retorno de la \u201cvisi\u00f3n del mundo de suma cero\u201d de Donald Trump, pero tambi\u00e9n a una segunda oleada de importaciones chinas baratas y a una extensi\u00f3n de los conflictos a Am\u00e9rica y a China en detrimento de Taiw\u00e1n o Rusia y de una mayor parte de Europa.<\/p>\n\n\n\n

Sin embargo, la globalizaci\u00f3n, a pesar de sus aspectos controvertidos, ha impulsado profundas transformaciones y una interdependencia mundial efectiva, que deber\u00eda desalentar nuevas hostilidades y cierres econ\u00f3micos. El escenario que tenemos por delante no deber\u00eda desviarse de un camino por el que cientos de millones de personas en China han escapado de la trampa de la pobreza, al tiempo que el continente asi\u00e1tico se ha sumergido en la econom\u00eda mundial, la tasa mundial de mortalidad infantil ha descendido a menos de la mitad de lo que era a principios de los noventa y la proporci\u00f3n de poblaci\u00f3n aniquilada por la guerra alcanz\u00f3 su nivel m\u00e1s bajo de la posguerra a principios de este milenio. El proceso de globalizaci\u00f3n, combinado con un largo periodo de paz, ha permitido a algunos pa\u00edses rezagados desempe\u00f1ar el papel de potencias econ\u00f3micas emergentes, aprovechando el orden econ\u00f3mico mundial y el comercio para acortar distancias con los pa\u00edses m\u00e1s avanzados.<\/p>\n\n\n\n

Una vez iniciado el declive, la ruptura de un equilibrio establecido puede producirse sin previo aviso.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

La inversi\u00f3n de estas tendencias y el riesgo de una \u201cgran desconexi\u00f3n\u201d, debida a la ampliaci\u00f3n de las fuentes de crisis y a la ausencia de un sistema de regulaci\u00f3n internacional, hacen que los retos de este siglo sean m\u00e1s dif\u00edciles de afrontar. Entre las nuevas formas de competencia figuran la orientaci\u00f3n que debe darse a los avances en inteligencia artificial e innovaci\u00f3n tecnol\u00f3gica, la promoci\u00f3n org\u00e1nica de la bioeconom\u00eda circular, las sinergias que deben lograrse en la nueva econom\u00eda espacial, la contenci\u00f3n de la carrera armament\u00edstica<\/a>, la direcci\u00f3n de los flujos migratorios y el crecimiento demogr\u00e1fico. En este contexto, para Fabio Panetta, gobernador del Banco de Italia, la econom\u00eda europea est\u00e1 \u201cparticularmente expuesta a las consecuencias de una fragmentaci\u00f3n del comercio mundial\u201d, dadas sus conexiones productivas y financieras globales y su dependencia de los recursos naturales importados y de la demanda exterior.<\/p>\n\n\n\n

Aunque Europa ha seguido el ritmo de Estados Unidos en t\u00e9rminos de crecimiento del PIB per c\u00e1pita durante m\u00e1s de un cuarto de siglo, la proporci\u00f3n de la Uni\u00f3n Europea en la econom\u00eda mundial se est\u00e1 reduciendo m\u00e1s r\u00e1pidamente que la de Estados Unidos: mientras que Estados Unidos representa en torno a una cuarta parte de la econom\u00eda mundial, la zona euro representa alrededor de una sexta parte. Seg\u00fan Daniel Gros, para reforzar la posici\u00f3n geopol\u00edtica de Europa es necesario \u201crevitalizar\u201d la econom\u00eda. Barry Eichengreen, por su parte, cree que hacen falta ideas innovadoras para fortalecer Europa. Entre los remedios indicados por Panetta figura la participaci\u00f3n europea en la reconfiguraci\u00f3n de las cadenas de producci\u00f3n mundiales, lo que supone una oportunidad para revitalizar la econom\u00eda del Sur mediante \u201cpol\u00edticas de atracci\u00f3n de capitales\u201d y, en general, una fuerte expansi\u00f3n de la inversi\u00f3n p\u00fablica y privada. Por ello, Italia y el Sur deben participar plenamente en el relanzamiento del proyecto europeo. El Sur puede desarrollar un nuevo papel de liderazgo si es capaz de ganarse sobre el terreno la confianza de los inversores mundiales, aumentar su potencial de crecimiento y perseguir concretamente su inclusi\u00f3n en el espacio econ\u00f3mico entre Europa y el Mediterr\u00e1neo.<\/p>\n\n\n\n

Los nuevos acuerdos euromediterr\u00e1neos, los pa\u00edses \u00e1rabes y la competitividad del Sur<\/h2>\n\n\n\n

Una perspectiva euromediterr\u00e1nea implica la apertura, a escala nacional y europea, de una fase de expansi\u00f3n coherente del comercio y de cooperaci\u00f3n s\u00f3lida, no s\u00f3lo con la otra orilla del \u201cmar interior\u201d, sino tambi\u00e9n con los vastos territorios del continente africano y de Medio Oriente , como parte de una visi\u00f3n m\u00e1s amplia. Este punto de inflexi\u00f3n puede venir de la toma de conciencia del papel de conexi\u00f3n geoestrat\u00e9gica del Sur y de Italia en un modelo sin precedentes, del an\u00e1lisis de la realidad de un \u201cnuevo mundo\u201d emergente y en m\u00e1gico crecimiento, de la capacidad de actualizar las pol\u00edticas industriales en un horizonte transnacional y metanacional. La decisi\u00f3n de incluir el Plan Mattei en la concepci\u00f3n comunitaria de la estrategia Global Gateway <\/em>puede hacer m\u00e1s cre\u00edble la idea de una intervenci\u00f3n coordinada hacia \u00c1frica, siguiendo una l\u00f3gica de compartir entre los pa\u00edses europeos y los que se encuentran en una evoluci\u00f3n compleja en el sur del Mediterr\u00e1neo.<\/p>\n\n\n\n

Italia y el Sur deben participar plenamente en el relanzamiento del proyecto europeo.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Es en virtud de una amplia sinergia internacional como pueden emprenderse acciones eficaces en favor del desarrollo, en particular en los \u00e1mbitos de la energ\u00eda, el medio ambiente, las infraestructuras, las conexiones, la innovaci\u00f3n digital y la formaci\u00f3n. En este marco, la econom\u00eda y el comercio pueden convertirse en una herramienta \u00fatil para erradicar los numerosos conflictos que persisten en esta regi\u00f3n crucial del mundo y restablecer una paz basada en la interdependencia, como sosten\u00eda Norman Angell a principios del siglo XX en The Great Illusion<\/em><\/em>. Un reciente informe de la Economist Intelligence Unit (EIU) ayuda a clarificar el estado de las inversiones \u00e1rabes en \u00c1frica, se\u00f1alando que no son s\u00f3lo los nuevos competidores (China, Rusia y Turqu\u00eda) los que se disputan con los tradicionales el vasto espacio econ\u00f3mico del continente, sino un grupo diverso de naciones e instituciones internacionales que aparecen en un escenario cada vez m\u00e1s complejo, como parte del proceso de reordenaci\u00f3n de los equilibrios geoecon\u00f3micos del mundo.<\/p>\n\n\n\n

El Consejo de Cooperaci\u00f3n del Golfo (CCG) es la organizaci\u00f3n creada en 1981 por los Estados ribere\u00f1os del Golfo P\u00e9rsico (Bahr\u00e9in, Kuwait, Om\u00e1n, Qatar, Arabia Saudita y Emiratos \u00c1rabes Unidos) para promover una cooperaci\u00f3n e integraci\u00f3n regionales m\u00e1s estrechas en los \u00e1mbitos econ\u00f3mico, social y cultural, que conduzcan a la creaci\u00f3n de un mercado com\u00fan y una unidad monetaria. El CCG es el canal esencial para las relaciones de la Uni\u00f3n con estos pa\u00edses, y tambi\u00e9n tiene acceso a importantes fondos de sus miembros para el continente africano, en un momento en que los pr\u00e9stamos chinos y la ayuda occidental son inciertos y parecen haber tocado techo. El atractivo de estos recursos se debe tambi\u00e9n a la rapidez con la que se puede disponer de los fondos y a las pocas restricciones que existen para su utilizaci\u00f3n, sobre todo en comparaci\u00f3n con las instituciones financieras occidentales.<\/p>\n\n\n\n

Este poder blando es tanto m\u00e1s pertinente cuanto que se deriva de inversiones de car\u00e1cter estrat\u00e9gico y de una mejora potencial de las condiciones de seguridad, en particular en las regiones del Cuerno de \u00c1frica y del Mar Rojo. De este modo, los Estados \u00e1rabes podr\u00edan convertirse en actores internacionales de primer orden en la iniciativa econ\u00f3mica de los pa\u00edses africanos, ampliando su presencia en el continente. Las empresas y los inversores del CCG tienden a centrarse en las industrias africanas relacionadas con los recursos energ\u00e9ticos (petr\u00f3leo, gas y energ\u00edas renovables), la miner\u00eda y la agricultura, as\u00ed como en las infraestructuras de transporte, los servicios log\u00edsticos y las industrias digitales.<\/p>\n\n\n\n

Un \u00e1rea mediterr\u00e1nea ampliada puede proyectarse hacia un nuevo destino y ser la clave del futuro de los pa\u00edses de su entorno.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Seg\u00fan estimaciones de la EIU, el Consejo de Cooperaci\u00f3n del Golfo ha invertido m\u00e1s de 100 mil millones de d\u00f3lares en \u00c1frica en los \u00faltimos diez a\u00f1os, lo que supone alrededor del 30% del total de la inversi\u00f3n extranjera directa (IED). En 2023, las inversiones directas indicadas por los pa\u00edses \u00e1rabes para nuevas actividades (greenfield<\/em>) en territorios africanos alcanzar\u00e1n los 53 mil millones de d\u00f3lares, superando los compromisos de las empresas chinas (35 500 millones de d\u00f3lares), europeas (38 mil millones de d\u00f3lares) y estadounidenses (10 mil millones de d\u00f3lares).<\/p>\n\n\n\n

El comercio entre el CCG y los pa\u00edses africanos creci\u00f3 a un ritmo del 8% durante la d\u00e9cada hasta 2022, alcanzando los 154 mil millones de d\u00f3lares en ese a\u00f1o. Esta cifra super\u00f3 el comercio bilateral total con \u00c1frica de Estados Unidos (74 mil millones de d\u00f3lares) e India (99 mil millones de d\u00f3lares), y alcanz\u00f3 al de China (289 mil millones de d\u00f3lares) y Europa Occidental (244 mil millones de d\u00f3lares). Este aumento de la actividad tambi\u00e9n est\u00e1 vinculado a la participaci\u00f3n de los Estados del CCG en la gesti\u00f3n de los puertos y las principales rutas log\u00edsticas de muchos territorios (Argelia, Egipto, Sud\u00e1n, Eritrea, Somalia, Tanzania, Mozambique, Sud\u00e1frica, Angola, Rep\u00fablica Democr\u00e1tica del Congo, Congo-Brazzaville, Ruanda, Nigeria, Guinea y Senegal). Los pa\u00edses \u00e1rabes compiten con los principales actores de la econom\u00eda mundial en todos los sectores y materias primas del continente africano, bas\u00e1ndose en una combinaci\u00f3n pragm\u00e1tica de \u201cno intervenci\u00f3n al estilo chino, creaci\u00f3n de redes al estilo ruso e inversi\u00f3n empresarial al estilo occidental\u201d.<\/p>\n\n\n\n

Este original an\u00e1lisis de la Economist Intelligence Unit nos permite no s\u00f3lo dirigir nuestra atenci\u00f3n a un nuevo grupo de competidores emergentes en la escena mundial, sino tambi\u00e9n reflexionar sobre la urgente necesidad de que Europa forme parte del desaf\u00edo actual y la oportunidad de que Italia y el Mezzogiorno desempe\u00f1en un papel significativo. El orden cambiante de la geograf\u00eda, la pol\u00edtica y la econom\u00eda atraviesa hoy un continente que linda inmediatamente con nuestro mar, lleno de tensiones y amargos contrastes, y que, al mismo tiempo, est\u00e1 en el centro del desarrollo futuro del mundo. Como en alg\u00fan momento lo dijo Fernand Braudel, una zona mediterr\u00e1nea ampliada podr\u00eda verse proyectada hacia un nuevo destino y ser la clave del futuro de los pa\u00edses que la rodean.<\/p>\n\n\n\n

Los Estados \u00e1rabes podr\u00edan convertirse en actores internacionales de primer orden en la iniciativa econ\u00f3mica de los pa\u00edses africanos, ampliando su presencia en el continente.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

1 – El papel renovado del G7 y la perspectiva global de \u00c1frica<\/h3>\n\n\n\n

La reuni\u00f3n del G7 en Italia no pudo tomar una v\u00eda radicalmente innovadora, sino que fue impracticable por su modelo y la debilidad de algunos de sus representantes, pero surgi\u00f3 un primer signo positivo. La apertura al Sur global y las conclusiones del G7 han mostrado no s\u00f3lo la intenci\u00f3n de extender a nuevos actores de la escena internacional<\/a> una estructura dise\u00f1ada para un mundo diferente, sino tambi\u00e9n la necesidad de experimentar nuevas estrategias, capaces de captar los puntos de confluencia de una multiplicidad de crisis interconectadas y de un contexto cada vez m\u00e1s complejo, empezando por \u00c1frica y el Mediterr\u00e1neo. Los puntos de inflexi\u00f3n en la historia son dif\u00edciles de predecir con mucha antelaci\u00f3n, pero el trabajo necesario para hacer posible uno, y evitar un retroceso repentino, requiere ser consciente de que el planeta atraviesa un momento cr\u00edtico.<\/p>\n\n\n\n

El inicio de una confrontaci\u00f3n multilateral, con la participaci\u00f3n de numerosas representaciones ajenas al G7 (Argelia, Argentina, Brasil, Emiratos \u00c1rabes Unidos, Jordania, India, Kenia, Mauritania, T\u00fanez, Turqu\u00eda y la Santa Sede) y de algunas de las principales organizaciones internacionales (Banco Africano de Desarrollo, Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, OCDE y Naciones Unidas) reforzaron la idea del di\u00e1logo m\u00e1s all\u00e1 de las barreras tradicionales, haciendo de las relaciones con los socios del Sur el terreno sobre el que se pueden construir relaciones globales m\u00e1s cooperativas y soluciones cre\u00edbles al actual desorden mundial. El documento final subraya el objetivo de una \u201cgobernanza mundial m\u00e1s eficaz, inclusiva y equitativa\u201d ante los considerables cambios que se est\u00e1n produciendo. Sin embargo, es el compromiso con \u00c1frica el que puede justificar la idea de una nueva direcci\u00f3n. El grupo apoya la creaci\u00f3n de la Zona de Libre Comercio Continental Africana. Esta colaboraci\u00f3n pretende mejorar la seguridad alimenticia, las infraestructuras, el comercio y la productividad agr\u00edcola. El G7 tambi\u00e9n ha previsto un importante programa de intervenciones en el marco de la Asociaci\u00f3n para la Infraestructura e Inversi\u00f3n Mundiales de los Siete y del Portal Global de la Uni\u00f3n Europea. El comunicado del G7 detalla tambi\u00e9n iniciativas espec\u00edficas en favor de los pa\u00edses africanos, vinculando el tema de los retos mundiales al del progreso en el Sur.<\/p>\n\n\n\n

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Vista a\u00e9rea de la piscifactor\u00eda de Dugi Otok (Croacia). \u00a9 SIPA<\/figcaption>\n <\/a>\n<\/figure>\n\n\n\n\n

Seg\u00fan un informe del McKinsey Global Institute titulado Reinventing Economic Growth in Africa: Turning Diversity into Opportunity<\/em>, en 2050 el 25% de la poblaci\u00f3n mundial (2 500 millones de personas) proceder\u00e1 de \u00c1frica. Esto ofrecer\u00e1 una gran cantidad de oportunidades para un desarrollo s\u00f3lido e integrador, proporcionando una rica dotaci\u00f3n de recursos naturales y abundante potencial humano \u2013el 40% de los j\u00f3venes ser\u00e1n africanos\u2013 para impulsar la prosperidad no s\u00f3lo en este continente, sino en todo el mundo. Este continente no es monol\u00edtico: representa una econom\u00eda de tres billones de d\u00f3lares, con una poblaci\u00f3n de m\u00e1s de 1 400 millones de personas, repartidas en 54 pa\u00edses. Dentro de esta vasta extensi\u00f3n, hay regiones que han crecido m\u00e1s deprisa que la media general durante los \u00faltimos 20 a\u00f1os, otras que han acelerado sus resultados <\/em>en la \u00faltima d\u00e9cada, otras que han desacelerado recientemente su tendencia, y otro grupo que lucha por progresar. Casi la mitad de \u00c1frica se encuentra en pa\u00edses por encima de la media, pero s\u00f3lo representan una cuarta parte del PIB total. Hay casi 350 empresas en el continente con beneficios de 1 000 millones de d\u00f3lares o m\u00e1s.<\/p>\n\n\n\n

A Europa le interesa adoptar una actitud de apertura que no pretenda explotar el territorio africano, sino contribuir a su desarrollo.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

A pesar de una situaci\u00f3n mundial muy incierta y cambiante, las econom\u00edas africanas han mostrado una gran capacidad de resiliencia, logrando un crecimiento del PIB del 3.2% en 2023, por debajo del 4.1% de 2022, pero repuntando en general, lo que llevar\u00e1 a un crecimiento medio del 4% entre 2024 y 2025. Sin embargo, la mayor\u00eda de los pa\u00edses africanos siguen enfrent\u00e1ndose a elevadas presiones inflacionistas, acumulaci\u00f3n de deuda, desigualdad y pobreza generalizadas, condiciones sanitarias cr\u00edticas, cambio clim\u00e1tico y fen\u00f3menos meteorol\u00f3gicos extremos.<\/p>\n\n\n\n

En un periodo de 30 a\u00f1os, se observa que mientras en la d\u00e9cada de 1990 el PIB crec\u00eda un 2.7% y la poblaci\u00f3n un 12.7%, a principios del nuevo milenio el PIB alcanz\u00f3 el 5.1%, lo que inici\u00f3 el periodo de la \u00abrecuperaci\u00f3n africana\u00bb, con un aumento mete\u00f3rico de la productividad y un repunte de las 30 primeras econom\u00edas africanas. En los \u00faltimos a\u00f1os, la tendencia se ha invertido y la productividad se ha debilitado en todos los sectores; esto ha hecho que el crecimiento impulsado principalmente por los precios de las materias primas y las inversiones extranjeras directas resienta el golpe.<\/p>\n\n\n\n

Desde este punto de vista, es necesario introducir innovaciones significativas mediante la generalizaci\u00f3n de los procesos de digitalizaci\u00f3n e innovaci\u00f3n tecnol\u00f3gica, la formaci\u00f3n de competencias calificadas en consonancia con la necesidad de modernizar y ampliar la estructura productiva nacional y la acuciante demanda de talentos del resto del mundo, y el aumento de la eficiencia de los servicios financieros y las inversiones en todo el continente. \u00c1frica es tambi\u00e9n una inmensa mina de recursos estrat\u00e9gicos. Posee el 93% de las reservas mundiales de platino y casi la mitad de las de cobalto, manganeso, cobre y litio, esenciales para la transici\u00f3n medioambiental y clim\u00e1tica. En este sentido, a Europa le interesa adoptar una actitud de apertura que no pretenda explotar el territorio africano, sino contribuir a su desarrollo, y no dejar esta vasta zona de crecimiento a las iniciativas depredadoras y las conveniencias geopol\u00edticas de China, Rusia <\/a>o el mundo \u00e1rabe.<\/p>\n\n\n\n

\u00c1frica no es monol\u00edtica: representa una econom\u00eda de tres billones de d\u00f3lares, con una poblaci\u00f3n de m\u00e1s de 1 400 millones de personas repartidas en 54 pa\u00edses.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Basta pensar en el fen\u00f3meno de la urbanizaci\u00f3n y la expansi\u00f3n del mercado de consumo para comprender las extraordinarias oportunidades que existen en t\u00e9rminos de divisi\u00f3n del trabajo y complementariedad entre las econom\u00edas africanas y europeas. Volviendo a los objetivos estrat\u00e9gicos de Italia y de la Uni\u00f3n, parece cada vez m\u00e1s importante la idea de un New Deal<\/em> en las relaciones entre los dos continentes<\/a>, que no son los protagonistas del desacoplamiento global pero que, aunque partan de posiciones diferentes, pueden desempe\u00f1ar un papel clave en el tablero econ\u00f3mico mundial. Los une un destino convergente, no s\u00f3lo por razones geogr\u00e1ficas y de proximidad, condensadas en las perspectivas del escenario mediterr\u00e1neo, sino tambi\u00e9n por el gran impulso econ\u00f3mico que puede suponer compartir una v\u00eda de desarrollo y, qui\u00e9n sabe, incluso por una alianza a construir en la perspectiva de un multipolarismo activo y de paz en las relaciones internacionales.<\/p>\n\n\n\n

2 – Europa del Sur, longevidad y crisis demogr\u00e1fica<\/h3>\n\n\n\n

Las razones por las que los habitantes del sur de Europa estar\u00e1n pronto entre los m\u00e1s longevos del mundo se han evaluado en un reciente art\u00edculo de The Economist<\/em>.<\/span>1<\/sup><\/a><\/span> La variedad de h\u00e1bitos alimenticios y de ejercicio, as\u00ed como la calidad de la planificaci\u00f3n urbana y el comportamiento social, son los rasgos m\u00e1s significativos de un nuevo modelo de vida que se est\u00e1 experimentando en esta parte del continente. Un estudio del Institute for Health Metrics and Evaluation de la Universidad de Washington ha trazado el mapa de la carga de morbilidad en 204 pa\u00edses entre 2022 y 2050, proyectando la esperanza de vida en ese periodo. Sorprendentemente, entre los 20 primeros \u00abpa\u00edses para viejos\u00bb \u2014 Countries for Old Men<\/em>, parafraseando la novela de Cormac McCarthy\u2014 figuran no s\u00f3lo las zonas m\u00e1s ricas (Suiza, Singapur, Jap\u00f3n y Corea del Sur), sino tambi\u00e9n un grupo de pa\u00edses un poco menos pr\u00f3speros, como Espa\u00f1a, Italia, Francia y Portugal, as\u00ed como Estados m\u00e1s peque\u00f1os como San Marino, Malta y Andorra.<\/p>\n\n\n\n

Las encuestas de este tipo muestran que la salud y la longevidad est\u00e1n claramente vinculadas al PIB per c\u00e1pita. Pero las causas espec\u00edficas de la mayor riqueza en el sur de Europa deben buscarse en otras direcciones, m\u00e1s all\u00e1 del v\u00ednculo exclusivo entre riqueza y salud. Algunos argumentan que estas poblaciones no siguen actualmente la \u00abdieta mediterr\u00e1nea\u00bb y que, por consiguiente, esta forma de alimentaci\u00f3n no puede ser un indicador de su mejor estado f\u00edsico. Otros, como Dan Buettner, de National Geographic, uno de los creadores de las \u201czonas azules\u201d \u2013\u00e1reas geogr\u00e1ficas del mundo donde la esperanza de vida es considerablemente superior a la media mundial\u2013, afirman que los h\u00e1bitos que est\u00e1n dando forma a personas cada vez de mayor edad se remontan a medio siglo atr\u00e1s, cuando las poblaciones meridionales com\u00edan alimentos campesinos o segu\u00edan una dieta basada en \u00abalimentos de hambruna\u00bb.<\/p>\n\n\n\n

La poblaci\u00f3n mundial supera actualmente los 8 mil millones de habitantes y podr\u00eda alcanzar un m\u00e1ximo de m\u00e1s de 10 mil millones a finales de siglo. Sin embargo, es muy probable que este pico sea el \u00faltimo.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Las zonas azules de Italia son el Cilento, en Campania, y la provincia de Nuoro, en Cerde\u00f1a, donde un gran n\u00famero de centenarios llevan un estilo de vida t\u00edpico de la regi\u00f3n mediterr\u00e1nea. Estas zonas han sido el punto de partida para el desarrollo de un paradigma socioecon\u00f3mico sin precedentes, precursor de la bioeconom\u00eda circular. Todo ello gracias a la visi\u00f3n del alcalde de Pollica, Angelo Vassallo, quien, siguiendo los pasos de Ancel Keys, logr\u00f3 promover la inclusi\u00f3n de la dieta mediterr\u00e1nea entre el patrimonio cultural inmaterial protegido de la humanidad. Adem\u00e1s de la dieta, el movimiento es otro factor de prolongaci\u00f3n de la vida, especialmente importante en Espa\u00f1a y, en general, en los pa\u00edses euromediterr\u00e1neos, debido al gran n\u00famero de paseos y senderos que existen en esas zonas.<\/p>\n\n\n\n

Diversos estudios han demostrado tambi\u00e9n la importancia fundamental de las relaciones sociales, as\u00ed como de las amistades y los lazos familiares, para el bienestar f\u00edsico y psicol\u00f3gico. \u00c9ste es tambi\u00e9n un aspecto particular de la vida en los pa\u00edses del sur de Europa. La disposici\u00f3n de los centros urbanos en el sur, con plazas y lugares de encuentro donde la gente puede reunirse, ver espect\u00e1culos, charlar, comer y beber juntos, es por tanto una ventaja a\u00f1adida en t\u00e9rminos de disfrute y relajaci\u00f3n. Pero, adem\u00e1s de estos factores, hay consideraciones m\u00e1s estrictamente demogr\u00e1ficas que pueden cambiar la forma de ver estos fen\u00f3menos. En las pr\u00f3ximas d\u00e9cadas se producir\u00e1 una inversi\u00f3n significativa de la tendencia de crecimiento de la poblaci\u00f3n mundial. Europa, que representaba el 24.7% de la poblaci\u00f3n mundial a principios del siglo XX, s\u00f3lo representar\u00e1 el 7.2% en 2050 y el 5.7% a finales de siglo. \u00c1frica, por su parte, pasar\u00e1 del 8.1% de la poblaci\u00f3n mundial al 37.9%. Es m\u00e1s, seg\u00fan Niall Ferguson: \u201cSi se tiene en cuenta que cuando Crist\u00f3bal Col\u00f3n desembarc\u00f3 en el Nuevo Mundo s\u00f3lo hab\u00eda 500 millones de seres humanos, la proliferaci\u00f3n de la especie homo sapiens en la era moderna ha sido una haza\u00f1a asombrosa\u201d.<\/p>\n\n\n\n

La poblaci\u00f3n mundial supera actualmente los 8 mil millones de habitantes y podr\u00eda alcanzar un m\u00e1ximo de m\u00e1s de 10 mil millones a finales de siglo. Sin embargo, es muy probable que este pico sea el \u00faltimo, lo que disipa los temores de una pr\u00f3xima cat\u00e1strofe maltusiana, es decir, un exceso de poblaci\u00f3n totalmente insostenible para la Tierra. Desde los a\u00f1os 70, asistimos a un descenso progresivo de la tasa global de fecundidad, con pa\u00edses que se sit\u00faan por debajo del umbral (2.1 nacimientos por mujer) que permitir\u00eda mantener los niveles de poblaci\u00f3n existentes. No s\u00f3lo la \u00abvieja\u00bb Europa est\u00e1 sufriendo este fen\u00f3meno, sino tambi\u00e9n Estados Unidos, China y muchas otras regiones de Asia y Medio Oriente: nuestro planeta, excluida \u00c1frica, sobre todo el \u00c1frica Subsahariana, ya se est\u00e1 reduciendo. En Europa, los pa\u00edses m\u00e1s poblados, con excepci\u00f3n del Reino Unido, perder\u00e1n una parte importante de sus habitantes<\/a>. Entre estos pa\u00edses, Italia experimentar\u00e1 el descenso de poblaci\u00f3n m\u00e1s fuerte. Por otra parte, m\u00e1s de la mitad del aumento previsto de la poblaci\u00f3n mundial hasta mediados de siglo se concentrar\u00e1 en ocho pa\u00edses (Congo, Egipto, Etiop\u00eda, Filipinas, India, Nigeria, Pakist\u00e1n y Tanzania). La tasa global de fecundidad bajar\u00e1 de 2.3 en 2021 a 1.8 en 2100. A partir de 2064, descender\u00e1 inexorablemente.<\/p>\n\n\n\n

Las zonas azules de Italia albergan un gran n\u00famero de centenarios que viven un estilo de vida t\u00edpico de la regi\u00f3n mediterr\u00e1nea.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Ferguson, que cree que el colapso de la poblaci\u00f3n mundial ya no es cosa de ciencia ficci\u00f3n, coincide con los expertos en que la poblaci\u00f3n humana no disminuir\u00e1 gradualmente, sino casi tan r\u00e1pido como ha crecido en el pasado. El problema del futuro ser\u00e1, pues, c\u00f3mo contrarrestar las repercusiones del declive demogr\u00e1fico en el desarrollo econ\u00f3mico y la vitalidad social. Por otra parte, si la longevidad debe considerarse una oportunidad, tambi\u00e9n es necesario un sistema de protecci\u00f3n social<\/em> s\u00f3lido y moderno. En 2018, por primera vez en la historia, hab\u00eda m\u00e1s personas mayores de 65 a\u00f1os<\/em> que ni\u00f1os menores de cinco a\u00f1os. Adem\u00e1s, en 2019, la esperanza de vida al nacer alcanz\u00f3 los 73 a\u00f1os. En este contexto, hay que ofrecer mejores servicios sociales para las familias y la migraci\u00f3n calificada, o arriesgarse a una tendencia negativa irreversible de la tasa de natalidad, para las personas mayores, en t\u00e9rminos de calidad de vida, atenci\u00f3n, asistencia y uso de las tecnolog\u00edas digitales, y para los j\u00f3venes, en t\u00e9rminos de promoci\u00f3n de la entrada al mercado laboral y el acceso a la vivienda. Estas elecciones a realizar, especialmente para Italia, se inscriben en la perspectiva fundamental de la relaci\u00f3n con los pa\u00edses menos desarrollados y con la inmensa frontera de \u00c1frica a trav\u00e9s de un Plan Mattei cada vez m\u00e1s org\u00e1nico e integrado en la nueva pol\u00edtica europea del Global Gateway<\/em><\/em>.<\/p>\n\n\n\n

\n \n \t\r\n\t\t\t\t\t\r\n\t\t\t\t\t\r\n\t\t\t\t\t\r\n\t\t\t\t\r\n\t<\/picture>\r\n \n
Vista a\u00e9rea de la piscifactor\u00eda de Dugi Otok (Croacia). \u00a9 SIPA<\/figcaption>\n <\/a>\n<\/figure>\n\n\n\n\n

Conclusi\u00f3n<\/h2>\n\n\n\n

A partir de 2021, ha aumentado el inter\u00e9s de Europa por apoyar planes de inversi\u00f3n hacia \u00c1frica, los pa\u00edses del Pac\u00edfico Sudoriental y Am\u00e9rica Latina, lo que demuestra no s\u00f3lo la necesidad de intensificar las relaciones con estas regiones del mundo y aumentar su autonom\u00eda estrat\u00e9gica, sino tambi\u00e9n de abordar ciertas cuestiones fundamentales para su propio futuro, relativas al suministro de materias primas, la expansi\u00f3n de las rutas comerciales y la construcci\u00f3n de un nuevo paradigma econ\u00f3mico y productivo. Adem\u00e1s, la gran incertidumbre que caracteriza al sistema geopol\u00edtico mundial y la expansi\u00f3n de los escenarios b\u00e9licos han hecho imprescindible que la Uni\u00f3n Europea adopte una estrategia espec\u00edfica y act\u00fae en la escena internacional, acompa\u00f1ada de una renovada capacidad para forjar relaciones y proponer soluciones pol\u00edticas. En este contexto, el Mediterr\u00e1neo ha vuelto a convertirse, tras un largo per\u00edodo, en un baricentro fundamental para el tr\u00e1fico, las comunicaciones, el transporte y la log\u00edstica, as\u00ed como para el desarrollo de la industria y las infraestructuras en los territorios que lo bordean y en otras zonas circundantes. Al mismo tiempo, esta vasta zona es escenario de flujos migratorios ininterrumpidos y de la competencia entre un conjunto compuesto de pa\u00edses, que corre el riesgo de desequilibrarse cada vez m\u00e1s hacia el Este. Tambi\u00e9n por esta raz\u00f3n, el papel de Europa no puede ser el de un simple actor secundario o la suma de las iniciativas de sus pa\u00edses. Es necesario definir un horizonte unitario y una agenda a largo plazo para la acci\u00f3n continental hacia una parte esencial del planeta.<\/p>\n\n\n\n

En su discurso inaugural del 18 de julio, titulado \u00abEurope\u2019s Choice\u00bb<\/a>, Ursula von der Leyen subray\u00f3 la necesidad de una \u201cUni\u00f3n m\u00e1s r\u00e1pida y sencilla, m\u00e1s centrada y unida, m\u00e1s solidaria con los ciudadanos y las empresas\u201d y \u201cque act\u00fae all\u00ed donde aporte valor a\u00f1adido\u201d. Entre las prioridades de las directrices de compromiso de trabajo para los pr\u00f3ximos cinco a\u00f1os, la presidenta de la Comisi\u00f3n Europea indic\u00f3 una estrategia europea sobre migraci\u00f3n y asilo, reforzando las relaciones con los pa\u00edses de origen y tr\u00e1nsito, y previ\u00f3 adecuar las competencias de los ciudadanos del Sur a las lagunas del mercado laboral europeo, permitiendo atraer talentos mediante reglas armonizadas sobre el reconocimiento de sus calificaciones. Tambi\u00e9n anunci\u00f3 su intenci\u00f3n de nombrar un comisario para el Mediterr\u00e1neo, que se centrar\u00eda en la inversi\u00f3n y las asociaciones, la estabilidad econ\u00f3mica, la creaci\u00f3n de empleo, la energ\u00eda, la seguridad, la migraci\u00f3n y otras cuestiones de inter\u00e9s com\u00fan, \u201cen consonancia con nuestros valores y principios\u201d. En este marco, von der Leyen propuso \u201cun enfoque m\u00e1s centrado en nuestra gran vecindad\u201d para lograr un nuevo \u201cpacto mediterr\u00e1neo\u201d, que no se disociar\u00eda de un papel activo de Europa en Medio Oriente, con el fin de ofrecer \u201cuna clara se\u00f1al pol\u00edtica de asociaci\u00f3n en un mundo conflictivo e inestable\u201d.<\/p>\n\n\n\n

El inter\u00e9s de Europa por apoyar planes de inversi\u00f3n en \u00c1frica, los pa\u00edses del Pac\u00edfico Sudoriental y Am\u00e9rica Latina ha aumentado.<\/p>Amedeo Lepore<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Partiendo de estas premisas, los pr\u00f3ximos a\u00f1os podr\u00edan ser decisivos, no s\u00f3lo para la proyecci\u00f3n de la Uni\u00f3n Europea hacia el Sur del mundo, sino tambi\u00e9n para la orientaci\u00f3n org\u00e1nica de su pol\u00edtica exterior y para su participaci\u00f3n en la reorganizaci\u00f3n geopol\u00edtica mundial, llenando un vac\u00edo en la escena internacional. Una presencia europea incisiva en este \u00e1mbito contribuir\u00eda a estabilizar la situaci\u00f3n en el planeta y mitigar\u00eda en gran medida el aumento de los conflictos, al situarse en el centro de la confrontaci\u00f3n en tiempos muy dif\u00edciles. Los tres ejes centrales de esta estrategia europea ser\u00e1n la seguridad econ\u00f3mica, el comercio y la inversi\u00f3n en asociaci\u00f3n a trav\u00e9s del Global Gateway<\/em>. Este \u00faltimo servir\u00e1 para orientar las inversiones en los corredores de transporte, los puertos, las energ\u00edas renovables y la producci\u00f3n de hidr\u00f3geno verde, as\u00ed como las cadenas de valor de las materias primas. Por \u00faltimo, el objetivo de la reorganizaci\u00f3n del multilateralismo es restablecer un orden mundial basado en valores y normas, pero tambi\u00e9n reforzar el protagonismo de Europa en la reforma del sistema de relaciones internacionales.<\/p>\n\n\n\n

En la nueva fase, la Uni\u00f3n Europea est\u00e1 destinada a abordar cuestiones decisivas para el futuro del mundo, cambiando profundamente su forma de actuar, sus estrategias y programas, su papel de l\u00edder y volviendo la mirada hacia el Sur: el Mediterr\u00e1neo, \u00c1frica y Medio Oriente . Los pa\u00edses del sur de Europa \u2014incluida Italia y su Mezzogiorno\u2014 s\u00f3lo podr\u00e1n desempe\u00f1ar un papel importante y constituir una bisagra vital en este nuevo espacio \u00abeuromediterr\u00e1neo\u00bb abierto si consiguen integrarse plenamente en esta perspectiva unitaria y entrar en sinergia con las instituciones comunitarias.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

Articular el Mediterr\u00e1neo con el mundo.<\/p>\n

Si la Uni\u00f3n Europea quiere tener \u00e9xito en la nueva fase, debe mirara hacia el Sur. Para Amedeo Lepore, la pol\u00edtica de cohesi\u00f3n puede permitirle a Europa insertarse en las profundas transformaciones de la globalizaci\u00f3n \u2014siempre que sea capaz de desplegar un m\u00e9todo euromediterr\u00e1neo\u2014.<\/p>\n","protected":false},"author":17959,"featured_media":45697,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"templates\/post-angles.php","format":"standard","meta":{"_acf_changed":true,"_trash_the_other_posts":false,"footnotes":""},"categories":[809],"tags":[],"geo":[177],"acf":[],"yoast_head":"\nUna estrategia euromediterr\u00e1nea en el nuevo orden econ\u00f3mico mundial - El Grand Continent<\/title>\n<meta name=\"robots\" content=\"index, follow, max-snippet:-1, max-image-preview:large, max-video-preview:-1\" \/>\n<link rel=\"canonical\" href=\"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/2024\/09\/27\/una-estrategia-euromediterranea-en-el-nuevo-orden-economico-mundial\/\" \/>\n<meta property=\"og:locale\" content=\"es_ES\" \/>\n<meta property=\"og:type\" content=\"article\" \/>\n<meta property=\"og:title\" content=\"Una estrategia euromediterr\u00e1nea en el nuevo orden econ\u00f3mico mundial - El Grand Continent\" \/>\n<meta property=\"og:description\" content=\"Articular el Mediterr\u00e1neo con el mundo. 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