{"id":35071,"date":"2024-05-16T06:00:00","date_gmt":"2024-05-16T04:00:00","guid":{"rendered":"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/?p=35071"},"modified":"2024-06-04T12:05:43","modified_gmt":"2024-06-04T10:05:43","slug":"construir-la-europa-de-2030-la-doctrina-glucksmann","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/2024\/05\/16\/construir-la-europa-de-2030-la-doctrina-glucksmann\/","title":{"rendered":"Construir la Europa de 2030: la doctrina Glucksmann"},"content":{"rendered":"\n

Hay momentos en la Historia en los que el destino de los pueblos da un vuelco, momentos que elevan a las civilizaciones o las hunden en el abismo. En 2024 vivimos en Europa uno de esos momentos decisivos.<\/p>\n\n\n\n

Todo a nuestro alrededor y dentro de nosotros parece fr\u00e1gil, inestable y, en cierto modo, ya condenado. La guerra en nuestro continente, el colapso clim\u00e1tico, la crisis social, el rechazo de las instituciones, el aumento de la ira y la extensi\u00f3n de la violencia, la ola de extrema derecha que recorre nuestras naciones: estamos sumidos en el caos que los antiguos griegos situaban en el origen y el fin del mundo.<\/p>\n\n\n\n

La cuesti\u00f3n que se nos plantea es sencilla: \u00bfes \u00e9ste el principio o el fin? \u00bfEs la renovaci\u00f3n o la ca\u00edda de Europa?<\/p>\n\n\n\n

La respuesta a esta pregunta existencial depende de nosotros, de nuestra capacidad para superar nuestros miedos, tomar decisiones y sacar de nuestro interior la energ\u00eda, los recursos y el coraje necesarios para tomar las grandes decisiones y librar las grandes batallas.<\/p>\n\n\n\n

Durante mucho tiempo, el recuerdo de los cr\u00edmenes del pasado bast\u00f3 para legitimar el proyecto europeo. Seg\u00fan Imre Kert\u00e9sz, \u00abla Constituci\u00f3n silenciosa e impl\u00edcita de Europa es la memoria, la experiencia del siglo XX\u00bb. Pero la memoria se erosiona, la \u00abConstituci\u00f3n silenciosa\u00bb se desvanece, y es en las amenazas del momento, en los retos de la \u00e9poca, donde debemos encontrar la raz\u00f3n de ser de la Uni\u00f3n Europea.<\/p>\n\n\n\n

La agitaci\u00f3n actual podr\u00eda llevarnos al espasmo, pero en cambio deber\u00eda espolearnos, y las palabras de H\u00f6lderlin, \u00abDonde crece el peligro, crece tambi\u00e9n lo que salva\u00bb, deben guiar nuestros pasos. Porque es afrontando la posibilidad de la muerte del proyecto democr\u00e1tico europeo<\/a> como lo restauraremos y le daremos el vigor que hoy le falta.<\/p>\n\n\n\n

Es afrontando la posibilidad de la muerte del proyecto democr\u00e1tico europeo como lo restauraremos y le daremos el vigor que hoy le falta.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

La agenda \u00abEuropa 2030\u00bb que proponemos en esta campa\u00f1a no es ut\u00f3pica ni idealista. De hecho, es profundamente realista<\/em>.<\/p>\n\n\n\n

No en el sentido, por supuesto, que dan a este t\u00e9rmino los c\u00ednicos que lo confunden con la renuncia a las grandes ambiciones y a las grandes luchas. No, el realismo<\/em> del que hablamos aqu\u00ed nace de la confrontaci\u00f3n cara a cara con el caos, conoce el poder de las ideas y exige transformaciones radicales.<\/p>\n\n\n\n

Enfrentarse a los reg\u00edmenes autoritarios que tratan a nuestras naciones como trapos, deshacerse de los combustibles f\u00f3siles que nos esclavizan<\/a>, romper con la religi\u00f3n del libre comercio que nos debilita y luchar contra la explosi\u00f3n de desigualdades que socava nuestras democracias: eso es lo realista<\/em> en 2024.<\/p>\n\n\n\n

Todos los cambios aqu\u00ed esbozados tienen como objetivo crear la potencia ecol\u00f3gica europea que por s\u00ed sola nos permitir\u00e1 abrir la posibilidad de un nuevo siglo europeo<\/a>.<\/p>\n\n\n\n

Construir un poder soberano<\/h2>\n\n\n\n

Nuestra primera prioridad es b\u00e1sica: dotar a Europa de los medios para defenderse.<\/p>\n\n\n\n

\u00bfQu\u00e9 ocurrir\u00eda si Donald Trump fuera elegido presidente de los Estados Unidos el 5 de noviembre de 2024<\/a>? Europa se encontrar\u00eda sola. Sola frente a la guerra, sola frente a Putin.<\/p>\n\n\n\n

Ha llegado el momento de que Europa salga del estado de adolescencia en el que ha vivido durante d\u00e9cadas, protegida por un paraguas estadounidense que cre\u00eda que durar\u00eda para siempre. Ha llegado el momento de que Europa se vuelva adulta.<\/p>\n\n\n\n

Y este paso a la edad adulta comienza con Ucrania, con el frente ucraniano que es nuestra primera l\u00ednea de defensa.<\/p>\n\n\n\n

Ha llegado el momento de que Europa se vuelva adulta.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

No se equivoquen: no se trata de un simple conflicto territorial en Ucrania, sino de la brutal materializaci\u00f3n de la guerra lanzada por Vladimir Putin contra nuestras democracias mucho antes del 24 de febrero de 2022<\/a>. El objetivo no son el Donbas ni Crimea, es la propia Europa.<\/p>\n\n\n\n

Esto deber\u00eda haber estado claro desde el verano de 2008 y la invasi\u00f3n de Georgia, que nuestros l\u00edderes toleraron e incluso recompensaron redoblando sus reverencias al Kremlin. O al menos desde 2014 y la anexi\u00f3n de Crimea, que nuestros dirigentes permitieron que se produjera en aras de unos cuantos contratos de gas.<\/p>\n\n\n\n

Fue para abrir los ojos a los son\u00e1mbulos que nos gobiernan por lo que ped\u00ed la creaci\u00f3n de una comisi\u00f3n especial sobre la injerencia extranjera el primer d\u00eda de mi mandato, en julio de 2019.<\/p>\n\n\n\n

En agosto de ese mismo a\u00f1o, Emmanuel Macron pronunci\u00f3 un discurso ante los embajadores que ilustra perfectamente la ceguera de las \u00e9lites francesas y de los europeos occidentales en general. En un momento en que la guerra asolaba Ucrania, en que los ataques h\u00edbridos contra nuestras naciones se multiplicaban, declar\u00f3: \u00abCreo que para alcanzar el objetivo de reconstruir un verdadero proyecto europeo en este mundo que corre el riesgo de bipolarizarse, debemos lograr forjar un frente com\u00fan entre la Uni\u00f3n Europea y Rusia.\u00bb<\/p>\n\n\n\n

\u00abUn frente com\u00fan entre la Uni\u00f3n Europea y Rusia\u00bb: esta idea no s\u00f3lo era poco realista, sino que negaba la posibilidad misma del poder europeo. \u00bfC\u00f3mo se puede esperar reunir a los b\u00e1lticos o a los polacos para la autonom\u00eda estrat\u00e9gica europea cuando se aboga por un frente com\u00fan con la Rusia de Putin en agosto de 2019? El discurso de la Sorbona muri\u00f3 de esa vieja contradicci\u00f3n francesa: promover l\u00edricamente la soberan\u00eda europea mientras se ignoran soberbiamente los intereses vitales de medio continente.<\/p>\n\n\n\n

Todo cambi\u00f3, me dicen, el 24 de febrero de 2022. Efectivamente, han cambiado muchas cosas. Pero, \u00bfhan comprendido nuestros dirigentes que somos <\/a><\/em>el objetivo de Putin<\/a>?<\/p>\n\n\n\n

\u00bfHan comprendido nuestros dirigentes que somos<\/em> el objetivo de Putin?<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Si es as\u00ed, \u00bfpor qu\u00e9, tras dos a\u00f1os de guerra, Francia es incapaz de entregar m\u00e1s de 5 mil proyectiles al mes a la resistencia ucraniana cuando los rusos disparan hasta 20 mil al d\u00eda? \u00bfC\u00f3mo explicar la falta de orientaci\u00f3n de nuestro sistema de producci\u00f3n? \u00bfC\u00f3mo explicar que el gobierno franc\u00e9s haya suprimido el t\u00e9rmino \u00abpriorizaci\u00f3n\u00bb, es decir, dar prioridad a Ucrania sobre todos los dem\u00e1s pedidos de armas, de la directiva ASAP sobre la producci\u00f3n y entrega de municiones, valientemente presentada por el comisario Thierry Breton? \u00bfC\u00f3mo explicar la insistencia en suministrar armas a Doha o Abu Dabi en plena escasez en el frente ucraniano? \u00bfC\u00f3mo explicar la persistente negativa a embargar los 206 mil millones de activos p\u00fablicos rusos actualmente congelados en nuestros bancos y destinarlos a ayudar a la resistencia ucraniana?<\/p>\n\n\n\n

En 2023, el ej\u00e9rcito franc\u00e9s se enfrent\u00f3 a un centenar de actos hostiles directos de las fuerzas rusas. En este mismo momento, los Estados b\u00e1lticos est\u00e1n cavando trincheras y construyendo b\u00fankeres. El primer ministro polaco, por su parte, habla de un \u00abestado de preguerra\u00bb en Europa. La defensa europea no es un tema abstracto; de hecho, es probablemente la cuesti\u00f3n m\u00e1s concreta que los eurodiputados elegidos el 9 de junio encontrar\u00e1n sobre su mesa.<\/p>\n\n\n\n

Para rearmar nuestro continente, crearemos un fondo de defensa de 100 mil millones de euros, financiado por un nuevo pr\u00e9stamo europeo. Lo que Europa ha hecho frente a la pandemia, debe hacerlo frente a la guerra. La Comisi\u00f3n Europea se ha convertido en una central de compras y pedidos de vacunas, y debe hacer lo mismo con las armas, dando prioridad a la producci\u00f3n europea. Este giro beneficiar\u00e1 masivamente a la industria armament\u00edstica, en particular a la francesa. Por tanto, exigir\u00e1 un nuevo contrato con esas industrias, que incluya el control europeo de las exportaciones. La \u00abpriorizaci\u00f3n\u00bb, es decir, la orientaci\u00f3n de los poderes p\u00fablicos, se convertir\u00e1 en la regla.<\/p>\n\n\n\n

Los pol\u00edticos recuperar\u00e1n el puesto de mando que nunca debieron abandonar. Y har\u00e1n de la seguridad de Europa su br\u00fajula absoluta. Y, evidentemente, la seguridad no es s\u00f3lo defensa. Tambi\u00e9n tiene que ver con la energ\u00eda, la industria, la salud, la agricultura… De aqu\u00ed a 2030, volveremos a hacer de Europa un gran continente de productores.<\/p>\n\n\n\n

No podemos ser libres y soberanos si somos simples consumidores de seguridad producida en Estados Unidos, de energ\u00eda producida en el Golfo o de mercanc\u00edas producidas en China en todos los sectores estrat\u00e9gicos.<\/p>\n\n\n\n

En la dial\u00e9ctica del amo y el esclavo, el fil\u00f3sofo alem\u00e1n Hegel describi\u00f3 el destino al que se enfrentar\u00eda Europa si no despertaba. El amo de Hegel es un puro consumidor. Disfruta de las mercanc\u00edas fabricadas por el esclavo hasta el d\u00eda en que \u00e9ste comprende la omnipotencia que le confieren sus funciones productivas y decide derrocar al amo cuya dominaci\u00f3n se ha convertido poco a poco en dependencia e impotencia.<\/p>\n\n\n\n

He aqu\u00ed, dos siglos despu\u00e9s, la historia de nuestras relaciones con China y de lo que se llama err\u00f3neamente globalizaci\u00f3n, es decir, el desplazamiento del mundo fuera de Europa. No cabe duda de que los grandes grupos europeos se han beneficiado enormemente de este proceso, que ellos iniciaron, pero nuestras naciones se han visto considerablemente debilitadas.<\/p>\n\n\n\n

No olvidemos nunca el sentimiento de humillaci\u00f3n que todos sentimos durante la pandemia, cuando nos dimos cuenta de que nos hab\u00edamos vuelto incapaces de producir cubrebocas, paracetamol o curare. No se trata de un sentimiento de vanidad o de orgullo mal entendido. Es un sentimiento poderoso que debemos aprovechar si queremos detener el declive de Europa.<\/p>\n\n\n\n

La defensa europea es sin duda el tema m\u00e1s concreto que los eurodiputados elegidos el 9 de junio encontrar\u00e1n sobre su mesa.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Este declive no es fruto del destino divino. Es el producto de una multitud de decisiones humanas, de una b\u00fasqueda fren\u00e9tica de los menores costos de producci\u00f3n, de una b\u00fasqueda codiciosa de los mayores m\u00e1rgenes y, sobre todo, de sucesivas renuncias pol\u00edticas.<\/p>\n\n\n\n

En Europa, no podemos ser los \u00faltimos fieles seguidores de una religi\u00f3n de libre comercio en la que ya nadie cree. A partir de ahora, debemos defender ante todo los intereses de los europeos.<\/p>\n\n\n\n

Pondremos en marcha una estrategia \u00abMade in Europe<\/em>\u00bb destinada a repatriar la producci\u00f3n m\u00e1s estrat\u00e9gica y a asegurar las cadenas de suministro cr\u00edticas. Adoptaremos una \u00abBuy European Act<\/em>\u00ab, que dar\u00e1 prioridad a la reserva de contratos p\u00fablicos europeos para la producci\u00f3n europea.<\/p>\n\n\n\n

A partir de ahora, todas nuestras pol\u00edticas se medir\u00e1n con el rasero de la soberan\u00eda europea.<\/p>\n\n\n\n

Para garantizar nuestra soberan\u00eda alimentaria, reformaremos radicalmente la Pol\u00edtica Agr\u00edcola Com\u00fan (PAC). La Europa agr\u00edcola de 2030 ya no debe pagar por hect\u00e1rea, sino subvencionar el empleo, estabilizar los precios y las rentas de los agricultores, y constituir las reservas que necesitamos; en resumen, romper con la l\u00f3gica liberal de los a\u00f1os 1990-2000.<\/p>\n\n\n\n

Para garantizar nuestra soberan\u00eda en materia de salud, vamos a repatriar las cadenas de valor de los medicamentos esenciales, lanzar un Airbus de los medicamentos, crear un servicio p\u00fablico europeo de salud y hacer valer un derecho europeo de compra frente a adquisiciones como la del gigante franc\u00e9s de los medicamentos gen\u00e9ricos Biogaran.<\/p>\n\n\n\n

Para garantizar nuestra soberan\u00eda digital, crearemos un fondo soberano para la transici\u00f3n digital. Durante esta legislatura, hemos logrado imponer un marco reglamentario innovador: ahora es el momento de pasar a la inversi\u00f3n y la protecci\u00f3n. Queremos hacer de Europa la campeona mundial de la innovaci\u00f3n digital.<\/p>\n\n\n\n

Estos proyectos de soberan\u00eda europea empezar\u00e1n por la energ\u00eda.<\/p>\n\n\n\n

A partir de ahora, todas nuestras pol\u00edticas se medir\u00e1n por el rasero de la soberan\u00eda europea.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Construir una potencia ecol\u00f3gica<\/h2>\n\n\n\n

La invasi\u00f3n de Ucrania nos ha hecho darnos cuenta de que nuestra adicci\u00f3n al petr\u00f3leo y al gas nos ha hecho d\u00e9biles en una situaci\u00f3n hist\u00f3rica \u2014la guerra\u2014 que proh\u00edbe cualquier debilidad.<\/p>\n\n\n\n

En el centro de nuestra agenda para 2030 est\u00e1, por tanto, la revoluci\u00f3n energ\u00e9tica: el r\u00e1pido declive de los combustibles f\u00f3siles y el desarrollo masivo de las energ\u00edas renovables, con una parte de energ\u00eda nuclear en nuestro mix. No se trata s\u00f3lo de un imperativo clim\u00e1tico, sino tambi\u00e9n de un imperativo de seguridad y un ant\u00eddoto contra el sentimiento de decadencia que nuestras naciones han experimentado desde la primera crisis del petr\u00f3leo en 1973, cuando nos dimos cuenta de que depend\u00edamos de potencias extranjeras sobre las que ya no ten\u00edamos ning\u00fan control, ni siquiera en nuestra vida cotidiana.<\/p>\n\n\n\n

Las petromonarqu\u00edas del Golfo pueden amenazar con reducir su producci\u00f3n de petr\u00f3leo, pero no pueden impedir que el viento sople en Saint Nazaire o Dubl\u00edn. Vladimir Putin puede cortar el suministro de gas a Europa, pero no puede impedir que el sol brille en Marsella o La Valeta.<\/p>\n\n\n\n

Para llevar a buen puerto esta revoluci\u00f3n, hay que invertir masivamente. No s\u00f3lo en la instalaci\u00f3n, sino tambi\u00e9n en la producci\u00f3n de p\u00e1neles solares y turbinas e\u00f3licas. De lo contrario, nuestras inversiones en energ\u00edas renovables ser\u00e1n subvenciones al sistema de producci\u00f3n chino.<\/p>\n\n\n\n

En la actualidad, China controla el 60% de las cadenas de valor de las industrias ecol\u00f3gicas. Y este dominio no es producto de una simple l\u00f3gica de mercado, sino el resultado de un plan. Romper la soga que tenemos al cuello exige una ruptura limpia con la actual blandura.<\/p>\n\n\n\n

Aumentaremos masivamente nuestra capacidad de inversi\u00f3n p\u00fablica y privada poniendo en marcha un fondo soberano europeo de 200 mil millones de euros para la bifurcaci\u00f3n ecol\u00f3gica y creando una uni\u00f3n de mercados de capitales. Y, para garantizar que estas inversiones no sean mera agua vertida en un barril agujerado, introduciremos el proteccionismo ecol\u00f3gico en las fronteras de la Uni\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

Introduciremos el proteccionismo ecol\u00f3gico en las fronteras de la Uni\u00f3n.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Las cuestiones de la soberan\u00eda europea y la ecolog\u00eda son inseparables. El poder que queremos construir encontrar\u00e1 en la transformaci\u00f3n ecol\u00f3gica tanto su horizonte de sentido como los medios de su afirmaci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

Por un lado, nos preguntamos c\u00f3mo hacer frente a la cat\u00e1strofe clim\u00e1tica y a la sexta extinci\u00f3n masiva de especies. Por otro, nos preguntamos c\u00f3mo garantizar nuestra seguridad y restaurar la primac\u00eda del poder p\u00fablico sobre los poderes privados. Estas dos cuestiones son una misma y tienen una respuesta \u00fanica en el surgimiento del poder ecol\u00f3gico europeo, piedra angular de nuestra agenda.<\/p>\n\n\n\n

Estamos convencidos de que la uni\u00f3n de estos dos t\u00e9rminos, que no suelen asociarse, poder y ecolog\u00eda, dar\u00e1 lugar a una nueva oferta pol\u00edtica capaz de contrarrestar la tentaci\u00f3n del repliegue nacionalista.<\/p>\n\n\n\n

Esto supone, ante todo, no ceder al asalto pol\u00edtico y cultural contra la ecolog\u00eda lanzado por la derecha y la extrema derecha. Defenderemos todos los textos del Pacto Verde, que se ha convertido en el chivo expiatorio de todos nuestros problemas. Pero haremos algo m\u00e1s que defender lo que hemos iniciado: iniciaremos una nueva fase en la revoluci\u00f3n ecol\u00f3gica de Europa: la fase de la planificaci\u00f3n, la inversi\u00f3n y el acompa\u00f1amiento. Daremos la respuesta europea a la Ley de Reducci\u00f3n de la Inflaci\u00f3n de Joe Biden, a\u00f1adiendo una dimensi\u00f3n al planteamiento estadounidense que \u00e9ste ignora: la sobriedad.<\/p>\n\n\n\n

La sobriedad no tiene buena prensa. Sin embargo, es un instrumento esencial de soberan\u00eda para Europa, porque toda energ\u00eda ahorrada es un paso m\u00e1s hacia la autonom\u00eda de un continente que importa combustibles f\u00f3siles. Y es tambi\u00e9n un instrumento de justicia social, porque significa volver a poner l\u00edmites a la exuberancia de los poderosos.<\/p>\n\n\n\n

En las ciudades republicanas del Renacimiento italiano, la cuesti\u00f3n de la opulencia de los grandes suscitaba debates interminables. En Florencia y Bolonia se tem\u00eda que la exhibici\u00f3n indecente de la riqueza privada en la escena p\u00fablica rompiera el pacto c\u00edvico. Los primeros en volverse sobrios ser\u00e1n los m\u00e1s ebrios, y limitaremos las actividades m\u00e1s contaminantes de los m\u00e1s ricos.<\/p>\n\n\n\n

La sobriedad significa salir de la sociedad donde \u201ctodo es desechable\u201d y dar a cada europeo un nuevo derecho: el derecho a la reparabilidad. Apoyaremos este derecho, reduciremos el peso de los coches y exigiremos periodos m\u00ednimos de garant\u00eda de los productos.<\/p>\n\n\n\n

Estamos convencidos de que la uni\u00f3n de estos dos t\u00e9rminos, que no suelen asociarse, poder y ecolog\u00eda, dar\u00e1 lugar a una nueva oferta pol\u00edtica capaz de contrarrestar la tentaci\u00f3n del repliegue nacionalista.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Pero la sobriedad ecol\u00f3gica no es s\u00f3lo un conjunto de reglas. Es tambi\u00e9n una pol\u00edtica de inversi\u00f3n. Significa apoyar el desarrollo de industrias: una industria europea de reparaci\u00f3n, una industria europea de producci\u00f3n de piezas, una industria europea de reciclaje.<\/p>\n\n\n\n

Pondremos en marcha el plan \u00abEuropa en tren\u00bb, organizando una transferencia de fondos de los medios de transporte contaminantes \u2014impuesto sobre la parafina, contribuciones de las empresas de autopistas, etc.\u2014 al tren, desarrollando la red ferroviaria en todo el continente, y apoyando al mismo tiempo las l\u00edneas locales de pasajeros y las l\u00edneas de alta velocidad.<\/p>\n\n\n\n\n

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Invertiremos masivamente en la renovaci\u00f3n t\u00e9rmica de las viviendas y lanzaremos el plan \u00abNuestras Escuelas\u00bb, que garantizar\u00e1 la renovaci\u00f3n t\u00e9rmica de todas las escuelas p\u00fablicas del continente europeo de aqu\u00ed a 2030.<\/p>\n\n\n\n

Pero debemos ir m\u00e1s all\u00e1: nuestra agenda pretende hacer de Europa la primera fuerza mundial en la protecci\u00f3n de la vida y la biodiversidad. No s\u00f3lo mediante una \u00ab\u00e9tica de la consideraci\u00f3n\u00bb hacia los seres vivos. Porque sin biodiversidad no comer\u00edamos, no respirar\u00edamos y no podr\u00edamos luchar contra el cambio clim\u00e1tico, ya que el secuestro de carbono por los ecosistemas, como los oc\u00e9anos y los bosques, regula el clima.<\/p>\n\n\n\n

Nos basaremos en las recomendaciones tanto de la IPBES \u2014el equivalente en biodiversidad del IPCC\u2014 como de la UICN \u2014la Uni\u00f3n Internacional para la Conservaci\u00f3n de la Naturaleza\u2014 y toda pol\u00edtica p\u00fablica ser\u00e1 validada en funci\u00f3n de su impacto sobre la biodiversidad.<\/p>\n\n\n\n

Apoyaremos el \u00abobjetivo 30\u00d730\u00bb establecido en 2022 en la COP15 sobre biodiversidad de Montreal, cuyo objetivo es proteger el 30% de las zonas terrestres y el 30% de las zonas mar\u00edtimas de aqu\u00ed a 2030, lanzaremos un \u00abpacto azul\u00bb para proteger los oc\u00e9anos y revisaremos la Pol\u00edtica Agr\u00edcola Com\u00fan.<\/p>\n\n\n\n

La sobriedad ecol\u00f3gica no es s\u00f3lo un conjunto de normas. Es una pol\u00edtica de inversi\u00f3n.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Construir una potencia democr\u00e1tica<\/h2>\n\n\n\n

La soberan\u00eda de Europa depende tambi\u00e9n de la fuerza de su sistema pol\u00edtico y de su democracia.<\/p>\n\n\n\n

\u00bfQu\u00e9 es la identidad europea? Sin embarcarnos en una larga exposici\u00f3n hist\u00f3rica o filos\u00f3fica, podemos hacer una simple observaci\u00f3n: de Riga a Lisboa, de Atenas a Praga, todas las ciudades europeas se organizan en torno a sus plazas p\u00fablicas<\/a>.<\/p>\n\n\n\n

Esta caracter\u00edstica, heredada de la Antig\u00fcedad y del Renacimiento, es fundamental. Distingue nuestras ciudades de las estadounidenses, por ejemplo. Identifica nuestro paisaje urbano y revela una relaci\u00f3n espec\u00edfica con la ciudad y la ciudadan\u00eda, que se remonta a la Antigua Grecia y luego al Renacimiento. La Uni\u00f3n Europea es heredera de este humanismo c\u00edvico. Es un proyecto pol\u00edtico, y a\u00fan m\u00e1s: un proyecto democr\u00e1tico.<\/p>\n\n\n\n

Durante mucho tiempo, los europeos creyeron que la democracia era irreversible en su continente. Pero no es as\u00ed. La democracia es un proyecto ideol\u00f3gico en competencia con otros, en el mundo y en la propia Europa. Es una construcci\u00f3n hist\u00f3rica fr\u00e1gil que se derrumbar\u00e1 si no se cultiva y defiende. Pero hoy no se cultiva ni se defiende con suficiente constancia y seriedad.<\/p>\n\n\n\n

Los sucesivos esc\u00e1ndalos de corrupci\u00f3n e injerencia extranjera conocidos como Qatargate, Rusiagate y Chinagate nos recuerdan que el primer bien p\u00fablico, el que condiciona todos los dem\u00e1s, es la integridad de la democracia europea<\/em>. En el centro de nuestra Agenda est\u00e1, por tanto, la necesidad de reforzar y proteger esta integridad, de acuerdo con las siete propuestas de Antoine Vauchez, Thomas Piketty y sus coautores, publicadas en estas p\u00e1ginas<\/a>.<\/p>\n\n\n\n

Ya no es aceptable que los eurodiputados puedan trabajar para los gigantes de la energ\u00eda durante su mandato, o para cualquier otro lobby, que los dirigentes europeos puedan trabajar para Huawei o para cualquier otra empresa extranjera que suponga la m\u00e1s m\u00ednima amenaza para nuestra soberan\u00eda, que simples comit\u00e9s consultivos internos sin poder sancionador se encarguen de comprobar la probidad de directivos y cargos electos, o que las presidencias rotatorias del Consejo est\u00e9n apadrinadas por grandes grupos privados.<\/p>\n\n\n\n

De Riga a Lisboa, de Atenas a Praga, todas las ciudades europeas se organizan en torno a sus plazas p\u00fablicas.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Devolveremos a las instituciones el \u00abarte de la separaci\u00f3n\u00bb que es consustancial a la democracia liberal y protege la esfera p\u00fablica de la penetraci\u00f3n de los intereses privados. Propondremos una \u00abdirectiva sobre la protecci\u00f3n penal de la integridad de la democracia\u00bb, dotaremos a la Fiscal\u00eda Europea de poderes espec\u00edficos y crearemos una alta autoridad para la integridad de la vida p\u00fablica Europea con las mismas prerrogativas que la instituci\u00f3n francesa en la que se inspira.<\/p>\n\n\n\n

No se trata de una cuesti\u00f3n de moral, sino, una vez m\u00e1s, de soberan\u00eda. Decenas de antiguos jefes de gobierno y ministros europeos, de todos los Estados miembros y de todos los colores pol\u00edticos, se han puesto al servicio de los intereses rusos, chinos o qatar\u00edes. Al mismo tiempo, partidos y ONG de la Uni\u00f3n han sido financiados por oligarcas rusos, algunos de los cuales han comprado literalmente pasaportes europeos a gobiernos europeos. Se trata de un enorme agujero en nuestra seguridad. Presentaremos una versi\u00f3n reforzada del Paquete de Defensa de la Democracia propuesto por la Comisi\u00f3n Europea para combatir estas injerencias.<\/p>\n\n\n\n

Se han creado granjas de trolls para manipular nuestro debate p\u00fablico, y las principales plataformas no ven nada malo en animar a las tiran\u00edas extranjeras a atacar nuestro espacio informativo. Presionaremos a la Comisi\u00f3n para que imponga multas disuasorias a estas plataformas de acuerdo con las normas adoptadas por la Uni\u00f3n. Como Tik Tok plantea problemas espec\u00edficos de seguridad e injerencia, crearemos una comisi\u00f3n especial sobre la plataforma china en los primeros d\u00edas de mandato para que se pronuncie sobre su prohibici\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

La resistencia del ecosistema democr\u00e1tico europeo depende de la existencia de una prensa libre e independiente. Pero las fuerzas del mercado amenazan ahora su supervivencia. Lanzaremos una segunda versi\u00f3n de la Ley de Libertad de los Medios, que ir\u00e1 mucho m\u00e1s lejos contra la estructura cada vez m\u00e1s olig\u00e1rquica de la propiedad de los medios en Europa, y crearemos un fondo europeo para financiar el periodismo de investigaci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

La democracia es un proyecto ideol\u00f3gico que compite con otros.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

La debilidad mostrada por el Consejo y la Comisi\u00f3n frente a Viktor Orb\u00e1n allana el camino para un retroceso general del Estado de derecho en la Uni\u00f3n y siembra las semillas de su descomposici\u00f3n pol\u00edtica. Comprobaremos que el pago de los fondos europeos est\u00e9 condicionado al respeto de los principios fundamentales de la democracia liberal, y empujaremos al Parlamento a entablar una lucha de poder m\u00e1s asertiva con las dem\u00e1s instituciones comunitarias para conseguirlo, en particular bloqueando el presupuesto si es necesario.<\/p>\n\n\n\n

La construcci\u00f3n de una Europa verdaderamente poderosa presupone una toma de decisiones coherente y eficaz en el seno de la Uni\u00f3n y, por tanto, reformas institucionales de gran calado. Defenderemos el fin de la unanimidad, que da a Hungr\u00eda el derecho a vetar sanciones contra Rusia, por ejemplo, o a los para\u00edsos fiscales el derecho a vetar cuestiones fiscales, y el paso a la mayor\u00eda calificada en el Consejo. Reforzaremos las prerrogativas del Parlamento Europeo otorg\u00e1ndole iniciativa legislativa y derecho a recaudar impuestos. Es imposible construir un poder pol\u00edtico europeo sin un avance federal, y nosotros somos los portadores de un aut\u00e9ntico \u00abPacto Girondino\u00bb para Francia y Europa.<\/p>\n\n\n\n

Tenemos ante nosotros una doble misi\u00f3n hist\u00f3rica: profundizar en la construcci\u00f3n europea y ampliar la Uni\u00f3n. Lejos de oponer estas dos ambiciones fundamentales, las unimos y las abordaremos de frente. El momento de la ampliaci\u00f3n a Ucrania<\/a> y a los dem\u00e1s pa\u00edses candidatos que hayan cumplido las especificaciones establecidas por la Uni\u00f3n ser\u00e1 tambi\u00e9n el momento de una revisi\u00f3n de las instituciones europeas<\/a>. Haremos de 2030 el a\u00f1o de la reunificaci\u00f3n del continente europeo y de la democratizaci\u00f3n de la Uni\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

Nuestro mandato ser\u00e1 que el Parlamento elabore un tratado de ampliaci\u00f3n que sea tambi\u00e9n un tratado de democratizaci\u00f3n de la Uni\u00f3n. El a\u00f1o 2030 debe ser el gran momento constituyente que Europa necesita para afirmarse como potencia.<\/p>\n\n\n\n

Somos los portadores de un aut\u00e9ntico \u00abPacto Girondino\u00bb para Francia y Europa.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Construir una potencia solidaria<\/h2>\n\n\n\n

La democracia no es s\u00f3lo un marco institucional, es tambi\u00e9n un sistema de solidaridad. No puede haber democracia estable sin solidaridad social.<\/p>\n\n\n\n

Los trabajadores polacos que crearon el primer sindicato libre del mundo comunista, llam\u00e1ndolo \u00abSolidarnosc\u00bb (\u00abSolidaridad\u00bb), lo entendieron bien. Esa es la palabra clave: solidaridad. Lo que nos mantiene unidos. Ninguna comunidad de destino puede mantenerse unida sin un fuerte mecanismo de solidaridad y redistribuci\u00f3n de la riqueza.<\/p>\n\n\n\n

En tiempos de guerra, la solidaridad y la redistribuci\u00f3n son mecanismos de autodefensa de las democracias. La cohesi\u00f3n de la Uni\u00f3n, base de su poder, exige que los europeos m\u00e1s ricos compartan el esfuerzo colectivo.<\/p>\n\n\n\n

Nuestras democracias no sobrevivir\u00e1n si el 31% de los padres europeos se saltan comidas para alimentar a sus hijos mientras los multimillonarios tienen una tasa impositiva sobre su riqueza inferior al 0.5%. La Uni\u00f3n debe convertirse en un veh\u00edculo de redistribuci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n

Junto con Paul Magnette, Aurore Lalucq y activistas ecologistas como Claire Nouvian y Camille Etienne, hemos lanzado una Iniciativa Ciudadana Europea (ICE) para gravar las mayores fortunas a escala continental con el fin de financiar una transici\u00f3n ecol\u00f3gica socialmente justa. Llevaremos este proyecto al Parlamento.<\/p>\n\n\n\n

En la pr\u00e1ctica, se trata de garantizar que los contribuyentes con un patrimonio superior a 100 millones de euros paguen el equivalente al 2% de su riqueza en impuestos en Europa. Los dem\u00f3cratas de todo el mundo se preguntan c\u00f3mo pueden participar los ultrarricos en el mundo com\u00fan, y en Estados Unidos Joe Biden defiende una medida en el mismo sentido<\/a>.<\/p>\n\n\n\n

Ese es el primer paso. El segundo es la justicia y la equidad en el impuesto sobre las empresas. No hay ninguna justificaci\u00f3n para que las multinacionales paguen menos impuestos que las PYME. El acuerdo internacional de tributaci\u00f3n m\u00ednima al 15%, que empez\u00f3 a aplicarse en la Uni\u00f3n el 1 de enero de 2024, es un primer paso, pero sigue siendo insuficiente, y vamos a elevar la tasa al nivel de la media del impuesto para las empresas en la Uni\u00f3n. Condicionaremos el acceso al mercado europeo, nuestra principal palanca en la escena mundial, al pago de este impuesto m\u00ednimo. Cualquier multinacional que opere en Europa tendr\u00e1 que pagar un impuesto cuando sus productos entren en nuestro mercado si su tasa impositiva efectiva es inferior al est\u00e1ndar europeo.<\/p>\n\n\n\n

No hay ninguna justificaci\u00f3n para que las multinacionales paguen menos impuestos que las PYME.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

Nuestra Agenda 2030 pretende volver a conectar con la larga b\u00fasqueda de igualdad y justicia que ha dado forma a las democracias europeas. En el coraz\u00f3n del continente m\u00e1s rico del mundo, millones de familias no pueden encontrar una vivienda digna.<\/p>\n\n\n\n

Al menos 900 mil personas en Europa dormir\u00e1n sin techo por la noche o en alojamientos de emergencia que tendr\u00e1n que abandonar a la ma\u00f1ana siguiente. Esto no puede continuar. Impulsaremos un gran plan de \u00abVivienda primero\u00bb inspirado en la pol\u00edtica finlandesa para que no haya gente sin hogar.<\/p>\n\n\n\n

El precio de los alquileres es una urgencia social en casi todas las grandes ciudades europeas, que afecta sobre todo a los j\u00f3venes, y entre ellos a los m\u00e1s vulnerables. Esta crisis les impide abandonar el hogar familiar, emanciparse y construir una vida independiente y libre. Adoptaremos un Plan Marshall europeo para la vivienda, que financiar\u00e1 inversiones masivas en la construcci\u00f3n y renovaci\u00f3n energ\u00e9tica de viviendas asequibles para todos. Tambi\u00e9n movilizaremos el dinero privado mediante la creaci\u00f3n de una plataforma europea espec\u00edfica y el establecimiento de garant\u00edas europeas para la inversi\u00f3n en vivienda asequible.<\/p>\n\n\n\n

Tener un techo es un derecho del que se ven privados demasiados ciudadanos europeos, pero un techo no basta: los ciudadanos europeos deben poder calentarse en invierno. La energ\u00eda es un bien de primera necesidad y lo volveremos a tratar como tal, reformaremos el mercado europeo de la energ\u00eda y defenderemos una tarifa energ\u00e9tica social a escala europea.<\/p>\n\n\n\n

La lucha por los derechos sociales es una continuaci\u00f3n de la larga lucha por los derechos humanos que ha dado forma a las democracias europeas. La primac\u00eda concedida durante demasiado tiempo \u00fanicamente a las libertades econ\u00f3micas en las instituciones europeas ha socavado el proyecto de una Europa democr\u00e1tica. Si la Uni\u00f3n Europea quiere conservar su sentido y su raz\u00f3n de ser, debe encontrar su verdadero centro de gravedad o, mejor a\u00fan, su fuerza propulsora, en la ampliaci\u00f3n de la aplicaci\u00f3n de los derechos humanos fundamentales que constituyen la base misma de su proyecto.<\/p>\n\n\n\n

La b\u00fasqueda de la igualdad empieza por la igualdad entre mujeres y hombres. Construiremos una Europa feminista. En un momento en que el gobierno franc\u00e9s se ha esforzado tanto por deshacer la directiva europea sobre la violencia contra las mujeres, reintroduciremos la definici\u00f3n europea de violaci\u00f3n que Emmanuel Macron hab\u00eda suprimido. Adoptaremos la cl\u00e1usula de la mujer europea m\u00e1s favorecida, que garantizar\u00e1 a todas las mujeres europeas los derechos m\u00e1s protectores que existen en la Uni\u00f3n, para que todas las mujeres europeas puedan beneficiarse de la pol\u00edtica de lucha contra la violencia contra las mujeres que se lleva a cabo en Espa\u00f1a o de la pol\u00edtica de igualdad salarial que se lleva a cabo en Escandinavia. Defenderemos sin descanso la inclusi\u00f3n del derecho al aborto en la Carta Europea de Derechos Fundamentales.<\/p>\n\n\n\n

La primac\u00eda concedida durante demasiado tiempo \u00fanicamente a las libertades econ\u00f3micas en las instituciones europeas ha socavado el proyecto de una Europa democr\u00e1tica.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

La potencia europea ser\u00e1 una potencia humanista, que defienda los derechos humanos desde el Karabaj hasta Gaza, y que se niegue a considerar el derecho internacional como de geometr\u00eda variable. Lejos de ser idealista, una pol\u00edtica exterior europea basada en la promoci\u00f3n de los principios en los que se fundan nuestras democracias es el requisito previo para una Europa cre\u00edble y, por tanto, poderosa a escala mundial.<\/p>\n\n\n\n

*<\/p>\n\n\n\n

Este es un breve esbozo del horizonte que nos movilizar\u00e1 en las pr\u00f3ximas semanas, meses y a\u00f1os. Este es el camino que proponemos para lanzar un nuevo siglo europeo.<\/p>\n\n\n\n

La Uni\u00f3n Europea ha estado dirigida durante mucho tiempo por dem\u00f3cratas c\u00f3modos; necesita dem\u00f3cratas luchadores. Nosotros seremos esos dem\u00f3cratas luchadores en el Parlamento Europeo.<\/p>\n\n\n\n

Yo forj\u00e9 mis convicciones europeas en los conflictivos m\u00e1rgenes de la Uni\u00f3n. Para m\u00ed, Europa no es un eslogan de campa\u00f1a, ni una tecnoestructura, ni un conjunto de normas. Europa es un ideal, es una lucha.<\/p>\n\n\n\n

La Uni\u00f3n Europea ha estado dirigida durante mucho tiempo por dem\u00f3cratas c\u00f3modos; necesita dem\u00f3cratas luchadores.<\/p>Rapha\u00ebl Glucksmann<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n

He visto a hombres y mujeres en Georgia y Ucrania arriesgar su vida por este ideal europeo. En 2014, vi a j\u00f3venes ucranianos desafiar las balas de francotiradores en la plaza Ma\u00efdan con una bandera azul en la mano.<\/p>\n\n\n\n

Las personas que aspiran a formar parte de la gran familia europea no se alzan por una tecnoestructura o un conjunto de normas. Se alzan por una visi\u00f3n del mundo. Se alzan por la libertad, por la igualdad, por una cierta idea de justicia que Europa encarna a sus ojos.<\/p>\n\n\n\n

Es hora de que la Uni\u00f3n Europea demuestre que es digna de la inmensa promesa que encierra. De eso trata nuestra agenda \u00abEuropa 2030\u00bb.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

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