{"id":15807,"date":"2023-04-17T16:30:00","date_gmt":"2023-04-17T15:30:00","guid":{"rendered":"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/?p=15807"},"modified":"2023-05-31T15:35:40","modified_gmt":"2023-05-31T14:35:40","slug":"organizar-la-violencia-el-poder-de-los-grupos-de-autodefensa-en-mexico","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/legrandcontinent.eu\/es\/2023\/04\/17\/organizar-la-violencia-el-poder-de-los-grupos-de-autodefensa-en-mexico\/","title":{"rendered":"Organizar la violencia: el poder de los grupos de autodefensa en M\u00e9xico"},"content":{"rendered":"\n
Hace diez a\u00f1os, en febrero de 2013, un centenar de hombres se alz\u00f3 en armas en el coraz\u00f3n de la regi\u00f3n de Tierra Caliente, en el estado Michoac\u00e1n, al occidente de M\u00e9xico <\/span>1<\/sup><\/a><\/span><\/span>. Se denominaron a s\u00ed mismos \u00abautodefensas de Michoac\u00e1n\u00bb y su objetivo era combatir y destruir al c\u00e1rtel de los Caballeros Templarios, una organizaci\u00f3n criminal que dominaba gran parte del estado. En gran medida, las autodefensas lo consiguieron. En paralelo a los dos a\u00f1os de movilizaciones que reunieron a m\u00e1s de quince mil hombres armados en 34 municipios de Michoac\u00e1n, el gobierno del presidente Enrique Pe\u00f1a Nieto lider\u00f3 en 2014 un proceso de negociaci\u00f3n sin precedentes entre civiles armados y el poder p\u00fablico. En un a\u00f1o, parte de las autodefensas pasaron de ser grupos armados ilegales a fuerzas p\u00fablicas, mediante un proceso de \u00ablegalizaci\u00f3n\u00bb que llev\u00f3 a la creaci\u00f3n de una nueva polic\u00eda local, la ya desaparecida Fuerza Rural.<\/p>\n\n\n\n Formalmente activos entre 2013 y 2015, los grupos de autodefensa de Michoac\u00e1n constituyen un fruct\u00edfero caso de estudio para analizar el vigilantismo armado, sus v\u00ednculos con grupos criminales y autoridades p\u00fablicas, y el uso que estas \u00faltimas hacen de los intermediarios locales para la gobernanza. Sobre todo, y m\u00e1s all\u00e1 del periodo activo del movimiento, los levantamientos y la multiplicaci\u00f3n de los grupos han dejado huellas que siguen siendo fundamentales en el paisaje de la pol\u00edtica, la (in)seguridad y la violencia en M\u00e9xico.<\/p>\n\n\n\n A partir de trabajo de campo realizado desde 2013 en los estados de Michoac\u00e1n y Guerrero, este ensayo deja de lado el tema de las polic\u00edas comunitarias -que pertenecen a comunidades ind\u00edgenas- para centrarse en los grupos de autodefensa y plantear las siguientes preguntas sobre la gobernanza de la violencia en M\u00e9xico: \u00bfpor qu\u00e9 se han multiplicado los grupos de autodefensa?, \u00bfcu\u00e1l es su relaci\u00f3n con los grupos criminales, por un lado, y con las autoridades p\u00fablicas, por el otro?, \u00bfy qu\u00e9 papel desempe\u00f1an en la regulaci\u00f3n de la violencia y en la gobernanza local, sobre todo en zonas emblem\u00e1ticas de la \u00abguerra contra las drogas\u00bb?<\/p>\n\n\n\n Formalmente activos entre 2013 y 2015, los grupos de autodefensa de Michoac\u00e1n constituyen un fruct\u00edfero caso de estudio para analizar el vigilantismo armado, sus v\u00ednculos con grupos criminales y autoridades p\u00fablicas, y el uso que estas \u00faltimas hacen de los intermediarios locales para la gobernanza.<\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n Para responder a esas preguntas, examinaremos c\u00f3mo los l\u00edderes civiles armados y el gobierno mexicano han dialogado, colaborado y se han enfrentado durante la \u00faltima d\u00e9cada. Sobre todo, veremos c\u00f3mo los primeros, a trav\u00e9s de su movilizaci\u00f3n en grupos de autodefensa, pero tambi\u00e9n de sus relaciones con las autoridades p\u00fablicas, se han convertido progresivamente en patrones pol\u00edticos -caciques, para llamarlos con un nombre mexicano- capaces de controlar territorios, recursos pol\u00edticos estrat\u00e9gicos, mercados econ\u00f3micos l\u00edcitos e il\u00edcitos, y redes cruciales de intermediaci\u00f3n y clientelismo entre los ciudadanos y los tres niveles de gobierno.<\/p>\n\n\n\n El an\u00e1lisis de la \u00faltima d\u00e9cada en Michoac\u00e1n documenta as\u00ed el surgimiento de operadores pol\u00edticos armados capaces de utilizar sus habilidades para volverse dominantes -e indispensables- en los esquemas de gobernanza local. Al mismo tiempo, este caso nos permite estudiar c\u00f3mo las autoridades son capaces de negociar, cooptar, reprimir o institucionalizar a diversos actores informales, incluso violentos, en el M\u00e9xico contempor\u00e1neo.<\/p>\n\n\n\n Sin embargo, veremos que gobernar a trav\u00e9s de \u00abhombres fuertes\u00bb locales -ya sean l\u00edderes de grupos de autodefensa, jefes criminales, miembros de partidos pol\u00edticos, activistas o \u00e9lites econ\u00f3micas- contribuye a promover el uso de la fuerza y las armas como recurso clave para obtener o mantener el poder. En \u00faltima instancia, eso limita, debilita e incluso, en algunos casos, impide la participaci\u00f3n y representaci\u00f3n pol\u00edtica de los ciudadanos sin armas, cerrando as\u00ed la vida democr\u00e1tica de regiones enteras.<\/p>\n\n\n\n Promover el uso de la fuerza y las armas como recurso clave para obtener o mantener el poder limita, debilita e incluso, en algunos casos, impide la participaci\u00f3n y representaci\u00f3n pol\u00edtica de los ciudadanos sin armas, cerrando as\u00ed la vida democr\u00e1tica de regiones enteras.<\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n Los grupos de autodefensa han afirmado estar \u00abhaciendo el trabajo que el gobierno no hace\u00bb en la lucha contra el crimen organizado y la extorsi\u00f3n, al tiempo que le piden a ese mismo gobierno que los apoye con recursos pol\u00edticos y militares. De ah\u00ed la paradoja: mientras reivindicaban una tradici\u00f3n de localismo, autoorganizaci\u00f3n y autojusticia, las autodefensas exig\u00edan una mayor presencia e intervenci\u00f3n del Estado, principalmente para apoyar sus levantamientos y la lucha contra los Templarios.<\/p>\n\n\n\n Sin embargo, tras diez a\u00f1os de promesas de paz y seguridad, Michoac\u00e1n no s\u00f3lo se mantuvo entre los cinco estados m\u00e1s violentos del pa\u00eds, sino que registr\u00f3 un aumento de 186.97% en los homicidios entre 2015 y 2021. En 2022, a pesar de una disminuci\u00f3n de 10.9%, se mantuvo como el cuarto estado m\u00e1s violento, con un total de 2 423 homicidios registrados y una tasa de 51 asesinatos por cada cien mil habitantes. Adem\u00e1s, en 2021 ocup\u00f3 el primer lugar nacional en desplazamiento forzado interno, con 13 515 personas oficialmente desplazadas.<\/p>\n\n\n\n Adem\u00e1s, Michoac\u00e1n es hogar de decenas de organizaciones criminales y grupos armados. En los \u00faltimos a\u00f1os, ha sido escenario de un conflicto especialmente violento entre el C\u00e1rtel Jalisco Nueva Generaci\u00f3n (CJNG) y una coalici\u00f3n de grupos criminales locales y antiguos grupos de autodefensa, los C\u00e1rteles Unidos. Por \u00faltimo, Michoac\u00e1n es una regi\u00f3n crucial para la importaci\u00f3n y el tr\u00e1fico de coca\u00edna, la importaci\u00f3n de precursores qu\u00edmicos de Asia para la producci\u00f3n de fentanilo y metanfetaminas, para la extorsi\u00f3n y el cobro de piso a empresas locales, y exportaciones multimillonarias de productos mineros y agroindustriales como lim\u00f3n, bayas y el famoso aguacate (del que Michoac\u00e1n es el mayor productor mundial), formando un paisaje particularmente imbricado y complejo de mercados delictivos.<\/p>\n\n\n\n Michoac\u00e1n es una regi\u00f3n crucial para la importaci\u00f3n y el tr\u00e1fico de coca\u00edna, la importaci\u00f3n de precursores qu\u00edmicos de Asia para la producci\u00f3n de fentanilo y metanfetaminas, para la extorsi\u00f3n y el cobro de piso a empresas locales.<\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n Para este an\u00e1lisis, identifico cuatro fases que ayudan a entender el panorama actual de violencia. La primera es la creaci\u00f3n y expansi\u00f3n de grupos de autodefensa, su lucha contra los Templarios y su institucionalizaci\u00f3n parcial bajo la Fuerza Rural, entre 2013 y 2015. En la segunda fase, entre 2015 y 2018, el poder local se consolid\u00f3 en manos de l\u00edderes que hab\u00edan acumulado recursos y control sobre mercados l\u00edcitos e il\u00edcitos a trav\u00e9s de su participaci\u00f3n en grupos de autodefensa. La tercera fase est\u00e1 marcada por una violenta ruptura de alianzas entre los grupos dominantes que desemboc\u00f3 en el conflicto entre C\u00e1rteles Unidos y el CJNG, episodio al que los lugare\u00f1os se refieren ahora como \u00abla guerra\u00bb y que tuvo lugar entre 2019 y 2022. Por \u00faltimo, el periodo actual, caracterizado por una violencia cr\u00f3nica mezclada con una aparente estabilidad post-\u201cguerra\u201d, que nuestros interlocutores, en el invierno de 2022, describieron como \u201ctensa calma\u201d.<\/p>\n\n\n\n Esa etiqueta, lejos de representar un avance hacia la paz duradera, indica m\u00e1s bien que los habitantes se han acostumbrado a niveles y pr\u00e1cticas de violencia extremos. Juan (nombre ficticio), un activista que lleva d\u00e9cadas trabajando en la regi\u00f3n de Tierra Caliente, Michoac\u00e1n, describe la situaci\u00f3n actual de la siguiente manera:<\/p>\n\n\n\n \u00abPaz no hay. La tensa calma, s\u00ed, eso es algo que muchos dicen… Creo que somos resistentes, pero estamos frustrados, resignados. \u00bfSe puede construir algo concreto as\u00ed? \u00bfSe puede trabajar sobre esa base? A lo mejor ya no vivimos con el miedo de antes, a lo mejor los grupos de autodefensa nos han quitado parte del miedo, pero no te enga\u00f1es… No es la paz o el conflicto, no s\u00e9 lo que es… Es la vida que tenemos. Cuando las cosas se calientan, es cuando ves que la gente se encierra inmediatamente en s\u00ed misma… Es algo aprendido. No sales, no hablas, te cuidas, sabes buscar informaci\u00f3n importante… Pero todo es por miedo, temor. La gente no se arriesga, porque todos conocemos la realidad de la amenaza. Aqu\u00ed, si vas demasiado lejos, est\u00e1s muerto. Y hay una delgada l\u00ednea entre hacer lo correcto e ir demasiado lejos. Quiz\u00e1 seamos m\u00e1s c\u00ednicos que antes, m\u00e1s esc\u00e9pticos ante cualquier promesa, cualquier proyecto, cualquier discurso… La gente aqu\u00ed es muy pragm\u00e1tica, sabe que la violencia es lo que te da el poder real, el poder de hacer pol\u00edtica principalmente. Vivimos en una tierra de violencia, una tierra de c\u00e1rteles y grupos armados. Pero ojo, no es una zona sin ley, en Michoac\u00e1n hay ley y orden. […] Vivimos bajo la ley de los c\u00e1rteles, del ej\u00e9rcito, del gobierno.\u00bb<\/em> <\/span>2<\/sup><\/a><\/span><\/span><\/p>\n\n\n\n El argumento de Juan sobre el orden es crucial para entender gran parte de la violencia en Michoac\u00e1n, pero tambi\u00e9n en M\u00e9xico en general. Ese \u00aborden\u00bb no implica necesariamente la ausencia de violencia, sino su regulaci\u00f3n por parte de diversos actores p\u00fablicos y privados que negocian la forma en que se ejercen el poder y la autoridad a nivel local. Esas negociaciones -o di\u00e1logos- se dan de manera permanente, lejos de la idea de grandes pactos \u00abmafiosos\u00bb. Tienen lugar m\u00e1s bien en el marco de lo que se puede llamar \u00abrelaciones pol\u00edtico-criminales\u00bb, es decir, las relaciones entre universos pol\u00edticos y actores locales m\u00e1s o menos violentos: caciques, hombres fuertes, miembros de la \u00e9lite econ\u00f3mica local, operadores pol\u00edticos, representantes pol\u00edticos y, por supuesto, narcotraficantes. En resumen, autoridades de facto<\/em> que se han convertido, como veremos m\u00e1s adelante, en intermediarios indispensables para el buen funcionamiento de la gobernanza local.<\/p>\n\n\n\n Ese \u00aborden\u00bb no implica necesariamente la ausencia de violencia, sino su regulaci\u00f3n por parte de diversos actores p\u00fablicos y privados que negocian la forma en que se ejercen el poder y la autoridad a nivel local.<\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n Numerosos trabajos de acad\u00e9micos, expertos y periodistas han sostenido que la multiplicaci\u00f3n de las organizaciones criminales y de los grupos civiles armados, como las autodefensas, es un s\u00edntoma del debilitamiento del Estado. Se conciben como enemigos absolutos de los poderes p\u00fablicos. <\/p>\n\n\n\n Este an\u00e1lisis presenta una hip\u00f3tesis distinta: sostengo que la multiplicaci\u00f3n de actores violentos en M\u00e9xico -incluidos los grupos narcotraficantes- lejos de implicar un repliegue mec\u00e1nico y una derrota del Estado, ilustra una transformaci\u00f3n de las modalidades de negociaci\u00f3n entre las autoridades p\u00fablicas, los civiles armados y los grupos criminales para la gobernabilidad de amplias zonas del pa\u00eds, especialmente en el contexto de la \u00abguerra contra las drogas\u00bb.<\/p>\n\n\n\n Retomando el argumento de Juan sobre el \u201corden\u201d en Michoac\u00e1n, vale la pena recordar el objetivo inicial de los grupos de autodefensa: abolir el control impuesto por los Templarios y hacer desaparecer al c\u00e1rtel. Esa \u00ablimpieza\u00bb se acompa\u00f1aba del deseo de producir un nuevo orden social y moral que recuerda la tensi\u00f3n que anima a la mayor\u00eda de los grupos de autodefensa, en M\u00e9xico y en el mundo, y que pueden analizarse como movimientos comprometidos con \u00abviolar la ley para hacerla cumplir\u00bb <\/span>3<\/sup><\/a><\/span><\/span>.<\/p>\n\n\n\n Inicialmente, las tareas \u00abjudiciales\u00bb de los grupos de autodefensa pod\u00edan incluir la confiscaci\u00f3n de bienes de los Templarios, as\u00ed como el castigo corporal o la eliminaci\u00f3n directa de sus miembros. Sin embargo, los grupos de autodefensa demostraron que los \u201cvigilantes\u201d no pretend\u00edan erradicar totalmente el crimen organizado. Se han preocupado m\u00e1s por regular sus actividades, incluso intentando poner fin a ciertas pr\u00e1cticas consideradas intolerables (extorsi\u00f3n, tiroteos, violencia contra las mujeres o los j\u00f3venes) y separando las actividades delictivas -como la producci\u00f3n y el tr\u00e1fico de drogas- del resto de la sociedad. Para decirlo m\u00e1s sencillamente, y haciendo eco de una idea que se oye con frecuencia sobre el terreno, se trata de volver a un pasado (a veces fantasioso) en el que los narcos \u00abno molestaban a la gente\u00bb. En otras palabras, para vivir en paz habr\u00eda que restaurar la coexistencia de dos universos paralelos, con la delincuencia por un lado y la sociedad \u00absana\u00bb por el otro.<\/p>\n\n\n\n Haciendo eco de una idea que se oye con frecuencia sobre el terreno, se trata de volver a un pasado (a veces fantasioso) en el que los narcos \u00abno molestaban a la gente\u00bb. En otras palabras, para vivir en paz habr\u00eda que restaurar la coexistencia de dos universos paralelos, con la delincuencia por un lado y la sociedad \u00absana\u00bb por el otro.<\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n As\u00ed, aunque esos grupos sean el resultado de una acumulaci\u00f3n de descontento, su ambici\u00f3n moral y social no es eliminar el crimen organizado, el narcotr\u00e1fico, ni enfrentarse al Estado, sino cambiar la forma de actuar de ambos. En esta situaci\u00f3n, la justicia por mano propia se presenta como un imperativo moral: cuando el gobierno no hace su trabajo contra los grupos criminales, hay que tomar la justicia por mano propia y convertirse en protector de la comunidad.<\/p>\n\n\n\n La capacidad de los grupos de autodefensa para restablecer el orden ha descansado en su organizaci\u00f3n territorial. Entre 2013 y 2015, sus l\u00edderes construyeron su autoridad sobre peque\u00f1as \u00e1reas de territorio para aparecer como los \u00fanicos l\u00edderes, tanto ante la poblaci\u00f3n como ante el gobierno federal. Al asumir la seguridad y el control de sus feudos, los l\u00edderes de las autodefensas pudieron presentarse ante las autoridades como aliados en la gesti\u00f3n de la gobernanza, posici\u00f3n que pueden seguir ocupando a pesar de la desmovilizaci\u00f3n oficial de los grupos.<\/p>\n\n\n\n La territorializaci\u00f3n de los grupos de autodefensa les ha permitido, por ejemplo, entablar una cooperaci\u00f3n militar activa con las fuerzas del Estado, incluso en la persecuci\u00f3n de l\u00edderes templarios fugados. A cambio, al colaborar con los l\u00edderes, el gobierno consigui\u00f3 recuperar cierta legitimidad local o, al menos, asegurarse una presencia militar a trav\u00e9s de un socio local. Las autodefensas ofrecieron a las fuerzas armadas habilidades y conocimientos valiosos, no s\u00f3lo en t\u00e9rminos de inteligencia sobre la vida local, sino tambi\u00e9n en t\u00e9rminos de control del terreno de operaciones. El conocimiento detallado del territorio, por ejemplo, no fue plenamente adquirido por las fuerzas federales, a pesar de su despliegue masivo en la regi\u00f3n. El conocimiento local de los grupos de autodefensa result\u00f3 ser una de sus principales ventajas para ganarse la confianza de las fuerzas p\u00fablicas y de las autoridades federales.<\/p>\n\n\n\n La capacidad de los grupos de autodefensa para restablecer el orden ha descansado en su organizaci\u00f3n territorial.<\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n Esas relaciones se basan en el control territorial, lo que puede parecer contradictorio, pero de hecho constituye el n\u00facleo de la influencia de los \u00abjefes\u00bb locales. Los l\u00edderes de las autodefensas han construido y controlado progresivamente feudos que pueden dar la impresi\u00f3n de estar geogr\u00e1fica y socialmente aislados, pero que sin embargo les permiten abrir un di\u00e1logo pol\u00edtico con las autoridades. Al asegurarse un control estricto sobre su territorio, los l\u00edderes adquieren importancia para la gobernanza local. De hecho, al igual que muchos otros actores violentos en M\u00e9xico, incluidos los narcotraficantes, los grupos de autodefensa en Michoac\u00e1n han luchado m\u00e1s por convertirse en socios, enlaces e intermediarios de las autoridades; engranajes que conectan y controlan los flujos de recursos estrat\u00e9gicos (como el financiamiento p\u00fablico, la aplicaci\u00f3n de pol\u00edticas de seguridad, los esca\u00f1os electorales o los puestos de trabajo, por ejemplo) que conectan al gobierno y a la sociedad local. <\/p>\n\n\n\n As\u00ed, oscilando entre la presi\u00f3n y la colaboraci\u00f3n, los jefes de las autodefensas, como se\u00f1ores feudales apoyados en su territorio, han construido su papel de mediador con el Estado. Al mismo tiempo, las autoridades reforzaron su capacidad operativa pol\u00edtica, mejoraron su capacidad para recabar informaci\u00f3n sobre las din\u00e1micas locales de violencia y ganaron nuevos aliados, aumentando as\u00ed su capacidad de gobernanza local.<\/p>\n\n\n\n Oscilando entre la presi\u00f3n y la colaboraci\u00f3n, los jefes de las autodefensas, como se\u00f1ores feudales apoyados en su territorio, han construido su papel de mediador con el Estado. <\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n El papel del intermediario es com\u00fan en el M\u00e9xico rural. Puede considerarse un equivalente de los caciques, por ejemplo. Hist\u00f3ricamente, el Estado mexicano ha tolerado, apoyado e incluso permitido que las autoridades informales -caciques o caudillos- asumieran ciertas tareas de gobierno e incluso que recurrieran a la violencia, siempre y cuando se mantuvieran alineados con los intereses fijados por las autoridades p\u00fablicas y abiertos al di\u00e1logo con ellas. Se trata de pr\u00e1cticas cl\u00e1sicas de delegaci\u00f3n del poder, en las que el Estado se apoya en representantes indirectos para gobernar localmente. En el caso de Michoac\u00e1n, la experiencia, carisma y poder acumulados por los l\u00edderes de esos grupos desde 2013 son centrales en la actual arquitectura de seguridad (o inseguridad) local.<\/p>\n\n\n\n Carlos, l\u00edder de un grupo armado que incluye tanto a exmiembros de las autodefensas como de la polic\u00eda, analiz\u00f3 esas din\u00e1micas en una entrevista en noviembre de 2022:<\/p>\n\n\n\n \u00abTengo la capacidad de sacar a mis hombres a la calle en un segundo. Basta con tocar las campanas de la iglesia o enviar una serie de mensajes de WhatsApp para que la gente salga inmediatamente. Eso es lo que ha cambiado con las autodefensas, la gente les ha perdido el miedo a los grupos criminales y al gobierno, y nosotros estamos organizados, tenemos la experiencia… Este es nuestro territorio y lo conocemos como la palma de la mano. Es poco probable que alguien pueda entrar en nuestro territorio sin que lo sepamos inmediatamente, y si nos enteramos de una amenaza, reaccionamos y sacamos a la gente de sus casas, con o sin armas. Los otros grupos lo saben, y las autoridades tambi\u00e9n… As\u00ed que lo piensan dos veces antes de hacer alguna estupidez contra nosotros\u00bb<\/em>. <\/span>4<\/sup><\/a><\/span><\/span><\/p>\n\n\n\n Este testimonio ilustra un legado crucial de los grupos de autodefensa: el aprendizaje de la movilizaci\u00f3n colectiva, la ocupaci\u00f3n del territorio, el patrullaje armado y el sentimiento de pertenencia y apoyo mutuo. Esas habilidades se combinan con el sentimiento m\u00e1s difuso, descrito por Carlos, de \u00abhaber perdido el miedo\u00bb: si la seguridad se pudo asumir en 2013, se puede volver a asumir en cuanto se identifica una amenaza.<\/p>\n\n\n\n Los grupos de autodefensa dejan un legado crucial: el aprendizaje de la movilizaci\u00f3n colectiva, la ocupaci\u00f3n del territorio, el patrullaje armado y el sentimiento de pertenencia y apoyo mutuo.<\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n En segundo lugar, la capacidad de vigilar el territorio y movilizar a la poblaci\u00f3n local sigue siendo un recurso pol\u00edtico crucial. Puede ser \u00fatil para protegerse, pero tambi\u00e9n para apoyar o enfrentarse a un candidato o a un partido pol\u00edtico durante un periodo electoral, por ejemplo. En este sentido, cada l\u00edder, incluso cuando controla un territorio que puede parecer poco estrat\u00e9gico e insignificante, act\u00faa en realidad como un jefe con un s\u00f3lido capital pol\u00edtico que puede negociar y poner al servicio de un aliado externo. <\/p>\n\n\n\n Tales capacidades le confieren una posici\u00f3n de operador pol\u00edtico, de socio de los poderes p\u00fablicos en la gobernanza, como me explic\u00f3 Ezequiel, antiguo activista pol\u00edtico:<\/p>\n\n\n\n \u00abLo que siguen garantizando los l\u00edderes es estabilidad. Y con los niveles de violencia que tenemos en Michoac\u00e1n, eso es esencial… Los l\u00edderes controlan a la poblaci\u00f3n, pero tambi\u00e9n se aseguran de que el municipio permanezca tranquilo… Y eso es lo que todos quieren aqu\u00ed, la gente normal, los empresarios, porque no quieren violencia, y las autoridades por supuesto. Todo el mundo sabe que los l\u00edderes tienen ciertos intereses y trabajan con un grupo criminal u otro… Es imposible evitar eso aqu\u00ed, no puedes escapar de los c\u00e1rteles, al menos tienes que hablar con ellos… Pero mientras ofrezcas estabilidad y seguridad, todo el mundo est\u00e1 contento […] Aqu\u00ed, la gente eval\u00faa tu eficacia como jefe de la siguiente manera: si te quito, \u00bfqu\u00e9 pasar\u00e1? \u00bfQui\u00e9n ocupar\u00e1 tu lugar? \u00bfTraer\u00e1 m\u00e1s violencia, m\u00e1s inestabilidad? Incluso para las autoridades, es mejor mantenerte… Trabajan con los l\u00edderes, los conocen, aunque sepan que pueden estar implicados en el tr\u00e1fico de drogas… Pero nadie te va a juzgar si traficas drogas en Michoac\u00e1n, siempre y cuando te comportes correctamente con la gente… Tal vez pienses que es responsabilidad del gobierno hacer algo contra el narcotr\u00e1fico, pero honestamente, a nadie le importa si traficas drogas siempre y cuando mantengas la estabilidad, \u00bfentiendes?\u00bb<\/em> <\/span>5<\/sup><\/a><\/span><\/span><\/p>\n\n\n\n As\u00ed, garantizar la estabilidad y el orden es la espina dorsal de la longevidad de los l\u00edderes autodefensas convertidos en intermediarios pol\u00edticos. En general, como indica Ezequiel, las autoridades p\u00fablicas est\u00e1n dispuestas a dialogar con esas figuras por su capacidad para regular la violencia y mantener el orden a nivel local. Esa din\u00e1mica permite comprender mejor la importancia de los l\u00edderes armados, que pueden controlar una docena o varios cientos de hombres en algunos casos, en el mantenimiento de canales de intermediaci\u00f3n pol\u00edtica (y clientelismo) entre el gobierno federal y los diferentes actores sobre el terreno.<\/p>\n\n\n\n Dentro de los municipios, la lealtad de los hombres armados es principalmente hacia su l\u00edder, aunque sus salarios proceden de m\u00faltiples fuentes. Algunos de ellos pueden recibir dinero de los presupuestos p\u00fablicos, especialmente cuando su l\u00edder ha conseguido introducirlos en la polic\u00eda local, o directamente de actividades il\u00edcitas como el tr\u00e1fico de drogas o la extorsi\u00f3n. En ese caso, la organizaci\u00f3n criminal responsable de pagarles puede utilizar a esos hombres como fuerza de reserva. Si bien sus actividades diarias est\u00e1n dedicadas a la seguridad de su propio municipio, pueden ser llamados por el grupo criminal para realizar tareas espec\u00edficas, por ejemplo, en caso de conflicto que requiera refuerzos. Tal fue el caso durante la guerra entre el CJNG y los C\u00e1rteles Unidos entre 2019 y 2022. Los C\u00e1rteles Unidos, que funcionan como una coalici\u00f3n de actores armados, depend\u00edan en gran medida de una reserva de hombres que pod\u00edan ser utilizados en caso de necesidad. Esas reservas salen de sus propios municipios, viajan a las zonas de conflicto, prestan apoyo y luego regresan a casa, actuando m\u00e1s como milicias armadas que como grupos de autodefensa.<\/p>\n\n\n\n Dentro de los municipios, la lealtad de los hombres armados es principalmente hacia su l\u00edder, aunque sus salarios proceden de m\u00faltiples fuentes.<\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n Las alianzas as\u00ed creadas entre las autoridades y los caciques son intr\u00ednsecamente inestables y dif\u00edciles de mantener a largo plazo. Lejos de representar pactos s\u00f3lidos, est\u00e1n marcadas por fricciones y conflictos constantes, ya que los l\u00edderes locales suelen buscar apoyo pol\u00edtico al tiempo que mantienen su autonom\u00eda y margen de acci\u00f3n sobre el terreno. En Michoac\u00e1n, por ejemplo, los l\u00edderes de los grupos de autodefensa llevan a\u00f1os manteniendo retenes, dirigiendo parte de la polic\u00eda municipal, organizando patrullas y portando armas, o recibiendo presupuestos p\u00fablicos para sus operaciones, entre otras medidas concretas. Todo ello contribuye al poder local de los l\u00edderes.<\/p>\n\n\n\n Sin embargo, al ser inestables, esas formas de delegaci\u00f3n de poder de las autoridades p\u00fablicas a los caciques tienen m\u00faltiples consecuencias pol\u00edticas. Los acuerdos informales se ven constantemente amenazados por otros actores que pretenden ocupar la posici\u00f3n de aliado del gobierno. Tambi\u00e9n es el caso de diferentes instituciones p\u00fablicas o fuerzas del Estado -la Secretar\u00eda de Defensa y la Secretar\u00eda de Gobernaci\u00f3n, por ejemplo- que luchan entre s\u00ed por ejercer influencia sobre el terreno y conservar el poder de mantener alianzas, clientelas y relaciones privilegiadas con los intermediarios locales.<\/p>\n\n\n\n Esas din\u00e1micas conflictivas contribuyen a sostener y alimentar largos ciclos de violencia. Cuando las autoridades act\u00faan como reguladores y \u00e1rbitros de la violencia en lugar de garantizar la aplicaci\u00f3n de pol\u00edticas p\u00fablicas transparentes en materia de seguridad y justicia, contribuyen a externalizar tareas del Estado a los l\u00edderes locales. Si bien esto puede parecer eficaz a corto plazo (por ejemplo, si contribuye a un descenso repentino de los homicidios en un determinado municipio), la consolidaci\u00f3n del poder de los l\u00edderes locales deslegitima al Estado como \u00fanico garante del orden y la seguridad.<\/p>\n\n\n\n Cuando las autoridades act\u00faan como reguladores y \u00e1rbitros de la violencia en lugar de garantizar la aplicaci\u00f3n de pol\u00edticas p\u00fablicas transparentes en materia de seguridad y justicia, contribuyen a externalizar tareas del Estado a los l\u00edderes locales. <\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n Estamos entonces ante din\u00e1micas de cogobierno que se construyen en una zona gris entre lo p\u00fablico y lo privado, con grupos armados asumiendo cada vez m\u00e1s tareas de seguridad p\u00fablica. Desafortunadamente, los sucesivos gobiernos de Enrique Pe\u00f1a Nieto y Andr\u00e9s Manuel L\u00f3pez Obrador no han sido capaces de dar un marco s\u00f3lido, institucional y transparente a las estrategias de seguridad p\u00fablica en Michoac\u00e1n.<\/p>\n\n\n\n En 2023, decenas de l\u00edderes informales operan en Michoac\u00e1n, repartidos en al menos un tercio de los municipios del estado. El resultado es un complejo conjunto de lealtades informales, gran inestabilidad y fuerte competencia. Observar el panorama criminal de Michoac\u00e1n es como mirar a trav\u00e9s de un caleidoscopio de alianzas en constante cambio. <\/p>\n\n\n\n Esas alianzas demuestran que la gobernanza de territorios clave en la guerra contra el narcotr\u00e1fico en M\u00e9xico depende, entre otras cosas, de una combinaci\u00f3n de acuerdos formales e informales entre las autoridades p\u00fablicas y los grupos armados o criminales. Analizando c\u00f3mo el gobierno, al mantener el apoyo formal e informal a los l\u00edderes armados en Michoac\u00e1n, puede contribuir a transformar a los intermediarios violentos en aliados cruciales para la gobernanza local. Esto, a su vez, fomenta una forma de externalizaci\u00f3n de la seguridad p\u00fablica y alimenta el poder de los hombres fuertes que terminan compitiendo por los intereses y recursos locales y buscan mantener su posici\u00f3n como apoderados del gobierno.<\/p>\n\n\n\n Los niveles de conflicto observados en Michoac\u00e1n en los \u00faltimos 10 a\u00f1os demuestran que las autoridades no han desarrollado estrategias para reducir la violencia sist\u00e9mica y evitar la fragmentaci\u00f3n territorial de la regi\u00f3n, actualmente dividida en decenas de feudos sobre los que los caciques locales ejercen una inmensa influencia social, pol\u00edtica y econ\u00f3mica.<\/p>\n\n\n\n Sin embargo, ser\u00eda err\u00f3neo considerar que el poder de los l\u00edderes no estatales est\u00e1 en absoluta oposici\u00f3n a la autoridad p\u00fablica, y no en articulaci\u00f3n con ella. Decenas de actores armados disfrutan de alguna forma de soberan\u00eda dentro de las mismas regiones, lo que da lugar a la colaboraci\u00f3n y la competencia. En ese escenario, el uso de la violencia no tiene como objetivo derrocar el sistema pol\u00edtico, sino maniobrar en el juego pol\u00edtico con los poderes p\u00fablicos.<\/p>\n\n\n\n Ser\u00eda err\u00f3neo considerar que el poder de los l\u00edderes no estatales est\u00e1 en absoluta oposici\u00f3n a la autoridad p\u00fablica, y no en articulaci\u00f3n con ella. Decenas de actores armados disfrutan de alguna forma de soberan\u00eda dentro de las mismas regiones, lo que da lugar a la colaboraci\u00f3n y la competencia.<\/p>ROMAIN LE COUR GRANDMAISON<\/cite><\/blockquote><\/figure>\n\n\n\n La apertura de estos \u00faltimos a colaborar con los l\u00edderes armados puede animarlos a hacer todo lo posible por asegurar su poder y a otros l\u00edderes a competir por el estatus de aliados pol\u00edticos. En \u00faltima instancia, esos feudos dificultan que las autoridades, o cualquier iniciativa de la sociedad civil, ofrezcan alternativas a los l\u00edderes carism\u00e1ticos. En resumen, el Estado acaba favoreciendo a los l\u00edderes violentos y el uso de la violencia y la coacci\u00f3n como las herramientas m\u00e1s respetadas y eficaces para conseguir y conservar el poder a nivel local. El espacio pol\u00edtico que queda para otras formas de participaci\u00f3n y movilizaci\u00f3n social, especialmente las iniciativas no armadas, se vuelve a veces inexistente, lo que en ocasiones conduce a la exclusi\u00f3n de los ciudadanos de a pie o de los grupos de la sociedad civil de la vida pol\u00edtica local. Varios actores pol\u00edticos y de la sociedad civil consultados en Michoac\u00e1n en el invierno de 2022 se\u00f1alaron que las actuales condiciones de inseguridad les impiden participar en cualquier actividad p\u00fablica. Si la gente sabe que los l\u00edderes armados son tolerados o apoyados por el Estado, se vuelve a\u00fan m\u00e1s riesgoso participar en cualquier actividad pol\u00edtica. Tales din\u00e1micas, sin embargo, no pueden examinarse desde la distancia, sino que requieren una inmersi\u00f3n profunda en las comunidades locales. Por extensi\u00f3n, la b\u00fasqueda de soluciones pol\u00edticas seguir\u00e1 siendo inalcanzable en ausencia de an\u00e1lisis de las crisis locales y de un firme compromiso de las autoridades municipales, estatales y federales con la transparencia y la responsabilidad para elaborar respuestas institucionales a la violencia y la inseguridad.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Desde hace diez a\u00f1os, en el estado de Michoac\u00e1n, al occidente de M\u00e9xico, los \u00abgrupos de autodefensa\u00bb se levantan en armas contra los c\u00e1rteles. Con el paso de los a\u00f1os, estos \u00abintermediarios de la violencia\u00bb se han legitimado, luego legalizado -hasta el punto de convertirse en una verdadera fuerza p\u00fablica-. Esta amplia investigaci\u00f3n de campo examina su historia y el nuevo rostro del orden pol\u00edtico y de seguridad que est\u00e1 configurando para M\u00e9xico.<\/p>\n","protected":false},"author":1366,"featured_media":15816,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"templates\/post-studies.php","format":"standard","meta":{"_acf_changed":false,"_trash_the_other_posts":false,"footnotes":""},"categories":[6],"tags":[],"geo":[172],"class_list":["post-15807","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-politica","staff-romain-le-cour-grandmaison","geo-americas"],"acf":[],"yoast_head":"\n
\r\n <\/picture>\r\n \n \u00bfHacer el trabajo que el gobierno no hace?<\/strong><\/h2>\n\n\n\n
\r\n <\/picture>\r\n \n Restablecer el orden moral y social<\/strong><\/h2>\n\n\n\n
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\r\n <\/picture>\r\n \n El control territorial y la construcci\u00f3n de feudos de poder y mediaci\u00f3n<\/strong><\/h2>\n\n\n\n
L\u00edderes armados y delegaci\u00f3n de poder<\/strong><\/h2>\n\n\n\n
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\r\n <\/picture>\r\n \n Inestabilidad y ciclos de violencia<\/strong><\/h2>\n\n\n\n
\r\n <\/picture>\r\n \n \u00bfQu\u00e9 espacio pol\u00edtico para los ciudadanos desarmados?<\/strong><\/h2>\n\n\n\n
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